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La habitación se sumergió en un tenso silencio. Kid no había entendido las palabras del shichibukai y quería una buena explicación de todo este embrollo, miró a su pareja con la intención de que aunque sea él le dijera que rayos pasaba, pero la expresión de pánico y terror en el rostro del moreno hicieron a sus palabras atragantarse y mirarle alarmado. ¿Qué cosa le hizo ponerse así? Con cautela se le acercó un poco pero antes de poder decir algo el moreno se levantó lentamente con una mirada helada y endemoniada, por inercia retrocedió un paso, ni siquiera cuando habían discutido aquella noche en su barco le había visto tan frío e intimidante, los nervios aumentaban cada vez mas y el aire se volvió tan pesado que apenas respiraba, se volteó a ver al shichibukai y si él estaba nervioso el otro estaba histérico.
Moria temblaba de pies a cabeza, ahora se arrepentía de hablar de más, si antes no quería morir ahora lo deseaba con todas sus fuerzas. El peso de esas iris plateadas le hacían encogerse más en su sitio. Ya se lo imaginaba, el moreno le rebanaría en mil pedazos, lo volvería a unir y lo diseccionaría para ponerlo de trofeo en una encimera……. Una voz trémula le hizo volver a la realidad.
- Dime donde están- las palabras se negaban a salir por el pánico que le inundaba, el moreno volvió a preguntar con la voz mucho más cargada de ira y odio- Dime donde están…….¡¡AHORA!!
Kid saltó en su sitio por el grito, estaba petrificado observando la escena, si no intervenía Law iba a matar a ese hombre en un arranque de cólera y aún necesitaban saber todos lo detalles posibles, con la mayor delicadeza que pudo apretó el hombro del moreno con su mano en un mudo gesto de controlarle, le sintió relajarse un poco y al fin logró respirar tranquilo, Law le dejó ponerse delante del prisionero y llevar las riendas de la conversación.
- Habla de una vez….¿Qué es el Plan B?
- Otros niños…..con nuestros genes…..- Law fue el que respondió y Kid le miró incrédulo.
- Oh no, no, no, no……mierda…..Tks….dime donde está vuestra base antes de que te mate de una vez.
- E-en una isla no muy lejos del laboratorio que explotó, al norte navegando dos semanas.
- Sabes que si estás mintiendo te mataré.
- ¡¡NO MIENTO, LO JURO!!- Kid frunció el ceño por el cobarde gritito del hombre pero estaba seguro que decía la verdad, se volteó a ver a su moreno y este asintió solamente.
- Tienes suerte que no estemos de humor para acabar contigo.
- Espera, hay algo más que quiero saber…..esos niños….¿Qué edad tienen?
- N-ninguna por ahora, c-cuando explotó el laboratorio y notamos que habían escapado decidimos iniciar el segundo proyecto, en estos momentos solo son unos bebés, si acaso de unos dos meses como máximo por las máquinas que aceleran el crecimiento- se hizo silencio por unos minutos y el pelirrojo, harto de la situación decidió terminar de una vez con esto.
- Suficiente, vámonos, Trafalgar.
Sin decir nada más ambos salieron de la bodega en silencio, los demás le esperaban en cubierta ansiosos por saberlo todo, sin embargo las caras de sus capitanes eran tan serias que la ansiedad se convirtió en preocupación.
- ¿Capitán?/¿Kid?- los nombrados suspiraron hastiados y comenzaron a hablar.
Heat y Killer estaban estáticos en sus lugares, tenía que ser una broma, no era cierto….Sachi y Penguin por otro lado temblaban de impotencia y terror, con todo lo que le habían contado sus niñas, el sufrimiento, las torturas, el miedo….ni soñando esto se iba a repetir, como si tenían que asesinar a todo el puto gobierno de mierda.
- Hay que ir por ellos- Penguin fue el primero en hablar y Killer le observó impresionado- No voy a dejar que le hagan lo mismo que a Mavis a otro hijo mío….no lo voy a permitir….- Kid sonrió un poco por esa actitud, Killer había escogido una buena pareja, el rubio le pasó un brazo por los hombros como apoyo y el joven se recostó en su hombro para calmarse.
- Heat- el nombrado se volteó confuso hacia su pareja, siempre le decía Heat-san con dulzura y una sonrisa, sin embargo lo que tenía a su lado era un castaño enojado y mortalmente serio- Quiero que quemes ese maldito lugar hasta las cenizas, que no quede nada en pie, ni siquiera el maldito recuerdo de que existió- el peliazul abrió lo ojos como platos y sonrió sádicamente.
- Por supuesto que sí, Sachi- el castaño le acompañó en el gesto y tomó su mano lo más cariñosamente posible que les permitía el momento.
El pelirrojo los observaba a todos algo más tranquilo pero recordó la reacción del moreno y con lo cerrado que era a las personas lo mejor era hablar en privado, así que lo mas sutil que pudo le agarró de su mano y se fueron a su camarote dejando a los otros en sus burbujas. No dijeron nada en todo el camino, Kid abrió la puerta de la habitación e hizo pasar a su pareja cerrando con suavidad la puerta de nuevo y pasando el seguro para que nadie les molestara. Se volteó a ver al moreno y solo suspiró.
Law solo se quedó parado en medio de la habitación, sumido en sus pensamientos y mirando a la nada, su cabeza procesaba todo a una velocidad imposible, imaginando todos las posibles escenas donde un pequeño o pequeña, pelirrojo o moreno, de iris doradas o plateadas sufría y lloraba pidiendo auxilio, deseando desaparecer de este mundo, siendo golpeado, encerrado en una asquerosa y oscura celda, obligándole a pelear para sobrevivir ….. que pensara como Erza cuando la encontró…….que era un monstruo……
Kid decidió sacarle de sus pensamientos, Law no era una persona positiva y sabía que pensaba lo peor en ese momento. No era que él no se imaginara la horrible situación en que podría estar su hijo o hija, pero si los dos se estancaban no llegarían a ningún lado y ese ser pagaría las consecuencias.
- Law…..Law, escúchame- el moreno giró la cabeza para verle- Este no es el momento de pensar de más, hay que atacar ya, en unos días estarán todos aquí y debemos tener un plan listo- se acercó a su pareja y le envolvió protectoramente entre sus brazos y apoyó el mentón en su oscuro cabello- Cuando esto termine tendremos otro enano más que aguantar- Law rio un poco y Kid sonrió- Me voy a volver loco si es otro como tú.
- ¿Cómo que otro como yo?- el moreno hizo un puchero fingiendo molestia y el pelirrojo carcajeó divertido.
- Si me toca otro enano tocapelotas los tiro a los tres por la borda.
- Fufufu, como si pudieras hacerlo…
- ¿Ah, quieres apostar?
- Para nada, Eusstas-ya, sé que no lo harás- Kid le miró con deje divertido y burlón.
- ¿Y cómo estás tan seguro de eso…. eh, Trafalgar?
- Fufufu, porque nos amas demasiado, Eusstas-ya- la cara de Kid podía competir perfectamente con su cabello, frunció el ceño y giró el rostro haciendo a Law reír ¿Acaso se podía ser más tierno?- Eusstas-ya- el chico le miró de nuevo- Gracias.
- Idiota- la sonrisa bobalicona del pelirrojo era un poema, la misma de Erza cuando le regaló la nodachi, Law logró relajarse y volver a la normalidad, Kid tenía toda la razón, debía estar lo mas sereno posible para prepararlo todo.
- Bien, vamos, nada puede fallar.
- Jump, como si eso fuera a pasar, Trafalgar- ambos sabían que a partir de ahora debían ponerse serios.
Bepo estuvo a punto de saltar del submarino en un ataque de ira….Jean Bart le sujetaba de la ropa mientras el oso se retorcía en sus brazos, si es que Law no quería contarle porque sabía que esto iba a pasar, solo había dicho lo de los otros pequeños y Bepo salió corriendo a una velocidad pasmódica gritando y gruñendo, nada que ver con el tierno osito de baja autoestima….Fue una suerte que con el escándalo que armó las niñas no hubiesen salido a ver que ocurría, cuando interrogaron a Moria ellas estaban con Bepo y Jean Bart y ahora Penguin y Sachi que preparaban la cena las tenían entretenidas. Cuando finalmente el navegante dejó de moverse su nakama le dejó en el suelo y bajó la cabeza avergonzado por su comportamiento.
- Lo siento, Capitán, no pude evitarlo.
- Lo sé, Bepo….olvídalo, vamos a comer, pero recuerda….ni una palabra a las niñas.
- Sí, Capitán.
La cocina del submarino estaba más llena y alegre que nunca, no es que no se divirtieran pero había que admitir que entre las niñas y sus parejas las risas no faltaban. Levy le contaba a sus padres sobre un libro de historias y leyendas antiguas con una enorme emoción, Mavis retó a Killer a ver quien podía comer más espaguetis y Penguin trataba de quitarle la idea de la cabeza, no le hacía gracia que sus dos rubios se enfermaran por indigestión…… Erza y Kid….para variar…..se peleaban como siempre, teniendo a Law riendo divertido o a punto de jalarle las orejas a ambos por idiotas. Para su suerte ellas no habían notado nada de todo lo ocurrido en el día, al menos podrían pasar momentos tranquilos, si se enteraban de que tenían hermanos en ese lugar moverían cielo y tierra para llegar a ellos y rescatarles, ya tenían suficiente con preocuparse por tres bebés……
Tres barcos se acercaban al punto de encuentro, Bonney reconoció el barco de Cavendish al instante y se sorprendió muchísimo al ver quien le acompañaba, sonrió burlonamente al ver a la acaramelada pareja con Lucy en los hombros del peliverde, alzó su mano y les saludó para llamar su atención.
- ¡Eh, princesa, por aquí!- el rubio frunció el ceño por el saludo tan descortés pero luego sonrió suavemente y le devolvió el gesto cuando estuvieron lo suficientemente cerca.
- Hola, Bonney.
- Te veo bien acompañado….os veis muy monooooosss.
- Jódete, pelirrosa- el peliverde chasqueó la lengua molesto- Ahora estamos juntos- la chica miró a la niña y le devolvió la mirada, él entendió al instante- Lo sé todo, yo también voy a unirme a ustedes- Lucy le apretó la cabeza en un abrazo y la supernova los miró impresionada, no sabía que ambos piratas estaban juntos ni que Bartolomeo pudiese ser tan sobreprotector, antes de poder decir algo un destello rosado llamó su atención.
- ¡LUCYYYYYY!- la pequeña sonrió de oreja a oreja, se bajó de los hombros de su padre y saltó hacia el barco de su amigo.
- ¡NATSU!- ambos se abrazaron eufóricos y llenos de alegría- Te he extrañado, baaaaaka.
- ¡¿A quién le dices baka?!
- JAJAJAJA
- ¡NO TE RIAS, RUBIA!
Bonney y Cavendish sonreían por la hermosa y tierna escena entre sus hijos, pero cierto peliverde no pensaba lo mismo, ese mocoso estaba demasiado cerca de su princesa y como él decía…….eran SUS princesas….de nadie más, así que levantó al niño en el aire y lo alejó de Lucy.
- ¿¡EH, QUE CREES QUE HACES, IDIOTA?!
- No te acerques a mi mocosa, enano.
- ¿¡ENANO?! ¡VAS A VER AHORA, PEDAZO DE PERRO!
- ¡¿QUE DIJISTE, MALDITO MOCOSO?!- ambos discutían como animales hasta que sus rubios les callaron de la única forma posible…….
-¿¡PERO QUE HACES, CABAGE/LUCY?!- ambos se sobaban la cabeza por los capones que recibieron.
- Controlándolos par de idiotas- ambos rubiales respondieron al unísono.
- Cállense de una vez y dejen de pelear, no vinimos a eso, Barto.
- Ggrrrr……después ajustaremos cuentas, mocoso.
- Por supuesto que sí, colmillitos.
- ¡Natsu! Suficiente.
- Está bien, pero solo porque me lo pides tú, mamá- los demás le miraron incrédulos y ella solo suspiró.
- Miren, el barco de Kid y el submarino de Law, vamos.
Bepo movió las orejas ante un cambio en el viento, se levantó de la mesa llamando la atención de los restantes y poniéndose en guardia.
- Se aproximan unos barcos.
Los adultos tomaron sus armas y salieron del submarino tensos, al ver tres barcos lo primero que pensaron es que eran de la marina, pero luego al fijarse bien respiraron con alivio.
- Ya llegaron.
- ¿Ese no es el barco de Bartolomeo-ya?
- Mmm.....sí ¿Qué rayos hace aquí?
- A lo mejor viene con Cavendish-ya, parecían cercanos cuando les conocí.
- Pero si se la pasaban discutiendo- el moreno le miró divertido y Kid cayó en lo que quiso decir, ellos también se la pasaban peleando al principio….carraspeó un poco- Ya entendí, Trafalgar.
- Fufufu, que lindo, Eusstas-ya.
- Tks….cállate, mejor nos reunimos en mi barco, no cabremos todos en el submarino.
- Espera, que las niñas vengan también, así verán a los otros.
Estando de acuerdo esperaron a los demás en la cubierta, cuando finalmente los tres capitanes bajaron de sus navíos con los niños, éstos corrieron directo a hacia sus nakamas.
- ¡CHICAAAASS! ME ALEGRO TANTO DE VERLAS- los cinco pequeños se abrazaban como podían entre risas.
- Fufufu, nosotras también, sabes ahora tenemos nombres.
- ¿En serio? Nosotros también, ahora soy Lucy.
- Y yo Natsu.
- Sugoooii, Lu-chan, a mí me pusieron Levy.
- A mi Mavis.
- ¿Y tú? No nos has dicho tu nombre, onee-san- la pelirroja sonrió.
- Erza….Erza Scarlett
- Wooooo suena genial- las risas continuaron durante minutos y se dedicaron a contar todo lo que habían vivido desde que se separaron.
Por otro lado los adultos solo les observaban divertidos y hasta aliviados por verlos juntos, sin embargo esa sensación no duraría mucho, ya era hora de ir al grano y la supernova estaba impaciente.
- Bueno…..ahora qué tal si nos dices de qué va toda esta mierda, Kid- el pelirrojo suspiró con cansancio.
- Aaahhhh….por la puta, Bonney, ellas vienen del mismo laboratorio ¿Qué mas quieres saber?
- Kid, me dijiste que una de ellas es tu hija, no hay que ser muy listo para darse cuenta de quien es, quiero saber cómo es posible eso.
- Eso te lo explicaré yo, Bonney-ya- el moreno les contó sobre el supuesto proyecto y notó como los tres capitanes abrían los ojos como platos, la verdad es que si él se había impresionado no le extrañaba para nada esas caras.
- Mierda……menuda locura, Kid, imagino que casi te da un ataque cuando te enteraste.
- Bueno, mujer, que te lo diga uno de los que empezó esta mierda, sí….casi lo mato de no ser por Killer.
- ¿Y qué vamos a hacer? No pienso esperar a que se lleven a Lucy- Cavendish esperaba que tuvieran alguna idea de qué hacer.
- Aún faltan más personas, Cavendish-ya.
- ¿Ah, quienes?- el moreno sonrió de una forma macabra pero divertida.
- Mugiwara-ya, Portgas-ya, Sabo-ya y……el Yonko Shorihige.
Se hizo silencio por unos minutos antes de que todos estallaran a la misma vez.
- ¿¡QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE?!
- ¿L-Luffy-senpai viene?- Bartolomeo se encerró en una burbuja donde solo habían mini Luffys riendo, el peliverde admiraba mucho al monito….quizás demasiado…….
- ¿El viejo Barbablanca? ¡No me jodas, hombre!- la pelirrosa tenía la mandíbula por el suelo y se llevó las manos a la cabeza.
- Oh, vaya, entonces va a ser una guerra de las buenas, peor que Marineford, Barbablanca tiene cuentas que saldar con la marina y esta es su oportunidad, pero…… ¿Por qué vienen?- el rubio se giró a ver a los niños y recordó que Lucy le había hablado de unos gemelos- Oh, faltan dos, deben estar con él, por eso viene Portgas. ¿Y Luffy y Sabo que pintan en todo esto?
- Portgas-ya adoptó a los gemelos, parece que llamó a sus hermanos y les contó todo, ya conocemos a Mugiwara-ya…..se lo tomó personal y más ahora que son sus sobrinos- a todos les escurrió una gotita de la nuca…..genial....el supernova más conflictivo de todos venía, el yonko más desquiciado también y contándolos a ellos…..vamos que la marina iba a tener la mejor fiesta de su vida…..- Mejor esperemos a que lleguen, así nos pondremos todos de acuerdo.
- Suena bien, Trafalgar- todos asintieron conformes.
Cinco revoltosos miraban a sus padres hablando con curiosidad, unos estaban demasiado serios y otros con caras preocupadas…..no entendían que sucedía, todos excepto Lucy, realmente prefirió no decir nada, sus papás le aseguraron que nada iba a sucederles a ninguno y ella confía ciegamente en ellos ¿Para qué preocupar a sus nakamas? Mejor dejar a los adultos encargarse de todo.
- ¡Mamá!- la pelirrosa se volteó a ver al niño- Mamá, tengo hambre, vamos a comer- la chica sonrió tiernamente y le asintió con la cabeza, dejando a todos los demás con cara de idiotas, jamás se hubiesen imaginado a la supernova siendo amable y….como decirlo……buena madre……
- Está bien, Natsu, ya terminamos, mañana puedes venir de nuevo a ver a tus amigas.
- ¡SIIIIIIIII! Nos vemos, chicas.
- Lucy, vámonos también, ya es tarde- Cavendish alzó a la niña en sus brazos y Bartolomeo le revolvió los cabellos haciéndole reír divertida.
- Hasta mañana a todos- la niña agitaba su mano despidiéndose.
- Adiós, Lucy, Natsu- las tres pequeñas que quedaron hicieron lo mismo y fueron con sus padres.
- ¿De qué hablaban, Law?
- De cómo los encontramos, solo nos pusimos al corriente.
- Anda, enana, tira a dormir que es tarde.
- ¿Ah? No me des órdenes, Kid- al pelirrojo se le hinchó una venita en la frente.
- Sí te las doy, enana de los huevos, tira a dormir.
- Que no- la niña le hizo pucheros y se cruzó de brazos afirmando su negativa, Kid se llevó su mano al puente de la nariz y apretó un poco para calmarse.
- No, si es que no puede ser una niña normal, tiene que ser una tocapelotas.
- ¿De qué estás hablando? Aquí no hay ninguna pelota y no estoy tocando nada- los adultos la miraron incrédulos y estallaron en carcajadas, Erza los miraba sin entender que había dicho que les causara tanta gracia, miró a sus amigas y ellas negaron con la cabeza, vale…..ahora sí no entendía nada.
- Ay, mierda, eso fue demasiado…..JAJAJAJA, sí que eres inocente, enana.
- ¡DEJA DE DECIRME ENANA, KID BAKA!
- Oh, por favor, no empiecen de nuevo, Eusstas-ya, Erza, a dormir- ambos pelirrojos le miraron molestos.
- ¡Qué coño, Trafalgar, a mí no andes mandando!
- ¿No dijiste que teníamos “algo que conversar”, Eusstas-ya?- el chico cayó en lo que le estaba diciendo y sonrió socarronamente.
- Cierto, cierto, perdón por olvidarlo, Trafalgar.
- Erza, es tarde y mañana quedaste con tus amigos, deberías descansar.
- Mmmmmm…….vale, pero solo por eso- el moreno le cargó y la llevó a su camarote seguido por el pelirrojo, acostaron a la enana en la cama y Law le revolvió el cabello como siempre para que se durmiera, apagaron la luz y salieron de la habitación.
- Al parecer las cosas van bien, Trafalgar.
- Sí, por ahora todos estamos de acuerdo- escuchó al pelirrojo reírse y le miró con duda.
- Estaba pensando en su cara cuando vea el otro mocoso- Law se imaginó la escena, Erza podría ponerse celosa (cosa que no creía) o saltaría de alegría por tener un nuevo integrante en la familia, sonrió pensando en eso y sintió como el pelirrojo le abrazó posesivamente.
- Anda que eres suertudo, Eusstas-ya- el chico lo miró con una interrogante en la cara- ¿No querías otro hijo? Pues dentro de poco lo tendremos- el pelirrojo sonrió de oreja a oreja como un niño pequeño y apretujó al moreno en el abrazo.
- Sí…….tengo mucha suerte- la voz con la que dijo lo último estaba cargada de cariño y euforia, ciertamente Kid nunca se había visto con pareja ni críos, ahora que los tenía (aunque fuesen algo a la fuerza) pensaba en el tiempo que había perdido con el moreno desde la primera vez que le vio- Oye, Trafalgar.
- ¿Mmmmm?
- ¿No teníamos una conversación pendiente?
- Idiota.