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El rayo de sol del amanecer. por Miluno

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Notas del fanfic:

ESTE FANFIC ES UNA TRADUCCION, luego no me anden denunciando. No me gustaria perder mi cuenta. Y pasen a leer.

Notas del capitulo:

Bueno se que he estado ausente y lastimosamente he tenido "la crisis del escritor" donde cuando me siento a escribir un nuevo capitulo de "Te amo, tal como eres" la hoja se queda en blanco mientras que yo estoy frente a la computadora por 3 horas y termino sin tener escrito nada.

Bueno este fanfic es una traduccion, me gusto tanto que quise traducirlo. En el final del cap les dejare un link para la historia original.

El rayo del sol del amanecer.

El rayo del sol del amanecer iluminaba una habitación que anteriormente estaba oscura. Misaki miro a su alrededor, despertado por el sonido de los pájaros cantando y la brisa fría que provenía de una grieta en la pared de madera en esa pequeña cabaña, la cual toco suavemente su piel pálida. Se froto los ojos cansado, mirando a su alrededor antes de bostezar. Se levantó lentamente de la cama, llevándose la sabana con él. Suavemente la dejo y se retiró al baño, tomo una ducha rápida y se ató una suave toalla azul alrededor de su cuerpo, el cual todavía seguía esbelto. Miro su reflejo en el espejo, una sensación de calidez recorrió su cuerpo al saber que una pequeña y saludable vida estaba creciendo en su interior.

“¿Estas feliz y emocionado hoy, mi amor?” Dijo Misaki frotándose el vientre que seguía siendo plano. Aunque él bebe aún era muy pequeño, no podía ocultar la felicidad de tener un hijo propio. Sin embargo el recuerdo repentino de “cierto hombre” lo hizo sentir totalmente triste y devastado.

“No hay nada que puedas hacer para que el este feliz… Creo que usted es lo suficientemente inteligente para entender lo que estoy diciendo… Humano”

¿Por qué estoy recordando eso?” Dijo Misaki sintiéndose frustrado, rápidamente se puso su ropa y camino hacia la cocina. Fue hacia las ventanas y las abrió. La suave brisa proveniente desde el exterior calmo al muchacho. Miro en la cocina, buscando alguna cosa comestible. Entonces vio el pan de ayer sobre la mesa y un pequeño tazón de miel. Se acercó a la chimenea y encendió la estufa.

Puso leche a hervir para hacer algo de chocolate caliente para el desayuno. Tomo el pan y lo partió en trozos pequeños, y puso la dulce miel en un pequeño cuenco. Se sentó a la espera en que la leche se calentara.

Su mente divagaba por los recuerdos de las cosas que habían pasado en los 2 últimos meses.

=FLASHBACK=

“¿Cómo crees que vas a ser aceptado por la familia real? ¡Ni en un millón de años! Solo tienes que irte al infierno, humano. Yo nunca aprobaría su existencia en el mundo de los demonios. ¡Tu presencia hace que el aire apeste!” El demonio empujo al pequeño chico al suelo. El muchacho gimió de dolor al empezar a ser golpeado por un grupo de demonios insatisfechos. Se hizo una bolita tratando de soportar el dolor.

De pronto, la mujer demonio, Mika. Que Misaki pensaba que era la líder del pequeño grupo, agarro el pelo de Misaki y tiro de él.

“¿LO ENTIENDES, HUMANO?” Dijo la mujer con frustración. Ella estaba muy enojada con el muchacho, según ella. Él le arrebato su futuro puesto como reina cuando el rey del país anuncio que se casaría con el chico. Su rabia llego hasta el punto que sentía que debía matar a ese chico.

“Jajaja, pequeño ladrón. Yo nunca te dejare ir como si nada… Golpéenlo.” Dicho eso, el pequeño grupo empezó a patear al muchacho y lo golpearon con palos, rocas, tacones, entre otros. Aunque Misaki se puso boca-abajo para proteger la pequeña semilla que crecía en su interior. Él bebe era el símbolo de su amor con el hombre que amaba, aunque el aun no sabía nada de eso. Él nunca iba a dejar que hirieran a su bebe.

“Acaben con él, no dejen que se vaya. Y asegúrense que el no pronuncie ninguna palabra de esto a nadie ¡¿Entendieron!?” Dijo esa mujer dándole una mirada satisfecha a Misaki.

“Si Mika-sama, haremos lo que usted pida” Dijeron las otras 5 mujeres, vestidas con el traje de sirvientas reales. Se reverenciaron ante la loca mujer, la cual reía malévolamente mientras que se dirigía a la fiesta real. En realidad esa noche se celebraría una fiesta por todas las parejas, donde se presentaría a todo el reino quien sería su nueva reina (Misaki), el cual había soñado con ella miles de veces y con muchas ganas de festejarla. Pero ahora todo se derrumbó en pedazos.

Entonces vio como las 5 sirvientas llegaban con un saco café, y unas telas largas negras, con las que amarraron al muchacho. Fue empujado en el saco y noqueado por una sirvienta. Entonces perdió la conciencia.

=FIN DEL FLASHBACK=

Dejo de recordar eso cuando escucho un golpe en la puerta. Lentamente se levantó de la silla y se dirigió a la puerta para abrirla. Un hombre bajo y pelinegro le sonrió.

“Kisa, ¿Necesitas algo?” Dijo Misaki empujando la puerta para que su amigo pudiera pasar.

“¿Qué? ¿Necesito una razón para visitar a mi amigo?” Kisa entro en la pequeña casa y camino hacia la sala de estar. Donde se sentó en una pequeña silla de madera. Misaki lo siguió después de cerrar la puerta, él también se sentó en una pequeña silla frente a Kisa, mientras sonreía.

“Bueno, cada que venias aquí. Me pedias algo…” Dijo Misaki relajando su cuerpo sobre la silla.

“Ah… Me haces daño… (Con ojos tristes de cachorrito). ¡Es broma! He traído algo de pan. Sé que amas esos bollos de carne rellenos, ¿verdad? La panadería estaba sacando estos bollos recién horneados” Dijo Kisa sacando una pequeña bolsa café, Misaki se puso muy alegre al ver eso. El realmente amaba esos panes, principalmente por el embarazo.

“¿Estas bien, Misaki? Te veías triste cuando abriste la puerta” Dijo Kisa con una sonrisa aunque hubo un destello de preocupación en su rostro. Su buen amigo Kisa lo podía leer como si fuera un libro. Es una bendición en el buen sentido.

“Estoy bien, me acabo de acordar del padre de mi hijo…” Misaki observo su mano sintiendo como su corazón se contraía en dolor y daño. Sabía que sus hormonas lo ponían muy sentimental, pero también se añade el problema sin resolver…

“¡No pienses en ese hijo de puta! Si realmente te amara, ya te hubiera encontrado y no te dejaría pasar el embarazo solo. Él no es digno de tu amor y tiempo” Kisa se levantó de la silla y se dirigió a la puerta.

“Kisa, se eso, pero…”

“Si todavía lo amas, lo sé. ¡Es solo que…! Ah lo que sea. Duerme y come bien, no quiero que estés enfermo por culpa del recuerdo de ese hijo de puta” Kisa abrió la puerta y salió. Misaki sonrió hacia donde había salido su amigo, sabía que Kisa tenía razón. Pero el aun no podía olvidar al hombre de ojos amatista y pelo plateado, haciendo más de un ángel, que un rey demonio (él es el rey demonio). Después suspiro, debía dejar en eso o se pondría a llorar.

-

Usami Akihiko se sentó en su trono sin ningún tipo de emoción, miro hacia abajo al ver como un hombre se arrodillaba ante él. Sentía como si hubiera pasado una eternidad desde que había visto a su amado por última vez. En la noche en la que se suponía que iba a presentar a su amado al reino, Misaki no estaba en ningún lado. Lo busco por todas partes, al principio pensó que algo le había pasado a Misaki. Pero de repente Mika había llegado con una carta de parte de Misaki, la cual alimento su ira. Misaki había huido diciendo que no lo amaba y que solo lo había usado, era la venganza por haber “matado” a su hermano y que nunca le perdonaría el pecado.

Ese día Akihiko destruyo la habitación de Misaki en un ataque de ira, y llamo a sus guardias para que lo buscaran. Él lo necesitaba de nuevo para encerrarlo y nunca volver a dejarlo libre. Él se aseguraría de que Misaki probara lo que sentía en ese momento.

“Usami-sama, una persona dijo que vio a un adolescente cerca de la frontera en el bosque del roble negro. Al parecer coincide con la descripción de lo que usted buscaba, al parecer estaba lavando algo de ropa” Dijo su fiel sirviente Yukina, el cual volvió a inclinarse frente a él.

“Preparen mi caballo, hay un prisionero que debemos capturar” Dijo Akihiko con una sonrisa diabólica antes de desaparecer en una nube de color negro y apareció en su habitación.

“Es hora de que aprendas la lección…”

-

Misaki se froto los pies, los cuales le dolían. Había terminado de lavar su ropa sucia en el lago cercano y recolectado algunas frutas para su cena. Tenía tan solo 3 meses de embarazo por lo que no le costaba tanto ocultarse para evitar ser visto. De todos modos se sintió feliz de estar a salvo y también que su pequeño estuviera a salvo. Solo esperaba que el niño naciera bien y evitar el riesgo de aborto involuntario, él sabía que el embarazo masculino era peligroso y que debía tratarse con sumo cuidado. Sonrió cuando sintió la magia de una patadita en su vientre, se sentía feliz con tan solo estar en la pequeña cabaña.

Miro hacia el techo de madera, su mente fue volando recordando cómo había conocido a Akihiko. Recordó el día en el que conoció a Akihiko por primera vez, Akihiko había incendiado su aldea. Los sobrevivientes fueron capturados y se convirtieron en esclavos, las mujeres fueron llevadas como esclavas sexuales. Mientras que los chicos como el, fueron llevados para ser vendidos como esclavos en el mercado negro. Takahiro el hermano de Misaki, lucho para evitar que se lo llevaran pero su cuerpo fue atravesado por una lanza y murió. Misaki ni siquiera pudo llorar la muerte de su hermano porque inmediatamente fue llevado. Misaki vio cómo su hermano perdió la vida poco a poco en sus brazos, las lágrimas corrían por sus mejillas. Él fue llevado y arrojado en una jaula con los otros niños. Muchos sobrevivientes eran niños pequeños que apenas conocían nada. Había unos cuantos que estaban cerca de su edad, pero en general eran más jóvenes que él. Vio a Ritsu en una esquina.

 Él estaba abrazando sus rodillas y exclamando en voz baja. Misaki se dirigió al muchacho y se sentó a su lado. La acción sorprendió al niño llorando. Cuando levantó la vista se dio cuenta de que su mejor amigo estaba todavía vivo, Ritsu abrazó Misaki. Eran amigos de la infancia. Vivir en este pequeño pueblo, hizo que se hicieran muy cercanos. A menudo jugaban juntos en la noche. Ahora, se enfrentan a un futuro incierto. Quedarse atrapado para ser vendidos a los ricos como juguete era un futuro que se negaron a admitir. Si aún no estaba seguro, aun habia esperanza. Misaki miró a los otros niños. Eran niños que habia enseñado a jugar. Algunos niños pequeños se arrastraron a él, acurrucados cerca de él. Sabía que estaban asustados y ya comenzaban a perder la esperanza. En la jaula, había cerca de 15 niños y adolescentes, incluyendo a Misaki. Siendo el mayor, intentó tranquilizar a los niños y trató de calmarlos. Su corazón casi se rompió cuando vio Hiyo, una niña de 5 años, lloró y se lamentó queriendo ver a su madre. Misaki solo podía abrazarla y frotar su espalda.

Ese viaje duró 1 hora, finalmente llegaron a la capital. Fueron llevados al castillo. Cuando abrieron la puerta de la jaula, todos los niños se acurrucaron lejos de la puerta. Se escondieron detrás de Misaki y Ritsu. El oficial trató de apoderarse de ellos, pero fracasó cuando los niños esquivaron sus intentos de atraparlos.

"¿Qué estás haciendo? Date prisa y agarra a los mocosos. Tienen que ser entrenados." Otro oficial dijo detrás del oficial. El oficial llamó a unos cuantos oficiales más y, finalmente, consiguió agarrarlos y los sacó. Fueron esposados r03;r03;para evitar que se fueran. Misaki vio impotente cuando arrastraron a los niños lejos. Por lo menos, les dieron un refugio y un lugar para trabajar. Para él, Ritsu y otros tres adolescentes solo se venderían en el mercado como mascotas. Misaki sólo podía mirar al cielo y gritar en silencio. Este futuro no estaba planeado. Ahora, habia perdido a toda su familia y sin futuro que fuera feliz. En su estado de depresión, no se dio cuenta de que su piel estaba brillando, despidiendo una suave luz. Esto llamo la atención del lider del reino demonio, Usami Akihiko. Acababa de terminar de matar a unos rebeldes cuando su vista capto la luz emitida de un joven. Se quedó inmóvil, porque no quería que esa hermosa imagen desapareciera. Akihiko que estaba cautivado con el chico agarró la barbilla de el y la levanto hacia arriba. Unas sorprendidas orbes esmeralda miraban a las orbes amatista. De alguna manera, una pequeña sonrisa apareció en el muchacho, sintiendo calidez.

Perdió la conciencia por su estado de depresión y el estrés. Lo último que recordaba eran un par de brazos fuertes que sostuvieron su frágil cuerpo y cómo esa calidez recorría su cuerpo, haciéndolo gemir por esa sensación.

~0~

Un fuerte golpe en la puerta despertó al adolescente dormido. No recordaba haber conciliado el sueño y rápidamente se levantó y se dirigió a la puerta principal lentamente, aunque escucho a su querido amigo llamándolo.

"MISAKI! Abre la puerta!" Misaki inmediatamente corrió hacia la puerta y la abrió, dejando ver a Kisa. El cual estaba respirando pesadamente mientras agarraba una bolsa.

"¿Qué pasó?" Misaki metió a su amigo en el interior de la cabaña antes de cerrar la puerta.

"El ejercito del rey ha llegado a este pueblo. Será muy sangriento y peligroso para que te quedes aquí. Tenemos que salir de aquí lo más rápido que podamos." Kisa caminaba de un lado a otro en la sala de la cabaña y saco una bolsa y metió ahí la ropa que había en el armario. Sabía que tenía que actuar con rapidez para salvar su vida y la de Misaki. Se llevaron algo de comida y se lo metieron en la bolsa. Vestían ropas con capucha para evitar ser descubiertos. Poco a poco se internaron en el bosque, con prisa de ir al otro lado del bosque que los llevaría a otra aldea. La oscuridad de la noche alrededor de ellos ayudó a camuflarlos con sus túnicas negras, por lo que era difícil que alguien los viera. Se agarraron las manos, sintiendo su calidez, lo que les dio fuerzas.

 Ellos intentarían sobrevivir el mayor tiempo que pudieran juntos. Tenían que recorrer una hora y media de viaje hasta el pueblo más cercano cuando  de repente oyeron el ruido de unas pisadas. Se congelaron de miedo antes de que Kisa con un pensamiento rápido agarro a Misaki en el bosque lejos del sonido y comenzaron a correr. Ellos lograron ver una enorme piedra y corrieron hacia ella y se escondieron detrás de ella, tratando de esconderse del enemigo. Ellos inhalaron y exhalaron tratando de controlar su respiración que estaba inestable por la adrenalina y la carrera. El sonido se hizo más fuerte a medida que el ejército galopaba más cerca de su escondite. Misaki se abrazó a sí mismo mientras que Kisa se acercó más al chico y lo abrazo asustado. Se acurrucaron juntos, rezando para que no los hubieran encontrado. Unos minutos más tarde, el sonido del galope se dejó de escuchar y exhalaron, por supuesto por el alivio que fluía a través de su cuerpo, estabilizando su respiración.

"Maldita sea, nos rodearon. Ellos tal vez habían incendiado el pueblo y capturaron a los habitantes del pueblo. Y parece que ya comenzaron con el otro pueblo. No hay manera de huir. Podríamos sobrevivir unos pocos días en el bosque, pero me temo que podríamos ser capturados”. Kisa hundió su cabeza entre las rodillas, sintiéndose agotado. Misaki solo pudo asentir en la comprensión. Él sabía que si era atrapado la probabilidad de que perdiera a su bebé era alta. No quería correr el riesgo de poner en peligro la vida de su bebé. En el silencio que los rodeaba, escucho el flujo de agua cerca, dando a entender que cerca había un rio. El sonido le dio una idea.

"Kisa, ¿por qué no seguimos el río? Si vamos por lo largo del río, tal vez haya una posibilidad de que haya un pueblo como la gente que decía que el río significaba la vida y que la vida significaba es la civilización. Nosotros tal vez tengamos suerte y encontremos un pueblo”. Sugirió Misaki.

"Buena idea, Misaki! Vamos a ir." Sacaron la bolsa y se dirigieron hacia el río, lentamente. Realmente esperaban que se encontrara un pueblo cerca.

-

Akihiko estaba hirviendo de ira. Después de capturar a los habitantes del pueblo, todavía no había rastro de Misaki. Apretó los dientes cuando inspeccionaba la casa que según su sirviente había sido ocupada de refugio por Misaki. Estaba vacía y no podía ver a nadie. Podía olfatear el aroma de su amado desde el aire significando que él se había ido hace poco  de esa casa. La ira de él se hizo más grande, pensaba que el chico había sido más astuto y había huido de él una vez más. Él envió una tropa a otro pueblo cercano a las afueras del otro extremo de la selva, en busca del adolescente. Salió de la casa, mandando una horrible mirada a los aldeanos que se abrazaban antes de subir a su caballo. Él ordenó a sus guardias para que se hicieran cargo de ellos y que se los llevara a la capital. Terminado la última orden, galopó a su caballo por el bosque con una sola cosa en su mente; Misaki definitivamente será suyo otra vez.

-

Ellos ya habían caminando por el río durante una hora. Misaki estaba cansado y sus pies estaban doloridos. Todavía no podía ver cualquier pueblo cercano y ellos estaban hambrientos y agotados.

"Tal vez deberíamos descansar por un tiempo. No es bueno caminar mucho cuando estas embarazado." Kisa se dejó caer sobre la hierba junto al río, mientras que llenaba su botella de agua. Misaki lo siguió y se sentó a su lado. También se llenó la botella vacía y bebió el agua, quitándose la sed.

"¿Por qué crees que el ejércitos ataque nuestra aldea? No es que este pueblo este cercano a la capital ni que el pueblo moleste a la capital. ¿Tal vez traten de buscar algo?" Dijo Kisa intrigado

Sorprendió a Misaki hasta la médula. No había pensado en ello antes, pero ahora no tenía sentido.

'Pero no hay manera de que se acuerde de mí, ¿verdad? Y nunca enviaría a todas sus tropas sólo para atraparme. Tal vez sea sólo una coincidencia ¿no? ¿Cierto?' Aunque él lo negó muchas veces en sus pensamientos, todavía no podía borrarse la sensación de saber que podría ser verdad. Después de todo él desapareció en un abrir y cerrar de ojos. La sensación de ansiedad y pánico ahora se transformaba a la sensación de la excitación y felicidad. No importa lo lejos que se habían separado, su amor al gran rey demonio todavía florecía en su corazón. ¿Cómo el rey tirano logró atrapar su corazón?

Él no lo sabía. No es que fuera agradable y amable. Aunque en un principio era frío y cruel con él, aprovechando su esclavitud como que el estaba destinado a servirlo como esclava sexual. Desde el día que Akihiko accidentalmente le hizo daño haciendo que cayera enfermo y cansado por una semana, de alguna manera cambió. Él nunca lo obligo a entregarse a él ya era muy considerado. También le permitió trabajar en el castillo, no le gustaba simplemente que se mantuviera en la recamara como el esclavo sexual o cortesano. Poco a poco, la gente vio los cambios en el Rey Demonio y no podía dejar de preguntarse cómo lo había cambiado. Se sonrojaba cada vez que los sirvientes en el castillo lo elogiaban por logrado cambiar al cruel rey. A pesar de que era más amable, él todavía le encantaba torturar a la gente. Pero se había disminuido y sólo los criminal que rompían la ley estaban siendo castigados y torturados por él. De alguna manera, los sirvientes en el castillo podían relajarse más y hacer su trabajo más eficientemente.

"Misaki! Oí, Misaki!" El grito sorprendió al muchacho. Él levantó la cabeza hacia el chico que estaba al lado de él y la culpa se puso en su corazón. Kisa es alguien a quien había conocido en el pueblo antes y que tuvo la amabilidad de ayudarlo aunque nunca le dijo nada de su vida pasada en el castillo. De alguna manera, sentía que lo había traicionado.

"Ehm... Kisa. Yo tengo algo que decirte..." Misaki inhalo, reuniendo fuerzas para decirle la verdad a su amigo.

"ok. ¿Qué quieres decirme?" Kisa miró al muchacho que estaba nervioso. "Es imprescindiblemente algo grande si se agita así. '

"El padre de mi bebé es... es... el rey de los demonios..." Kisa se quedó estupefacto mientras miraba al chico. Quería que lo negara y le dijera que se trataba de una broma, pero de alguna manera en la profundidad de los ojos esmeralda podía ver la sinceridad y ansioso.

"Oh, Dios! ¿Cómo? ¿Acaso lo forzó en su vida?" Kisa preguntó en estado de shock.

"Él no me forzó, tal vez al principio, pero no. No me obligo después de eso. Él es amable conmigo." Misaki respondió.

"Entonces, ¿cómo es posible que usted estuviera aquí sangrando cuando te encontré. Si él se preocupa por ti, por qué te echo?" Kisa entrecerró los ojos en detesta. A pesar de que sólo se había hecho amigo de Misaki hace sólo dos meses, odiaba a las personas que tomaban ventaja del niño inocente que era demasiado bueno para perdonar a alguien desde el fondo de su corazón.

"Él no me hirió, Kisa. Su pretendiente, Mika, ordenó a unas sirvientas que me mataran. Por suerte, logre sobrevivir, ya que huyeron cuando viniste a ayudarme." Explicó Misaki.

Kisa suspiró. "Bueno, ¿y ahora qué? ¿Quieres ir a verlo o deseas continuar el viaje?”

Misaki no tuvo ninguna oportunidad de responder cuando una voz habló desde detrás de él.

"Definitivamente, querías verme, ¿no?... Misaki." Ambos adolescentes miraron hacia atrás y se congelaron. Detrás de ellos, se encontraba el rey demonio, sus ojos amatista se transformaron en carmesí mientras miraban a los ojos esmeraldas.

"U-usa-gi-san" brisa fluía a su alrededor, sólo el flujo de agua y el susurro de las hojas del bosque se oía en el silencio de la noche.

-

Poco a poco, Misaki se levantó de su sueño. Su último recuerdo vino  y cayó en cuenta de nada. Sólo podía recordar cuando él miró a los ojos de Akihiko y perdió la consciencia. Trató de frotarse los ojos pero su mano no se movía. Él abrió rápidamente sus ojos, sólo para ser recibido por un techo familiar. La recamara del rey demonio. No se sorprendió de ver que estaba encadenado a la cama.

"Parece que estas despierto." Una voz repentina sorprendió al muchacho; dirigió sus ojos al oscuro rincón de la habitación, el lugar que él sabía que a Akihiko realmente le encantaba sentarse. Akihiko estaba bebiendo un vaso de sangre antes de que él lo dejo y se dirigió al muchacho.

"Usa-sa-gi-san, yo..." Misaki se perdió. No podía formar ninguna palabra.

"¿Por qué?" Un suave susurro provino del hombre. Misaki parpadeó en confusión.

"¿Por qué?"

"¿Por qué me dejaste, Misaki? ¿Por qué?" Akihiko agarro la cara del niño y con fuerza lo empujó hacia arriba.

"No quería dejarte. Me vi obligado!" Misaki se estremeció cuando Akihiko apretó su agarre.

"No me engañas, Misaki. Usted me dijo claramente sus sentimientos en la carta. Su confesión es falsa, no me mientas mientras tratas de mirarte inocente." Akihiko lo soltó. Le desabrochó el pijama blanco que el muchacho llevaba. Sus ojos no se movían de la mirada perdida en los ojos esmeralda de la persona que él realmente amaba.

"Espera, Usagi-san, espera!" Akihiko ignoró el niño gritando y empezó a rasgarle la camisa. Sacó el pantalón dejando al niño desnudo a él. Pasó su mano, acarició el pezón sensible de Misaki mientras que el otro lo lamia y chupaba. Misaki lanzó un pequeño gemido cuando Akihiko chupo y dejo la marca de un beso cerca de su pezón. Akihiko daba besos hasta que llego al torso del chico antes de lamerse el labio y besar los suaves labios de Misaki. Los mordió y chupó, extrayendo sangre. Luchó por ser el dominante aunque ganó fácilmente. Misaki solo podía agarrar la sábana al intentar detener el gemido.

"Nunca me debes dejar Misaki... Tengo que entrenarte de nuevo para que no te olvides que eres mi cortesana. Mi mascota." Akihiko sonrió maliciosamente.

Misaki se arqueo cuando Akihiko penetró su entrada con su largo dedo sin previo aviso. Misaki gritó como el dolor viajaba a través de su zona inferior. Él rogó a Akihiko para que se detuviera pero al igual que antes fue ignorado. Akihiko no perdió el tiempo, sólo penetraba su entrada con más dedos, impaciente para enterrarse a sí mismo en su cuerpo. Misaki no podía pensar en nada más que el fuerte dolor. Trató de moverse lejos del hombre solo para ser agarrado por una mano fuerte. Sabía que dejaría moretones en su cuerpo. Misaki todavía no podía adaptarse al dolor que lo rodeaba, sólo para ser agrandado cuando algo más grande entro en su entrada, el muchacho gritó de dolor.

"POR FAVOR, USAGI-SAN! Por favor, Para! Me estas haciendo daño! Por favor, Usagi-san." Fue ignorado viendo como Akihiko aumentaba su velocidad, golpeando su punto dulce. Misaki solo podía agarrar la sábana mordiéndose los labios para superar el dolor. En su mente neblinosa de repente se acordó de algo importante.

"Akihiko, PARA! ESTOY EMBARAZADO, AKIHIKO-SAN!" El grito detuvo al hombre. Miró al chico debajo de él, la sorpresa gobernaba su cara.

"Qué..?" Akihiko miró al chico, parpadeando.

Con lágrimas en los ojos, Misaki dijo: "Estoy embarazado de tres meses. Así que por favor déjame, le estás haciendo daño al bebé.". Akihiko fue silenciado.

"Por favor... Por favor escúchame primero. Yo no hui. Me vi obligado por Mika-san. Ella trató de matarme pero Kisa me salvó. Él era el que estaba conmigo en el bosque. Me ayudó a mejorarme. Yo no sé nada de la carta. Yo nunca escribir cualquier carta. Por favor, confía en mí, Akihiko-san. Realmente te amo. MI confesión no es una falsificación. “Akihiko miró a los ojos esmeralda, la sinceridad retratando a los ojos vidriosos. Misaki lloró silenciosamente en la noche silenciosa. Akihiko se salió del niño y lo abrazo.

"Su ausencia hizo que mi corazón se volviera loco. No es lo mismo sin ti aquí. Realmente te amo. Lo siento por dudar de ti. Yo debería saber que este es el plan de Mika porque ella está realmente convencida de querer casarse conmigo. Estoy lo siento por mi culpa, que fuiste arrastrado hacia el peligro. Por suerte estás vivo. Por favor, no me dejes de nuevo. “Akihiko se acurrucó en el lado del niño, inhalando el olor único. Akihiko rompió el abrazo y miró al muchacho. Con un chasquido de sus dedos la cadena se abrió y se deslizó lejos. Él tomó su mano y posó un beso en el moretón de la muñeca de Misaki.

En su estado de ira, había infligido dolor a su amado aunque plenamente se arrepiente. Besó el hematoma, la culpa llenó su corazón. Le acarició los cabellos castaños y besó los labios, ahora con pasión y gentil. Él hizo un hechizo de dormir y poco a poco los ojos esmeraldas se cerraron. Misaki necesitaba su descanso. Akihiko lo observó mientras la luna ilumina el cuarto oscuro y el cuerpo de su amado fue sumergido en la luz de la luna. Nadie sabía que Misaki era medio demonio y mitad humano. Él descubrió esto después de haber investigado y probar su sangre. Decir que estaba sorprendido estaba más allá de lo que sintió en ese momento. En el que él descubrió que Misaki era el hijo del Rey Demonio del sur. No sabía cómo estaba en el norte, en su país, no obstante no le importó. Pero él estaba agradecido por ello; conoció a Misaki y se enamoró de él. Mientras miraba a la cara dormida de su amado, el realmente esperaba que él siempre esté con él en las buenas y en las malas...

-

"Por favor, Akihiko-sama! Por favor, suélteme!" Akihiko sonrió mientras el que puso a su pretendiente en un estado enorme de sufrimiento, ella se retorcía en el suelo, como la basura. Los gritos y las suplicas eran música para sus oídos.

"¡Por favor déjeme!" Mika sollozó como el dolor se triplicó, su dolor y su cuerpo herido estaban en el suelo. Se estremeció cuando el enorme poder de su rey se juntaba a su alrededor, el dolor fue infligido por una horrible herida herida. Akihiko empujaba su daga negra hacia varios lados, cortando su vientre. La sacó, sangre broto de la herida, ensuciando el suelo y la camisa y la capa de Akihiko. Mika tosió sangre y agarro su sangriento vientre, sollozando de dolor.

"¿Crees que vas a salir? No después de tratar de matar a mí persona más preciosa. Misaki no se puede comparar a ti." Akihiko empujar su larga espada profundamente en el vientre de la mujer como Mika gritó de dolor y agonía. No podía hacer nada mientras que ella estuviera limitada de magia negra por parte de Akihiko. Pocos de sus comandantes estaban detrás de él como él gratamente estaba torturado a Mika. Yukina y Takano simplemente fijaron sus ojos en la sangrienta escena, vacíos de cualquier emoción. Akihiko empujó su magia negro y le dio la vuelta al demonio femenino y la agarró por el cuello en giro doloroso. Él ya la torturó durante media hora ya. Comenzando con cuchillos arrojadizos y apuñalando su carne.

"Usted debe sabe que no se debe meter conmigo, Mika. Usted dijo que Misaki era un humano sucio. Mírate ahora, en su estado y la sangre pueden ayudarte? Suplicando como un humano sucio. ¿Qué puedes hacer ahora que la magia fue despojada de usted?" Akihiko estrecho su agarre sobre la garganta de la mujer antes de que él la soltó, sólo para caer de nuevo al suelo.

Mika tosió fuertemente mientras recuperaba el aliento y de inmediato se arrastró hacia Akihiko. "Por favor, perdóname, Akihiko-sama. Por favor, dame otra oportunidad. ¡Por favor!"

"Otra oportunidad... bueno, Mika, yo tengo un trabajo perfecto para ti." Akihiko apago su cigarro mientras miraba la reverencia y la cara agradecida.

"Gracias, Akihiko-sama! Voy a trabajar más duro, Akihiko-sama." Mika se inclinó hasta el suelo, mostrando su agradecimiento. El rostro de Akihiko transformó a un alegría sádica y el mal mientras veía al demonio inmundo, dándole las gracias. Akihiko hizo un hechizo de curación sólo para detener el flujo de sangre, que no quería que la mujer muriera todavía por pérdida de sangre. Después de todo, pasara mucho tiempo antes de que pudiera probar la muerte dichosa.

"¡Guardias!" Akihiko grito, llamando a los guardias fuera de la mazmorra.

Un conjunto de pasos de marcha se oía como tres guardias entraron. "Sí, Usami-sama"

"Tomen a esta mujer sucia y envíenla a la principal zona roja en la frontera de Satien. Dénsela al dueño del burdel y asegúrense de que ella trabaje su culo como esclava sexual allí. Llévenla ahora." Akihiko agitó sus manos mientras miraba a la cara de la mujer, que estaba blanca en estado de shock e incredulidad mientras sus palabras se hundieron en su mente. Los tres guardias pusieron inmovilizadas las manos con cadenas, y arrastraron a la mujer fuera de la sala del trono.

"Akihiko-SAMA!" Lo último que se oía era el sonido de las suplicas y lloriqueos mientras los guardias arrastraron dolorosamente a Mika en la superficie rocosa áspera en el castillo. El demonio una vez arrogante finalmente derramó miles de lágrimas mientras ella literalmente se desapareció lejos para convertirse en un esclavo, el estado más bajo que un siervo humano. Akihiko solo pudo mirar con una sonrisa malvada y contenta que la maldita fuera arrastrada lejos, para nunca ser vista otra vez.

"Buenas formas de torturar, Akihiko." Takano se unió a su rey, sonriendo maliciosamente al recordar el dolor que le hizo al demonio.

Akihiko se sentó en su trono, sonrió mientras sus leales comandantes le daban miles de cumplidos.

"Bueno, eso fue divertido." Akihiko se levantó.

"Limpien la sangre sucia en el suelo. Y no me molesten." Akihiko salió de la habitación; su sangriento manto brillaba ya que se ilumino a causa del caminar junto a algo de luz.

-

El rayo del sol del amanecer se filtró a la sala una vez oscuro. Misaki en ligero estado de inconsciencia, tiro de la manta superior. Sin embargo, podía oír una risita proveniente de su lado y sus ojos soñolientos se abrieron rápidamente. Akihiko estaba allí en su gloria con su uniforme negro y capa roja con una bandeja de comida. Espere, Alimentos. Los ojos soñolientos parpadearon un par de veces para ajustar la imagen, y para decir que eso seria predecible. Akihiko aunque lo estaba cuidando a él, no traía la comida a él, especialmente a su habitación. Él prefería comer en el comedor.

"Ya es de mañana, ¿No quieres levantarte?" Akihiko se acercó a la cama y puso la bandeja sobre la mesita de noche antes de sentarse en la cama. Sacó el edredón, que cubría a Misaki haciendo que el adolescente diera un gemido de desaprobación.

"Déjame dormir un rato. No estoy tan hambriento." Misaki murmuró.

"Yo lo sé, pero tienes que comer con regularidad. El médico ya planeo su horario de comidas. Usted tiene que tomar el desayuno ahora. Y beber un par de pociones." Akihiko ayudó al niño a sentarse, sacó la almohada y la puso detrás de la espalda de la joven. Akihiko miró el vientre hinchado y su corazón se llena de alegría y orgullo. Le acarició el vientre, ganando una pequeña sonrisa de su amado. Misaki se unió a su marido, sí marido y se frotó el vientre. Había estado casado con Akihiko durante dos meses ya que significaba que estaba embarazado de cinco meses. Estaba emocionado y feliz, esperando el nacimiento de su hijo. En estos últimos dos meses, trabajaron en la fuerza de su relación. Akihiko se había transformado por completo cuando el conoció que su amado esperaba un hijo de su propia sangre y ese pensamiento se hundió en su mente.

Se volvió más amable y considerado hacia las personas sobre todo a él. Ningún día se olvidó de besarlo y acariciarlo y confesar su amor a él. Todo lo que hizo Misaki sintiera más vergüenza y sus mejillas obtuvieran un rubor más brillante. La gente que trabajaba alrededor en el castillo también podrían descansar más ahora cuando empezó a tomar las palabras de Misaki en consideración. Misaki compartió su opinión y consejo él para ser más considerado con la gente, empezar con decir "gracias" a la gente que vale la pena y los elogió por su buen trabajo. Sabía que sea difícil cambiar a alguien, pero como la gente siempre dice, el amor podría cambiar por completo. Llegó rápido un shock enorme cuando Akihiko dio gracias al cocinero que cocinó su plato favorito. El cocinero, Shika, gritó y se inclinó inferior mientras gracias volver al rey para disfrutar del plato. Bueno, Misaki podría simplemente sonreír y disfrutar la sonrisa de Akihiko de estar junto con él. Decir que a los siervos a su alrededor su sorpresa era comprensible como Akihiko nunca sonreía excluyendo la sonrisa diabólica.

Akihiko también se volvió más posesiva y protectora sobre Misaki. Nunca aceptó cuando Misaki se declaró deseoso de continuar su trabajo en la cocina real. Misaki estaba enojado al principio, pero después de escuchar el razonamiento de Akihiko, se rindió. No es que él odiaba sentarse sin hacer nada, pero era muy aburrido. Le dijo eso a Akihiko y rápidamente él le mostró el jardín real que Misaki tomó gustoso al instante. Decir que el jardín era un regalo a él lo sorprendió, pero ver a su amigo perdido hace mucho tiempo de la niñez Ritsu en buen estado lo dejo sin palabras. De Ritsu se enteró de que fue comprado por Takano, el segundo al mando de la tropa oscuro, el ejército de Akihiko. Se puso a trabajar aquí en el castillo como Takano prácticamente se hizo dueño de su propio cuarto aquí en el lado oeste. Ritsu también le dijo, su amor que florece hacia el hombre, aunque él no se había confesado a el hombre todavía.

 Misaki solo podría alentar a su amigo para seguir a su corazón. Qué feliz estaba cuando a sus oídos había llegado la noticia de que a Kisa le ofrecieron un trabajo como oficial del ejército bajo el mando de Yukina. Misaki se enteró de que él estaba haciendo un buen trabajado después de que estaba siendo capturado junto con él durante la escena del río. Después de Akihiko sabía que Kisa fue quien lo salvo, al instante le recompensó Kisa. Se reunió con Kisa un par de veces en el jardín durante su descanso y le presentó a Ritsu. Decir que se convirtieron en amigos al instante podría ser comprensible ya que comparten el mismo interés en los libros. Misaki solo pudo sonreír en la felicidad al ver que sus amigos interactuaron y juntos compartieron historias y se rió desde el fondo de su corazón.

"Otra vez te perdiste en tus pensamientos, mi Amado". Akihiko acarició la cara pálida sobresaltando a dicho chico de sus pensamientos.

"Acabo de recordar algo." Misaki sonrió mientras el dedo de Akihiko trazaba sus labios. Akihiko se inclinó y capturó sus labios regordetes y besó a su consorte. Mientras que se encontraba abrazando al chico, tirando de él con sus brazos mientras se disfruta el beso. Abrió la boca del adolescente lamiendo y chupando antes de soltarlo, respirando con dificultad.

"Te quiero, mi amor." Akihiko le beso la mejilla y beso la mano de Misaki, un gesto de respeto y amor.

"Yo también te quiero... Akihiko-san." Misaki se sonrojó y sonrió, mirando la cara feliz de su marido. ¿Quién hubiera pensado alguna vez un esclavo humano como él podría estar entre tanta felicidad. Todo era perfecto. Mientras miraba a su vientre, en menos de tres meses, su primer hijo nacería y esperaba en el fondo de su corazón que esta felicidad durará para siempre. Ahora, él podía ver el camino de su futuro, y su corazón y su mente sabían que su lugar estaba aquí, junto con Akihiko para el resto de su vida.

 

Notas finales:

Espero que les haya gustado esta traduccion :D intente hacerla lo mejor posible y aqui les dejo el link de la historia original.

https://www.fanfiction.net/s/10476907/1/The-Ray-of-the-Morning-Sunshine

 


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