La instalación a la que habían llegado era más de lo que Naruto se pudo imaginar, era un cuartel, tenía un muro de acero sólido recubierta con concreto de tres metros y eso era sola la primera puerta. El auto bus se había aparcado tras pasar la puerta de metal para que varios de los que patrullaban inspeccionaran meticulosamente que no hubiera ningún caminante dentro o fuera que los pusieran en peligro, cuando todo estuvo asegurado, se pusieron nuevamente en marcha pasando una reja mas.
Ya en el interior y después de haber descendido del vehículo, el Rubio observo el verdadero tamaño en donde se encontraban, podía apostar que tenían más capacidad que dos estadios de fútbol juntos.
Tomó su mochila, observando como varias personas se acercaban a ellos para comprobar que todo estuvieran bien, mientras él y fue equipo se mantenían a un costado negando la asistencia médica que les brindaban, lo mejor era que revisaran a las personas que traían consigo aunque más de una estaba desconfiada, Sabía que confiaban en su equipo más no en los desconocidos.
-Bienvenidos – Hablo una Rubia de cabellera larga en una coleta mientras se acercaba – mi nombre es Ino, soy quien les ayudará en su estadía – sonrió -aquí pueden estar cómodos, la seguridad es buena y pueden estar tranquilos.
-Ya lo veo – acotó Naruto.
-Pueden acompañarme para que se cambien, hay duchas y si tenemos suerte podremos alcanzar el agua caliente – todos sonrieron al escuchar eso, ellos sobre todo llevaban demasiado tiempo fuera de alguna zona residencial en la que tuvieran ese tipo de privilegios.
-Yo iré primero con la bebé – menciono el Rubio al ver que ya todos se iban – quiero asegurarme de que van a estar bien.
-Lo estarán – afirmo la rubia. – ya Sasuke nos informa de la situación, estarán en buenas manos.
-Pero me quiero asegurarme yo mismo ¿Hay algún problema? - pregunto un poco molesto, estaban equivocados si pretendían dejarlos sin ver si el lugar era seguro, la humanidad seguía siendo atroz y eso Naruto lo sabía muy bien.
-Claro que no – respondió Ino en el mismo tono.
Sin mencionar alguna palabra más le dio indicaciones a los muchachos de que estuvieran atentos y se aseguraran de que todos estuvieran en buenas manos eh igual forma disfrutarán, mientras el seguía las Camillas en la que de encontraba la mamá y el bebé.
Al ingresar por un pasillo diferente al que se habían ido sus compañeros pudo divisar que era una zona exclusiva para la medicina, todo estaba limpio, iluminado y tenía su propio aire controlado. Naruto tuvo la sensación de estar nuevamente en un hospital y sin que lo pudiera evitar, leves recuerdos llegaron a su mente. Él en una camilla en cuarentena, su padre a través del cristal y ese inconfundible olor a desinfectante… se sentía tan real.
Deslizó su mano hasta tocar el bolsillo de su pantalón tomando la navaja en mano sin sacarla, con muy poca delicadeza y a través del Interior presiono la punta contra su pierna, tratando de enviar estimulación a su cerebro para que volviera a la realidad.
El dolor siempre funcionaba para distraerlo, lo supo desde muy pequeño y aprendió a controlar los puntos más sensibles del cuerpo humano gracias a la Medicina que su padre le había enseñado, y pudo practicar cuando estaba en la guerra, cuando aún no se habían esparcido la epidemia.
Siendo sincero no sabía que era mejor, su vida siempre había sido un infierno, y ahora le costaba mirar las diferencias; siempre estuvieron huyendo, salvando gente bajo a presión y poniendo su vida en riesgo… lo mismo de siempre solo que por causas diferentes.
Sacudió un poco su cabeza dispersando sus ideas, revisaría el lugar, se aseguraría que fuera seguro y después se marcharían, tenía su propia misión y tenía que cumplirla.
-¿Estas bien? - le preguntó una chica de pelo Rosa, alta, delgada buen porte – Parecer un poco pálido.
-lo estoy - afirmo sin dejar de verla.
-Eso espero – sonrió no muy convencida – mucho gusto soy Sakura, me dijeron que sabes de Medicina ¿Es cierto?
-sí
-Es perfecto – respiro – me dirás loca, pero te necesito ¿En que área te especializas?
-En todas – respondió sincero y prosiguió antes de que la chica preguntará – era Médico de guerra, es esencial saber sobre todo tipo de Medicina, en el campo abierto no hay tiempo de esperar a un especialista.
No refutó más la chica, habían pocas personas de Medicina y los superaban en número. Quería la mayor ayuda que pudieran.
Naruto la siguió por de le indicaba, ayudaría mientras estuvieran. Dejaría que los chicos descansarán lo suficiente y en un par de días se marcharían.
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*9 años antes de la epidemia.*
Rusia.
-Segundo día desde la inyección del suero “DCR” en el sujeto “B”, su tejido subcutáneo no presenta anomalías, sin embargo la capa celular se desintegró completamente y avanza más rápido de lo esperado. El cerebro por su parte, pierde las funciones racionales de un ser humano quedando solo la parte de la supervivencia – término de dar su reporte sin mucho Que agregar en la pequeña grabadora dando por finalizada su bitácora.
Minato es científico desde su adolescencia, especializado en el desarrollo de sueros contra epidemias Mundiales, actualmente residía en Rusia, trabajando en conjunto con Japón, al desarrollo de la cura del “DCR”
El suero ya había sido utilizado, debido a sus resultado en humanos sanos se necesitaba una cura para contrarrestar los efectos que daba.
Volteo hacia la camilla de metal donde se encontraba el cuerpo de lo que fue un humano, servía como prueba de laboratorio y confirmaba lo que siempre creyó. La vida después de la muerte no era posible… arrastró el cuerpo hasta los congeladores, mañana seguirá con ello y esperaba que nunca funcionará.
Dejó su bata en el Perchero, miro última vez asegurándose de que todo quedará bien y salió del laboratorio, camino por los blancos pasillos hasta llegar a la zona de cuarentena pero antes de pudiera atravesar la puerta fue detenido. El coronel Hiraya lo miraba de pies a cabeza, con desprecio y el sentimiento era mutuo.
-¿Qué lo trae por aquí señor Minato? – dijo plantándose en frente.
-No creo que eso sea de su incumbencia – respondió molesto tratando de esquivarlo.
-Oh creme lo es, me incumbe todo lo que quiere hacer – lo tomó del hombro hasta hacerlo girar – lo mejor es alejarnos y charlar un poco, no querrá que sufra por una desobediencia suya. – sonrió satisfecho el de cabello blanca al ver como Minato se tensaba, lo tenía controlado y así estaría hasta que pudiera lograr su cometido. – Cuénteme, como va el avance.
- si quiere saber, puede leer los reporte, los tiene al día después de todo – soltó el agarre de su hombro con brusquedad.
-Pero no hay mucho avance, por lo tanto no me sirve. – lo miro serio, necesitaba el desarrollo del suero terminado.
-Es lo único que hay, la ciencia requiere paciencia – respondió con molestia, Hiraya era una persona sin escrúpulos y lo que menos quería era colaborar con sus planes.
-No se pase de listo Minato – acomodo su uniforme – yo se que puede recreará la misma formula, después de todo ya lo hizo una vez, el suero DCT es perfecto, y la cura que usted ya había desarrollado es aún mejor.
-No creo que sepa de lo que esta hablando, no juegue a se Dios, es imposible que controle algo que desconoce.
-Yo no lo juegos, es algo que sucederá – sonrió con prepotencia – su hijo es la muestra de ello, usted no dudó en experimentar con el, yo por que me voy a detener con unos simples humanos. – dijo con indiferencia para después marcharse dejando aún molesto Minato.
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Actualidad
Osaka – Japón
Sasuke salió de su habitación, ya limpio y con nueva ropa. Había dato su información a la Jefa detallando cada hecho, visitó a Kiba para verificar que estuviera bien y ahora se encontraba en dirección a los dormitorios, iría a verificar el nuevo grupo, más específicamente los soldados habían pasado ya tres días desde que llegaron y no había cruzado mucha palabra con ellos, según lo que había escuchado se estaban alistado para marcharse.
Le llamaban la atención, había reconocido esos uniformes donde sea que fuera, en su tiempo había estudiado las Ciencias Políticas de su país y sabía que ellos pertenecieron a las fuerzas armadas de Japón que antes de la epidemia luchaban contra Rusia por lo que sabia política.
Le pareció extraño que un grupo militar se encontraba en aquellas afuera de alguna ciudad, puede ser por que huyeron, pero tenían demasiado armamento militar para decir que solo pasaba pero también estaba la posibilidad que tuvieran el mismo propósito de ellos, salvar a la gente. Después de todo ya no había guerra que luchar y antes de todo ellos ya tenían que servir al país para protegerlo.
Disperso sus pensamiento, después indagaría más. Toca la puerta tres veces hasta que escucho la aceptación e ingreso, en la habitación se encontraban la mayoría de ellos, solo faltaba el Rubio que según había visto era el líder del Grupo.
-Buenas – saludo percatándose de el equipamiento que tenían listo – llegó justo a tiempo, quisiera hablar con ustedes.
-¿Sucede algo? - pregunto Kakashi
-Nada de que preocuparse – aclaro – solo quería discutir su partida.
-No creo que haya algo que discutir – menciono Gaara como si estuviera molesto - simplemente queremos marcharnos
Sasuke ignora su tono de voz tratando de no hacer un mal gesto, ahora recordaba por que odia tratar con las personas – no se los estoy impidiendo simplemente quiero expresar unos puntos.
-Es de mala educación no escuchar a quien nos ah ayudado – todos en el cuarto se sobresaltaron al escuchar una vos de tras de ellos, Sasuke se volteo rápidamente percatándose de un Rubio lleno de sangre.
-Naruto ¿Qué te sucedió? - se acero rápidamente el peligro plateado ignorando completamente a Sasuke
-Nada de que preocuparse, estaba en la enfermería ayudando – explicó tranquilo ingresando al cuarto – si me permites me daré una ducha y vamos almorzar, después de todo ya es hora.
Sasuke asintió conforme para después salir de la habitación, paso por el expediente en el cual esperaba que se convencieron de quedarse, y muy a su pesar los necesitaban.
El refugio que tenían no era especializados, ni siquiera fue adaptado por los militares para personas de afuera, cuando Sasuke llegó no eran más de 20, su jefa quien trabajaba en esa instalación fue la primera en esta allí, la aseguro y protegió lo más que pudo para refugiar a las personas. Con el paso del tiempo, fueron adaptando la instalación, para más personas, labraron campos donde antes se entraba, todo lo que era ahora lo fueron construyendo, aun que daba mucho por hacer pero lo lograrían.
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-¿Qué era lo que nos querías decir?- Shikamaru fue el primero en hablar ya que todos estaban en su actitud molesta de ignorar a Sasuke.
-Antes de eso, quisiera saber el motivo por el que se van – pregunto.
-Tenemos asunto propios que tratar – respondió Shika restándole importancia al asunto.
-Esos asuntos estarían cerca de Kyoto
-por que estas tan interesado en nosotros, se claro en lo que quieres – esta vez fue Gaara quien habló y Sasuke había dado en el clavo, iban a la misma ciudad.
-Lo eh sido desde el inicio, queremos su ayuda, que se queden y poder reforzarnos – habló, no estaba dando rodeos, necesitaba convencerlo, su hermanita era mejor en esto y lo maldijo mentalmente por ni estar ahí presente – y al ver que de Van quisiéramos que nos ayudarán y así nosotros ayudarlos a ustedes.
-¿En que necesitan ayuda? – se metió por fin el rubio
-Nosotros nos dedicamos al rescate de personas, nuestro siguiente objetivo esta en Kyoto – explicó el Azabache mostrando una carpeta – según sabemos, fue una de las primeras ciudades que cayó y en su tiempo una de las más pobladas – explicó – tenemos armas gracias a la base en la que estamos pero muy pocas personas capacitadas para ir a ese tipo de misiones. Por eso necesitamos su ayuda.
-¿Por qué Kyoto? ¿Por qué no continuar en Osaka? aun falta muchas zonas por rescatar- menciono el Rubio con intriga – aún no hemos decidido nada, lo más seguro es que sigamos nosotros solo pero si nos quieres convencer tenemos que saber todo.
Sasuke re soplo molesto, ese mocoso era bueno y de solo saber eso le daban ganas de borrar le esa sonrisa del rostro – ya habíamos enviado a un grupo, pequeño de tres personas solo para exploración, el último reporte que nos enviaron fue el de la página dos – señalo – encontraron más personas de las que creyeron, por lo que se signaron a despejar un edificio para ayudarlas, en el proceso, no sabemos cómo algo alteró a los caminantes y los rodearon, no hay zona o lugar por el que puedan escapar y solo les queda un día más de comida y agua, o al menos es lo que pensamos.
-Entiendo, te parece si nos dejas a solas y lo discutimos un rato – pidió Naruto – no creo que salgamos ya así que, más tarde iré darte la respuesta.
Sasuke asintió levantándose de su lugar para marcharse y dejarlos solo. Naruto miro la carpeta si decir nada, sus amigos conocían esa mirada y muchos se estaban lamentando.
-¿No lo estarás pensando enserio? - inquirió Kakashi – Al menos dinos por que, sabes que ni podemos dejar que nos descubran, si saben que tu…
-Lo se
- Además, perderemos las condenas de tu padre y será difícil encontrarlo – acotó Neji
-Lo se
-No sólo. Digas lo se, es mejor que digas la verdadera razón – menciono una vez más al castaño al ver que no decía nada.
- Iremos – deslizó una fotografía señalando un punto en específico – hay una persona que nos interesa y es el trato que hicimos todos.
Todos miraron el punto que señalo su amigo quedando sorprendidos en el proceso, y sobre todo Gaara, estaban de broma, ese no podía ser… significaba que seguís con vida.
-Iremos por tu esposo Gaara
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