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sweet creature por tobio

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Notas del fanfic:

no hay shipp aquí (o quizá el himukaga/kagahimu) pero son muy bebos, creo yo. 

Notas del capitulo:

AYYY, leer las aventuras de himuro y kagami en américa me han cambiado, soy una mujer nueva (??) 

―Oye, Tatsuya ―murmura Kagami.

 

Ambos están en el kiosco de un parque, intentando dormir. Ya es de noche, y tras un día lleno de aventuras, y querer recuperar unos balones de baloncesto de un gimnasio abandonado, tuvieron que hacer una parada para guardar fuerzas, con Alex la Golden Retriever acostada a los pies de Himuro, y Kagami dándole la espalda a ambos.

 

Kagami les tiene mucho miedo a los perros, y a pesar de que Himuro sabe eso, de igual manera lo obligó a que tocara la espalda de esa horrible monstruo.

 

―Dime. ―La voz de Himuro suena suave y comprensiva, porque quiere resolver el pequeño problema que acaba de tener con Taiga.

 

―Tú y yo vamos a estar juntos para siempre, ¿Verdad? ―Tatsuya mira a su pequeño hermanito con duda, Kagami siempre ha sido muy malo para disimular o fingir. La voz acongojada y melancólica con la que habla, preocupa a Himuro.

 

― ¿Qué sucede bro? ―cuestiona, con una expresión seria. Kagami se remueve un poco en su lugar y luego se voltea, mirando con desesperación al pelinegro.

 

―Prométeme que siempre estaremos juntos ―habla suplicante y Himuro traga en seco, sintiendo cómo el perro se remueve entre sus pies. Los ojos de Taiga ahora están llorosos y su nariz húmeda.

 

―Taiga ―habla en voz alta y muy firme, Kagami sorbe su nariz―, Tú eres mi hermano. Nada ni nadie podrá separarnos nunca, ¿Entiendes? ―Observa al menor de ocho años con seriedad, y luego suaviza su expresión, dedicándole una sonrisa amable―, Ven aquí. ―De un movimiento un poco brusco, Himuro mueve su pie y el cachorro se aleja para recostarse a una distancia prudente.

 

Kagami se acerca, acurrucándose en medio de las piernas de Himuro y apoyando su espalda contra el pecho del mayor. Tatsuya siempre lo protege, no importa que pase, él siempre sabe qué hacer, que decir, cómo actuar y Kagami lo admira mucho, demasiado, él desea algún día llegar a ser cómo Himuro.

 

―Ahora, ¿Me vas a decir por qué te pusiste tan alterado? ―cuestiona el mayor, apoyando su espalda contra el muro del kiosco y sintiendo cómo Kagami se apoya un poco más cerca, ahora están un poco más calientitos.

 

Kagami duda antes de hablar.

 

―Tuve un sueño recientemente ―murmura cabizbajo―, Éramos grandes, tú y yo, muy altos y seguíamos siendo tan hermanos cómo siempre. Jugábamos baloncesto, comíamos hamburguesas y yo te daba los pepinillos, practicábamos con Alex, celebrábamos mi cumpleaños y el de Alex al mismo tiempo, éramos muy felices ―dice con ilusión, y Himuro tararea.

 

―Eso suena realmente bien, ¿Qué pasó luego? ―pregunta curioso, escuchando el ruido del viento mover los árboles, y sintiendo la respiración de Taiga un poco acelerada.

 

―Tú…, tú te ponías raro ―habla inseguro.

 

― ¿Raro de qué forma?

 

―No sé, estabas enojado conmigo y me gritabas, tenía mucho miedo porque no entendía porque estabas tan molesto conmigo ―explica en un susurro, y Tatsuya lo abraza cálidamente.

 

― ¿Y pudiste descubrir porqué estaba enojado contigo? ―habla tranquilo, pasando su mano fría por los cálidos brazos de su hermano.

 

―Tú ya no querías ser mi hermano ―dice triste―, Decías que no podías ser mi hermano mayor, si yo era mejor que tú, Tatsuya, estabas tan enojado conmigo. ―Sus ojos se ponen un poco llorosos de nuevo, pero rápidamente los limpia con la mano―, Y decías algo sobre un juego final, que decidiría si seguíamos siendo hermanos, u olvidáramos todo lo que había pasado.

 

―Taiga…

 

―Yo no quiero que eso pase, sí tú vas a alejarte de mí por el baloncesto, ¡Entonces ya no quiero jugarlo nunca más! ―exclama con una expresión dolida―, Tú fuiste el que me enseñó a jugarlo y amarlo, y si él mismo juego que nos hizo hermanos nos va a separar, prefiero aprender otra cosa, cómo surf ―concluye, con un adorable puchero.

 

Himuro se queda pensativo un momento, ¿Él realmente pondría a Taiga en esa situación? ¿Realmente lo haría escoger entre el baloncesto o seguir siendo su hermano?

 

―Solo fue un sueño Taiga ―murmura―, Ya sabes que amo jugar contigo, y si tú te vuelves mejor que yo, no hay nada que podamos hacer. ¿Bien?

 

―Pero… ¿Realmente no te importa? En mi sueño tú realmente-

 

―Eso solo fue un sueño, idiota. ―Lo aprieta ligeramente, para darle a entender su tono de broma―, Siempre estaré contigo, eres mi hermanito. ―Himuro acomoda su cabeza en el hombro de Kagami, y éste se acomoda de mejor manera.

 

―De acuerdo. ―Es lo último que murmura Kagami, hasta que ambos se quedan dormidos.

 

La mañana siguiente comienza, con el estruendoso grito de Kagami. En el momento en que despierta, ve a Alex recostado en sus pies desde quien sabe cuándo. El día a penas y comienza, y a ellos les queda mucho por recorrer.

 

 

Notas finales:

necesito a un himuro en mi vida, hueón. 


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