La historia del planeta Tierra hubiera sido totalmente distinta a lo que conocemos si un solo hecho del pasado no hubiera sucedido.
En el año 377, Kakarotto llegó a la Tierra, dando comienzo a lo que posteriormente se convertiría en la salvación del mundo.
Claro, si lo vemos de ese modo, todo se lo debemos al golpe que de crío recibió, cambiando su comportamiento agresivo por uno tranquilo, volviéndolo bueno y bondadoso.
Criado y entrenado por Son Gohan, recibió el nombre de Son Goku, fue inculcado desde muy pequeño sobre la fortaleza de los vínculos, forjando un niño fuerte e inocente, diestro en el ámbito de las artes marciales.
Tras la muerte del anciano, pocos años después conoce a Bulma y compañía, dando inicio a la aventura de la esferas del dragón.
En el año 749, Goku se enfrentó a la banda de Pilaf y ShengLong es invocado por primera vez.
En el transcurso del siguiente año, Goku es estrenado por Muten Roshi, convirtiéndose junto con Krilin en los discípulos de la tortuga.
El primer torneo de Goku y una nueva búsqueda para encontrar su preciada esfera del dragón de cuatro estrellas.
La patrulla roja hace su aparición y comienza una nueva persecución por aquellos objetos misteriosos capaces de cumplir cualquier deseo, logrando destruir la armada del coronel Red y conocer al maestro Karin.
Después, como todos sabemos, mueren Krilin y el maestro Roshi y aparece el temible PiccoroDaimaku, el rey de los demonios, buscando la destrucción del mundo. Y tal como alguna vez la bruja Uranai Baba lo predijo, Goku vence al poderoso Daimaku, siendo reconocido por el mismo rey de la Tierra como el salvador del mundo.
Conoce al mismo Kamisama y logra conseguir que sus amigos revivieran a cambio de quedarse a entrenar durante tres años en el palacio, buscando volverse más fuerte y para que en el futuro pudiera encargarse de la reencarnación del mal, Majunia, mejor conocido como Piccoro, quien con el paso de los años se convertiría en uno de sus mayores aliados.
Es verdad, como alguna vez dijo Bulma, por culpa de Goku la Tierra siempre se ha encontrado en peligro.
Y eso queda confirmado a partir del momento en el que él primer saiyajin pisó la Tierra, buscando a Goku, su hermano menor, dándole paso a la llegada de los últimos y más poderosos saiyajines, poniendo nuevamente al mundo en peligro.
Irónicamente Vegeta y Goku vuelven a encontrarse en Namek y llega el desenlace de la venganza saiyajin contra el emperador del mal, Freezer.
¿Y que siguió? Los androides con el propósito de matar a Goku por órdenes del único sobreviviente de la patrulla roja, el doctor Gero, su creador.
Cell también es digno de mencionar aquí, pues además de ser otro androide del doctor Gero, por culpa de Goku casi logra su objetivo, erradicar a la humanidad.
Y aunque no fuera visto de ese modo, el despertar de Majin Buu también tuvo que ver gracias a que Goku llegó a la Tierra.
Pero... ¿Y si el bebé Kakarotto nunca hubiera llegado sido mandado a destruir el planetario como decía su misión? Si por culpa de un par de personitas la historia cambió... ¿Que hubiera pasado?
La Tierra como la conocemos sería muy distinta.
Sin Goku, Pilaf hubiera logrado convertirse en el emperador del mundo gracias a las esferas del dragón.
Y aun sin las esferas, la patrulla roja hubiera logrado deshacerse de Pilaf y lograr la dominación del mundo, por que en sí nunca las necesitaron para cumplir su propósito.
Pilaf, molesto por haber sido vencido por la patrulla roja, de igual manera le hubiera buscado y entregado las esferas del dragón a Piccolo Daimaku.
Este hubiera pedido el mismo deseo, la juventud eterna, recuperando todo su poder tal y como hubiera pasado si Goku estuviera en la Tierra. La única diferencia sería que esta vez no hubiera nadie quien lo pudiera detener en su ambición por ser el rey de la Tierra.
Como Goku nunca llegó al planeta, los saiyajines tampoco lo hicieron, mucho menos hubo viaje a Namekusei.
Y como Goku jamás se metió con la patrulla roja, los androides y Cell nunca fueron construidos.
Se sabía que una de las diversiones de Piccolo Daimaku era destruir ciudades.
Cada nueve de mayo una ciudad era destruida a al azar y con ellos la población fue disminuyendo con el pasar de los años...
Y solo de esa manera se pudo evitar el despertar de Majin Buu, al no existir la suficiente energía vital en el mundo, Babidi nunca pudo reunir la suficiente energía.
La historia hubiera terminado en el momento en que Piccolo se convirtió en rey.
Sin Goku, ese sería el destino del planeta Tierra.