UNA VIDA A TU LADO
Un pequeño de cinco años corria con los brazos abiertos con su papi, el hombre de cabellera castaño solo acomodó sus lentes, viendo a su hijo con su pijama de arañas, lo acomodó en su suave cama, el acariciaba los cabellos de su hijo, observando las cosas de su pequeño, quedando su vista en el marco de una foto, y no pudo evitar sonreir al ver a su esposo sonreir en la cámara con un enorme oso de peluche en una de sus citas por el día del cariño. Y dejó que su mente se llenará de dulces recuerdos.
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¿cuánto es para siempre?
¿Hasta dónde se puede llegar el amor?
¿Cuándo se puede olvidar al amor de tu vida?
¿Existe el amor a primera vista?
Cuando te conocí tenía 14 años y tu 16 años, estabas todo sucio arreglando la tubería de la oficina de mi padre y yo entraba para hablar con él o mejor dicho pedirle que pusiera atención a su único hijo fértil.
Cuando nuestras miradas se conectaron supe que eras mi otra mitad, entre charlas, coqueteos y meses de citas a escondidas nos convertimos en novios y los dos creamos castillos sobre nubes blancas. Tu eres pobre y yo estaba acostumbrado a tener una vida de lujo pero eso no importaba cuando sólo tú y yo nos amabamos.
Un día mi padre nos descubrió y todo fue tan rápido, el guardaespaldas de mi padre golpeandote, yo protegiendote como podía, causando la rabia de mi padre, me dio a escogerte a ti o mi vida de lujos y a los 15 salí solo con lo que tenía puesto.
En un cuartucho de motel, abrazados en la cama me prometiste nunca dejarme solo, cuidarte y amarme lo recuerdas, amor.
Cada día fue difícil, había días que peleabamos, otros nos amabamos, los días se convirtieron en meses y los meses en años.
Con mucho trabajo compramos una casita, con nuestras manos la arreglos y era feliz. Nuestra rutina era salir a trabajar pero antes de iniciar una buena sesión de sexo matutino en cualquier parte de nuestro hogar, tu trabajo de albañil y el mío de secretario. Al cumplir mis 20ños, en una de nuestras citas caíste desmayado, te ordene que te hicieras un chequeo....recuerdo los exámenes, y en el despacho del médico nos dio el diagnóstico: Cáncer
¿cuánto es para siempre?
Desde ese día todo cambio. Trataste de ser fuerte por los dos, de darme esas sonrisas que son reconfortantes, de mirarme a los ojos y decir todo va a estar bien.
Iniciaste el tratamiento y yo estuve a tu lado, de ver como la primera quimioterapia te dejo débil, tan frustrado pero yo trate de bromear y mostrar mi encantadora personalidad.
Los días pasaban rápido para mi gusto, y nuestras rutinas cambiaron, al correr tú ya no me ganabas y yo te vi el rostro agotado, baje la velocidad para darte ánimo, que me dejarás como lo hacías.
Fui testigo silencioso de ver como tu cabello se caía, de ver tu rostro demacrado, tus ojeras, de ver tu cuerpo como adelgazaba y yo no podía evitarlo, de ver como las cuentas aumentaban y no era capaz de lograr nada.
Mi amor, vi como poco a pocos vida de deseaba abandonar, de ver los cambios drásticos en tu salud. De tomar tu mano y sentirla tan fría, pero aún así tratadas de ser fuerte.
¿Hasta dónde se puede llegar el amor?
Antes de tu primer quimioterapia, te extrajeron tu semen para que si en un futuro quisiéramos una familia, tu tuvieras esa opción y creí, luego de cuatro años de luchar con el cáncer darte ese regalo.
La primera vez que lo intenté, falle al parecer tuve un aborto natural, no te dije nada para no preocuparte, cargue con ese dolor solo yo, pero no deseaba que sufrieras.
Recuerdo las noches frías que abrazados, charlamos de tener a un pequeño corretear en los pasillos, de que tú le enseñarias a jugar a la pelota y yo solo te escuchaba con el corazón hecho añicos pero luego de unos meses lo intente por segunda vez.
El segundo intento fue fallido, mi cuerpo lo expulsó cuando por susto de verte desmayado en la tina. No reaccione, te cargue como pude al auto para llevarte al hospital. Esa noche nos informaron que estabas rechazando la medicación.
La tercera es la vencida o ese decía pero tenía miedo y no ayudaba la visita de mis padres a mi humilde hogar como lo mencionaron pero con la frente en alto los saque de nuestro hogar, un hogar en donde he sido amado, en donde todos estos años he vivido mil recuerdos llenos amor a tu lado.
Te observó en esa cama, tu cuerpo agotado y la bendita máquina conectado a tu cuerpo.
Steve ¿Porque el amor es tan duro?
¿No me dejes?
¡¿STEVE NO ME DEJES, NO TÚ, NO ME DEJES AMOR?
¿Cuándo se puede olvidar al amor de tu vida?
A la edad de 14 años te conocí y supe que existía el amor a primera vista. Un año después fue rechazado por mi familia pero tu te hiciste mi hogar, mi familia.
Fue duro, pero juntos trabajamos para tener nuestras cosas y luego cuando éramos tan felices te diagnósticaron cáncer y todo cambio pero juntos hasta el final.
Ahora a mis 25 años, te dejo un ramo de rosas rojas a tu tumba y todo se desmorona a mi alrededor. Steve, juro que quiero tirarme en el primer puente que encontré para acabar con mi miseria.
Pero no puedo. No porque no me falte valor, pero hay un pequeño que me necesita. Steve la tercera es la vencida ¿verdad?
Eres y serás siempre mi primer amor, Rogers.
Vamos bebé es hora de ir a casa...
—Rogers, nuestro pequeño Peter está creciendo y sabe que tuvo al mejor padre.
Fin
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