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Magos, chispas y lobos por minima

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10 Fiesta de Cumpleaños

La fiesta era sencilla, así como el sheriff Stilinski no tenía talento para decorar tarjetas mucho menos para decorar una fiesta de cumpleaños para niños, por lo que desde el año pasado le pedía a Melissa ayuda en este tipo de cosas.

La ausencia de Claudia aún era reciente, especialmente en eventos familiares como cumpleaños, pero el hombre no se consideraba lo suficiente mezquino como para privarle algo de alegría a sus hijos, Claudia solo regresaría para atormentarlo si algún día se enterara de eso.

Con manteles de plástico con decoración de superhéroes en mesas en el jardín, algunos globos aquí y allá, y una enorme piñata colgada en el árbol del patio trasero fue la decoración; la vieja parilla ya estaba encendida calentando las primeras hamburguesas y salchichas para los perros calientes, en el refrigerador descansaba el pastel que los chicos habían preparado con la receta súper especial de triple chocolate de su madre.

La mayoría de los invitados adultos eran los padres de los niños que decidían quedarse para vigilar a sus jóvenes vástagos, o amigos de John y Claudia que conocían a los hijos Stilinski desde pequeños, en el caso de Stiles desde pañales y en el de Harry desde que John y Claudia decidieron adoptarlo, los niños en su mayoría eran compañeros y amigos de la escuela de sus hijos, y algunos niños cerca de la edad de estos hijos de sus compañeros policías.

No era la más grande de las fiestas, pero las constantes risas y juegos constataban que todo el mundo se estaba divirtiendo.

Mientras que los niños jugaban con globos de agua al ser un caluroso día de verano y se perseguían unos a los otros en el jardín, los adultos platicaban de temas que suelen hablar y parece gustarles, como estadísticas del último partido de béisbol, política o trabajo, ya saben, temas aburridos de adultos que a la mayoría de los niños poco le interesan, aunque había un par que resaltaba para muchos en el grupo de adultos pero no para los Stilinski, eran los magos sentados en la mesa tratando de seguir las conversaciones de quienes los rodeaban.

-Conocidos de mi tiempo en el ejército- había dicho John cuando le preguntaron quiénes eran estos desconocidos.

No tenían motivos para dudar de la palabra de John por lo que no profundizaron más en el tema y mejor se concentraron en el último puntaje del partido de su equipo favorito o el último chisme local invitando a los nuevos a integrarse a la conversación.

-El equipo junior de béisbol ya empezara la temporada, inscribiré a Billy para las pruebas- dijo uno de los padres mientras cambiaban de un tema a otro.

-Todo el mundo sabe que el equipo de Basquetbol es la estrella de la ciudad-

-¿Basket? Lacrosse caballeros- dijo una de las madres presentes, una policía madre de uno de los pequeños terrores que estaban jugando en el jardín, una pequeña niña con dos trenzas que estaba demostrando tener la mejor puntería con los globos de agua de todos los niños ahí presentes. Tal vez en algún futuro seria francotirador o algo así.

-Mientras los niños se diviertan y no se lastimen… ¡Scott más vale que dejes esa manguera!- grito Melissa con un oído en la conversación y un ojo de halcón sobre su hijo que había tratado de usar la manquera del jardín como ventaja contra la niña de las trenzas que estaba superando a todos junto a Cora, el grito distrajo suficiente a su hijo para recibir otro globo de agua directo en la cara.

En realidad las pocas niñas de la fiesta estaban venciendo al número superior de niños en ese cumpleaños, los varones estaban prácticamente escurriendo agua mientras las féminas del grupo esquivaban y atacaban sin tregua, Cora las lideraba así que no le extrañaba mucho.

Esa niña se notaba una líder nata como su madre.

-¿Y ustedes que opinan señores? ¿Cuál creen que es el mejor deporte?-

-Quid… digo, ¿croquet?- dijo Richard, como la mayoría de los magos era fanático del quidditch y casi responde sinceramente a la pregunta, solo para decir lo primero que se le vino a la mente. No era de sus momentos más inteligentes pero se encontraba asombrado por la masacre que pasaba ante sus ojos, al menos solo eran globos de agua y no pelotas.

-¿Croquet?-

-Pensé que los newyorquinos amaban el béisbol, ni siquiera sabía que había equipos de croquet en NY-

-Oh, es un gusto adquirido, también me fascina el béisbol pero encuentro muy entretenido el croquet-

-¿Y tú Lancelot?-

-Prefiero el futbol americano, aunque debo admitir que he visto partidos de lacrosse y pueden ser más brutales y entretenidos-

-La carne está casi lista- llamo John llamando la atención de los adultos desde donde estaba parado al lado de la parrilla.

-A mí me huele que algunas piezas se te quemaron jefe- dijo uno de los mejores amigos de John y compañero de trabajo.

-Revisa ese olfato Larry, esto está quedando a la perfección-

John podía decir eso pero algunas piezas estaban algo chamuscadas, pero ya saben cómo es esto, no te metas con el cocinero si no quieres acabar quemado y más si es el sheriff de la ciudad, Larry podía tener esta libertad porque eran amigos desde su época en la academia de policías.

-¡Niños ya vengan a comer!- llamo John, su jardín estaba lleno de charcos de agua, pedazos de plástico de globos y sus propios hijos parecían gatos mojados con los zapatos llenos de lodo pero por ver esas sonrisas en sus rostros valía la pena el desastre.

-Creo que tengo agua en el oído- dijo Stiles saltando sobre sus pies mientras inclinaba la cabeza tratando de sacar el líquido de su cabeza.

Cora era la segunda con mejor puntería del grupo de niños, pero sin lugar a dudas era la más fuerte al lanzar, había sacado aire o derribado a los niños ahí presente con un buen lanzamiento, cuando lo golpeo en la cabeza con el globo de agua creyó por unos segundos que lo habían noqueado.

-Todos tenemos aguas en todas partes, ya tuve suficiente agua sobre mí por el día de hoy-

-Ni creas que te escaparas del baño el día de hoy Scott, ahora siéntate y traeré algunas toallas para ustedes niños-

-Gracias señora McCall- corearon algunos niños cuando se les extendió una toalla para secarse o calentarles un poco, era verano y aunque era un día soleado en Beacon Hills, al estar rodeado de bosques el clima no era tan seco o aún muy caluroso en esta época del año como en otros lugares.

Las niñas se estaban regodeando un poco de su aplastante victoria mientras los chicos escurrían agua, pero no era malo o amarga derrota, es algo que los niños tienen y los adultos pasan a olvidar con el tiempo, la sana competencia que solo es un juego, si, los chicos estaban más empapados que esponjas en el fregadero en comparación de las niñas, pero se divirtieron a carcajadas, y en realidad esto no se trataba de ganar o hacer equipos, que los grupos se dividieran entre niños y niñas fue coincidencia.

Mientras los adultos preparaban las hamburguesas y perros calientes y los niños empezaban a tomar sus refrescos, de repente se escuchó un estruendo enorme provenir de la calle.

-¡Quédense aquí! Voy a ir a ver… tal vez fue un accidente- John dejo la espátula y fue a la parte delantera de la casa seguido de cerca de Larry y otro par de sus compañeros policías, hasta atrás de ellos venia Lancelot que por alguna razón tenía un mal presentimiento.

Mientras tanto los niños y los otros padres se quedaron en el jardín, Melissa junto a los demás adultos vigilaban a los pequeños y trataban de tranquilizarlos, lo último que querían era tener un grupo de niños traumatizados por un sangriento accidente automovilístico delante de la casa.

Pero lo que causo tal escandalo no fue un accidente frente a la casa, o al menos no debería ser considerado así.

Una vieja moto cargando al hombre más grande que encontraras en tu vida no lo es.

Cuando llega a la puerta principal John ya está listo repasando lo que tiene que hacer si ve algo horrible al otro lado de la entrada de su casa, se prepara mentalmente, como policía ha sido testigo de incontables accidentes, escenas que algunas veces siguen en sus pesadillas algunas noches, sin embargo no encuentra algo tan espantoso como cuerpos acostados en la calle sacados por la fuerza a través de parabrisas o personas atropelladas, tampoco acero deformado y llantas fuera de sus ejes.

Solo hay un hombre sobre una moto, un hombre enorme, barbudo y peludo, el tamaño de la moto aunque grande, al lado de ese hombre era como unas caricaturas de osos rusos sobre pequeñas motos.

La máquina rugió ruidosamente de nuevo y algo de humo salió del escape, era la causa de tanto escándalo. Cuando el hombre bajo y los amortiguadores de la moto chirriaron ahora libres de tanto peso John y compañía se dieron cuenta que ese hombre era mucho más enorme de lo que parecía a simple vista.

Otros vecinos se estaban asomando desde sus ventanas o puertas medio abiertas, era casi como un espectáculo en medio de la calle, y bueno, cualquiera que hiciera tal escándalo en un barrio tan tranquilo como este lo era.

-Ahrrg ese sí que fue un viaje largo- hablo el hombre con acento notablemente fuerte y claramente extranjero.

El hombre saco un papel de uno de los tantos bolsillos de su chaqueta y lo acerco a sus ojos en medio de esa maraña de cabellos que era su cara, parecía estar leyendo algo.

-Esa chatarra parece que causo todo este escándalo- comento Hughes, otro de los compañeros policía de John, el modelo de la moto era notablemente viejo y a plena vista le faltaba algo de mantenimiento.

-Y el hombre gigante al lado de ella- secundo Larry, y eso que era el adulto más alto de la casa el día de hoy con 1.95 mtrs, pero ese señor le superaba con creces.

-Bien, parece que está algo perdido. Tal vez solo necesiten que le den algunas indicaciones- John ya se disponía a bajar los escalones de su entrada y ayudar al hombre extraño en medio de la calle pero una mano en el hombro lo detuvo.

Era el señor Graves que inmediatamente se dio cuenta que no era un humano con problemas de gigantismo en la calle, ahora ¿Qué rayos hacia un semi gigante con una moto mágica en medio de las calles residenciales de Beacon Hills?
Notas finales: después de repensar y reescribir un par de veces esto deje que las cosas terminaran así :/ , la otra idea era otros dos o tres episodios para esperar a que fueran a Inglaterra donde se encontrarían con Hagrid, pero si el guardabosques pudo encontrar a Harry en una isla en medio de la nada, a este hombre nada lo detendría para ir a visitarlo en su cumpleaños. Algo sumamente imprudente pero que si me puedo imaginar que haría este hombre solo para ver a Harry.

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