Sus manos temblaban mientras marcaba el número de su hermano en el celular que Enel le había otorgado por unos minutos, el solo pensar que luego de terminar esa llamada tendría que irse del país junto al rubio provocaba que quisiese llorar por milésima vez, pero no debía, tenía que guardar la compostura, sobre todo porque Enel estaba sentado en el sofá que se encontraba frente a él vigilándolo atentamente.
Tras unos cuantos segundos presionó la opción llamar sobre la pantalla del móvil, colocó la opción de altavoz a mandato del rubio y esperó.
-¡¿Luffy?! ¿E-Eres tú?
La voz de su hermano sonaba desesperada y a punto de quebrarse, rompiendo su corazón al instante.
-S-Sí, Ace, soy yo... ¿Cómo estás?
Sabía que no tenía mucho tiempo, pero no se le ocurría qué otra cosa decirle a su amado hermano mayor, todo lo que su cabeza le gritaba era la palabra "ayúdame" y eso lo estaba desconcertando.
-Estoy bien, pero eso no importa... ¿Cómo estás tú? ¿Por qué no respondes mis llamadas? ¿Sabes lo preocupado que he estado por ti? No abrías la puerta cuando iba a tu departamento, ni a mí ni a tus amigos, Luffy, dime qué es lo que sucede, no creo que por una ruptura amorosa te estés comportando de esta...
-Ace- Luffy tuvo que interrumpirlo al ver que la mirada de Enel se ensombrecía cada vez más- perdón por todo mi comportamiento y por preocuparte de esta forma, fui muy infantil, pero ahora estoy bien, créeme
-¿En verdad?- hubo una pausa de unos segundos- ¿En verdad lo estás?
Luffy quiso gritar, apretó fuertemente los puños para evitar hacerlo y cerró los ojos tratando de calmarse. Una sola palabra bastaba para que su hermano fuese a buscarlo y lo liberase del infierno en el que estaba, podía hacerlo, aprovechar que su mente estaba lúcida y...
-Se está haciendo tarde, mi cielo
Unos fuertes brazos rodearon su cintura y sintió los labios ajenos acariciar su cuello. El Enel cálido estaba a su lado en ese momento, aquel que le brindaba amor y protección.
"¿Quieres que te separen de él?"
"Yo..."
"¿De la única persona que te ama?"
"No... no quiero"
-¿Luffy? ¿Qué sucede?
La voz de su hermano resonó por toda la sala y tardó unos segundos en contestar.
-No sucede nada, no te preocupes- hizo una pausa y miró fijamente al rubio a su lado, el cual le sonrió y se acercó para darle un beso en la mejilla- Ace, llamaba para decirte que me iré por un tiempo
-¡¿Qué?! ¿P-Por qué? ¿A dónde? Luffy, tú no puedes...
-Soy mayor de edad, hermano- la voz de Luffy se tornó algo fría- necesito despejar mi mente, así que me iré, no sé por cuanto tiempo y no puedo decirte a dónde, solo que estaré bien y que te extrañaré
-¡No puedes irte!- Ace rompió en llanto- ¿Qué sucede contigo Luffy? Tú no eres de esta manera
-Debo irme, hermano, te quiero
-¡No! ¡Luff...!
Colgó la llamada y se giró para besar al rubio. Enel lo abrazó fuertemente y lo mimó durante unos minutos.
-Debemos irnos- dijo el rubio una vez se separaron
-Sí
El pelinegro fue hacia su habitación y tomó una gran maleta, Enel debido a su fuerza cargaba con tres más y ambos salieron del departamento rumbo al garaje del edificio.
"Escogiste lo mejor"
Luffy miró desde la entrada la sala del lugar que había sido su hogar durante varios meses y cerró la puerta lentamente.
"Sí"
...
...
No sabía cuánto tiempo llevaba corriendo sin mirar a atrás, pero poco le importaba. Las lágrimas no dejaban de brotar de sus gemas azules y el dolor que abrumaba su pecho en lugar de menguar se intensificaba cada vez más.
-¡Te odio... te odio maldito marimo!
Cuando sintió que sus piernas ya no daban más se detuvo, observó su alrededor durante unos segundos y se dio cuenta que había llegado a la zona dónde vivía Luffy.
"¿Querrá verme? N-Necesito de un amigo en este momento"
Sanji apretó sus puños y caminó hacia el edificio donde residía el pelinegro. Se gritaba internamente dejar de pensar en lo que había visto, pero todo intento era inútil, las imágenes se repetían una y otra vez en su cabeza torturándolo y evitando que dejase de llorar.
"¿Por qué, Zoro? ¿No pudiste esperar un poco más? Fuiste y te acostaste con un... ¡maldito traidor!"
El rubio divisó el edificio y estaba por ir hacia la entrada de este cuando una persona lo detuvo del brazo. Inmediatamente frunció el ceño y se giró para mirar de quién se trataba.
-Oye, hermoso ¿Por qué lloras? ¿Te perdiste o algo?
Un alto y corpulento hombre de apariencia un poco mayor le sonreía ladinamente.
"No tengo tiempo para esto"
-No- con un movimiento algo brusco liberó su brazo- discúlpeme, pero no lo conozco, así que...
-Eres toda una fiera ¿eh?- el hombre invadió su espacio personal- eso me gusta- susurró cerca de su rostro
-Oye que...
-¿Por qué no vienes conmigo?- nuevamente tomó del brazo a Sanji- Podemos divertirnos juntos, te lo aseguro
-¡Suéltame! ¡¿Quién diablos te crees que eres?!
-¡¿Quién diablos te crees tú?! A mí nadie me rechaza ¿entiendes?
Sanji trataba de zafarse del agarre contrario, pero el desconocido era demasiado fuerte y su brazo ya comenzaba a entumecerse.
-¡Suéltame, idiota!
El cocinero trataba de gritar lo más fuerte que podía, pero debían pasar de las nueve de la noche y esa zona no era muy transitada.
-¡Cállate!- el hombre inmovilizó al rubio con su cuerpo y colocó una mano sobre su boca para evitar que gritase- Debes saber que tú tienes la culpa, traté de ser amable nena, pero tú...
-¡Albert! ¿Qué haces que no estás en el auto? Dentro de unos minutos partimos.
La voz de una tercera persona se dejó oír y apenas Sanji lo vio reconoció al tipo que Zoro había fotografiado.
"Es él"
-Discúlpeme jefe, pero estoy domando a zorritas rebeldes como puede observar
Enel miró a Sanji detenidamente y sonrió con mofa.
-¿Quieres llevártelo?
-Si le parece bien
-Haz lo que quieras- el yakuza se giró- pero ya sabes lo que tienes que hacer antes, no quiero que Luffy lo vea ¿queda claro?
-Entendido, jefe
"¿Luffy?"
Al escuchar el nombre de su amigo, Sanji luchó por soltarse para ir tras el tipo que Zoro estaba investigando, pero el hombre que lo sostenía lo inmovilizó por la espalda y colocó un trapo sobre su nariz provocando que perdiese la conciencia lentamente.
Antes de que sus ojos se cerraran el rubio dejó caer su llavero esperando que eso pudiese ayudar a encontrarlo.
"Zoro... ayúdame, ayúdanos"
...
...
-¡¿Maldición?! ¿No puedes ir más rápido Tashigi?
-¡Estoy yendo lo más rápido que puedo, idiota!- gritó la de gafas- te noto muy alterado así que será mejor que te calmes ahora, eso en nada ayudará con la misión
-¡¿Cómo quieres que me calme?! ¡Mi mejor amigo está viviendo con un miembro del clan de Yakuzas más peligroso del país!
-¡Precisamente por eso! Debes recomponerte y pensar con la cabeza fría
-Tsk...
-Concuerdo con Tashigi, amigo, debes tranquilizarte- Yosaku colocó una mano sobre el hombro del peliverde
-Sí- habló esta vez Johnny- todo saldrá bien
Luego de que Zoro reconociese la comida de Sanji y dedujera el gran malentendido que se había armado con este viéndolo salir de un burdel, el peliverde decidió que por más que quisiese arreglar las cosas con su cocinero, la situación de su mejor amigo era mucho más importante en ese momento, Luffy estaba corriendo peligro y era su deber como amigo y policía ir y ayudarlo.
Apenas llegó a la comisaría junto con su amiga explicaron toda la situación y entregaron las pruebas con las que contaban al jefe de su sección. Mr. Thompson se mostró sorprendido al inicio y luego apenado por haber dudado de la intuición de uno de sus mejores hombres, pero se reivindicó accediendo a la petición del peliverde de mandar un escuadrón con 15 de los mejores policías de la división hacia el departamento de Monkey D. Luffy y atrapar a uno de los principales líderes del clan Shinto.
Zoro junto a los demás organizaron todo lo necesario lo más rápido posible y unos instantes antes de partir, el peliverde recibió la llamada de Ace, el cual llorando y muy preocupado por su hermano menor le dijo que estaba por ir hacia el departamento del enfermero ya que por teléfono este le había avisado que se iría de viaje. Por supuesto, el peliverde inmediatamente le explicó que era peligroso que fuese al edificio de su mejor amigo y que él iría hacia allí a ayudarlo, que confiase en que Luffy estaría con él pronto y que lo mantendría informado. Al principio le fue difícil convencer a Ace, pero tras unos cuantos minutos y con la ayuda de Marco, al cual Zoro podía escuchar a través del teléfono confortando a su esposo, terminó la llamada no sin antes prometerle al pecoso que Luffy estaría sano y salvo.
-El edificio se encuentra doblando esta esquina ¡Todos preparados!- gritó Zoro por el intercomunicador
-¡Sí!- respondieron los encargados de las dos patrullas que iban detrás de la del peliverde
Los vehículos se detuvieron un poco antes de llegar al edificio. Los 15 agentes bajaron de estos y 6 de ellos se dirigieron a resguardar las tres entradas que presentaba el inmueble, dejando al resto de ellos como los encargados de ingresar hacia el departamento de Luffy.
-El jefe de la división comunicó al dueño y seguridad del edificio de la misión justo después de que partimos, todos los civiles de las plantas anteriores están siendo evacuados ahora, los que se encuentran en los pisos superiores han sido exhortados de permanecer dentro de sus residencias por seguridad
-Gracias por el informe, Yosaku- respondió el peliverde- Bien, chicos, ya es hora de...- Zoro miró hacia el suelo al sentir que había pisado algo esponjoso- esto es...- levantó el objeto y observó un llavero de peluche color verde- no... no puede ser
-¿Qué sucede, Zoro?
Tashigi observó el cuerpo de su mejor amigo comenzar a temblar y rápidamente se acercó a él para ver que ocurría.
-E-Esto...- Zoro levantó el llavero para que su amiga detective pudiese verlo- Sanji tiene uno igual
-Puede ser una coincidencia, Zoro, no necesariamente signifiqu...
-"Mi marimo"- Zoro apretó los puños fuertemente y su rostro se ensombreció- eso es lo que Sanji bordó sobre este tonto peluche una vez lo compro. ¡Juro que si ese maldito le hace algo yo lo...!
De pronto un fuerte golpe se dejó oír y el policía solo pudo colocar una mano en su mejilla. Hace mucho tiempo que su amiga no lo golpeaba para hacerlo entrar en razón y se sintió patético.
-¿Te calmaste?- habló la peliazul- No sabemos si Sanji está o no en este momento con Luffy, pero si ese fuera el caso con más razón debes tener la cabeza fría para poder ayudarlos. Todos iremos a por ese maldito del clan Shinto. ¡¿Quedó claro, agente?!
-Tsk... Sí- Zoro guardó el llavero en su bolsillo- andando
...
...
-Jefe, tenemos un problema
-¿Qué sucede?
-Estamos rodeados por la policía, todas las entradas se encuentran bloqueadas
-Tsk...- Enel se quedó en silencio unos segundos- no todas, Albert- sonrió- no todas
...
...
Se encontraba exhausto, aquel día había sido muy pesado y solo quería llegar a su casa y descansar. Era cierto que se había inmerso en el trabajo para tratar de evitar pensar en lo idiota que había sido y el cuanto se merecía haber perdido a la única persona que había amado en la vida, pero el hecho de casi desmayarse en pleno hospital era ya un extremo. Se estaba sobre esforzando y eso no era nada bueno.
"Escuchar el regaño de la Dra. Robin no es nada agradable"
Cuando estaba por llegar a su edificio, un policía hizo una señal para que parase su auto.
-Disculpe, pero no puede avanzar más, el edificio que viene está siendo evacuado
-¿Evacuado? ¿Qué sucede?
-Solo manténgase aquí por su seguridad, señor
"¿Por qué tantos policías? Acaso... ¡No! ¡Luffy-ya!"
Trafalgar bajó del auto lo más calmadamente que pudo y en menos de lo que podía recordar ya se encontraba corriendo dejando detrás al policía luego de golpearlo en el estómago.
"¡Tienes que estar bien! Si te sucede algo yo... ¡Maldición!"
...
...
Rápidamente subía las escaleras hacia el piso dónde se encontraba el departamento de su mejor amigo. Su corazón latía fuertemente y una fuerte ansiedad lo invadía debido al miedo que sentía no solo por Luffy, sino tambien por el amor de su vida.
"Debo calmarme, él está bien, tiene que estar bien"
-Estamos aquí ¿No se reportó movimiento en ninguna de las entradas?- preguntó Tashigi a través del intercomunicador
-No, agente- respondieron al unísono los que se encontraban en el primer piso
-Entendido, comienza la operación en tres- Tashigi miró a Zoro- dos, uno...
Rompieron la puerta y entraron al departamento en fila, cuidando cada uno la espalda del otro.
-¡La policía! ¡Todo el mundo al suelo!
Los agentes comenzaron a inspeccionar las habitaciones, pero al no encontrar nada comenzaron a desconcertarse.
-No pudo salir de aquí antes, la seguridad del edificio cerró automáticamente todas las entradas y no reportó ningún vehículo intentar dejar la residencia desde que el jefe se comunicó con el dueño del lugar para explicar la situación
-Exactamente, además Ace te llamó justo antes de partir, indicando que Luffy aún se encontraba aquí- habló Yosaku dirigiéndose a su amigo
-Algo no está bien- Zoro apretó los puños- las tres entradas están resguardadas ¿cómo...?- calló por unos segundos- ¡maldito!
De un momento a otro Zoro comenzó a correr escaleras arriba ya que los ascensores habían sido desactivados por seguridad.
-¡¿Zoro?! ¡Qué sucede!- gritó Johnny
-Tres entradas... ¡Entiendo! Todo el mundo siga a Zoro, yo debo ocuparme de algo- habló la peliazul
-¡Andando!- dijo Yosaku comenzando a correr tras el peliverde
...
...
-¿Está seguro que es bueno dormir al Señor Luffy, jefe?
-Sí, no quiero tener ningún contratiempo, Albert- el rubio suspiró tirando al suelo el cigarro que llevaba fumando- ¿en cuento tiempo estará aquí el maldito helicóptero?
-Un minuto señor
-Más le vale
...
...
Corría y corría lo más que sus piernas se lo permitían. Se sentía un estúpido al no haberse dado cuenta antes del plan de ese malnacido, pero a esa alturas nada ganaba recriminándose, solo debía enfocarse en seguir corriendo y llegar pronto a la azotea del edificio y así salvarlos, no podía permitir que aquel yakuza se los llevase.
"Sanji, Luffy, les prometo que los salvaré, lo juro"
De pronto escuchó el ruido característico que generaba un helicóptero y se le heló la sangre. ¡No! ¡¿Por qué ese maldito edificio debía tener tantos pisos?!
-¡Maldición!
El ruido se hacía cada vez más fuerte y eso significaba dos cosas, que aquel yakuza malnacido estaba a punto de huir y que él se encontraba muy cerca de llegar a la azotea.
-Ya casi...
...
...
-¡¿Qué hace aquí, señor?! El edificio ha sido evacuado, por favor retírese
-¡Déjeme pasar!- gritó exasperado Law- ¡La persona que amo puede estar todavía dentro, ¿comprende?!
-No puedo hacer eso, es por su seguridad
Trafalgar tomó del cuello y miró con una expresión de odio y rabia al agente.
-¡Escuche, sino me deja entrar juro que...!- el sonido de un helicóptero lo hizo callar por unos segundos- ¿Pero qué rayos...?
...
...
-¡No tenemos tiempo, jefe! ¡Suba deprisa!- gritó el conductor del helicóptero
Con algo de dificultad Albert y Enel lograron acomodar a Sanji y Luffy en la aeronave debido a que esta se encontraba suspendida y no había descendido en la azotea para facilitar así la partida.
-Entre, jefe
Albert ayudó al rubio a adentrarse al vehículo aéreo y justo cuando estaba por entrar también el ruido de la puerta que daba hacia la azotea resonó en toda la estancia con brusquedad.
-¡Deténgase ahí!- Zoro les apunto con su arma- No intentes escapar o juro que...
-Si disparas lo único que lograrás es que mate a este civil ¿eso quieres, policía?- Enel sacó su arma y apuntó con ella la cabeza de Sanji
-Si le haces algo te mataré, maldito
-¡Oh! ¿Entonces lo conoces?- el rubio miró a su subordinado- parece que tu zorrita tenía dueño, Albert
-¡Repite eso!- Zoro quitó el seguro de su arma mientras apuntaba a Enel
-Sujétate fuerte Albert, partimos ahora
-¿Está seguro que no disparará?- preguntó el que se encontraba con medio cuerpo fuera del helicóptero a su jefe
Enel miró a Zoro y sonrió.
-No, no se atreverá
Las manos de Zoro temblaban mientras observaba con impotencia como se alejaba el helicóptero llevándose al amor de su vida y su mejor amigo, dejándolos así a merced de aquel miserable mafioso.
-Sanji... Luffy, perdónenme
Comenzó a llover de pronto. Las gotas de lluvia fueron poco a poco empapando el lugar dándole a la escena un panorama aún más deprimente.
La vista del agente comenzó a nublarse debido a las lágrimas que comenzaron a brotar de sus ojos, cayó de rodillas al suelo sin fuerza, tirando en el acto su arma hacia un lado.
-Perdónenme
Tomó con ambas manos su rostro y no trató de contener sus sollozos, en ese instante por más que intentase ser fuerte el resultado sería el mismo.
-¡Zoro! -los agentes llegaron a la azotea y se acercaron a él- lo sentimos- fue lo único que dijeron al observar cómo se encontraba su amigo
El helicóptero se alejaba cada vez más de la vista, pero ninguno de los presentes podía hacer más. El yakuza del clan Shinto tenía rehenes y si disparaban podían arriesgarse a que estos salieran heridos.
-Lo mataré... juro que lo mataré
-Ten por seguro que lo atraparemos, amigo- dijo Yosaku mientras posaba una mano sobre el hombro del peliverde
...
...
Por el rostro de su amigo, Tashigi adivinó cual había sido el desenlace en la azotea del edificio. Se acercó a Zoro lentamente y colocó una mano en su hombro en señal de apoyo y esperaba que lo que había hecho con ayuda de la portátil que cargaba para cualquier emergencia a pesar de no pertenecer a la división de logística pudiese reconfortarlo.
-Puedo imaginar cómo debes estar sintiéndote ahora, Zoro, pero escucha atentamente- la peliazul esperó a que el otro agente dejase de mirar hacia el suelo para fijar sus ojos en ella y continuó- no subí con los demás porque debido a tus palabras deduje lo que aquel maldito había planeado, así que con ayuda de mi portátil di aviso al equipo de rastreo del aeropuerto más cercano y por mi cuenta también hice lo mío, quizá no pudimos detenerlo aquí, pero ten por seguro que sabremos donde ese helicóptero aterrizará- sonrió- lo atraparemos
Zoro asintió y dejó mostrar una pequeña sonrisa en señal de agradecimiento. No tenía tiempo para estar deprimido ni para culparse por lo sucedido, Enel podía haber ganado esa batalla, pero la guerra aún no finalizaba, él rescataría a Sanji y Luffy aún si eso le costaba la vida.
...
...
Tras haber golpeado a los policías que intentaron detenerlo de camino al edificio y al que resguardaba una de las entradas de este, Law fue interceptado por dos agentes más, los cuales lo redujeron y esposaron por "resistencia a la autoridad.
Ahora, el doctor se encontraba imposibilitado de moverse y a pesar de sus reclamos y el pedido de alguna explicación acerca de lo que estaba sucediendo, ninguno de los agentes le dirigía la palabra.
"Maldición... aquel helicóptero acaba de marcharse ¿Por qué vendría uno hasta aquí? Necesito saber lo que está sucediendo. Necesito saber si Luffy está bien"
Justo cuando estaba dispuesto a volver a gritar y exigir que lo liberasen, divisó al amigo del Luffy, Zoro, caminar hasta la entrada del lugar acompañado de varios agentes.
"Si él está aquí, significa que..."
-Tú ¿Por qué estas esposado?
-¡Zoro-ya! ¡¿Qué sucede?! ¡¿Luffy está bien?!
Zoro apretó los puños y se quedó en silencio. No podía decirle que había dejado que Enel se lo llevara.
-Golpeó a dos policías para abrirse camino hacia el interior del edificio, Zoro, por eso nos vimos en la necesidad de esposarlo
-Está bien, yo me encargo de él, es un conocido
-Como digas
Law se quedó callado y apretó los puños tratando de negar lo que claramente, la expresión del peliverde le decía.
"No, esto tiene que ser una broma, sí, es eso, solo una broma"
Una vez libre, Law se acercó a Roronoa y esperó a que el otro comenzase a hablar, tenía que calmarse y esperar por la explicación que el peliverde seguramente tenía para él.
-Es mi culpa- comenzó Zoro mirando fijamente a Law- él... se los llevó y no pude hacer nada para impedirlo"
-¿Qué?- Trafalgar sintió como el mundo se le vino encima en tan solo unos segundos- ¡¿Pero qué dices?! ¿Quién se lo llevo?- Tomó el cuello de la chaqueta de Zoro bruscamente- ¡Dime que es una maldita broma, Zoro!
Los demás policías hicieron el amago de acercarse hacia ellos, pero Zoro les indicó con gestos que no lo hicieran, él manejaría la situación.
-Me gustaría que fuese así, Law, pero es verdad- los ojos de Zoro mostraban tanta culpabilidad y arrepentimiento que Trafalgar lo soltó y tomó con ambas manos su cabeza, presionando sus sienes
-¿Cómo? Y... ¿Fue Enel? Él resultó ser...
-Sí, hace unas horas descubrí, gracias a un contacto que trabaja en un burdel, que Enel era miembro del clan Shinto; salí de allí junto a otro agente rumbo hacia la comisaria para informar de nuestro hallazgo a nuestro jefe de sección, pero antes de partir encontré unas botellas de sake y comida en el suelo, a simple vista pude adivinar que pertenecía a Sanji y que seguramente viéndome salir de aquel lugar habría pensado lo peor, pero en ese momento solo pensaba en que Luffy corría peligro, así que dejé para después el explicarle las cosas al cocinero- hizo una pausa- Una vez en la comisaría, informé todo y nos preparamos para la misión. Antes de partir Ace me llamó diciendo que Luffy le había comunicado por teléfono que se iría de viaje por no sabía cuánto y que a pesar de sus intentos por hacerlo entrar en razón, Luffy no desistió de su decisión, así fue como nos apresuramos al saber que Enel quería llevárselo.
-Maldito...
-Al llegar encontré por casualidad el llavero de mi novio y- Zoro se tomó unos segundos para calmarse- y supe que Sanji estaba con Luffy, obviamente para contarle lo hijo de puta que era por ir a un burdel estando con él, todo es mi culpa ¡maldición!
-Entonces aquel helicóptero- Law ató cabos y comprendió el desenlace- Enel se los llevó de esa forma adivinando que no tendría escapatoria por ninguna de las entradas del edificio
-Exactamente, y a pesar que deduje lo que planeaba y llegué antes que se fuera, Luffy y Sanji ya estaban dentro y se encontrabas dormidos, no podía disparar porque si llegaba a herirlos no podría perdonármelo. Si hubiese llegado antes quizá ellos... todo es mi culpa
-No lo es- Law suspiró- todo lo contrario, si no hubieses descubierto que Enel es un yakuza, en este momento solo discutiríamos el "Luffy se fue del país con su novio", gracias a ti, podemos dedicarnos día y noche a buscarlo, porque desde ahora te lo digo, yo ayudaré a buscarlo, Zoro, Luffy es la persona que amo y no me quedaré con los brazos cruzados, sé que puedes entenderme por qué Sanji se encuentra en la misma situación y créeme que lo lamento mucho- Law no debía desesperase, sabía que no ayudaría en nada hacerlo y solo lo hundiría más de lo que ya estaba desde que terminó su relación con el pequeño pelinegro, así que se llenó de positivismo y alejó todos los pensamientos malos de sí. Encontrarían a Luffy, sí, no cabía duda de ello.
-Dejaré que me ayudes, pero a la hora de la intervención debes prometer que dejarás que la policía haga su trabajo, un civil inexperto no sería de mucha ayuda en ese caso
-Está bien, pero me mantendré cerca ya que un doctor para tratar a los heridos si es de ayuda ¿cierto?
-Sí- respondió Zoro algo ya más calmado
-Bien
El policía comenzó a caminar rumbo a una de las patrullas con Law siguiéndolo- iremos a la comisaría y allí te explicaré cual será nuestro siguiente movimiento, no podemos permitirnos dormir
-No podría aún si quisiera
-Por cierto, Law- habló Zoro mientras abría la puerta del piloto de uno de los vehículos que habían llegado como refuerzos hacía poco- debemos prepararnos porque Ace, el hermano mayor de Luffy, está esperándome en la comisaría
-¿Prepararnos?- preguntó el doctor algo desconcertado
-Yo por obvias razones y tú- el agente encendió la camioneta una vez Law se encontraba sentado al lado- por ser el hijo de puta que engañó a su hermano
Trafalgar suspiró y abrochó el cinturón de seguridad en silencio. Sí, Zoro tenía razón, debía prepararse.
"Pronto nos veremos nuevamente, estoy seguro de ello, Luffy"
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El sol se había puesto hace poco más de una hora. Las luces de los faroles iluminaban la calle y el extenso parque que se encontraba frente al edificio dónde Killer acudía a veces a trabajar, ya que el rubio, al ser un escritor, generalmente se quedaba en casa creando sus famosas obras maestras.
Kid había tenido que esperar a que la agenda de Killer le indicase que tenía que asistir a la editorial para llevar a cabo lo que tenía planeado. No había sido nada fácil convencer a la editora de su mejor amigo para que le diese aquella información, pero luego de un "tengo planeado decirle cuánto lo amo" la mujer, que intuía no era mucho mayor que él por el tono de su voz al teléfono, suspiró y con un tono divertido le dijo la agenda de la semana de Killer.
"¿Es normal que esté temblando del solo pensar en que pronto podré escuchar tu voz?"
Exhaló el aire que había retenido en sus pulmones más tiempo del necesario por enésima vez y estaba a punto de sacar un cigarrillo, para calmar la ansiedad que sentía de estar esperando allí por más de tres horas a la persona que amaba, cuando observó a lo lejos las puertas transparentes del edificio abrirse y de ellas salir a un grupo de personas.
La larga cabellera rubia de Killer era inconfundible ante sus ojos, al igual que la característica máscara que siempre llevaba para cubrir su rostro. Cómo deseaba Kid el poder observar el rostro del escritor, desde hace muchos años había deseado poder apreciarlo en su totalidad, pero respetaba el hecho que su amigo no se sintiese cómodo con eso, esperaba algún día él le permitiese acariciar su mejilla y besar su frente.
"Pero por ahora, solo quiero que me perdones"
Con mucha determinación, el pelirrojo se acercó hacia el grupo de personas, la gran mayoría trabajadores de oficina por el uniforme que usaban, y rogó internamente porque Killer no lo ignorase y le permitiese hablar antes de mandarlo a la mierda.
-Killer
El aludido se tensó de solo escuchar la voz de la persona de quien no había dejado de pensar durante las dos semanas posteriores a su pelea. Había estado absorto conversando con los editores y secretarios de la editorial que no se había percatado de la gran figura acercándose hacia él, su máscara tampoco lo ayudaba.
-K-Kid
-Yo...- miró a los tres hombres y una mujer que acompañaban al rubio mirarlo con intriga- Buenas noches- los saludó, cortésmente- vine para hablar contigo- se dirigió nuevamente al rubio- ¿me escucharías?
Siendo consiente del cómo los demás los miraban y el tono tan lastimero de implorante de Kid, Killer asintió y tras despedirse amablemente de sus compañeros, caminó junto a Kid hacia el lugar dónde este había aparcado su carro.
-Yo...- comenzó el rubio una vez estuvieron al lado del vehículo- sé que acepté hablar contigo, pero...
-¿Confías en mí?- el pelirrojo tomó una de las manos de su amigo
Killer lo observó inmóvil por unos segundos y sonrió tristemente, a pesar que el otro no pudiese ver su gesto debido a su máscara.
-Sí, a pesar de todo nunca podría desconfiar de ti
-Entonces vamos- Kid abrió la puerta del copiloto y sonrió- te prometo que hablaremos una vez lleguemos allí
-¿Allí? ¿Dónde?
Kid se mantuvo en silencio unos segundos y luego se dirigió a abrir la otra puerta delantera de su auto.
-Al lugar dónde todo comenzó
...
...
El viaje no duró más de veinte minutos. Durante todo el trayecto ambos permanecieron en silencio y no era para menos, todo lo que había sucedido la última vez que se vieron, las palabras hirientes, los reclamos, todo aún estaba fresco y necesitaban una larga conversación si querían que su relación volviese a ser como era.
"Te extraño tanto, idiota "
-Sígueme por favor
Fue todo lo que dijo Kid antes de salir del auto y caminar lentamente esperando que Killer estuviese tras él.
A medida que caminaban alrededor del lugar, el rubio fue reconociendo donde se encontraban.
"Esto..."
Una gran estructura se dejaba observar en las sombras y Killer juró que pudo oír el sonido de la campana indicando que el horario de receso había terminado. En esa época, todos los estudiantes emitían sonidos de desilusión al saber que la hora del juego había acabado y los profesores regalaban a uno que otro que intentaba escabullirse por el gran terreno boscoso y llenos de campos de deporte que rodeaban la escuela.
-La secundaria- detuvo su andar- ¿Por qué...
-Aquel día lo recuerdo muy bien ¿sabes? –Kid se giró y observó fijamente al rubio- estaba algo frustrado porque ningún chico era capaz de ganarme en el básquet y deseaba que hubiese alguien que me obligase a poner todo mi esfuerzo, que me hiciese sufrir para ganar- el pelirrojo dio unos cuantos pasos y quedó muy cerca de su acompañante- fue entonces cuando sentí una mirada sobre mí, al principio no le tomé mucha importancia, porque bueno, muchas personas antes se habían quedado observando cuando jugábamos, pero a medida que pasaba el tiempo la mirada se hacía más intensa y me puse un poco nervioso, lo admito- sonrió- debido a eso me decidí y me giré para ver de quién se trataba. No esperé encontrar a un lindo niño rubio detrás de las mallas, por lo que me acerqué y entable conversación contigo, me agradaste desde el primer momento, Killer.
Su nombre dicho con aquel tono tan melancólico lo hizo temblar y maldijo internamente el que Kid se hubiese percatado de eso, ya que el pelirrojo tomó sus manos entre las suyas y las apretó suavemente.
-En esta secundaria comenzó nuestra amistad, aquí te conocí y nos hicimos los mejores amigos, compartimos momentos muy hermosos y divertidos, éramos unos niños muy traviesos y sé que todo se debió a mí, tú solo me seguías a donde fuese.
El rubio no pudo evitar sonreir ante lo dicho por Kid, de pronto los recuerdos de los profesores persiguiéndolos y de sus mamás regañándolos llegó a su mente y la nostalgia e apoderó por completo de su ser.
"Qué época más perfecta"
-Cuando entramos a la preparatoria conocimos a Trafalgar, Apoo y Hawking y fue así como nuestra banda estuvo completa. Quiero mucho a esos desgraciados ¿sabes?, hemos pasado muchas cosas juntos, son más que familia para mí- los ojos de Kid brillaban y el reflejo de la luna en ellos los hacía ver incuso más hermosos de lo que eran- sin embargo, tú...- se mantuvo en silencio unos segundos y Killer observó cómo su rostro fue tornándose carmín- tú siempre has sido la excepción, Killer. Tenías la etiqueta de mi mejor amigo, de mi hermano, pero en el fondo eras mucho más que eso para mí y no lo sabía- suspiró y apretó las manos de Killer nuevamente- fue muy idiota para no darme cuenta. Tuvieron que pasar tantas cosas- soltó una de las manos del rubio y la llevó hacia el lado del rostro de este, acariciando sobre su oreja que era parte de lo que la máscara no cubría- tuve que ser un imbécil y leer lo que no debía, tuve que dejar de verte y frustrarme porque no respondías mis llamadas, tuve que ir a verte porque no soportaba un día más sin escuchar tu voz...- para el entonces el rostro de Killer ya se encontraba empapado, daba gracias a que la máscara lo cubría, pero si Kid le preguntaba algo estaba seguro no podría evitar que debido al temblor y sonido de su voz, este adivinase que estaba llorando- y comportarme peor que un imbécil, fui un troglodita que dijo todas esas barbaridades y estupideces porque... estaba tan celoso. Verte con aquel sujeto me enloqueció, Killer, no tenía ningún derecho de tratarte de esa manera y lo lamento tanto, perdóname por favor- continuó acariciando los dorados cabellos rubios del escritor
-Está bien- Killer posó su mano sobre la del pelirrojo- te disculpo, Kid, no quiero que estemos enojados porque me hiere mucho estar lejos de ti, eres mi mejor amigo y también me gustaría que todo fuese como antes
-Gracias por perdonarme- Kid sonrió- Sin embargo yo... aún no he dicho todo lo que tenía planeado esta noche
-¿Qué?- completamente confundido, Killer observó como el pelirrojo llevaba sus manos hacia su boca y besaba el dorso de estas con sus labios. Se sonrojó al instante y esperó impaciente por lo que fuese que Kid fuera a decir
-Le pedí ayuda Law cuando no contestabas mis llamadas y también luego de lo que sucedió hace dos semanas- hizo una pausa- Me gané un buen puñetazo de su parte- sonrió- y gracias a la forma directa en la que dice las cosas, me hizo darme cuenta que...- entrelazó sus dedos con los contrarios- que todo este tiempo, fui el más grande rey de los idiotas por no darme cuenta de cuán profundo era el amor que sentía por ti
No sabía cómo debía reaccionar antes las palabras de Kid. Nunca, ni en sus mejores sueños, hubiese creído que algún día la persona de la cual estaba completamente enamorado correspondería sus sentimientos. ¿En qué mundo paralelo se encontraba?
-Te amo, Killer, el simple hecho de pensar en ti me aprieta el pecho y no me deja respirar, es... asfixiante, sofocante y... moriría por el simple de hecho de sentir esa sensación una y otra vez solo por el hecho de que me es provocada por ti- las mejillas de Kid se encontraban muy rojas para ese entonces- sé que te hice sufrir, que no me merezco que me des otra oportunidad, pero estoy aquí ahora pidiéndotela porque no puedo no hacerlo, me es imposible renunciar a ti sin luchar
-Kid...
-Killer yo...
-No, no puedo
Las palabras de Killer se sintieron como dagas y su respiración se detuvo al instante. Sí, sabía que se lo merecía, pero eso no hacía que doliera menos.
-Eso significa que al final si fui capaz de lograr que me dejaras de amar ¿cierto?
-No es eso, yo...- el rubio se soltó del agarre de Kid y apretó sus labios debajo de la máscara- n-no he dejado de amarte, ni un solo segundo
Kid sintió su corazón volver a latir y se apresuró a hablar.
-Entonces ¿por qué? Yo te amo, si me das una oportunidad...
-¿Cómo puedes amar a alguien de quien no has visto el rostro durante tantos años?- Killer apretó sus manos en forma de puños- créeme que te decepcionarías profundamente si supieras como soy en realidad y yo... no quiero, no podría soportar tu mirada llena de decepción y de asco cuando...
-Killer- interrumpió Kid mientras tomaba nuevamente las manos del rubio entre las suyas- yo te amo, no me importa como sea tu rostro, si tu no quieres mostrármelo respetaré tu decisión hasta el día en que decidas contarme lo que sucedió aquel verano del cual regresaste con esta máscara.
-Pero Kid...
-Me enamoré de ti como persona, de tus sentimientos, del sonido de tu voz mientras me regañas, del sonido de tu risa, del color de tus ojos, cosas abstractas que nunca podrían opacarse con nada, ¿entiendes?
Killer se soltó del agarre y lentamente llevó sus manos hacia su rostro, retirando la máscara en segundos que parecieron eternos para ambos. Las únicas personas que la habían visto sin ella habían sido sus padres y los doctores que lo operaron, nadie más; el que la persona que amaba estuviese a punto de verlo así, lo hacía querer desistir y salir corriendo de allí sin mirar atrás, pero no podía hacerlo, debía ser valiente y tener coraje, por él y por el amor que sentía hacia Kid.
El amor es una maravillosa flor, pero es necesario tener el valor de ir a buscarla al borde de un horrible precipicio*.
La máscara cayó al suelo en un sonido sordo que pareció escucharse por todo el lugar. Kid observó detenidamente el rostro de Killer y se quedó completamente inmóvil. ¿Cómo podía ser?
-T-Te desagrado ¿cierto?
Sin decir ni una palabra, el pelirrojo se acercó a Killer y tomándolo de los hombros depositó un beso sobre el puente de su nariz, justo sobre la delgada cicatriz que traspasaba esta.
-No vuelvas a siquiera pensar algo como eso- apoyó su frente contra la contraria y observó fijamente los preciosos ojos azules del rubio- prométemelo
-Entonces- sus ojos se volvieron vidriosos- ¿n-no te desagrado?
-Por supuesto que no- Kid acunó las mejillas de Killer entre sus manos- eres la persona más hermosa que he visto en mi vida
-No tienes que mentirme para hacerme sentir mejor
-No te estoy mintiendo- Kid acarició con su pulgar los rojos labios de Killer y suspiró- eres hermoso y lo único que quiero en este momento es besarte hasta que me ruegues por dejarte respirar de nuevo, quiero saborear cada rincón de tu boca y jugar con tu lengua hasta que no pueda recordar quien soy
Las mejillas de Killer se colorearon intensamente y desvió la mirada de los ojos tan intensos de Kid. Nunca nadie le había dicho algo tan... tan erótico y a la vez romántico.
Rozando su nariz con la contraria, el pelirrojo obligó a que Killer lo mirase nuevamente.
-¿Puedo?- fue lo único que salió de sus labios como un susurro
Killer solo asintió sumamente avergonzado y lo próximo que sintió fueron los labios de Kid sobre los suyos tomándolos de la forma más perfecta posible, con amor, pasión, anhelo... tantas emociones mezcladas que lo hacían perder el sentido de la realidad... del espacio y tiempo.
Tal como Kid le había anunciado, su beso le dificultaba el respirar, sentía la lengua de Kid saborear cada rincón de su cavidad de forma ansiosa y llena de afecto, sus manos apretar su cintura y acercarlo a su cuerpo como si quisiese que se fundieran allí mismo. Él, no tenía ningún tipo experiencia, pero, trató como pudo de seguirle el ritmo al pelirrojo hasta que ya no pudo más y por la falta de oxígeno se vio obligado a separarse.
-K-Kid...
-Ese fue tu primer beso- sonrió con ternura- y no trates de negarlo, lo pude sentir
Completamente sonrojado el rubio escondió su rostro en el cuello del pelirrojo.
-Cállate
-Tan lindo- Kid se removió un poco y del bolsillo de su chaqueta sacó una cajita pequeña de color azul marino
-Eso...- Killer se reincorporó mirando lo que el pelirrojo tenía en sus manos
-No sabía que pasaría esta noche, pero si era un maldito afortunado sería capaz de mostrártelos- abrió la cajita y se dejaron observar dos aretes colgantes negros con bordes plateados- cuando los vi no pude dejar de pensar en ti, Killer- la mirada de Kid era muy intensa, el rubio sentía que podía ver a través de él, cada rincón de su alma- eres la persona más importante y especial de mi vida, te amo demasiado y me harías el hombre más feliz si aceptaras ser mi novio
Las lágrimas corrían por sus mejillas sin que pudiese hacer nada por pararlas y no podía culparse, se sentía la persona más feliz del mundo en ese momento.
-Sí, sí, mil veces sí- se abalanzó contra el pelirrojo y lo abrazó fuertemente- te amo, te amo, Kid
-Gracias por aceptarme- Kid devolvió el abrazo y besó el lado de la cabeza del rubio- yo tambien te amo
Tras unos segundos más de permanecerá abrazados, Kid se separó lentamente de su ahora pareja y delicadamente recogió uno de sus mechones de cabello para colocarle el arete.
-Se ve perfecto en ti
-Gracias- Killer tomó el otro arete y se lo colocó a Kid- combina muy bien con tu estilo, tan guapo
-Oh... ¿piensas que soy guapo?- Kid se acercó y tomó de la cintura al rubio, apresándolo contra su cuerpo
-mmm... sí, pero no más que Law, él es más guapo- sonrió divertido Killer
-¿En serio?- Kid rosó sus labios contra los contrarios- ¿o lo dices solo porque quieres ponerme celoso? Ya que si es así, déjame decirte que...- juntó sus labios con los de Killer en un beso profundo y rápido- lo conseguiste
-jaja- Killer rio y acarició la mejilla del pelirrojo- tú eres la persona más hermosa que he visto en mi vida
Al verse citado por su novio, Kid sonrió enternecido y lo abrazó fuertemente. Sí, era el hombre más afortunado del mundo, de este y de todos los que existiesen.
...
...
No era lo más común dar ese gran paso el mismo día en que dos personas se declaran su amor y se vuelven pareja. Siempre se dice que es mejor esperar ya que se debe conocer mejor a la otra persona para estar seguro antes de entregarse por completo; sin embargo, en ocasiones no se puede luchar contra esa fuerza de atracción, aquella que te arrastra contra la otra persona y te hace perder la razón.
Kid y Killer no eran convencionales y por eso apenas llegaron al apartamento del rubio, se abalanzaron el uno contra el otro como si no existiese nada más, como si en el universo todo dejase de tener significado excepto ellos dos.
-K-Kid...
-...- tenerlo acostado completamente desnudo debajo de él todavía se sentía tan surreal, tan etéreo, que Kid tenía miedo de parpadear y que al abrir los ojos Killer desapareciese de su lado- confía en mí- besó su frente con ternura- no te haré daño, ya no más
Killer asintió, besó castamente el brazo de Kid que estaba apoyado sobre el lado derecho de su cabeza y se entregó completamente.
Kid acarició sus labios y su cuerpo de la forma más tierna posible. Sabía por lo que antiguos ligues del pelirrojo que él solía ser muy agresivo en la cama, pero al darse cuenta lo diferente que Kid lo estaba tratando, se sintió cálido y enamorado un millón de veces más. Sí, él era especial.
-nngh... Kid
El sentir su lengua en uno de sus pezones lo estaba llevando a la gloria. Se sentía muy caliente, su miembro estaba goteando de lo excitado que se encontraba y no sabía qué hacer, no sabía si debía pedir más o simplemente disfrutar, no sabía si debía armarse de valor y tocar a Kid o esperar a que él se lo pidiese... no sabía nada y se estaba volviendo loco pensando
-¿Hay algo que quieras decirme, hermoso?- preguntó Kid dejando libre el pezón izquierdo del rubio que hasta hace unos segundos se encontraba lamiendo y succionando
-Yo...- su mirada vidriosa y respiración entrecortada casi provocaron que Kid se viniese en ese instante ¿cómo podía ser tan exquisitamente erótico?- ¿p-puedo tocarte?
Kid se sintió morir y revivir al mismo tiempo. ¿Qué si podía tocarlo? Maldición. Por supuesto que sí.
-Puedes hacer lo que tú quieras- se acercó y se apoderó de los labios a los que se había vuelto adicto - soy completamente tuyo
Killer se sonrojó aún más si era posible y de forma lenta llevó su mano hacia el gran bulto dentro del bóxer de su amante.
-E-Es tan grande
-Maldita sea- Kid apoyó su frente contra el pecho del rubio y respiró agitadamente- no vuelvas a decir algo tan sexy o yo... no podré aguantar
Su sesión de amor duró bastante tiempo. Kid acarició los muslos del rubio con delicadeza, hundió so rostro en ellos y tomó el miembro de Killer en su boca, dándole todo el placer que le fue posible. Lo hizo venirse en su cavidad y mientras él se recuperaba del placentero clímax introdujo uno de sus dedos, que había lubricado previamente, en su entrada.
-nngh...
-¿Te duele?
-N-No, solo se siente extraño
-Pronto se sentirá mejor
Kid se acercó y se apoderó de los labios del rubio mientras seguía dilatándolo lentamente.
-K-Kid...
La preparación duró unos cuantos minutos y para cuando Killer pudo darse cuenta ya eran tres lo dígitos dentro de él, los cuales estaban rozando un punto que no sabía podría hacerlo gemir y ansiar por más, un punto que lo estaba volviendo loco.
-ahh... yo quiero...
-Dime...- la respiración de Kid estaba agitada por la excitación, tener de esa forma a Killer lo estaba llevando a su límite- que deseas, mi amor
-nngh... tú, t-te quiero a ti
Solo esas palabras bastaron para que el pelirrojo retirara sus dedos del interior de Killer y tomara un preservativo de una caja sin abrirse que se encontraba dentro del cajón de la mesita de noche del rubio.
-¿Estás listo?
Killer asintió.
Kid entró lentamente en él y tuvo que hacer uso de todo su autocontrol para no correrse por esa simple acción. Killer era tan exquisitamente estrecho y caliente que se sentía en el mismísimo cielo.
-¡Ahh! K-Kid
-Nngh...- sin moverse, para darle tiempo a Killer para que se costumbre, Kid se acercó y comenzó a besarlo lentamente
Pasaron unos segundos y fue el rubio quien comenzó a mover sus caderas. Necesitaba más de esa sensación placentera, su cuerpo estaba actuando por sí solo sin ningún pudor o vergüenza.
-Más... - hablaba entre jadeos- más profundo
-Ahh...- gimió el pelirrojo cuando Killer movió sus caderas apretando su miembro- E-Esto es completamente tu culpa
-K-Kid
El pelirrojo comenzó a moverse contra el cuerpo de su amante de forma rápida y certera, dando exactamente en el punto que hacía gemir y pedir por más al rubio. Las fuertes piernas del escritor se abrazaron a la cintura de del pelirrojo, quien se inclinó y sin parar el movimiento de su pelvis comenzó a besar y succionar la piel del cuello y clavícula de su novio, dejando marcas que al día siguiente se observarían tan hermosas en contraste con la clara y hermosa piel de Killer.
-¡Ahh!- el miembro de Kid llenó completamente su interior y lo golpeó nuevamente en aquel punto que lo hacía gritar de placer- n-no puedo... m-me vengo... K-Kid!
- Ahh...-él también estaba en su límite- v-vente para mí, Killer
Con un fuerte gemido el rubio eyaculó sobre el vientre de ambos y segundos después le siguió el pelirrojo, quien sacó su miembro del interior de su novio rápidamente y quitándose el preservativo descargó toda su esencia entre ellos de igual forma.
Kid cayó rendido al lado del escritor y tras unos segundos de recuperar el aliento se giró y con una sonrisa se acercó a él para darle un beso, el cual fue correspondido inmediatamente por el rubio.
-Te amo- dijo una vez se separaron
-Yo tambien te amo- respondió el rubio y se acurrucó en el pecho del contario
...
...
Habían pasado casi una hora acurrucados acariciándose el uno al otro y compartiendo uno que otro beso. Hace solo unos minutos Killer había comenzado a preguntar cómo es que Kid había logrado que le dieran acceso a la secundaria a esas horas de la noche y el saber lo mucho que se había esforzado e pelirrojo por él lo hacía enamorarse cada vez más.
-Entonces... ¿en serio le suplicaste a la directora? Puedo imaginarme su rostro lleno de sorpresa
-Sí, pero no solo le supliqué, doné dinero para las actividades de la escuela y me comprometí a ser el patrocinador del próximo festival de verano
-¿En serio?- Kid podía ser demasiado lindo en ocasiones- te amo- Killer alzó el rostro y le dio un dulce beso en los labios
-Por ti soy capaz de vender mi alma al diablo y luego vencerlo cuando este quiera llevarse mi alma- acarició la mejilla del rubio- nadie podrá separarme de ti nunca
Killer tomó la mano de que el pelirrojo tenía sobre su rostro y la entrelazó con la suya, tras eso, escondió su rostro en el cuello del pelirrojo y se quedó en silencio durante casi un minuto.
-¿Killer? ¿Sucede algo, mi amor?
-Aquel verano- comenzó a hablar calmadamente el rubio- fue cuando sucedió.
Kid sabía a qué exactamente se refería su novio y lo abrazó fuertemente como signo que continuase, que él solo se limitaría a escuchar si eso era lo que quería.
-Me alejé de mis padres cuando fuimos a un lugar con muchos puestos de ventas, había una pulsera de púas que me pareció perfecta para ti, y no me di cuenta que había perdido de vista a mis padres para cuando terminé de comprarla. Fui muy tonto, Kid, en lugar de quedarme allí ismo a esperarlos, creía que ya era lo suficientemente grande para encontrarlos por mi cuenta y fui tras ellos. Tras quince minutos de búsqueda sin éxito llegué a una zona no muy transitada, me asusté y traté de irme pero dos sujetos me intersectaron- para ese momento su cuerpo comenzó a temblar y Kid lo sostuvo contra su cuerpo, trataba de expresarle todo su apoyo y protección a través de ese gesto- comenzaron a acosarme y a pesar que traté de correr ellos me atraparon, me tiraron al suelo en un callejón oscuro, me golpearon y...
-Esos malditos desgraciados- Killer pensaba lo peor, tenía ganas de asesinar a alguien y de forma muy literal- como pudieron...
-Estuvieron a punto. Uno me obligó a masturbarlo con mi mano mientras atacaba mi cuello y el otro... lamía mi miembro mientras introducía uno de sus asquerosos dedos en mí.
-Mi amor...
-Pude pedir auxilio con las últimas fuerzas que me quedaban y una persona que pasaba cerca me escuchó, fue rápidamente en mi ayuda, pero debido a que por lo que hice les había arruinado su pequeña diversión, uno de ellos me dejó un "pequeño regalo", o eso fue lo que me dijo luego de que con su navaja me cortase el rostro
-Killer- Kid tomó el rostro del rubio y se acercó para darle un casto beso- perdóname, perdóname por no haber estado allí para ti en esos momentos tan difíciles - sus ojos estaban vidriosos, estaba a punto de llorar en cualquier momento
-No es tu culpa- el escritor llevó una de sus manos al rostro del pelirrojo y limpió los bordes de sus ojos de las lágrimas que amenazaban por salir- ni los chicos ni tú sabían nada, yo quise que así fuese, me moría de la vergüenza y en ese entonces, detestaba profundamente mi aspecto, aún ahora no me siento a gusto con el
-No digas eso, por favor - Kid acarició las marcas en el rostro del rubio con la yema de sus dedos de una forma tan delicada y lenta que Killer suspiró profundamente- estas marcas no opacan ni un poco tu belleza ¿me oyes? Son muy finas y estoy seguro que dentro de poco, ni siquiera podrás percibirlas
-Yo no quería usar ninguna crema, pero mi madre insistía- Killer sonrió- y no puedes decirle no a tu mamá
-Mi suegra es la mejor-Kid devolvió la sonrisa
-Ella se sorprenderá mucho cuando sepa lo nuestro- el rubio se sonrojó- sabe que me gustan los chicos, pero nunca le dije que estaba enamorado de ti
-Bueno, ella ya me quería mucho desde la secundaria, será lo mismo como yerno
-Oh, eres muy seguro de ti mismo- Killer picó la nariz de Kid con el dedo índice
-Que te puedo decir- Kid tomó la mano de su novio y beso su palma tiernamente- soy irresistible
-Uhm... egocéntrico
-Así me amas
-...Sí, te amo
-También te amo
...
...