La magia era especial, aquellos que eran sensibles a ella podían sentirla sin ningún problema, claro que les tomaba años descubrir dicha habilidad.
Pero como toda habilidad había quienes la utilizaban para bien y otro para mal.
El miraba por la ventana de aquella majestuosa mansión, la magia estaba extraña, no era igual a otras ocasiones, había algo más, alguien estaba utilizando hechizos bastantes extraños, aun no podía determinar si eran rituales antiguos u prohibidos.
Sea lo que fuere no le gustaba para nada.
Se alejó de la ventana con la intención de checar las cosas de Hogwarts, observar que el plan fielmente creado desde hacía mucho tiempo estuviera realizándose de forma correcta.
Pero antes de llegar a la habitación donde estaba la esfera que controlaba Hogwarts, un elfo apareció para indicarle que al ministro le urgía verlo de forma inmediata.
La mirada que le lanzo al pobre elfo le hizo estremecerse y en ese momento aquella criatura agradeció pertenecerle al ministerio y no al hombre frente a él, quien no dudaría en herirlo gravemente.
Mirando la puerta por la que estuvo a punto de entrar no le quedo más que irse donde el idiota le llamaba.
--Eso estuvo cerca—exclamo aquella voz, mientras miraba lo que había sucedido
--Lo sé, deben apresurarse, sino él se dará cuenta—le respondió su compañera preocupada, aquellas personas eran muy importantes para ella y para el futuro realmente
--Iré a ver a mis informantes, es posible que ellos deban actuar
--Están por investigar la situación—dijo mientras miraba la esfera y veía a los dos jóvenes que parecían hermanos, pero que no lo eran.
--Siempre me pregunte ¿Por qué se lo permitiste?
--No te interesa—fueron sus palabras para desaparecer en la bruma que existía
--Algún día lo averiguare.
Mientras en Hogwarts todos esperaban el omento de regresar al comedor. Las dos nieblas de la décima generación se habían separado un poco, a Mukuro aceptaba estar con los demás y sobre todo con Hibari con quien tenía una extraña amistad, pero en ese momento la soledad era lo mejor, tomando en cuenta la situación que vivían.
El hecho de que su hermanita Nagi tendría familia con una chica de ese lugar y que además por lo que había escuchado era un fanática a la pureza, cosa que aún no entendía mucho, era sorpresivo junto a la aparición de su hijo, estaba intentando averiguar quien estaría lo suficientemente loco para tenerlo como pareja o tal vez sería como Bel y el chico de Shimon, solo tuvieron a sus hijos y se separaron, aunque si era sincero ese pensamiento lo molestaba.
A pesar de todo, aunque fingiera que él era feliz como era, eso no significaba que añoraba tener una familia normal, tal vez ya no unos padres amorosos, pero si una pareja en quien apoyarse, tal y como los demás.
--¿Mukuro?—la voz de la chica que salvo y se convirtió en su hermana le saco de sus pensamientos
--¿Qué sucede Nagi?
--¿Estás bien?
--Si, solo pensaba en las parejas, nada importante—exclamo con una ligera sonrisa, sabía que no debía mentirle a su amiga, pero en ese momento le estaba dando solo la mitad de la verdad
--Entiendo, por cierto ¿haz pensado en lo dicho por la chica rubia? Pansy dijo que su nombre es Luna y todo el mundo la cree loca
--¿Pansy te dijo eso?—cuestiono divertido ante el sonrojo de su hermana—lo he pensado pero no comprendo realmente lo dicho
--¿crees que tenga que ver cómo nos sentimos y nuestros extraños accidentes?—susurro mirando hacia atrás con la intención de que nadie le escuchara
--Lo creo, además ahora que tocas el tema, no me he sentido así, de hecho me siento tranquilo como si
--Estuviéramos en el lugar correcto—termino la frase Nagi mientras sus manos que se habían mantenido cerca de su pecho desde el inicio se apretaron—no quiero abandonar a Tsuna
--No lo haremos Nagi, solo hay que ver cómo controlar nuestras emociones, al fin y al cobo somos de la familia, Luna menciono que éramos algo del tal Snape, tal vez debamos platicar con el hombre
--No sé por qué pero tengo la sensación de haber escuchado el apellido en algún lugar
--Snape… si da la sensación de haberlo escuchado, avisemos a Tsuna y busquemos al hombre
--Se están movimiento—exclamo una voz femenina mientras miraba como se iban
--Sabíamos que eso sucedería—respondió Nataly, mirando a su madre y padrino irse--¿es un problema?
--No realmente, es un callejón sin salida, no hay información, tendrían que hacer lo mismo que nosotros para averiguarlo—respondió una voz masculina
--o pedirle a los gobblings el préstamo de un pergamino de herencia.
--Lo interesante—dijo una tercera voz masculina—es que le dimos la respuesta cuando te presentaste Geralt
--Todos están sorprendidos por lo que sucede—respondió la primera voz—muchos creyeron que se casarían con x persona y resulta que no es así—lo descubrirán
--Y cuando eso suceda, podrán derrotar al idiota ese, al fin y al cabo esto inicio con el primer doble de la familia
Los jóvenes asintieron, el descubrimiento había sido sorpresivo y para confirmarlo habían hecho lo dicho por Geralt, desde habían comenzado a armar el extraño rompecabezas familiar y como este se había vinculado a la familia Vongola y a los Perrevel
Severus estaba terminando de leer la receta de la poción que ayudaría al joven Weasley, estaba confuso cuando leyó que en un momento de la poción debía ser hervida en la llama del sol y puesta en reposo con la llama de la lluvia y terminar la cocción con la llama del cielo.
A pesar de su relación con Demian, desconocía mucho sobre las llamas, sabía que Demian la poseía, pero él nunca le presto mucha atención, además de saber que era na variante de la magia que muy pocos podían utilizar, e incluso algunos squib podían hacerlo.
Los golpes en su despacho le hicieron levantar loa mirada y darle paso
--¿Qué se les ofrece?—cuestiono al ver a los jóvenes de la niebla, se negaba a decirles como muchos alumnos, los hermanos piña
--Queríamos hablar con usted, de lo dicho por la joven Luna—fueron las palabras de la joven
Severus asintió y le indico que entraran, el conocía la reputación de la chica, y además también estaba intrigado sobre lo dicho
--¿cree que sea posible lo dicho por ella?—cuestiono Mukuro mirando al joven
--No estoy seguro—respondió mientras se reclinaba sobre el asiento—por parte de mi madre no hay más familia, a excepción mía mi línea materna se extinguió y por parte de mi padre es difícil saberlo
--¿Por qué?—interrogo Chrome
--Nunca he sabido de mi familia paterna, él ha dicho que no le interesa saber nada de ellos, así que nunca hemos investigado
--Talvez sea hora de saber algo de su familia paterna ¿no?
--Con su presencia aquí, es muy plausible, le pediré a Lucius que me apoye con esto, tienen muy buenos informantes
--Nosotros haremos lo mismo, el arcobaleno Reborn es bueno también investigando
Media hora más tarde en el gran comedor
--¿podrás hacerlo Reborn?—cuestiono Tsuna a su tutor después de escuchar a sus dos nieblas
--Tu pregunta ofende dame-Tsuna, claro que puedo hacerlo, aunque posiblemente tarde más tiempo debido a nuestra presencia aquí
--Bueno dejamos todo en tus manos arcobaleno—exclamó burlonamente Mukuro
--¿Cuál es el nombre que hay que investigar?—pregunto ignorando al chico
--Tobías Snape
--Bien—fueron las palabras de Reborn
--¿todo bien Tsuna?—cuestiono Takeshi al ver el ceño fruncido del joven
--Si, solo que tengo la sensación de que hemos escuchado ese apellido en otro lugar
--ahora que lo dices—comenzó Hayato—también lo he escuchado antes
--Así que quieres que investigue tu apellido muggle—fueron las palabras de Lucius mientras comía en la mesa de las serpientes
--Si, aunque no es muggle, parecer ser que es un squib
--interesante, alguna familia extrajera, si no mal me equivoco ellos son italianos
--Lo son
--Veremos que encontramos de Tobías Snape
--¿Qué haces Luna?—cuestiono Collin mirando a su amiga con un pergamino y pluma
--Jugando con los apellidos de los presentes, los combino y les cambio las letras
--He tía Luna ¿podrías?—pidió Eliam mientras leía dos apellidos
--Descuida ellos deben descubrirlo—dijo mientras tachaba dos apellidos que había hecho—ellos lo harán cuando llegue el momento
--Gracias tía
--Bien después de esta exquisita comida, comenzamos con las nuevas presentaciones.
Los presentes se levantaron para que los sofás aparecieran y las familias que se formaban se sentaran juntos