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Excelsior por Samy_DBS

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Notas del fanfic:

Los personajes de Naruto son de Kishimoto-sensei.

Esta historia está basada en la pelicula Silver Linings Playbook.

Notas del capitulo:

Hola chi@s!

Bueno esta historia la basé en una película, la trama me encantó y quise adaptarla al Mundo Naruto Yaoi.

Al inicio la haría sasunaru, pero no sé, siento que Itachi y Deidara quedan mejor en este papel.

Si bien, Itachi no es un loco desquiciado xD apuesto a que será divertido, no lo sé es mi opinión. Oigan, se que Excélsior lleva un acento. Pero por alguna razón de la vida quise escribirlo sin el. No me critiquen, estoy loca.

Espero les guste. 

Su espalda desnuda chocó contra la pared forrada en baldosas, el agua que caía constantemente le golpeaba suavemente su piel acanelada. De sus labios salían suspiros con cada roce que su amante le proporcionaba.

 

Devoraba el cuello sabor nuez, sus manos pálidas recorrían con recelo cada sitio de su cuerpo, robó sus labios hambriento por algo más.

Odiaba la idea de que Naruto no le perteneciera, pero disfrutaba el hecho de tomar a SU rubio burlándose en las narices de su hermano mayor, Itachi. Alias el prodigio, el hijo favorito, el orgullo de la familia Uchiha.

 

Sonrió cuando su adoración rubia lo abrazó de la cintura usando sus piernas, su kitsune estaba ansioso. Mordió fuertemente su cuello dejando una visible marca de pertenencia. Naruto gimió ante esto. –Feliz cumpleaños gatito.- le susurró con aquella voz tan masculina.

 

- - -

 

Bajó de su auto, había conseguido la tarde libre, llevaba una bonita caja forrada en papel con un enorme moño que resaltaba. En su otra mano llevaba dos pases para ir a un restaurant muy reconocido, consiguió una reserva con un mes de anticipación.

 Quería que el amor de su vida la pasara bien en este diez de octubre. Se preparó con una de sus mejores sonrisas.

 

Entró a su vivienda, estaba todo en silencio. –Naruto.- lo llamó y no estaba por ninguna parte de la planta baja, decidió buscar en su habitación y tampoco.

 

Sin embargo escuchó el ruido del agua de la regadera caer, sonrió. Le  daría la sorpresa.

Abrió con cuidado la puerta y la cerró, cuando giró para encontrarse con su esposo lo que sus ojos ébano vieron lo dejaron sin palabras.

Su hermano menor estaba teniendo relaciones con su esposo, este par ni siquiera notó la presencia del ojeroso. Itachi explotó. Apretó los dientes y todo pasó tan rápido. Sangre, gritos, golpes, el sonido de la sirena de una ambulancia y un montón de policías arrastrándolo lejos.

 

- - - - - - - - - - - - - [Ocho meses después] - - - - - - - - - - - - -

 

-Aquí tiene Itachi-san. –Una enfermera le extendía un par de pastillas junto con un vaso con agua.

 

El Uchiha las metió en su boca y tomó el agua para poder ingerirlas. –Abra la coca por favor. –pidió amable la chica. Itachi lo hizo. –Gracias por cooperar. –Salió satisfecha de que no hubiera problemas con el paciente.

 

Una vez se encontraba solo escupió las píldoras. –No las necesito más. –se aseguraba a sí mismo mientras salía al extenso campo del hospital.

 

Comenzó a hacer sus ejercicios matutinos. No quería perder su forma. Lo acompañaba uno de sus amigos. Un hombre con una loca afición con los tiburones. Su nombre era Kisame.

 

-¿Hoy sales verdad? –le cuestionó el hombre tiburón.

 

-Eso dijo el juez, aún queda la ultima palabra del medico.- Contestó serio.

 

Itachi era alguien de aspecto apacible y sereno. Nadie nunca hubiera imaginado que tuviera problemas de ira.

 

Pasaron las horas y era tiempo de ir al comedor. En su camino se encontró con una mujer muy bella. Su sonrisa era muy cálida dirigida hacia su persona. No podía creerlo.

 

-Ya es hora de irnos Itachi.- le habló suavemente a su primogénito.

 

Mikoto había luchado para que su querido hijo saliera de ese manicomio en los ocho meses prometidos. Con algunos inconvenientes y arriesgando demasiado en el juzgado logró liberar del encierro a Itachi.

 

Conducía el auto viendo hacia el frente mientras una que otra vez le echaba un vistazo a su hijo. –Quiero ir con Naruto.- dijo de la nada.

 

La mujer tragó duro sabía lo poco conveniente que era eso. –Querido, sabes que él te puso una orden de restricción… no quiero más problemas legales… ya hice mucho con sacarte del hospital.- usó una voz tranquila.

 

-Ya veo. –Comprendió. –Entonces llévame a la biblioteca. Iré por los libros que usa Naruto para enseñar. –Mikoto le dirigió una mirada dubitativa. –Estoy bien, el terapeuta dijo que era un avance. Quiero recuperar mi empleo y volver a reintegrarme a la sociedad. –Justificó, la mujer sonrió. Su hijo si había progresado.

 

Pasaron dos horas y media hasta que llegaron a su casa. Por acuerdo de la corte con Mikoto. Itachi viviría bajo el cuidado de su madre hasta que fuera capaz de valerse por sí mismo.

 

Antes de cruzar la reja del enorme y vivo jardín se detuvo. Sasuke estaría ahí… después de todo es la casa de sus padres… con tan solo pensarlo sentía que perdía el control. Excelsior. Susurró para sí mismo.

 

-Vamos Itachi. –Su madre lo tomó del brazo y siguieron adelante.

 

Cruzaron la puerta de madera y se sintió extraño de ver de nuevo aquella casa. Era un ambiente hogareño gracias a la presencia de Mikoto.

 

En la sala estaba su padre leyendo un periódico. Era una persona que no deseaba ver, claro que no. Enfrentar a Fugaku era uno de sus grandes retos.

 

-Ya llegamos. –Anunció la mujer. Fugaku suspiró levantándose para recibirlos.

 

Besó a su esposa y luego su mirada severa se posicionó en Itachi. El le tenía mucho afecto, no podía darle la espalda a su hijo.

 

-¿Qué tal, como van las cosas? –Cuestionó tratando de romper el hielo. Itachi se sintió aliviado.

 

-Bien, todo va muy bien. –Contesto mientras se daban un abrazo un poco forzado de parte de ambos.

 

-¿Qué dijo el médico? –Esta vez se dirigió a su esposa.

 

-Tranquilo, no te preocupes por eso. Míralo ya está aquí con nosotros. –Le sonrió.

 

-Me interesa saber que dijo el médico. –La miró insistente. –Porque lo que el juez diga no tiene nada que ver con la salud de Itachi y…- comenzaba a ocasionar una discusión.

 

-Hey, todo va bien. –Intervino Itachi.

 

-Si todo esta bajo control. –Siguió Mikoto.

 

Fugaku ya no pudo decir nada más. –Entonces… Felicidades. –Anunció estrechando las manos con su hijo.

 

-Si, gracias. –Contestó simple.

 

-Ahora la pregunta importante es: ¿qué vas a hacer con tu vida? –Hablaba seguro el hombre mayor.

 

Itachi se separó mientras tomaba los libros que momentos antes había recogido en la biblioteca. –Me voy a mantener en forma. –ante la mirada de confusión de sus padres decidió explicarse. –Delgado, para Naruto.- finalizó.

 

Ambos adultos tenían cara de preocupación y sobre todo Mikoto. Al parecer su hijo no había superado al Uzumaki. –También leeré los libros con los que enseña Naruto y recuperaré mi empleo. –Continuó explicando.

 

Fugaku decidió tomar la palabra no muy seguro de seguir con la platica. –Oye… Naruto vendió la casa. Él se fue. –Un silencio sepulcral se plantó en el lugar. -¿no te lo dijo tu madre?-

 

Le tomó un par de minutos procesar la información. –Voy a decirte algo. –Su tono de voz iba subiendo. –No sabes nada de nuestro matrimonio. –Un aura depresiva lo rodeaba, Mikoto colocó su mano en el hombro de Itachi para intentar calmarlo.

Itachi repelió el contacto de su madre. –Nuestro matrimonio. –Enfatizó el nuestro. –Naruto y yo nos amamos demasiado… igual que ustedes.-

 

La pareja de casados se abrazó levemente tratando de transmitirse apoyo. –Itachi, Naruto ya no está el se fue ¿entiendes eso? –

 

-¡Que te pasa papá… ¿por qu…-sin darse cuenta había perdido el control de nuevo. –Excelsior. –Se apresuró a decir.

 

-¿Excelsior? –repitió el hombre mayor con dudas en su voz. –

 

-Excélsior: significa que usaré toda esa negatividad y la convertiré en combustible que me ayudará a encontrar un rayo de luz. –Aclaró las dudas, esa era una palabra que usaba para auto-calmarse. –Eso haré, y no es mentira. –decía decidido. –No es mentira, se necesita trabajo y eso es verdad.- finalizó mientras se iba a su recamara con los libros en mano.

 

El matrimonio Uchiha se miró entre sí sin saber como actuar ante este nuevo estilo de vida.

 

CONTINUARA…

Notas finales:

Dejen su rw, si les gusta la seguiré xd 

Bye bye


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