De pronto apareciste tú.
El profesor Tristán había llegado a la clase típica de historia, es gracioso porque la profesora Serenity se había tomado el año sabático y este profesor tomaría su lugar. A penas y puedo imaginarme las aburridas clases en las que estará la temporada de mi último año de preparatoria.
-Jovencito- expresó el profesor-dejese de andar viajando, espero que no me esté imaginando desnudo...-bromeó
-¿que diablos?- Duke pensó- ¿por que habrá dicho semejante estupidez?
-muy bien me presento formalmente queridos alumnos- amplió los tonos de su gruesa voz-soy el profesor Tristán, especializado en la materia de Historia del Arte y la comunicación visual. Espero que todos pasen la materia, porque es bastante sencillo excentar si se lo proponen.
-Claro-hace expresó weebel- otro profesor barco- arrojó una bola de papel al aire.
-Claro que es fácil, más no será como la zorra que vino a educarlo niño-el profesor anotó el temario en el pizarrón para que todos lo lograran retomar en sus apuntes.- muy bien, me gustaría que fuéramos una breve introducción, por lo que me gustaría que me dijeran qué tema les gustaría manejar específicamente.
Tea levantó la mano- me gustaría trabajar con el antiguos Egipto.- afirmó.
-excelente, ya salió voluntaria, que empiece la ruleta rusa- rio maquiavélico.- tú niño, te va a tocar hablar de Mesopotamia.-señaló a Rex
- Pero... Usted debería darnos la clase.- se agitó en seguida.
-lo haré a su momento, pero primero me voy a divertir mucho mientras ustedes ponen cara de... pequeños ingenuos- rio de nuevo.
-¿que le pasa a este loco?- se preguntó Duke- esto es anti-pedagógico
-Niño de la diademita roja- señaló el profesor refiriéndose a Duke.-hablará de Japón.
-¿niño? ¿Quién se cree?- Duke- se comenzó a molestar.
Mientras Tristán seguía hablando, Duke deducía lo que podía de la personalidad de este nuevo profesor.
A lo largo de la semana, Duke espiaba al recién llegado; durante sus horas libres, lo perseguía por los pasillos o por los jardines que atravesaban el comedor y la biblioteca. Generalmente estaba acompañado de chicas, eso era muy raro, porque siempre de parte de ellas escuchaba maravillas, mientras que él tenía otra percepción de Tristán.
Cada clase que veían, era bastante particular, nada como memorizar fechas ni nombres ni nada de eso, la técnica de enseñanza de Tristán fue completamente distinta y más dinámica...
Duke seguía sin acoplarse, era demasiado extraño a su parecer el tipo de clase que daba el Historiador del arte aunque por alguna razón, Duke tenía la sensación de que Tristán lo miraba demasiado, como si fuesen los únicos humanos interactuando con mucho duelo, Duke sintió incomodidad con forme fue pasando el tiempo ya que ahora en las maniobras espía que el hacia, Tristán las aplicaba aún más indiscretas.
Le pareció mejor alejarse, curiosamente, fue aún más difícil.
En la excursión del mes pasado, en el bus, Tristán se sentó a un lado de él, durante el recorrido no se separaron más de metro y medio uno del otro eso parecía una asfixiante forma de llamar su atención.
Un día muy caluroso, el profesor pido que se les ayudará a los alumnos con un ensayo de lo que se trabajó durante su estancia dando clases.
Por crueldad del destino, Duke fue el último en entregarlo. Esa tarde cambiaría toda su vida y justamente en su cumpleaños...
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