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Titanium por Kunay_dlz

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Notas del fanfic:

Los personajes de Kuroko no Basuke pertenecen a Tadatoshi Fujimaki.


Los personajes de Sekaiichi Hatuskoi pertenecen a Shungiku Nakamura.


La canción pertenece a sus respectivos autores.


 


Otro one-shot que salió muy extraño, el universo alterno me recuerda demasiado a uno muy conocido y les juro que no era mi intención al principio luego, bueno, luego pues no le vi problema en seguirlo. Espero que les guste.

 

 

Titanium

 

 

 

Que soy absoleto, que mi presencia no es necesaria… que no puedo jugar más el deporte que tanto amo porque no soy ‘suficiente’. Dejé de ser una herramienta para la Generación Milagrosa. Que Aoimine-kun ya no sabe recibir mis pases, que Kise-kun no necesita mi ayuda, que Midorima-kun es perfectamente capaz de robar el balón por él mismo, que Murasakibara-kun ni me recuerda en la cancha… Akashi-kun es cruel con sus palabras, pero son ciertas. Bueno, él me incitó a encontrar mi talento, él abogó por mí para hacer una prueba para la primera división… él me descubrió.

Y valla que descubrió otras cosas de mi persona. Tontamente, creí estar enamorado, Aomine-kun era como un hermano, Kise-kun un desesperante amigo, Midorima-kun muy escueto al igual que yo, Murasakibara-kun no fue más que un compañero de equipo; Akashi-kun era amable, me notó una vez y luego no me quitó su vista de encima, sus palabras eran dulces, sus miradas contenían tintes de adoración… no pude evitarlo, con él descubrí tantas cosas, con él fue muchas ‘primera vez’ y muy satisfactorias si debo mencionarlo.

Akashi-kun me dio tanto… es normal que sea él quien me lo quite de igual manera… ¿no es así?

 

You shout it out
But I can't hear a word you say
I'm talking loud not saying much

I'm criticized but all your bullets ricochet
You shoot me down, but I get up

 

Si lo pienso bien, siempre he estado encadenado a sus palabras: me dijo que llegara a ser un integrante oficial de la primera división, y lo hice; me dijo que no practicara más que mis pases, y así lo hice; me dijo que mantuviéramos en secreto nuestra relación, y así lo hice; me dijo que abandonara el equipo de básquet… que era innecesario cuando todos han desarrollado sus talentos, y es lo que voy a hacer; me dijo que no entrara a ningún otro equipo de básquet… y me dolerá en el alma, pero lo haré.

Me cambié de escuela, mi familia se iba a mudar y yo había rogado me permitieran quedarme con mi abuela… ahora ruego a mi abuela para que valla con nosotros a Londres. Ella me conoce y sabe que no me siento bien, más por mi salud mental que por ella misma, el fin de semana sube con mis padres y conmigo a un avión con destino a Londres, Londres, Londres… esa palabra se me hace tan desconocida, supongo que su país lo será de igual manera así como su gente y toda su cultura.

Como escuchando mi pensamiento, mi abuela me regala una sonrisa conciliadora.

 

I'm bulletproof nothing to lose
Fire away, fire away

 

Llego a una ciudad extraña, asisto a una academia antigua y vuelvo a ser el alumno invisible que nadie nota más que cuando les hago saber de mi presencia. Es difícil acostumbrarme a un idioma completamente diferente, algunos profesores hasta olvidan sus citas con migo para regularizarme en este sistema escolar. Prefiero lidiar con estos problemas que con los que insisten en rondar mi cabeza y que sin duda ocasionan más dolor que los presentes.

En una de las aulas que uso como salón de estudio, un chico distinguido ocupa un asiento cerca de mi asiento usual; es más bajo que yo por pocos centímetros, su cabello es un castaño no tan claro ni tan obscuro, brilla mucho y tiene una suave apariencia, no es tan corto ni tan largo aunque llega a ocultar sus ojos, la piel de sus manos y rostro es casi de porcelana, parece muy concentrado en su lectura por lo que decido no interrumpirlo o, más bien, asustarlo como a todos los demás.

Así que eras tú quien ha estado traspasando a mi salón privado” dijo una voz cansada y un tanto fría para pertenecer a alguien de su edad, sin embargo, lo que más me sorprendió era el hecho de me hablara a mí… que haya notado mi presencia. “Mi nombre es Tetsuya Kuroko” dije de lo más normal, intentando ocultar mi sorpresa y poca felicidad al ser ‘reconocido’ aun con mi baja presencia.


Ricochet, you take your aim
Fire away, fire away

 

Al parecer “Ritsu Onodera” esperaba algo más aparte de mi nombre. Más tarde me enteré que Ritsu era una especie de Lord, era influyente y tener su favor era algo que todos buscaban de él. A mi mente vino la imagen de otra persona que conocía con una situación similar, no terminó bien el que hayamos congeniado, por lo que no incité más que el compartir el salón privado pese a la tristeza que Ritsu insiste en ocultar. Pasó una semana y no intercambiamos más que un breve saludo y despedida cada que coincidíamos en ese lugar.

Un día entraron dos alumnos en busca de Ritsu, le hablaron de negocios, de fiestas u obras de teatro… querían llamar la atención del Lord. “Por favor, ¿podrían abandonar el salón? Sus voces desesperadas me distraen.” dije con mi voz monótona, claro que gritaron, se asustaron tanto que uno de ellos se desmayó y el otro se hizo en los pantalones. Ritsu los miraba con shock bien disimulado y a mí me miraba con curiosidad casi palpable. Luego que se fueran los intrusos, Ritsu inició con un interrogatorio moderadamente casual, casi tierno de su parte.


You shoot me down but I won't fall,

I am titanium

 

Luego de haber saciado un poco su curiosidad con mis respuestas escuetas, sin el normal cambio de voz para provocar énfasis en mis palabras y sin manera de saber si en verdad era real lo que le dije, me ofreció una especie de amistad con beneficios. No, no esa clase de beneficios. Yo sería una especie de compañero-guardián para él y él me permitiría usar el contenido de su salón privado y me ayudaría con mis trabajos y el idioma en general.

No era un trato justo pensé, él haría más cosas por mí que lo que yo haría por él, él aclaró que debía estar con él todo el día durante la academia para que no le acosaran los hijos de inversionistas, reporteros, enemigos y otra clase de personas con las que tiene que lidiar a diario.

Inicia mañana, verás que al término del día me pedirás ‘un aumento’” dijo en un agradable tono de broma ese chico con aura de melancolía.


You shoot me down but I won't fall
I am titanium

 

No bromeaba, ese frágil chico rodeado de fortaleza no bromeaba en absoluto. Lo acompañé durante los dos recesos, incluso mis clases cambiaron por completo para estar con él la mayoría del tiempo, este chico tiene ese aire frío, distante y a veces prepotente (para ocultar su soledad, tristeza y corazón roto) por una buena razón; a cada instante alguien se acercaba a él con segundas intenciones, incluso un saludo, si era correspondido, le seguía una repertorio de ‘consejos’, ‘ofrecimientos’ y ‘tratos’.

Mi papel era ‘saludarlos’, si no se alejaban luego del susto, debía guiar a Ritsu a otro lugar. No entendía cómo es que tantos buscaban a Ritsu, es decir, era demasiado joven, incluso Akashi-kun tenía más libertad. El joven Lord notó mi duda, y me explicó a medias que a pesar de su corta edad ya tenía el título que sus padres portaban le heredaron al haber fallecido hace un par de años, los mismos que él tenía viviendo aquí, dijo que pese a su ascendencia Japonesa sus padres habían logrado obtener un título de noble por razones que ya no me quiso decir.

Dijo que la edad no importaba, que estaba preparado y que si seguía en la academia fue por una jugada de uno de sus socios que al no haber podido ‘destronarlo’ se encargó de requerir que Rsitsu cursara los estudios correspondientes; aunque no se ve muy afectado por su ausencia en la empresa, no con un fiel representante en la Corporación Onodera. Tenía frente a mí a un chico, todavía un niño, convertido en adulto.

 

Cut me down
But it's you who has further to fall
Ghost town, haunted love

 

En realidad no sé por qué seguí ‘ayudándole’. Quizá me sentía mal por una infancia perdida entre las responsabilidades de adultos que aun no entiendo del todo. Quizá parte de su situación me recordó tanto a Akashi-kun. Quizá creí que si le ayudaba, de alguna manera, sería como ayudar a Akashi-kun y así dejar de sentirme en deuda con él. Quizá tan solo quería algo más en qué ocupar mi mente que en mi anhelo por jugar básquet.

Ritsu no sabía mis motivos ‘reales’ al igual que yo, pero sí tenía claro que no era para ‘obtener’ su favor. Aun así, cuando estuve totalmente a la par con mis compañeros de clase Ritsu me llevó con él a sus clases especiales; negocios, historia, etiqueta, política y tantas otras, dijo que entre más cerca mejor, y que con conocimiento sería invencible.

Sintiéndome en deuda una vez más, busqué la manera que mi habilidad beneficiara a otros; aprendí a desviar tanto la atención que había veces que Ritsu tampoco era notado cuando estábamos entre tanta gente; mi observación de quienes se acercaban a Ritsu evitó un intento de asesinato, cinco reporteros amarillistas y paparatsis, tres inspectores de policía, dos intentos de rapto y a varios oportunistas.


Raise your voice, sticks and stones may break my bones
I'm talking loud not saying much

 

Había ocasiones en las que salíamos a pasear por los jardines de la academia, sin tanto por lo que cuidarse, Ritsu era agradable, hablaba un poco más como él mismo y un poco menos como el adulto que debía ser. Le hable de mí, de mi antigua vida como jugador de básquet y de mis ex compañeros de equipo… dijo que era estúpido. Estúpido por creer en las últimas palabras, estúpido por lamentarme no ser suficiente  para ellos; dijo que ellos eran estúpidos por dejar que un poco de talento nublara su juicio, estúpidos por no saber lidiar con la fama ni con la excelencia en su área, dijo que Akashi-kun era aún más estúpido por creer que podría ordenarme. Quien diría que alguien con la apariencia y comportamiento de un ángel podía llegar a ser tan duro.

Continuó diciendo que mi habilidad era invaluable, dijo que la única persona que podría decir qué hacer o qué nunca intentar sería yo mismo. Dijo que aún tenía talento por explorar, dijo que si tanto amaba el básquet que no lo dejara aun no fuera tan bueno como mis ex compañeros. Se rio de mi analogía de Luz-Sombra, y luego dijo que mi trabajo era aún más importante que cualquier luz. Me pidió permanecer más tiempo a su lado, aun después de la graduación… era lo más cercano a un amigo que él podría tener.

 

I'm bulletproof nothing to lose
Fire away, fire away

 

Seguimos estudiando en una prestigiosa institución, Ritsu siempre tuvo las puertas abiertas en cualquier instituto que quisiera, yo logré entrar por el estudio extra que tuve al lado del joven Lord, haciendo caso a ‘mi amigo’ hice lo posible por entrar a su equipo de básquet; hice amigos, entrené hasta caer inconsciente, sudé tanto que Ritsu me mandaba a las duchas antes de acercarme a él, jugamos en equipo y no faltaron los malos entendidos, desarrollé nuevas técnicas y aprendía a encestar más de las veces que fallaba. Ganamos campeonatos, Ritsu siempre asistió a todos los juegos oficiales y de práctica para animarme, fue increíble volver a jugar.

Fuera de la cancha y lejos de los balones solía acompañar a Ritsu a su empresa, a su casa, le asistía en reuniones fuera de la oficina… me llegó a presentar como su asistente personal cuando había miradas desconfiadas, incluso me llegaron cheques de empleado oficial. Al enfrentarlo “Claro que eres mi empleado, me has sacado de varios aprietos, has evitado problemas y no te dejaré ir tan fácilmente” dijo “Por un momento pensé que me pagabas por ser tu amigo” bromé, “Oh, ¿Y qué si así fuera?” respondió con gracia captando mi juego “Con el trabajo extra y los peligros no te alcanzaría” expresé con la seriedad que uso en la cancha, Ritsu me lanzó el cojín más cerca de su asiento y lo lanzó directo a mi cabeza, reímos un poco y seguimos con nuestro trabajo.


Ricochet, you take your aim
Fire away, fire away

 

Fue por medio de las reuniones de negocios que volví a encontrarme con mis ex compañeros de la Generación Milagrosa: vi a Kise-kun en un trato con una agencia de publicidad que buscaba expandirse fuera de Japón y pedían ayuda Ritsu por un compatriota, Kise-kun no me vio sino hasta que terminó la firma del convenio; vi a Midorima-kun en una inspección al hotel que era cede de una Convención de médicos, él iba acompañando a su padre, me vio cuando subí con Ritsu (dueño de la cadena hotelera) al escenario, no intentó hablarme, ni yo tampoco intenté cruzar palabra con él.

En un viaje a Japón, justo al lado de una feria, vi pasar a Murasakibara-kun, no intercambiamos palabra y hasta creo que él ni me vio; al visitar el tercer estadio en el que la Corporación Onodera había invertido vimos un partido de práctica donde Aomine-kun jugó o más bien arrasó a sus contrincantes, intenté no verlo, dolía ver lo lejos que era del Aomine-kun que un día conocí. Ritsu tomó mi mano durante el resto del juego.


You shoot me down but I won't fall
I am titanium

 

Casi al final de la visita a Japón Ritsu fue solicitado para una última reunión con alguien importante, el presidente de la Corporación Akashi, y sí, el Akashi-kun de la Generación Milagrosa también estaba presente acompañando a su padre. Akashi-kun sí me vio desde el inicio, me observó con disimulado interés y cuando hubo terminado la plática importante e iniciaban las cortesías, no perdió tiempo en preguntarme cosas referentes a los negocios, cuestionando mi presencia en tan importante reunión… para su confusión le contesté todo con profesionalismo, sin dudar ni un instante y estando tan seguro que mi palabra tenía el mismo peso que Ritsu no me dejé vencer de tal manera que hasta yo mismo me sentí confundido.


You shoot me down but I won't fall
I am titanium,

 

Ritsu intervino, me presentó nuevamente como su Asistente Personal y como su hombre de confianza absoluta, reiteró a ambos Akashis que si por algún motivo no pudieran contactarse con él, yo tendría la respuesta a sus dudas. Como si de un juguete nuevo se tratara, el joven Lord no tardó en exaltar mis atributos y lo invaluable que soy no solo para su compañía sino para él de igual manera.

El Akashi-kun que fue mi compañero intentó dar a conocer ‘detalles’ que tan sólo él sabía sobre mi vida y sobre mí; tontamente trataba de demostrar su señorío sobre mí. Ritsu no se quedó atrás, lo infantil del juego ‘mi casa es más grande que la tuya’ llegó a ser tan absurdo que Akashi-kun describió mi manera de roncar ante un impasible Akashi-san, Ritsu contra atacó con los minutos exactos que le tomaba arreglar mi cabello al despertar.

 

I am titanium,

 

Akashi-kun reveló que fue él quien descubrió mi potencial, Ritsu le restregó en la cara el desecharme; Akashi-kun evocó el haber sido mi compañero de equipo y capitán, Ritsu le contó el número de victorias y reconocimientos a los que ‘guie’ al equipo de básquet de nuestro instituto, sin amenazas a nuestras espaldas si no salíamos vencedores y de la sonrisa que adornaba mi rostro durante cada juego.

 

I am titanium

 

La reunión con la compañía Akashi terminó con un pequeño contrato de prueba, un Akashi-san modestamente furioso con su primogénito, un Akashi-kun con sed de venganza, un Ritsu con una sonrisa que prometía dolor, y, yo terminé con vergüenza, tremendas ganas de asesinar e incertidumbre bien escondidos bajo mi máscara del Sexto Jugador Fantasma de la Generación Milagrosa.

Vergüenza ante Akashi-san, él no tenía que saber el número de lunares que hay en mi espalda o que suelo tocar el piano con mi abuela cuando me siento triste; ganas de asesinar a Akashi-kun por actuar como si fuera mi amo y por los secretos que salieron de su boca; y, la incertidumbre con Ritsu, ¿cómo tomar el saber todo el conocimiento que tiene sobre mí? ¿Detalles que ni yo recordaba o ponía atención?

 

Stone-hard, machine gun
Firing at the ones who run
Stone-hard, those bulletproof guns

 

Por cierto, de alguna manera (Akashi-kun tratando de marcar ‘territorio’) el equipo del instituto al que Ritsu y yo asistimos fue invitado por la embajada Japonesa a un ‘juego amistoso’ de la sección de básquet contra un equipo que fue leyenda para cierta generación en una de las escuelas más prestigiosas con un lema contundente. Al saber la noticia Ritsu rio de tal manera que jamás lo había visto, ni su representante en la compañía por lo que pude ver en su rostro, me miró y dijo que me divirtiera durante el juego al ver a mis ex compañeros.

Quizá practicaron, quizá consiguieron los mejores entrenadores, quizá planearon jugadas que pudieran derrotarnos… pero, su falta de pasión, su trabajo individual y su afán de ‘hacerme’ reaccionar les costó la derrota. No fue con un gran margen, con dos puntos ellos perdieron, no creían que fui capaz de jugar los cuatro tiempos, que pide encestar y que desarrollé nuevas técnicas con mi habilidad. Perecían realmente confundidos, casi a punto de entrar en shock, sobre todo Akashi-kun.

 

You shoot me down but I won't fall,

I am titanium

 

Tan ciegos, inmaduros y tontos, no fueron más que una luz débil condenada a la extinción, sin Tetsuya con ustedes jamás progresarían” dijo Ritsu con su actitud de Lord al entrar a la cancha luego que se anunciara al equipo vencedor, “Aunque debo agradecerles, si no fuera por lo que le hicieron, por lo herido que lo dejaron, él jamás habría llegado al lugar que mejor le sienta, a mi lado.” continuó con ese tono donde se sabe superior a todos.


You shoot me down but I won't fall,

I am titanium

 

Si no fuera por lo bien que lo conozco, por el ligero timbre de voz un poco ‘travieso’ tal vez me hubiese sentido ‘usado’. “No importa quién de ustedes crea que fue una luz necesaria para Tetsuya, siempre fue él quien les dio fuerza” continuó Ritsu, “Una sombre no puede existir sin una luz” intervino Akashi-kun “Una luz verdadera, sabe ocultarse en la misma obscuridad” decretó Ritsu.


You shoot me down but I won't fall,

I am titanium

 

Y como por arte de magia Ritsu desapareció de la vista de todos, tampoco lograron verme a mí, en medio de la confusión de la Generación Milagrosa, Ritsu y yo salimos del estadio, “’Una luz verdadera, sabe ocultarse en la misma obscuridad’ dijiste” me dirigí a Ritsu, en verdad necesitaba que me explicara un poco esa manera suya de pensar “Imagina algo como la Luna y su luz nocturna, cambiante, brillante para algunos, suficiente para iluminar todo a su paso con tal claridad que asombra, sin embargo, con la ayuda de la noche quien oculta sus ‘fallas’, quien ‘regula’ lo que se puede o no ver, quien decide si la Luz es suficiente o hacerse uno con ella, es el balance perfecto de Luz y Obscuridad o como tú lo llamas: Luz y Sombra.” explicó con tal intensidad que me robó el aliento.


You shoot me down but I won't fall,

I am titanium

Si no fuera por el conocimiento que tengo sobre las estrictas reglas bajo las que Ristu se encuentra por ser Lord… si no fuera por las expectativas que debe llenar… si no fuera por esa prometida a la que no puede dejar ni el fantasma de quien causa tristeza a su ojos verde oliva… tal vez me atrevería a soñar con otro tipo de ilusión que creí nunca poder recuperar, pero su deber con la Corona, toso su sufrimiento y trabajo duro para poder llenar su título me impiden ir más allá que ser su fiel sombra. “Quiero un aumento” fue lo único que dije ante lo que descubrí en mi interior.

 

I am titanium

 

Ritsu sonrió de medio lado, casi como si hubiera escuchado todo lo que pensé, y dijo  “Lo que desees” no pude evitar, en simples palabras, prometerle mi vida entera “Yes, my Lord”. 

 

 

Fin.

 

Notas finales:

Gracias por leer.


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