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Penguin llevaba en brazos a una dormida Mavis mientras Killer le guiaba justamente a su habitación, al abrirle la puerta para que pasaran notó que el moreno estaba algo nervioso, le tomó del brazo con suavidad y le entró. Penguin dejó a la niña en la cama, la arropó con las sábanas y se le quedó observando unos minutos para ver si no se despertaba, Killer no perdía detalle de cada movimiento del chico, era tan jodidamente tierno y delicado que le daban ganas de estrujarlo y no soltarlo. Habían logrado hacer una amistad en los días que llevaban viéndose, sin embargo él necesitaba algo más, no iba a desperdiciar esta oportunidad, se acercó lentamente al moreno y le susurró para no despertar a la pequeña.
- Realmente es una buena niña.
- Sí, lo es- Penguin sonrió tan dulcemente que hizo sonrojar a Killer.
- ¿Penguin, por qué no te quedas esta noche?
- ¿E-eh?
- Me gustaría seguir hablando contigo, hay cosas que quiero saber.
- ¿Mmm? ¿De Mavis?- el rubio tragó saliva, allá iba….
- No…..de ti- el moreno le miró con sorpresa, puta gorra que no dejaba ver a Killer su rostro- Mavis no es la única que se pregunta por qué usas esa gorra.
- Tú usas máscara y no te he preguntado el por qué….. ¿a qué se debe tanta curiosidad?- no quería sonar grosero pero tenía razón, ambos estaban iguales, el rubio suspiró largamente.
- Porque quiero ver el rostro de la persona con quien tengo una hija, quiero saber cómo son tus ojos y tu cabello, a cambio….te dejaré ver el mío- Penguin abrió los ojos como platos ¿en serio se quitaría la máscara? También sentía curiosidad por conocer su rostro….lo pensó unos minutos y se resignó, que más daba, solo esperaba que Mavis tuviera razón.
- Bien- Killer sonrió, finalmente vería al moreno, zafó su máscara y la sacó a la vez que el otro se quitaba la gorra, Penguin levantó la vista y dejó al rubio sin respiración.
- Oh mierda…..ella no exageraba….son….preciosos….- Killer le miraba embobado, su moreno estaba sonrojado, con el cabello un poco revuelto y esos ojos tan brillantes mirándole con la misma curiosidad con la que le miró la rubia, el chico se acercó y se repitió la misma escena, delineaba las cicatrices con delicadeza mirándole con calma y dulzura.
- Killer-san, eres un idiota, eres muy guapo- el rubio rio.
- Jeje, ella dijo lo mismo, incluso me acarició de la misma forma que lo haces ahora, ya veo que no exageraba.
- ¿Exagerar? ¿Con qué?
- Tus ojos, me dijo que eran impresionantes…y es cierto, son hermosos- Penguin prácticamente soltaba humo de la nuca, no negaba que le gustaba el rubio pero no pensó que fuera recíproco.
- K-Killer-san- no aguantó más, el rubio pasó un brazo por la cintura del moreno acercándolo a su cuerpo y con la otra acariciaba su mejilla, hasta que rompió la distancia y le besó, no con lujuria pero si un beso intenso que mostraba todo lo que había estado guardando hasta el momento. Se separaron por falta de aire y Killer le abrazó.
- Nunca me imaginé tener una familia, siempre pensé que moriría un día en una masacre.
- La verdad es que yo tampoco me lo imaginaba, con los capitanes que tenemos que podíamos esperar jeje, pero…..supongo que ahora sí somos una familia- el rubio le apretó en el abrazo.
- Pen-chan- el aludido le miró con sorpresa y luego sonrió bobaliconamente por el nuevo apodo- Vamos a dormir- llevó al chico a la cama y se acomodaron al lado de Mavis, Killer les rodeó a ambos con sus brazos y se quedaron dormidos.
En otra habitación ocurría algo similar, Levy dormía plácidamente en la cama de Heat y Sachi estaba inquieto, el peliazul decidió romper el silencio.
- Levy me contó sobre ti y creo que tiene razón, no deberías taparte por algo como eso- el castaño se estremeció por el comentario y bajó la cabeza, Heat no quería esa reacción, se adelantó hacia él y le tomó por el mentón, haciéndole subir la cabeza de nuevo- Déjame verte.
- Y-yo no.
- Sachi…..mírame, estoy lleno de cicatrices, tengo tatuajes por todo el cuerpo y me han dicho que hasta parezco un zombi- el castaño rio un poco con eso, era cierto que su aspecto no era el mejor, pero para él ese zombi le parecía atractivo.
Heat tomó ese silencio como una afirmación, llevó su mano al gorro del chico y lo sacó, dejándolo en una mesa que tenía cerca, ahora venían las gafas, notó que Sachi tragó saliva, estaba nervioso, tomó los lentes y los quitó suavemente, dejando esos ojos almendrados a su vista, las soltó al lado del gorro y solo se quedó observando el rostro que tenía enfrente.
- Te ves mucho mejor así.
- Me siento más cómodo tapándome.
- No tienes que hacerlo conmigo, jamás te juzgaría- el castaño le miró con sorpresa y recordó algo.
- ¿En serio crees que mis ojos son lindos?- el peliazul se sonrojó un poco.
- ¿C-cómo sabes….?
- Jejeje, Levy me lo dijo, parece que cierta pequeña movía fichas en los dos bandos- Heat rio por eso.
- ……Sí, lo pienso, y también pienso que deberíamos estar juntos, no lo digo porque tenemos una hija, sino porque realmente me gustas- tomó a Sachi entre sus brazos y apoyó su mentón en su cabeza, el castaño estaba incrédulo, Heat era directo sin lugar a dudas pero eso le gustaba, la idea de ser una familia de verdad le gustaba mucho. Levantó su rostro y con una sonrisa de oreja a oreja se alzó de puntitas para besar al peliazul que le correspondió al instante- Tomaré eso por un sí- Ambos se acurrucaron en la cama con su niña y cayeron en los brazos de Morfeo.
En la cocina solo quedaban los dos capitanes y la taheña que “dormía profundamente” sobre la mesa, el silencio era tenso, después del agradable intercambio de palabras que tuvieron durante la cena ninguno mencionó nada más. Erza ya estaba incómoda, no quería que pelearan por ella así que tendría que ayudar un poco, comenzó a removerse en su lugar y con sus manos pasándolas sobre la mesa buscaba las de Law, cuando las encontró terminó de correr todo su cuerpo y prácticamente tomó al moreno como su almohada, apretándolo por el torso y apoyando su cabeza contra su pecho.
El moreno al principio se quedó inmóvil en su sitio, luego rodeó a la niña con uno de sus brazos para asegurar que no se cayera, Kid solo analizaba cada una de las expresiones de Law, siempre le pareció una persona fría y calculadora, cuando no le tocaba las pelotas claro…..pero tenerlo en la misma sala mimando y protegiendo a una enana rompía todos sus esquemas, tal vez Killer tenía razón, si los otros dos de su tripulación eran todo lo contrario a lo que se decía quizás con Trafalgar sea igual.
- ¿Qué clase de pesadillas tiene?- Law le miró y frunció el ceño.
- Ya te dije que si quieres saber de ella le preguntes directamente, Eusstas-ya, pero en serio…. ¿No te lo imaginas?- el pelirrojo cayó en la cuenta, en los files que Moria le dio hablaba de torturas y experimentos, así que era eso, apretó los puños con fuerza y rechinó los dientes como una bestia lista para atacar. El moreno solo le observaba- Supongo que ya te diste cuenta.
- Menudos hijos de puta, los voy a matar.
- Fufufu, no eres el único que piensa divertirse, Eusstas-ya, tengo todo un itinerario de todo lo que les voy a hacer cuando lo agarre- Kid no pudo evitar sonreír maquiavélicamente, la cara de Law era totalmente sádica y sus ojos brillaban con emoción, jodidamente genial.
- Jajaja, perfecto, Trafalgar, entonces la pasaremos mucho mejor de lo que tenía pensado.
- Menudo par de imbéciles me han tocado…..fufufu, pero no me puedo quejar, no podría estar más a gusto- Erza sonrió para sus adentros e inconscientemente apretó aún más al moreno, rompiendo así el aura psicópata que habían armado los chicos.
- Creo que deberíamos ir a dormir, Trafalgar, se despertará si la llevas al submarino, mi cuarto es grande - el moreno sonrió con sorna.
- ¿Me estás invitando a dormir en tu camarote, Eusstas-ya?- el pelirrojo se dio cuenta de lo que dijo y se sonrojó hasta las orejas- Fufufu, Eusstas-ya, no te hacía tan tímido.
- Si será cabrón, la puta madre lo parió….. ¿y en qué mierda estaba pensando invitándolo a quedarse? Mierda, mierda…..
- No es necesario que me quede, solo la dejaré en tu habitación y me iré al submarino.
- …….. ¿Y si se despierta o tiene pesadillas?- Law mostró una ligera preocupación en sus ojos, no había de otra, suspiró.
- De acuerdo, me quedaré.
Los dos caminaban en silencio al camarote del pelirrojo, este pasó y el moreno sin decir nada acomodó a Erza en la enorme cama de la habitación, se sentó en el borde de la cama y acariciaba los cabellos de la pequeña que ahora sí estaba dormida. Kid se sentó del otro lado de la cama y miraba a la pelirroja.
- ¿Le gustó el regalo?- Law no pudo evitar sonreír al recordar esa noche, para Kid eso era un sí- Ha mejorado mucho, ya controla bastante bien el metal.
- Me alegra saberlo.
Continuaron charlando durante unas horas, al parecer ninguno tenía ganas de dormir, disfrutaban de este momento de paz.
Erza comenzó a removerse un poco en la cama y sudaba mucho, apretaba la mandíbula en un claro gesto de dolor y su cuerpo comenzó retorcerse con violencia, Law intentaba despertarla moviéndole un poco y llamándola, pero al no reaccionar empezó a preocuparse, la pelirroja comenzó a gritar y el miedo se apoderó de ambos adultos.
Kid también trataba de despertarla pero no había forma, Law ya estaba al borde de una ataque de pánico, la tomó por los hombros y la zarandeó con fuerza.
- ¡DESPIERTA! ¡ERZA, DESPIERTA!
Finalmente abrió los ojos, jadeaba sin parar y miraba a todos lados tratando de ubicarse, cuando reconoció al pelirrojo y al moreno intentó hablarles pero su voz no salía y no lograba ordenar sus ideas, estaba entrando en pánico y su respiración se agitaba cada vez más.
Mierda, está demasiado pálida….. ¿Qué hago?..... Kid no sabía qué hacer, miró a Law que tenía los ojos desorbitados, la niña comenzó a hiperventilar, ni hablarle ni nada le calmaba, el moreno ya desesperado solo atinó a ponerle su gorro y hacer presión sobre él con su mano, los jadeos poco a poco fueron despareciendo hasta que la escucharon respirar con normalidad, ambos suspiraron de alivio.
Erza sentía algo en su cabeza, ese cambio abrupto logró sacarla del estado en el que había caído, poco a poco levantó sus manos y tocó el objeto, era mullido y suave, era….. ¿un sombrero? Abrió los ojos por completo y levantó el rostro, unos ojos plateados y unos dorados le miraban con angustia y expresiones preocupadas.
- Law……..Kid…….- el pelirrojo saltó en su sitio, era la primera vez que le llamaba por su nombre.
- Oye, enana, ¿estás bien?- no respondía, solo pasaba sus ojos de uno al otro y escondió la cara en el sombrero y lo apretaba con tanta fuerza que sus nudillos estaban poniéndose blancos.
- Erza- el moreno intentó hablarle.
- …….Estoy bien……solo….no es nada, ya estoy mejor…..- Law sabía que no era cierto y Kid frunció el ceño por esa respuesta tan falsa.
- Escúchame bien, Erza Scarlet- la niña saltó en su sitio, Kid siempre le llamaba por motes, pero esta vez tenía un tono tan serio y autoritario que hasta Law se impresionó- Ya no estás en ese lugar, si a alguien se le ocurre solamente tocarte Trafalgar y yo le romperemos los huesos…..así que déjalo atrás de una vez, ahora estás con nosotros.
Erza aflojó el agarre del gorro y levantó su mirada hacia la del pelirrojo, mierda que entre él y el moreno le hacían verse como una cría llorona y débil.
- Sois iguales.
- ¿Eh?
- Tsk….Kid, idiota.
- ¿Ah? ¿¡Pero que mier….?!- no pudo terminar de hablar porque la pelirroja le abrazó, ocultando su cabeza todavía en el gorro.
Kid se quedó estático, joder, no era bueno con los niños pero esta situación lo ameritaba, así que con la mayor suavidad que pudo le devolvió el abrazo con algo de torpeza. Law solo les observaba y no pudo evitar mostrar una sonrisa tierna y aliviada, el pelirrojo le miró y al ver esa reacción casi echa humo por la nuca, de puta madre, entre la mocosa y él lo iban a matar. La niña se zafó del abrazo y se volteó hacia el otro.
- Ya sé por qué nunca te lo quitas, es muy cómodo….y muy útil.
- Fufufu, eso me suena a que alguien quiere quedárselo- los taheños abrieron los ojos como platos ¿Trafalgar Law iba a regalar su sombrero?- Aunque tengo que admitir que te queda bien.
- ¿Me lo dejarías? ¿En serio me lo dejarías?- Law volvió a sonreír.
- Mmmm……quizás…….pareces un tierno y pequeño honguito…fufufu….- a Erza se le hincharon las venas de la frente.
- ¡TÚ SÍ ERES UN HONGUITO, TRAFALGAR IDIOTA!- comenzó a insultarle con todo lo que se le ocurrió y Kid se revolcaba de la risa en la cama, sujetándose el estómago con las manos y casi ahogándose.
- JAJAJAJA, un honguito, jajaja, esa fue genial, Trafalgar.
- ¡No le sigas la rima, payaso Kid!
- ¿Payaso? Ven acá enana del demonio.
El pelirrojo intentó atrapar a la niña y ésta empezó a correr por toda la habitación huyendo de él, se trepaba por todos lados y se burlaba cuando se le escabullía de las manos, ver al sanguinario Eusstas Kid corriendo detrás de una enana era una escena digna de recordar, pasaron varios minutos así hasta que el moreno alzó a la niña en sus brazos y la dejara en la cama, pero un mal movimiento hizo que ella se retorciera y riera, Kid puso una sonrisa maquiavélica……ahora sí se iba a desquitar, con su mano comenzó a hincarle en las costillas y ella reia cada vez más fuerte y se ponía en posición fetal.
- Jajaja, no puedo creer que tengas cosquillas, este es tu fin, enana.
- ¡Y-ya para! Jajaja….¡Law ayudaaa! Jajaja
- Me pregunto si…..- el moreno apretó su dedo contra el lado de Kid haciéndolo brincar en el sitio, puso una sonrisa totalmente pícara y comenzó a repetir la acción- Fufufu, Eusstas-ya, tú también tienes cosquillas.
- ¿Qué coño haces, Trafalgar?- Erza aprovechó el desliz y se lanzó encima del pelirrojo a ayudar a Law, sometiendo al chico entre ambos- ¡YA VALE, PARAD LOS DOS, CABRONES!
- Ni de coña, Kid, ahora me toca a mí- pasaron varios minutos torturando al taheño hasta que estaba tan rojo como su cabello.
- Erza, yo creo que ya es suficiente.
- Moooo…..pero me estaba divirtiendo.
- Es tarde, deberíamos dormir.
- Vale- Law acomodó a la niña en la cama y antes de soltarla ella agarró su mano y con la otra tomó la de el pelirrojo- ¿Os vais a quedar, verdad?- ambos se miraron unos segundos y luego a ella.
- Claro que sí, enana, ahora duérmete de una vez.
- No me des órdenes…..Kid….- la niña cayó dormida por el cansancio.
- Joder, Trafalgar, ¿es que no pudo sacar otra cosa de ti?
- Fufufu, mentiría si dijera que no me orgullezco de ello, Eusstas-ya.
- Idiota, duerme de una vez, mañana tendré un dolor de cabeza de la ostia.
Erza dormía en el medio de ambos, aún tenía el sombrero de Law y las manos agarradas a las de ellos, ahora estaba más segura que nunca, no solo tenía al moreno, sino que Kid ahora ocupaba un lugar más grande en su vida.