Día de los inocentes, los americanos los festejan el primero de abril, los mexicanos y algunos otros países de Latino América lo festejan el veintiocho de diciembre. Ese día es donde amigos y familiares les gusta gastar una que otra broma a sus conocidos, es divertido para pasar el rato y reír en grupo, pero muchas veces aquellas bromas se salen de las manos y pueden terminar causando dolor, física y/o emocionalmente, a los afectados, pero no por eso las personas se detienen, al contrario muchas otras apenas termina ese día piensan en lo que pueden hacer para el siguiente año.
Orihara Izaya, un joven de cabellos negro y llamativos ojos rojos, un chico muy apuesto pero a la vez bastante peligroso. En la Academia Raira saben que no es buena idea meterse con aquel chico o podrían terminar más perjudicados de lo que uno podría pensar. Izaya no discrimina a nadie para el día de las bromas, para él todos los humanos son iguales, lo único que suele diferenciar uno de otros es su modo de reacción, y por esa misma razón amaba el April Fools. Muchas veces causó rompimientos o disputas entre el alumnado de su escuela, siempre le divertía ver las reacciones que daban los muchachos, mientras él los observaba desde lejos, en una posición muy segura y sin que se enteraran de que él era el causante de aquellas bromas. Pero los alumnos no eran el único blanco del joven moreno, incluso maestro se vieron involucrados en aquel juego, los más viejos en la escuela ya sabían del día de las bromas que causaba grandes problemas para muchos, por lo que iban con mucho cuidado por las instalaciones y dando clases sin bajar la guardia, pero aun así, varios caían en las pesadas y peligrosas bromas de Orihara, los profesores no podían hacerle nada a su estudiante de igual manera, como expulsarlo o castigarlo, porque sabían que podría irles peor. Así que simplemente se iban con cuidado y cuando les tocaba la broma simplemente daban un suspiro de alivio al notar que sería así de nuevo hasta el siguiente año, o hasta que se graduara Orihara.
Era el último año en la academia Raira, y como todos los años Izaya decidía usar el primero de abril para gastar bromas, y ya no era tan divertido jugar con solo los alumnos o maestro, por lo que esta vez cambiaría de objetivo. No había jugado al "April Fools" con Shizuo ni con Shinra, el primero no, porque siempre estaba molestándolo y no tenía caso, Shizuo no tenía fecha específica para ser molestado, y Shinra, bueno, él era su amigo desde la secundaria y aunque no lo demostrara le tenía aprecio.
Pero ese día Shinra parecía estar de malas, por lo que se enteró, Celty se había enojado con él por alguna razón dejando a Shinra deprimido, y para empeorar las cosas para el castaño, la dulluhan había viajado por un trabajo y no volvería hasta dentro de dos semanas. Por lo cual Shinra no estaba de humor, el momento perfecto para hacerlo explotar y ver nuevas reacciones de su amigo.
Izaya no tardó mucho en hacer algo que los hiciera caer en una "inofensiva broma", él más fácil de engañar fue Shizuo, esa mañana le puso una nota, donde una chica le pedía que lo viera después de clases detrás de el gimnasio, nada como una nota donde una chica se le confesaría, eso dejó a Shizuo esperanzado y con ganas de conocer a aquella chica. Cuando en realidad lo esperaría un grupo de delincuentes de la escuela rival.
Con Shinra fue un poco más elaborado, hizo que el profesor mandara a Shinra por unas copias, encontrándose con una chica del salón de al lado, ella era la delegada de su grupo y a pesar de tener novio estaba interesada en Shinra, y al tener ese momento a solas. Prácticamente Shinra casi sale violado de las fotocopias, para seguirle a la mala suerte, el novio actual de la delegada los encontró, a Shinra casi corriendo y con labial por toda la cara, el chico al verlo y reconocer a su novia dentro fue detrás de Shinra para golpearlo, ese día Shinra no pudo separarse de Shizuo ni de Kadota por miedo a que lo golpeara aquel chico y sus amigos.
Al final del día Shinra se quedó solo y siendo perseguido por aquellos chicos por toda la escuela, Shizuo fue a encontrarse con la chica, pero grande fue su sorpresa al ver que no había nada más que pandillero de otra escuela diciendo que Shizuo había estado cortejando a la novia del líder, con eso se inició una ferviente pelea, antes de que Shizuo terminada escuchó los gritos de auxilio de Shinra, usando al último en pie lo usó de proyectil para detener a los atacantes del futuro medico ilegal.
Shizuo termino peleando por segunda vez en menos de cinco minutos, Shizuo herido fue curado por Shinra en la enfermería de la escuela, ambos estaba cansado y se contaron el mal día que tenían, iban a pasar de largo aquel acontecimiento cuando Shinra se dio cuenta de la fecha cuando terminó de curar al rubio.
-¿Shizuo, Izaya no estuvo bastante tranquilo este día?
-Relativamente, vi que molestaba a un grupo de chicas, pero nada fuera de lo usual. ¿Por qué?
-Hoy es primero de abril, Izaya siempre gasta bromas de muy mal gusto a toda la escuela, pero siempre nos ignora a nosotros...
-Es muy probable que él sea el causante de lo que pasó hoy. No, estoy completamente seguro que él es el culpable, él siempre hace lo mismo para molestarme- Shizuo empezó a molestarse, cada vez mas- Lo matare, ¡Mañana lo haré pedazos!
-Tranquilo Shizuo- El rubio vio mal a Shinra, pero se calmó un poco al notarlo pensativo y luego poner una peculiar sonrisa- Golpearlo o lastimarlo solo le dará satisfacción por lograr molestarnos. ¿Qué te parece si nos vengamos, Shizuo?
-Te escucho...
-Bien, esta noche...
Izaya había tenido un gran día, mejor que cualquier otro, las reacciones de Shinra y Shizuo fueron la cereza del pastel de su April Fools, y para su suerte Shinra le había llamado esa tarde diciendo que como había tenido un mal día lo invitaba a pasar la noche en su casa, ya que no había nadie. No era la primera vez que lo invitaba, solía ir porque Shinra tenía juegos de videos muy interesantes, veían películas y comían sus postres favoritos, nadie pensaría que el gran Orihara Izaya hacía pijamadas con su amigo castaño. Shinra le dijo que llevara ropa cómoda, y al ser fin de semana, le convenció para traer un par de cambios por si salían de paseo mañana.
Con calma y disfrutando del atardecer, Izaya llegó al departamento que compartía con aquella extraña mujer, tocó el timbre y su buen amigo lo recibió con una gran sonrisa, le sirvió un poco de refresco y comieron un par de bocadillos mientras veían e capítulo de una serie de terror, que ambos no se perdían, una vez hubo terminado Shinra le pidió a Izaya que escogiera el juego mientras el preparaba más bocadillos.
-Traje té, sabe mucho mejor con estos nuevos pasteles de aquella nueva pastelería, "Lovely Lovely"- dijo Shinra dándole a Izaya su té y una gran rebanada de tiramisú.
-Genial, sabe delicioso- le dio un bocado al pastel y luego bebió el té- Pero... ¿Fuiste hasta Ikebukuro por esto?
-Oh, no para nada, me lo trajeron como un obsequio- dijo con una sonrisa maliciosa, el brillo de sus lentes ocultaban sus ojos, confundido Izaya terminó por beberse el té.
-¿Celty regresó? Pensé que se había ido por dos semanas...- Sintió un leve mareo pero no le dio importancia.
-Y no está, recuerda tengo casa sola...- Se puso de pie y ayudó a Izaya a sentarse en el sofá- Quien me lo trajo fue Shizuo...
Izaya se sorprendió al notar que alguien le había puesto una mano en el hombro y el agarre empezaba a lastimarlo, conocía esa fuerza, pero no había sentido la presencia de nadie más en la casa, su cuerpo empezaba a relajarse, pero intentó parecer lo más normal posible. Al voltear el rostro vio a Shizuo sonriéndole sádicamente.
-Así que... me has vendido a la bestia, ¿Shinra?- dijo con su típica mascara de cinismo, era la primera vez que Shinra le hacía algo como eso, tenía curiosidad de saber los motivos- ¿Puedo saber el por qué? Ya que siempre decías que no querías vernos pelear hasta la muerte...
-Y es verdad Izaya-kun, no soportaría la idea de perder a mis dos amigos- Le dio un bocado al tiramisú de Izaya para luego sentarse a su lado, y le indicó a Shizuo que hiciera lo mismo al otro lado del moreno- Pero creo que ya fue suficiente con gastar bromas el día de los inocentes, y esta vez me usaste a mí- dijo de manera dramática, como si hubiera sufrido la más grande traición- Si fuera una inocente broma, lo hubiera dejado pasar, pero hiciste que corriera por toda las escuela en todo el día para salvar mi pellejo e hiciste que Shizuo peleara de más, incluso salió herido...
-¿Oh, la bestia puede sangrar? Que interesante, ¿Es verde o morado su sangre?- dijo intentando mantener su cinismo, pero se sentía extraño, empezaba a sentir mucho calor, sentía una extraña presión en la boca del estómago que le hacía sentir que le faltaba el aire.- ¿Qué me hiciste, y qué planeas Shinra?- dijo esta vez serio viendo a su amigo de lentes, que le sonreía como si nada.
-Tranquilo Izaya-kun, solo te día un pequeño afrodisiaco que conseguí por parte de una conocida tuya, dijo que sería muy efectivo para ti... Y veo que realmente funciona- Lo último le susurró al oído con una voz sensual, mientras acariciaba su ante pierna, la cual empezaba a despertar. Izaya escuchó como Shizuo rio entre dientes- Y no te haremos nada tan malo como tú sueles hacer con nosotros, solo queremos "castigarte"
-Pero no te preocupes, Izaya-kun~- Esta vez Shizuo habló, alargando su nombre como solo él sabía hacer- Que disfrutarás esto...- Por un momento Izaya notó que la voz del rubio se agravó, haciéndolo estremecer.
Izaya se encontraba en la habitación de Shinra, estaba completamente desnudo, Shizuo lo "ayudó", por no decir que lo vistió contra su voluntad, con una tanga color negra con un pequeño moño en la parte de atrás de color rosa, en el cuello un listón negro y en el cabello le pusieron dos pequeños moñitos rosados que hacían juego con la tanga. El informante sentía que no podía hacer nada para defenderse en ese momento, todo su cuerpo lo sentía caliente y entumecido también, simplemente se quedó sentado en la cama viendo como Shinra se sentaba frente a él usando únicamente sus bóxers ajustados de color azul, y Shizuo detrás de él en las mismas condiciones que el castaño, usando unos bóxers negros.
Shizuo lo sujetó las muñecas posicionándolas en la espalda del futuro informante, Shinra aprovechó la distracción para besarlo salvajemente, en el beso Izaya se resistió en un principio, pero el calor y la lujuria empezaba a ponderarse de su mente, haciendo que se rindiera a sus instintos y correspondiendo al húmedo beso. Mientras ellos se besaban Shizuo empezó a besar el blanco cuello y hombros de Izaya, dejando mordidas en toda su piel, cuando sintió el rubio que el beso ya estaba siendo muy largo, separó a ambos para luego dirigir el rostro de Izaya al suyo, besándolo con lujuria, mordiendo suavemente sus labios del peli negro, ambos jugaban con sus lenguas, haciendo que algo de su saliva combinada empezara a escurrirse de sus labios.
Shinra veía como Izaya "peleaba" por tener el control en el beso con Shizuo, y este no se lo permitía, al fin y al cabo ambos nunca dejarían de pelear ni siquiera durante el sexo, cosa que sería bastante interesante, al menos para él. Mientras ambos seguían besándose, el castaño empezó a besar el pecho del moreno, lamía sus pezones hasta dejarlos duros para luego morderlos suavemente, Shinra empezaba a disfrutar el como Izaya soltaba suspiros durante el beso, pero no se detuvo ahí, dejó descansar un poco sus pezones para luego ir bajando por su pecho con húmedos besos hasta llegar al borde de la tanga, se posicionó entre las piernas de Izaya, y sin vacilar le dio una gran lamida al pene erecto del moreno por sobre la tela, haciendo que rompiera el beso con Shizuo para soltar un sonoro gemido, no se lo esperaba, lo tomó por sorpresa. El castaño sacó el miembro erecto de Izaya que pedía a gritos ser liberado de aquella prisión de tela.
Shizuo con malicia volvió a besar a Izaya para callar sus gemidos, mientras Shinra seguía en lo suyo. El castaño lamió desde la base hasta la punta del pene de Izaya, jugando de igual modo con sus testículos, para luego meter aquel miembro a su boca, escuchó como Izaya contenía el gemido contra la boca de Shizuo, y con eso empezó a mover su cabeza de arriba a abajo muy lentamente, para luego ir aumentado la velocidad, cuando sentía que Izaya iba a correrse se detuvo.
-Shizuo, préstame un segundo la boca de Izaya-kun- Shinra volvió a sentarse, para luego tomar entre sus manos el rostro de Izaya haciendo que se agachara hasta la altura de su miembro- Vamos Izaya-kun, es tu turno de "comer"- dijo mientras sacaba su miembro.
Izaya no quería, aun mantenía algo de lucidez, por lo que hizo a un lado si rostro haciendo que su mejilla tocara el erecto pene de Shinra. Al ver que no se movía Shizuo le jaló del pelo para que abriera la boca al gritar, y funcionó, apenas Izaya abrió la boca Shinra metió su pene dentro de la boca de Izaya moviéndose a su propio ritmo. El moreno sentía que se ahogaba, pero Shinra no se lo metía tan profundo como para hacerlo, sentir aquel pedazo de carne en su boca, empezaba a excitarlo y más al notar como Shizuo lo veía con deseo, quería ver qué cara ponían ambos si él cooperaba, así que sin más decidió poner de su parte, dejando que la lujuria y el deseo lo guiara.
Izaya se soltó del agarre de Shizuo para poder tomar entre sus manos el pene de Shinra y poder hacerle aquella felación de un modo más cómodo para él. Lamía toda la extensión del sexo del castaño, chupaba y lamía la punta para luego meter todo a su boca, subiendo y bajando usando de igual modo la lengua. Antes de que siguiera, Izaya fue separado por Shizuo viéndolo hincado con su miembro al aire, el moreno entendió lo que quería, así que lamio y repitió todo el proceso para dejar bien ensalivado el pene de Shizuo para poder meterlo en su boca, Izaya se dio cuenta que el rubio la tenía ligeramente un poco más grande que Shinra, pero no había mucha diferencia.
Mientras Izaya se encontraba en cuatro comiendo el pene de Shizuo, Shinra se posicionó detrás del moreno acariciando y besando las nalgas de Izaya para luego separarlas y empezar a lamer aquella virginal entrada.
-¡Espera Shinra!- Izaya se detuvo abruptamente, notando como Shinra empezaba a lamer su ano, intentó detenerlo pero Shizuo lo hizo regresar a su posición, metiendo su pene en su boca.
-No te distraigas pulga, sigue con lo tuyo...- dijo con malicia Shizuo notando como el pene de Izaya empezaba a gotear- Eres una puta... te excita que ambos estemos haciéndote esto.
-Cállate bestia, que estas a punto de correrte solo con mamártela- Izaya no se dejaría insultar por el rubio así que empezó a moverse más rápido haciendo que Shizuo se corriera dentro de su boca, tragándose toda su semilla- Oh, eso fue rápido Shizu-chan...¡Ah!
Izaya no pudo seguir burlándose del rubio puesto que sintió como algo pequeño entraba dentro de su cuerpo, al voltear vio a Shinra meter un dedo en su interior, y empezaba a moverlo lentamente. Iba a protestar pero fue callado por un apasionado beso de Shizuo, en ese momento Shinra metió el segundo dedo, haciendo que Izaya reprimiera un gemido contra la boca del rubio, Shinra siguió de esa manera extendiendo las paredes del ano de Izaya, preparándolo para lo que venía.
Cuando el castaño sintió que ya estaba suficientemente dilatado entró de una estocada haciendo que Izaya rompiera el beso para soltar un grito de dolor y placer. Shinra empezó a moverse lento dejando que el cuerpo de Izaya se acostumbrara a él.
-Izaya-kun, realmente es muy cálido y apretado en tu interior- Dijo Shinra viendo como Izaya descansaba su torso en el colchón, mientras sus gemido se hacían cada vez más sonoros- ¿Qué tal la vista Shizuo?
Shizuo se quedó sentado viendo como Shinra penetraba a Izaya suavemente, para luego ir aumentando la velocidad, Izaya veía al rubio avergonzado, era humillante para él ser penetrado por otro hombre, pero las sensaciones era maravillosas, se sentía tan bien tener a Shinra dentro de él, a pesar de todo él era bastante suave, se preguntaba Izaya cómo sería hacerlo con Shizuo.
-Eres muy suave Shinra, debes ponerle más fuerza- dijo el rubio, este levantó un poco el rostro de Izaya y lo posicionó entre sus piernas, sus miembro estaba semi erecto por el reciento orgasmo- Vamos Izaya-kun, prepáralo...
Izaya abrió la boca lamiendo el glande donde aun podía sentir el sabor de los restos de semen que habían quedado. El moreno usó sus manos para poder acomodarse mejor, se sentía tan bien de esa manera, podía sentir el cálido pene de Shinra arremetiendo contra él de una forma tan placentera, mientras en su boca podía sentir como poco a poco el miembro de Shizuo empezaba a crecer y endurecer por sus caricias. Las embestidas que Shinra le daba empezaron a ir cada vez más rápido y con más fuerza hasta que sintió como le tocaba aquel punto que lo hacía sentir en el espacio.
-¡Ahí, Shinra, ahí!- Izaya interrumpió la felación para pedirle a Shinra que siguiera dando en aquel punto, cuando sintió como Shinra le cumplía lo que pidió retomó su labor por complacer también al rubio que le acariciaba la cabeza, en señal de que hacía bien su "trabajo"
Con un gruñido sordo Shinra se corrió dentro de Izaya, mientras este igual se corría manchando las sábanas. El castaño al salir de Izaya dio un suspiro de satisfacción, le sonrió a Shizuo al ver como el moreno se desplomaba en la cama.
-No es hora de dormir Izaya-kun... aun falto yo- Dijo Shizuo relamiendo sus labios de una manera muy sensual, haciendo que el mismo Izaya se estremeciera ante eso.
Shizuo volteó a Izaya quedando boca arriba, cambió de posición con Shinra, al ver que Izaya no se movería por el cansancio. El rubio empezó a frotar su erección con el pene dormido de Izaya, al estar sensible por el reciente orgasmo empezó a gemir por el calor que despedía el miembro de Shizuo al rozar el de él, el tacto era cálido y húmedo, gracias a los restos de semen de parte de ambos sus penes de deslizaban con mayor facilidad, causándoles un gran placer. Shizuo metió dos dedos de una sola vez notando que estaba lo suficiente dilatado y húmedo para recibirlo, así que sin esperar más entró de una sola estocada, causando que Izaya soltara un grito de completo placer.
El rubio empezó a penetrarlo con fuerza, subiendo las piernas de Izaya a sus hombros para llegar lo más profundo que podía, haciendo que el moreno soltara sonoros gemido. Tal y como suponía Izaya, el sexo con Shizuo sería completamente diferente que con Shinra, el rubio era más brusco, más salvaje, más excitante. Izaya podía ver el cabello húmedo de Shizuo pegando a su frente, parecía disfrutar mucho aquello, ya que sonreía con malicia cada vez que le daba en aquel punto haciéndolo gritar y pedir por más.
De repente la vista de Izaya cambió, frente a sus narices estaba el pene de Shinra de nuevo erecto, el castaño se había posicionado sobre de él, haciendo la posición del "69", Shinra movió las caderas haciendo que su pene rozara con los labios de Izaya, este al entender abrió la boca para recibir aquel pedazo de carne, sentía el sabor salado de los restos de su semen, pero se vio envuelto en un nuevo nivel de placer al sentir como Shinra empezaba a succionar su propio mimbro, y todo sin que Shizuo se detuviera.
Izaya estaba que se sentía a morir, era penetrado con fuerza por Shizuo, tocando aquel punto que lo hacía delirar, mientras Shinra succionaba su pene al mismo ritmo que las estocadas del rubio, Izaya no podía mantener un ritmo adecuado para complacer a Shinra, eran demasiadas sensaciones que sentía.
-Nee, Shizuo déjame entrar a mí también, Izaya no puede hacerlo todo al mismo tiempo- dijo Shinra mientras se separaba de Izaya, Shizuo de igual modo salió de él, haciendo que el moreno se estremeciera y sintiera vacío- Bien... Izaya-kun, ven conmigo- Shinra se acostó boca arriba, y con ayuda de Shizuo, Izaya se montó al castaño, debido al sexo su entraba estaba lo suficiente dilatada y húmeda como para que Shinra entrara sin problemas, ambos se veía a la cara. Izaya podía a preciar lo atractivo y diferente que se veía el castaño sin sus lentes.-... Ahora tú, Shizuo...
-Espera...- Izaya vio como el rubio se ponía detrás de él, y ponía la punta de su pene en su entrada, ya ocupada- ¡Detente bestia! ¡No va a entrar!
-Oh, claro que entrará- y con mucho cuidado Shizuo fue entrando en Izaya, haciendo que este soltara otro grito.
Izaya temblaba y su culito le dolía, tener a ambos en su interior al mismo tiempo era extraño, sentía como el dolor empezaba a asfixiarlo, pero sus "compañeros" se dieron cuenta, por lo que Shinra se levantó un poco para besarlo, y Shizuo empezó a masturbarlo mientras le lamía el cuello. Sentía que Shizuo disfrutaba mucho de morder y lamer su cuello. Aquellas caricias empezaban a excitarlo de nuevo, haciendo que se relajara al igual que sus paredes, e instintivamente movió un poco sus cadera.
Tanto Shinra como Shizuo se vieron a los ojos, entendiendo que ya podían moverse y así fue. Al mismo tiempo, o al menos trataban que sus embestidas se coordinaran, empezaron a penetrar con fuerza a Izaya, haciendo que gritara de placer.
Izaya no podía más, sentía que en cualquier comento se correría; sentía que no podía respirar, sus piernas empezaba a entumecerse desde la punta de sus dedos hasta la parte baja de su estómago. Shizuo y Shinra, estaba en las mismas condiciones que el moreno, al estar ambos al mismo tiempo dentro de Izaya, hacía que en su interior se sintiera aun más estrecho, además podían sentir la erección del otro frotándose dentro del futuro informante, el calor, la humedad y la presión estaba dejándolos llevar.
Con un último esfuerzo, Shinra y Shizuo aumentaron la velocidad de las penetraciones, haciendo gritar a Izaya, el rubio mordió el hombro del moreno mientras Shinra lo masturbaba, haciendo que este se corriera en su mano, y al llegar al orgasmo, contrajo sus paredes, para poco después sentir como Shinra y Shizuo explotaban en su interior con un sonoro gruñido de placer de ambos.
Rendido salieron del interior de Izaya viendo cómo salían en grandes cantidades el semen de ambos combinados. Ambos se vieron y notaron que Izaya estaba a punto de quedarse dormido.
-El baño lo dejé listo, tomémoslo juntos, así dormiremos más cómodos- Dijo Shinra con una sonrisa, ayudando a Shizuo a cargar a Izaya hasta el baño.
Shinra le dijo a Shizuo que se adelantara con Izaya, él cambiaría rápido las sabanas, y apenas terminó se reunió con ambos, Izaya estaba semi dormido en la tina su cabeza descanzaba en el borde con los ojos entre cerrados, mientras Shizuo terminaba de bañarse. Shinra tardó menos y los tres se vistieron para pasar la noche juntos. Izaya solo le pusieron sus bóxers negros y una camisa gris de manga larga que había traído, Shizuo vistió con sus pans azules para dormir, y Shinra con su pijama morado de camisa de manga corta y pantalón.
Esa noche los tres durmieron en la misma cama, con Izaya en medio de ambos, apenas se acostaron el moreno se acurrucó en Shinra y se quedó completamente dormido, el castaño acarició los cabellos negros de Izaya, y vio con Shizuo con una sonrisa.
-Creo que no sería tan malo recibir otra broma de Izaya el siguiente año.
-Supongo que no- Shizuo cubrió con la sabana a Shinra e Izaya- Esto igual lo podemos hacer como una "tradición" para terminar el April fools de Izaya.
-Me parece buena idea...No le diremos nada a Izaya de esto... será nuestro secreto.
-¿El tener este trió con Izaya al final del primero de abril?-Shinra asintió con la cabeza- No es mala idea, me gusta... Repitámoslo el año que sigue.
-Mejor en mi cumpleaños...- dijo en un susurro Izaya, con los ojos adormilado vio a ambos- Es el mes siguiente...
-Oh, aun mejor- dijo Shinra emocionado- Entonces, hasta tu cumpleaños Izaya.
Shinra besó a Izaya, él le correspondió con gusto, al terminar el beso el moreno se volteó para besar a Shizuo, quien de igual modo le correspondió el beso, con eso Izaya durmió acurrucado en Shinra y con Shizuo abrazándolo por la espalda.
En el mismo edificio en el departamento de alado se encontraban cuatro chicas frente a un gran televisor. Una de ellas era una joven de cabellos negro ondulado, de ojos castaño claro, a su lado una chica albina de ojos rojos le sujetaba las manos emocionada, y a lado de esta un par de gemelas de cabello castaño oscuro al igual que sus ojos, una de ella tenía el cabello tranzado y usaba lentes, su gemela mayor tenía el cabello corto y no mostraba expresión alguna en su rostro, más en su interior estaba igual de emocionada que las otras tres chicas.
-Usa-chan fue gran idea dar aquello a Kishitani-san- dijo la gemela menor, viendo como su gemela mayor asentía con la cabeza.
-Oh, pero no hubiéramos tenido estas imágenes si no les hubiera pedido que pusieran las cámaras en toda la casa, Mairu-chan, Kururi-chan- dijo la albina emocionada- Kass-chan, gracias por prestar tu apartamento para esto, ¿viste que valió la pena?
-Sí, en definitiva Usa-chan- la morena abrazó a la albina emocionada- Valió completamente la pena que invadieras mi casa con todas esas cosas- señalando su equipo de espionaje- No me importa despertar con ojeras por esto, pero... dame un copia.
-Por supuesto, solo promete no publicarlo.
-Hecho.
-Veámoslo de nuevo- dijo Mairu emocionada.
-¡Sí!- dijeron las tres al mismo tiempo.