Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

LA DUDA. por SigmaIII

[Reviews - 3]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Hola, soy SigmaIII. Algunos me conocen por mis trabajos en Bleach y Harry Potter. Pues hoy vengo con algo nuevo y completamente diferente a lo que acostumbro, un One-Shot StanxBill, BillxStan? Esta muy Light.

Los personajes pertenecen a Alex Hirsch/Disney.

Notas del capitulo:

Hola, pues este es un One-Shot StanxBill, BillxStan? Se ubica cuando los gemelos viajan por el mundo en el barco Stan´O War II. 

ACOTACIONES:

Sueños. 

"Pensamientos o recordatorios"

 

.

.

.

Separación de escenas.

...........................

La duda.

Stan O´War II. En algún lado de pacífico.

 

-¡Stanly no debiste pelear en el círculo de la muerte de esos pescadores! ¡Fue sumamente…

-¡BAH! Ahórrate el regaño mamá, nos dejaron ir ¿O no?- Stan rebuscó en la gaveta y sacó un botiquín. Lo colocó sobre la cama en la que se sentó. Se encontraban en la cabina del barco. Mientras navegaban fueron asediados por pescadores ilegales que los creyeron inmiscuirse en su territorio. Para Ford fue imposible dialogar aunque conocía el idioma y para Stan fue más práctico luchar por la libertad de ambos.

Ford no dijo nada, se quedó quieto contemplandolo.

-¿Qué?

-No es nada.-

Stan puso los ojos en blanco, imaginaba que Ford analizaba la situación y quería regañarlo, pero como todo salió bien prefirió no hablar. Terminó de desinfectar las heridas en su mano y se colocó un vendaje. Guardó el botiquín. Ahora iría al timón pero Ford lo detuvo, le impidió salir.

-¿Qué haces? ¡Marchemonos de una vez!, no volveré a pelear con esos tipos.

-Yo dirigiré el curso, deberías descansar. Además es mi turno.

-Tonterías hermanito, yo estaré al timón. Tu duerme.

-Estás herido. Falta poco para que anochezca.

-De verdad no es nada, puedo conducir esta nave con solo una mano y una taza de café…

-¡STANLY! ¡No lo repetiré!, ¡Aséate y duerme!

-Pero…- Ford dio media vuelta y salió cerrando la puerta tras de sí.

 

JAJAJAJAJAJAJAJA

No supo si era su imaginación o la risa en su cabeza era real.

Últimamente prefería seguir despierto.

Es que si no dormía estaría desvelado y sería inútil. El mar es muy peligroso y necesita todos sus sentidos trabajando al cien por ciento. Se recostó de mala gana y miró al techo preocupado. Así hasta que cayó dormido.

-¡Stan!

-Déjame estoy cansado.

-¡Ey! ¡Ese Ford es un pesado! Por ti es que se libraron de los mercenarios y no hace más que reclamarte, debiste dejarlo atrás y que lo lanzarán por la borda.

-No discutiré eso.- Stan se dejó caer en su silloncito de la cabaña, tomó el control remoto y encendió la televisión. Bill se puso enmedio bloqueando la vista.

-¿Oye y qué ocurrió hace unos momentos? Por un instante tuve la sensación de que preferías evitarme.

-Lo haría si pudiera, créeme.

-¿Y eso por qué? Pensé que lo de la dominación mundial y mi intento de asesinato habían quedado en el pasado.

-¡Yo nunca te perdonaré lo que le hiciste a mis sobrinos!

-¡Oh! ¡No seas tan duro! Ya me disculpe.

-Yo nunca te oído una disculpa.

-¿De verdad me harás poner de rodillas?- Levito y se apoyó contra su hombro.- Eres malo Stan Pines. Malo.- Al oído. Stan se estremeció y puso de pie.

-¡De verdad quisiera descansar esta vez! - Bill frunció el ceño. Toda una mente de posibilidades y este anciano prefería sumirse en la nada.

-Cómo quieras- Bill tronó los dedos y desapareció.

-Al fin.- Stan se sentó de nuevo y pronto todo se oscureció, parecía una noche fresca.

 

Todo comenzó hace un año, cuando dejaron Gravity Falls, mientras más recuerdos recuperaba y mejoraba su memoria, más tenía la certeza de que no era el único en su cabeza. Y lamentablemente así era. No quería decir nada a Ford para no preocuparlo, pero cada vez era más difícil disimular.

.

.

.

Abrió los ojos y se estiró perezosamente. Se incorporó.

-¿Ford?- Una trampilla al frente llamó su atención, no la había visto antes, era imposible que hubiera una habitación allí. La intriga lo hizo bajar. Había un laboratorio, con mesas largas llenas de frascos, tubos de ensayo y artefactos eléctricos. Al frente había una puerta, su aspecto lúgubre le generó cierta ansiedad, lentamente presionó un botón en el marco. La puerta metálica se abrió y Stan pudo verse asi mismo, dormido y sumergido en un líquido rosa dentro de un contenedor de cristal. Ante el asombro retrocedió. Agitó la cabeza para espabilarse, la voz de Bill se escuchaba cerca.     

 

-Odio ser yo quien te lo diga pero estamos en un tanque.

-No estoy en ningún tanque. Ya te dije que odio…

-No miento Stan, Ford te metió en un tanque.  Este es un recuerdo.

-No son recuerdos. Lo estás recreando.

-¡No es así Stan!-Bill apareció frente a él.-¿Crees que yo te mentiría en algo tan importante? Si estás atrapado yo también lo estoy, ¡Y ODIO QUE ME ENCIERREN! -Se volvió enorme por enojo y luego regresó a su tamaño habitual cuando se calmó.- Por eso quiero advertirte.

-¡No es así! ¡Solo quieres confundirme para que deje de confiar en Ford! Lo haces para vengarte.

-¿Vengarme? ¿No me escuchas cuando digo….

-Quieres vengarte de mí por ignorarte todo este tiempo. -

Bill lo miró furioso, el ceño fruncido y venas rojas decorando su cuerpo.

-Ver recuerdos es entretenido lo admito. Pero a veces necesito hablar.- Si, aceptaba la derrota y se reducía a hablar con su anfitrión. Los minutos en la cabeza de Stanly para Bill se sentían como una eternidad y ya había visto todos los recuerdos de toda esa vida hasta hoy dos veces.

-Suerte con eso.-

Bill tembló de enojo e iba a contestar pero se abstuvo. Se convirtió en una sombra sobre el suelo y desapareció. La ilusión también lo hizo y Stan ahora regresaba a la sala de estar en la cabaña. Por un instante se sintió mal por Bill, pero luego recordó a Mabel y a Dipper y el sentimiento desapareció. Eran dos enemigos juntos en esto. Entonces despertó. Miró a su lado. La cama de Ford estaba tendida, seguramente seguía al timón.  

-¡Diablos!-

Ya no quiso dormir. Se sentó y tras un rato sey preparó para ese día.

.

.

.

De noche…..

 

-¡Pero tu me pediste ayuda! Y… yo... yo…busque los diarios.

-Esto debe parar Stanly.

-¡Somos hermanos!

-Si, lastimosamente así es.-

 

Fue la conversación que tuvo con Ford cuando se reencontraron, una conversación privada, pero Bill la miraba a través del televisor en la sala de estar de la cabaña. Se encontraba sentado sobre el control remoto en el medio del asiento, con aspecto pequeño y exhausto al igual que su ánimo.  

 

Stan sintió una pizca de tristeza.

Cansado del recuerdo Bill pateó un botón del control remoto para cambiar el canal y por ende de recuerdo. Luego miró a Stan cansado.

 

-Estas en mi sitio.- Bill suspiró y levito muy lentamente para quitarse.-Oye…- Bill lo miró.- Y suponiendo, sólo hipotéticamente que estamos en una especie de tregua, ¿De qué querrías hablar?-    

.

.

.

“Vivía en un mundo plano de pesadillas, pero al menos podía moverme libremente. Estar encerrado es desolador”

.

.

.

Dos años después.

 

-¡Y no quiero que cambies el curso sin consultarmelo!

-¡Dame crédito, nos libre de ese estúpido Iceberg!- Stan cerró de portazo la escotilla y se acomodó sobre unos sacos, en un asiento improvisado que utilizaba cuando quería apartarse de Ford. Estaba muy molesto, y como siempre el cansancio lo hizo dormir pronto.

 

-¡Stan!- A pesar del sueño superficial, enseguida se apareció Bill. Lo recibía muy contento, después de todo ya eran amigos, ambos preferían verlo así. -Oh no me digas, un mal día ¿Es así? Siéntate Stan.- El viejo sofá en la sala de la cabaña.- Relájate. ¿Qué te ofrezco? ¿Té? No eso no, tu bebida favorita. Una lata bien fría de “Pitt” ¡Vaya nombre para una bebida! ¿Y es comestible? ¿Qué importa? ¡Estamos en un sueño!- Con un tronar de dedos apareció la lata que descendió hasta llegar a la mano de Stan.   

-¡No sé cuál es su problema!

-¿Ford?- Bill se sentó en el hombro de Stan.

-Siempre me trata como si fuera un tonto.

-Me gustó la forma en la que viraste el barco, estuvo a poco de quedar boca abajo ¡Pero libraste el cubo de hielo gigante!

-¡Y eso no le importó a Ford!

-Ford siempre ha sido muy cuadrado, no es tan listo como tú. El no hubiera sabido qué hacer. Se hubiera paralizado de miedo igual que siempre.

-Claro que si, él siempre…Un momento.- Stan miró divertido a Bill.

-¿Qué ocurre?

-Que listo, pero siempre me daré cuenta, ya sé que no debo escucharte triángulo isósceles. Pero sigue, me gusta ser halagado. Por fin alguien reconoce mis aptitudes.

-Oye oye, detente ¿Crees que yo estoy intentando algo justo ahora? ¡Claro que no!

-Te descubrí ¡Admítelo!

-¡Ah Stan! Si quisiera controlarte ya lo habría hecho de querer. Ni te darías cuenta.- Golpeó con un dedo su nariz.

-Si, claro, como si pudieras.-

Se miraron felices hasta que fue raro.  Entonces cada uno se distrajo con algo.

.

.

.

-Este es mi favorito.- Miraban un recuerdo en el televisor.

-Ja, Carla. Ese día su padre me busco por todo el pueblo.- Alardeó Stan, Bill se encontraba recostado y levitando a unos centímetros.  

-Me encantó cuando pagaste al mesero y la persecución en motoneta.

-Fue una velada espectacular.-

 

Siguieron hablando y para cuando se dio cuenta despertó. Con buen ánimo.    

Stan llegó al puente donde se cruzó con Ford, este seguía molesto y desconcertado al encontrar que Stan no.   

………...

Probablemente era su imaginación, pero Ford comenzaba a sospechar que las cosas no estaban del todo bien.

 

-Jejeje….JA!.......JAJAJAJA….ZZZZZ-

 

Ford miraba a Stan mientras dormía, este paraba de roncar para reír estruendosamente y luego tranquilizarse. ¿Cómo se podía estar tan divertido en sueños?

 

Era imposible, había borrado la existencia de Bill. Pero si Stan pudo recuperar sus memorias….Era una posibilidad que tenía presente. Bill no se había ido, no del todo. No podía saber qué ocurría en la cabeza de Stan.

 

-Eres genial triángulo.

-No tu eres genial Stan. Mira revisa estos.- Con un tronar de dedos aparecieron varios pósters en las paredes de la cabaña.

 

-¿Qué es esto?

-Sólo una selección de tus imágenes secretas.-

 

Sí, de revistas para caballeros. Y Stan compiló una buena cantidad durante años. Se sintió avergonzado, pero con Bill no había porque. Al ente le daba gracia sin juzgarlo. Y no había opción, eran dos seres habitando el mismo cerebro, ninguno tenía intimidad.

 

-Esto…

-Bueno.- Bill se río.- Ya no haz hecho “esa” cosa que hacías antes de darte cuenta que aquí estoy.- Eso era cierto, había cosas que estimulaban su imaginación, pero con Bill aquí ya casi no había recurrido a esta clase de entretenimiento. Stan contempló los pósters como si analizará una pintura de museo.

 

-Excelente, ese centro límbico está trabajando.- Bill se frotó las manos.-  La atmósfera se siente menos tensa.- También miró una de las imágenes.- Mujeres humanas con curvas. No lo entiendo pero parece tener efecto en ti.- Stan estaba distraído con una.-¿Qué tal una pirámide?- Stan miró a Bill flotar.- Siento como si me fuera derretir sobre tus pensamientos.- Stanly se estremeció.   

-¡Wow! ¡Oh vaya yo no… Hace calor aquí, creo que debo despertar y tomar una ducha fría.- Cuando despertó se secó el sudor de la frente y agitó la mano para darse aire.  

.

.

.

Sin duda algo ocurría. Estaban sentados ante una pequeña mesa para comer.  Stan tenía la cabeza en las nubes y para Ford era evidente que algo lo tenía preocupado.

 

-Stanly, Staly ¡Stanly!

-¿Qué? ¡Oh sí! Duendes espaciales, increíble…¡Oh mira la hora! ¡Es tan tarde! Iré a dormir, despiértame al cambio de turno. ¡Buenas noches!- Stan dio un gran bocado y caminó rumbo a la cabina.

-¡Stan oye!- Este se detuvo.- Stan, si algo ocurriera, algo malo, me lo dirías cierto.

-Jajaja ¿Qué hablas? ¿Te preocupa que lo que pasó con los pescadores? Olvídalo, no irán tras nosotros.

-No me refiero a eso. Solo contesta la pregunta.

-Si Ford, si algo malo pasará te lo diría. Ahora iré a descansar.-

 

Se marchó dejando solo y confundido a su hermano.

 

-Creo que Ford comienza a sospechar.- Bill no dijo nada, siguió levitando. Stan lo miró, esperaba que dijera algo. Bill lo hizo contestando a sus preguntas.

-Puedes entregarme por lo que le hice a los niños, a todo Gravity Falls, a Ford y a ti Stan pero si lo haces, tú también podrías estar en peligro.

-Ford encontraría la forma de ponerme a salvo.

-Sí, lo sé.- Bill se abrazó así mismo, desvió la mirada.-Creí...Al principio pensé que, que desaparecer de una buena vez sería mejor para mi que estar atrapado en el cerebro atrofiado de un viejo. Pero, desde que nos hicimos amigos, siento que lo estoy superando, me resigné si, pero, a través de ti encontré un consuelo y, creo que realmente me agradas…. Y eso me irrita tanto, porque no entendía...pero luego conociéndote, conociendo tu vida es que me di cuenta de que eres una persona increíble. Estuviste en prisión tres veces, te prohibieron la entrada a medio país, suplantaste a tu hermano desaparecido, fingiste tu propia muerte ¡Hasta le enseñaste a un oso a conducir! ¡Esas cosas me encantan! Tu vida es un desastre Stanly Pines y eso es muy atractivo para una entidad ancestral del caos como yo. Y yo...yo….¡Aghh! ¡Ni siquiera puedo hablar!.- Bill comenzó a moverse muy rápido de un lado a otro, tocaba la punta de su cuerpo como si necesitara frotarse la cabeza.-Lo que quiero decir es que, si no me entregas a Ford, tu y yo podríamos, podríamos escapar de él y continuar sembrando el caos y destrucción por el universo…

-¿Universo?

-Por la Tierra. Juntos.-

Stan estaba abrumado, en respuesta al nerviosismo comenzó a reír. Bill frunció el ceño, estaba siendo sincero y no era para que se burlara de él.

-¡Buena esa! Esta vez sí que estuve por caer…

-Eres un estúpido.-

 

Bill se marchó, y los siguientes días y noches, aun en sueños no lo volvió a ver.

Pero habitaban el mismo cerebro, no podían separarse.

Stan lo encontró en el bosque, el bosque de Gravity Falls, cerca del lago. El primero en hablar fue el triángulo.

 

-¿Qué es el amor para un ser supremo? ¿Qué es el amor ante la fama, el poder, la fortuna?- Stan desvió la mirada, la decepción se asomó en el único ojo de Bill.-Ni siquiera Ford las quiso y ahora que no puedo darlas ¿Qué opciones tengo?.- El hombre se sentó a su lado.

-¿Qué más tienes? Sorpréndeme.- Bill tembló conteniendo su frustración.

-¡¡¿Qué?!! ¡¿Qué cosa?! ¡No estás escuchándo! ¡No tengo nada!- Lo miró a punto de explotar. La sonrisa divertida de Stan le indicó que estaba olvidando algo. -¡Bien! Tal vez, un humano anciano y blando como tú podría... enseñarme el valor de algo que no poseo.- La mirada apenada en ese único ojo. Bill no era el mismo que conoció hacía dos años en Gravity Falls.

-Es un trato triángulo.-

.

.

.

Vivían en el mismo cerebro. Y recientemente, compartían el mismo corazón.

-Tenemos que decidir pronto.- No había opción, si aún no habían sido descubiertos por Ford era por mera suerte. ¿Y por qué no contarle? Porque no lo aceptaría, Bill era ya un enemigo jurado, y por más que Stan quisiera entrar en razón con él, no escucharía. Y aunque las cosas se habían calmado, ya era difícil ocultarlo, la existencia y relación entre ambos.-Amas a Ford.

-Si.- Stan inspiró profundo.- Si nos vamos ahora sospechara más, nos iremos en el próximo puerto.

-Stan ❤ ¿Hablas enserio?

-Claro. Somos gemelos pero no…

-¡Stan!-Bill brincó y abrazó su cabeza.- Haremos este planeta nuestro. Seremos como Romero y Julieta huyendo prófugos de la justicia.

-Romeo.- Stan se rió de las ocurrencias de Bill.

-Stan-Al oído- Déjame estimular esa imaginación tuya.

-¡Espera triángulo! Aún no se me pasa el susto de la última vez.

-Mmphh Te prometo cosas anticuadas esta vez.

-¿Nada de monstruos?

-Nada de monstruos❤-

………………………

 

Epílogo

 

-Stan. ¡Stanly!-

Ford seguía llamando pero no lo encontraba por ningún lado en el barco. ¿Y si había caído al mar? Se asomó por la barandilla. Había tanta niebla ni siquiera podía ver el agua. Si había caído. Estaba solo. Miró en todas direcciones asustado.

-¡STAN!-

Entonces ese espantoso sonido, producto de la más terrible pesadilla.

-JAJAJAJA MUAJAJAJAJAJA ¡¿Pero qué tenemos aquí?!-

Venía de todos lados.

Entonces una luz muy brillante bajo del cielo y tomó la forma de aquel demonio, era enorme, del tamaño de la nave. Se recostó sobre ella apoyando todo su peso y doblando las partes metálicas.

El enorme ojo se abrió posando la pupila en Ford.

-¡Tú!

-¡Seis dedos, viejo amigo!

-¡Bill! ¡Lo sabía, sabía que seguías con vida!

-¡Guau! ¡Cuanta rabia Seis dedos! ¿Qué pasa contigo? ¿Dónde está tu hospitalidad?

-¡¿Qué hiciste con Stan?!

-¿Stan? ¡Ah!, duerme pacíficamente- Bill movió su mano para abanicarse- ¡Ffuu! ¡Sí que se agotó mentalmente!, hizo mucho calor en el Sur-Se rió tontamente.- Nos gusta jugar al policía y al ladrón. Extendió su brazo para mostrarle el grillete de las esposas aún sujeto a su muñeca, el otro extremo libre. Ford se llevó las manos a la cabeza intentando comprender.- Sí, ya sé, ya sé lo que estás pensando. ¿Cómo puede un ser interdimensional como yo disfrutar el sexo tántrico? ¡Pues yo tampoco lo sabía! pero debo decirte que es excitante y muy estimulante. Tu hermano no se queda atrás. Tiene menos dedos que tu pero sabe que hacer con ellos.- Ford retrocedió encogiéndose, casi con náuseas. Sospechaba que Bill estaba oculto en alguna parte de la mente de Stan pero nunca imaginó...- Oye, oye, parece que te cayó de peso la noticia, ¿Por qué no te sientas?- Apareció una silla sobre la que Ford se dejó caer, estaba abrumado y muy confundido.- Me ofendes Stanford. Pensé que alguien con tu intelecto podría entenderlo. ¡Ah! ¡Sí! Pero olvide que de entre los dos, el genio siempre fue Stan.

-¿Por qué...?- Apenas logró articular las palabras, Ford estaba muy asustado y preocupado por Stan, estaba en peligro y todo porque no supo hacer ni actuar antes.

-Oh sí, para empezar, eso de cambiarse de ropa y fingir ser el otro fue idea de Stan, ¡Brillante! A ti nunca se te hubiera ocurrido. Si, me derrotó ¡Un golpe realmente doloroso en el ojo! Pero eso es cosa del pasado, sin resentimientos, ahora somos mejores amigos. ¡Hasta me perdonó por casi desollar a los niños! ¡Lo que me recuerda! Se acerca el cumpleaños de ambos. Pensamos en un microscopio para Dipper y diez litros de pegamento líquido para Mabel, dejemos que su creatividad decida en qué utilizarlo. Sin duda ella tiene potencial como adorable ángel del caos y Dipper, bueno, pues se parece a ti. Tendrá éxito, supongo. ¡Mabel….-Cada palabra era una aberración, parecía, como si fueran una pareja. Hablar de los chicos…

-¡Déjalo!

-....la llevaremos por su permiso de..¿Qué dijiste?

-¡Qué lo dejes! ¡Deja en paz a mi hermano!- Bill lo miró de nuevo, al principio muy enojado, pero luego, tras unos segundos su gesto se relajó a uno muy entretenido, casi riéndose. Burlándose de él pero sin hacer un solo ruido.-¡No lo repetiré Bill! ¡Deja la mente de Stan en paz!  

-No tienes que estar celoso Ford. No es mi culpa que Stan se haya enamorado de mí.- Amor. Un monstruo como Bill jamás usaría esa palabra. Al usarla Ford entendió la gravedad del asunto.

-¡Mi hermano nunca se dejaría influenciar por ti! ¡Mucho menos enamorarse! ¡Deja de mentir!

-¡Ah pobre, pobre, inmaduro e ignorante Stanford!

-¡Nunca confiaría en ti!

-¿Ah no?-El ojo de Bill se volvió completamente negro.-  ¿Y por qué estás tan seguro Seis dedos? Cuándo tu lo hiciste, siendo tan listo.- Ford pasó saliva, tenía razón, él se dejó engañar.

-¡Stanly no es como yo! ¡El no..

-En eso tienes razón, es un hueso duro de roer.-Bill inspiró profundo.- ¡Me agrada! ¿Puedes creerlo? Ahora entiendo cuando tu especie dice “Encontré a mi alma gemela”¡Tu gemelo es mi alma gemela! ¿Oyes lo disparatado que suena? JAJAJAJAJA...- Su maldita risa retumbó por todos lados.

-¿Pero que desfachatez estás hablando?- Ford tuvo una imagen mental de Stan y Bill juntos. Se negaba a creerlo. Quiso huir pero por más que corría y corría no podía alejarse de la figura de Bill. Tras unos desesperantes segundos este cesó de reír.

-¡Oye! ¿A dónde vas?- Apareció pequeño frente a Ford. Este se detuvo en seco- Aún no he dicho lo que quería decirte. Stanford, en unos días tocaremos puerto, entonces Stan y yo huiremos de ti.

-¿…

-¡Ah! No le digas que te dije, de hecho preferiría que pelearas un poco con él para que parezca que no lo sabías. Stan se ha quemado la cabeza ideando una excusa que parezca convincente, ¡Como si te importara!, y no quiero que su trabajo se vaya a la basura solo porque arruine la sorpresa.- Ford no daba crédito a lo que estaba ocurriendo, daba por hecho que Stan era un rehén y que Bill decía estas cosas para realmente horrorizarlo.

-¿Y por qué me lo dices?

-¡Nada se te escapa!- Empezó a aplaudir.- Falta muy poco para llegar al puerto y no volvernos a ver, realmente no tienes tiempo para idear un plan en mi contra lo que hace este momento perfecto para hacerte saber de mi existencia y mi relación con Stan. Estoy atrapado, de hecho invado ahora mismo este sueño tuyo gracias a tu “conexión, sexto sentido de gemelos” o cómo se llame que tienes con Stanly.- Bill miró sus uñas.- No tengo muchas formas de vengarme Ford, pero si te afecta aunque sea un poco que te robé a Stan, ¡Entonces quiero que lo sepas! JAJAJAJA. ¡Y oh vaya que nos divertimos! JAJAJA ¡Y nos divertiremos!

-¡Estás demente si crees que no te detendré!

-Confió en que no harás nada Ford. Stan a veces es sonámbulo, y con ayuda de una voz en su cabeza, podría algún día, no sé, caminar por la proa y dejarse caer en el mar.

-¡Estarías acabando contigo! ¡Si algo le pasa a Stan…

-¡No lo sabemos! Y si, es un riesgo que estoy dispuesto a correr por mi, nuestra felicidad. La conciencia de Stan y la mía se están volviendo una, pronto nuestras limitaciones físicas serán cosa del pasado. Tal vez el universo y los mundos más allá de este estén fuera de mi alcance; ¡Pero este planeta entero será nuestro! Y Stan por fin se librará de tu sombra y menosprecio. ¡Hasta la vista Seis dedos! ¡Y no lo olvides! Finge sorpresa. JAJA JAJAJAJAJA-   



-¡¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHH!!!!!- Ford se sentó, miró en todas direcciones, se encontraba en la cama, se sacó de encima la sábana, Stan estaba en el asiento frente a él.

-¡OHH! ¡¿Qué te ocurre? ¿Por qué gritas?- Stan brincó en su lugar.-¿Estás loco? ¡Casi me infarto!

-¡Stan!- Ford se paró y lo tomó por los hombros para zarandearlo “¿Es cierto? ¿Bill no ha muerto? Y todo este tiempo tu….” --Caer por la borda-- Pero se abstuvo.

-Oye amigo me estás asustando.

-¿Qué vas a obsequiar a Mabel en su cumpleaños?

-¿Qué?

-¡Solo contesta la pregunta!

-Eh…

-¡Contesta!

-Dinero, muñecas, un tesoro pirata, un novio, no sé...lo que quieras…-

Ford se quedó quieto mientras se recuperaba. Ninguna era la respuesta esperada.  

-JAJA JAJAJA ¿Fue un sueño? solo un sueño….- Ford regresó a la cama y se dejó caer muy aliviado.

-No sé qué acaba de ocurrir.- Stan muy sútilmente escondió los papeles que estaba trabajando, falsificaba billetes. Ford fingió no darse cuenta, desvió la mirada para darle tiempo de ocultarlos.

-Solo un sueño horrible.- Ford respiró profundo para recuperarse. Luego miró a Stan quien ahora inspeccionaba una revista al revés. Luego tuvo un presentimiento, miedo porque. ¿Para qué necesitaba dinero?

- Oye Stan, si algo malo ocurriera, ¿Tú me lo dirías cierto?

-¿De qué estás hablando?

-Solo contesta la pregunta.

-Vamos, claro que te diría, necesitaría ayuda para resolverlo.

-Jaja, sí. Igual yo.- Ford se acomodó y le dio la espalda para dejar que Stan siguiera en lo que hacía. Pero no se durmió.

 

JAJAJAJAJAJAJA

 

¿EL FIN?

Notas finales:

¡¡Gracias por leer y llegar hasta el final ??…!!

¡Si, esta finalizado! El siguiente capítulo es solo el mini-extra que por lo regular acostumbro. 

Si te gustó mi Fic, o te gusta como escribo, revisa mis otros trabajos. Solo tienes que dar clic allá arriba en mi nombre. Eso si, preparate para un disparate. Saludos.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).