De repente el camión de pasajeros frenó, haciendo que todos quienes iban de pie chocaran entre sí, haciendo que Minsoo se estampara contra el chico de cabello castaño, reconoció el aroma particular y sonrió, pasó saliva; separó sus labios levemente, ligeramente nervioso.
-Perdona mi impuntualidad; me hubiera encantado llegar antes a tu vida.-susurró haciendo que su aliento chocara contra la piel de la nuca de YoungMin.
Después de dos segundos una carcajada sonora invadió el autobús, provocando que todos los pasajeros los voltearan a ver.
-Investigué un poco y me enteré que eso de “la impuntualidad de los sentimentales” es de Jungsoo, así que si me quieres ligar tendrás que inventarte algo más.- contestó YoungMin subiendo el volumen de su reproductor de música.
-¿Cómo que lo investigaste?- preguntó alarmado, separándose del cuerpo de YoungMin. –¿Fuiste a hablar con él?-
-Le mandé solicitud a SplashFace.- contestó encogiéndose de hombros y aferrándose a su mochila porque sentía que Minsoo podría meterle algo. –Revisé sus publicaciones y me encontré eso de la impuntualidad varias veces. Le dije “Suena fantástico, tienes un exquisito gusto en cuanto a literatura, me encantaría leer a ese autor, ¿me puedes decir quién es si no te molesta?” y dijo “Me lo dijo alguien y sí, es hermoso.” La conversación fluyó naturalmente.-
-Espera, ¿cómo te tienes en SplashFace?- hasta donde sabía, Jungsoo ya conocía el nombre de YoungMin. –¡OH!- probablemente Jungsoo también haya investigado a YoungMin y ahora que regresaba a casa las cosas se podría poner un poco feas. Y duras.
-Epic Twin.- contestó sonriendo. –Bebé, no soy tan estúpido como para entregarme al león.- negó lentamente notando como se acercaba a la parada en la que normalmente baja.
-No es que te llamara “tonto” o algún sinónimo, sólo me dio curiosidad.- caminó tras de YoungMin para bajar también, pero antes de que pudiera pedir la parada, Minsoo presionó el botón sonriéndole, el gemelo sólo alzó las ceja sin ánimos. –De nada, “bebé”.-
YoungMin sólo suspiró medianamente satisfecho.
-Gracias.- susurró una vez que el autobús se paró, luego bajó las escaleras y aunque quería marcharse directo a su casa, se detuvo a esperar a Minsoo. –Creí que ya habíamos hablado esto.-
-¿Crees en el destino?-
-Te dije que no.- respondió riéndose ligeramente. –Me gustaría decir que eres alguien perseverante pero incluso ellos saben cuándo rendirse.-
-Si te hago una rima ¿bajarías tus guardias?-
-Para tu desgracia yo no soy auditivo así que tus riman no funcionan conmigo.- mintió. –Si verdaderamente quieres hacer algo para mí, respeta a JungSoo.-
-Pero…-
-Es alguien interesante, postea cita de autores y cosas de su trabajo. Hasta me cayó bien. Considero que aun puedes hacer algo por tu relación.-
-Yo no sé si quiero hacer algo, pero lo pensaré.-
-¿Te digo una cosa fea?- preguntó YoungMin volteando a verlo por encima de su hombro. –Leeteuk va a ser feliz contigo, sin ti y a pesar de ti.-
-Tú también.- contestó Minsoo sonriendo. –Conmigo, sin mí y a pesar de mí.-
-No tienes remedio.-