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Unforgettable stories por paunina12

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Notas del fanfic:

Todos los personajes son de Yana Toboso y he adaptado la historia original (Rome y Cinderella) para hacerla SebaCiel

Notas del capitulo:

Espero que lo disfruten :) pasen a leer.

Por favor no permitas que este amor se convierta en una tragedia como el romance de romeo y Julieta, lo único que te pido es  que me saques de aquí y me lleves lejos, en donde pueda estar solamente contigo y despertar junto a ti todas las mañanas sin pensar en el que dirán, ese es mi único deseo.

Al parecer la droga ha hecho efecto y mis dos padres ya están dormidos antes de que les pudiera decir un mentiroso “buenas noches”, me apena tener que haber puesto ese líquido peligroso en sus copas de vino durante la cena, pero si eso es lo que tengo que hacer para estar contigo no me arrepiento de nada, aunque mi sucia conciencia siga recordándomelo para hacerme sentir culpable por lo que va a pasar cuando el sol desaparezca. Aun así les deseo muy buenas noches y espero que tengan muy dulces sueños, pues ya es hora de que los adultos se duerman.

Llevo hasta mis labios un caramelo de la compañía de mis padres, los mejores dulces de todo Londres, los dulces Phantomhive, y no puedo evitar sentir que estoy siendo observado por ellos, me temo que su ojo sobreprotector se encuentra sobre mí todavía y no sé cómo distraer mi mente de aquel pensamiento, así que rápidamente lo quito de mi boca y lo lanzo al basurero. Aun sintiendo el sabor de la inocencia en mi boca no puedo evitar preguntarme que tan lejos llegaremos hoy.

Tengo miedo de que me muerdas y me hagas daño, dejando sobre mi blanca piel marcas de besos que seguro podrán verse mañana, pues la idea es que ninguno de los dos seamos descubiertos, pero es tanto el amor que te tengo que prefiero arriesgarme a que mañana ocurra una tragedia cuando nos encuentren juntos que dejarte ir sin demostrarte cuanto significas para mí. Por favor no me lastimes y se amable conmigo, pues sabes bien que nunca me ha gustado el sabor amargo de la decepción, puesto que siempre fui un chico ”mimado” que comía los dulces que le daba su madre

No tengo ni la más mínima idea de lo que pasará esta noche y la incertidumbre parece matarme pues no dejo de mirar el reloj pensando que quizás todas las reglas que rompí fueron en vano y que no vendrás a mi como me lo habías prometido, me aterra que no cumplas tu promesa pues llevamos paneando esto durante mucho tiempo y me costó demasiado aceptar la idea de que me había enamorado de alguien tan diferente a mí, sobretodo de un chico bohemio como tú. ¿puedes recordar nuestra promesa? Espero que lo hagas, porque si no es así, mi corazón se romperá y nadie podrá ayudarme a volver a armarlo, si no que quedará permanentemente destruido como si fueran las zapatillas de cristal de cenicienta.

Ya es tarde y falta poco para la media noche, la hora en la que por fin nos encontraremos después de hace mucho tiempo, ya no podía soportar estar lejos de ti, las cartas que nos enviábamos me ayudaban a pasar los días dolorosos en los que me hiciste falta, pero no te culpo por eso ya que si no hubiera sido por mi prometida, que nos descubrió las cosas habrían sido completamente diferentes.

He decidido prepararme para esta noche, he aceptado el regalo que de forma pícara se me fue entregado por Sieglinde Sullivan, aquella chica que se convirtió en mi amiga y en la única que sabía nuestro secreto y no se lo había contado a nadie, es más, nos apoyaba y hacía bromas sobre nuestra relación, causando que ambos nos sonrojáramos. “te compré esto, sé que es de mujer, pero se verá muy bello en ti, lo sé, sorpréndelo con esta ropa y te aseguro que no querrá déjate nunca” esas fueron sus palabras exactas, Tomé la caja y la abrí para ver su contenido por primera vez, era un baby doll rosa con encajes y detalles negros, vuelos bastante femeninos y delicados y una gran rosa con forma de moño justo a la mitad del pecho, no podía negar que era realmente lindo “¿me querrá incluso si uso esta ropa?” no pude evitar preguntármelo. Me desvestí frente al espejo y me puse lentamente aquel traje, me sonrojé de inmediato, ya que este solo cubría un poco de mis muslos y mi trasero, me di una vuelta frente al espejo para tener una vista completa de mi cuerpo, era realmente vergonzoso verme a mí mismo de esa forma tan femenina y coqueta a la vez. Lancé una mirada a la caja, que aún no había sido vaciada completamente y vi una peluca con una coleta a ambos lados, en el espejo desapareció mi imagen y en cambio aparecía figura de una chica joven y tímida que esperaba ser amada amablemente por su novio. Dejé de mirarme a espejo por la vergüenza que me causaba y caminé a paso lento hacia mi peinador, de uno de sus cajones saqué un delineador negro y me pinté los ojos con él, también le puse rímel a mis pestañas, que parecieron alargarse al contacto con el líquido negro. La duda me atrapó nuevamente, “si fuese así, si fuese una linda chica ¿me querría tanto como dice amarme? ¿Nuestros padres apoyaría nuestra relación? Seguramente si”. Padre, madre, perdónenme, pero prometo volver a ser un buen chico cuando sea mañana y me desharé de todo esto.

Llegó a mi memoria un recuerdo que atesoraba, el día que te conocí en el baile de la escuela, ese que se hacía a mitad del año para que los estudiantes no perdieran la motivación. Como nunca he sido un fan del estudio, a pesar de tener las mejores calificaciones de la clase, fui invitado al baile, pero no llevé nada más que mi uniforme, nuestros ojos se encontraron en medio de la multitud y el resto pareció desaparecer, recuerdo que estabas bailando con una chica a la que apodaban “Beast” pero cuando nuestros ojos se cruzaron, tu mano, que estaba posada en su cintura se separó de esta inmediatamente, dejando a la chica completamente confundida, y como si fuéramos imanes nos atraíamos fuertemente el uno al otro. En un instante estuvimos frente a frente balbuceaste una frase para saludarme, y yo me sonrojé como un idiota, estoy seguro  de que me veía ridículo, al pasar un rato ocurrió algo increíble, nos tomamos de las manos como si fuese una travesura y nos escabullimos hasta llegar a un gran parque que estaba siendo iluminado simplemente con la luz de la luna. Creo que en ese momento comprendí que el amor a primera vista no era un simple cuento de hadas. Quise que el tiempo se detuviera cuando te tuve junto a mí, cuando nuestros labios se acercaron  lentamente hasta juntarse y sellar un escandaloso secreto con un casto beso, al separarnos ambos estábamos sonrojados. Tu aparente personalidad coqueta y seductora pareció caer cuando preguntaste “estuvo muy mal” yo solo me reí nerviosamente para luego responder “estuvo perfecto”.

Después de ese día nos juntábamos todas las tardes solo para disfrutar la compañía del otro, tomados de las manos o simplemente con mi cabeza reposando en tu pecho mientras tú acariciabas mi cabello suavemente, verte se transformó en mi único deseo. Al pasar el tiempo tuve que confesarte que tenía una prometida a pesar de solo tener 15 años y que esta no era nada más ni nada menos que mi prima, Elizabeth, que a pesar de ser una hermosa y angelical chica no causaba otro sentimiento en mí que no fuera un amor de hermanos, algo muy diferente a lo que me causaste tú.

 Fue verdaderamente lamentablemente cuando fuimos descubiertos besándonos por ella, quien llena de despecho se lo contó a mi padre. Él afortunadamente no le creyó, pero para nuestra mala suerte ella no se detuvo hasta crear la duda en la cabeza de mis padres, quienes me siguieron para ver donde iba cada tarde –yo les había dicho que iba a una actividad en la escuela- y nos encontraron juntos.

La bofetada que recibí de mi padre en ese momento no se comparó con el dolor que sentí cuando te golpeó a ti, mientras pronunciaba tu nombre era sujetado por el brazo por mi madre que lo único que hacía era llorar por que su hijo estaba “enfermo” y que tú me habías contagiado, fue algo realmente tonto ¿no lo crees? en ese momento me pregunté ¿Cómo puede ser el amor una enfermedad? Me avergüenza completamente la actitud de mis padres, quienes hasta te llamaron demonio por haberme “engatusado y seducido, llevándome por el camino del pecado”. Si amarte es un pecado creo que nunca podré ver a Dios, pues estaré pecando toda mi vida, hasta que de mi último suspiro.

Repentinamente siento un suave llamado desde mi ventana, y te veo allí, como si dios hubiera respondido mis plegarias, estás parado cual romeo esperando a Julieta bajo su ventana para recitarle los versos más bellos que existen. Amarro rápidamente las sabanas de mi cama para crear una escalera improvisada que luego lanzo por la ventana, te apegas a ella y la trepas para entrar en mi habitación, que solo por esta noche no tiene la ventana cerrada. Quedas realmente sorprendido por mi apariencia,  te acercas a mí pero yo no puedo evitar retroceder mientras froto mi brazo derecho con mi mano izquierda, todo esto con la cabeza hacia abajo, tratando de ocultar la vergüenza que sentía, tomaste mi mano suavemente y me alejaste de la oscuridad en la que me refugiaba, tu mano se levantó y se dirigió a mi mentón, sujetándome para darme un beso suave y mientras lo hacías con tu mano libre quitabas la peluca de mi cabeza. “te ves mucho mejor así” dijiste mientras te miraba a los ojos y sujetaba tu mano, deslizándola por mi mejilla, “creí que me querrías más si fuese una chica” te dije algo apenado, las lágrimas comenzaba a brotar de mis ojos, corriendo el maquillaje que me había aplicado anteriormente. De tu bolsillo sacaste un pañuelo y comenzaste a secar mis lágrimas y a limpiar mis ojos cuidadosamente. “me gustas mucho más así, estoy enamorado de un chico, y ese chico eres tú, deberías saber muy bien que nada cambiará eso” no pude evitar sollozar un poco más por su declaración, tomé tu mano y la puse nuevamente e mi rostro, sentía las caricias que me dabas en la mejilla con  tu dedo pulgar y me calmaba poco a poco.

Sé que esto es desconocido para ambos y los dos queremos experimentar lo que para muchos está prohibido y es castigado por esta sociedad, pero para ser franco no me importa para nada que esto para muchos sea extraño, porque cuando estos sentimientos empezaron a surgir dentro de mí no me importó que fueses un hombre al igual que yo. Te pido que por favor no me ocultes nada pues solo planeo mostrarme de esta forma tal vulnerable y escandalosa a ti.

Nunca habíamos estado en esta situación antes, si habíamos estado solos, pero nunca como en estas circunstancias, debo aclarar que nunca antes había tenido una relación, estaba completamente a su merced ya que él muy a mi pesar eres un conocido don juan que volvía locas a las chicas, quizás por eso no creo completamente el amor que juras tenerme, tengo tanto miedo de ser solo uno más en su lista de conquistas que tuvo que pasar mucho tiempo para decidirme a hacer esto.

Te sentaste junto a mí y acariciaste mis mejillas, tomaste mi rostro y depositaste un beso muy diferente al que nos habíamos dado hace un rato, aprovechaste que mi boca estaba abierta para introducir tu lengua en ella, se sentía extraño, pero era realmente excitante sentir como ambas húmedas se unían en un baile erótico que me nublaba la vista, teniendo él el control haciéndome perderla cabeza simplemente con un beso de lengua, al separarnos un hilo de salía unía nuestras bocas, lamí mis labios de forma provocadora, invitándolo a continuar. El bretel de mi baby doll había descendido y se halla bajo mi hombro, solo por esta noche supongo que está bien que nadie esté vigilando hasta donde llegará ese hermoso encaje.

Me convertiré en Cenicienta y dejaré mi zapatilla de cristal para que puedas encontrarme, espero que al entregarme a ti quede grabado en tu pecho mi nombre y que nunca puedas olvidarlo. Tu mano desciende hasta el lugar prohibido y doy un respingo, me acaricias suavemente y no puedo dejar de templar bajo sus caricias, tus manos que me incitan a seguir pecando esta noche. Si no estás seguro de que te amo, escucha las palabras que en voz baja comienzan a salir de mi boca.

Los jadeos y gemidos que no puedo evitar escapan de mi garganta y hacen que amas tus labios y me veas con lujuria, así que solo queda darte el permiso que necesitas para continuar. Te suplico que me muestres todo el placer que puedo conocer y que me llenes de una vez por todas porque ya no aguanto más, porque quiero sentirte de todas las maneras posibles.

Te acercas y cuidadosamente entras en mí, tomas mis caderas y tratas de ser cuidadoso y no dañarme, yo solo arqueo la espalda y trato de olvidar el dolor que estoy sintiendo, mi cabeza y mi razón parecen haber escapado y solo quiero continuar con lo que estamos haciendo, así que te incito a seguir con un beso apasionado que une nuestras bocas nuevamente. Tu eres el único que dejaré que me vea de esta manera tan lasciva y vulgar, pues es un deseo que solo quiero que sacies tú.

Los sonidos obscenos que hacemos resuenan por toda la habitación y parecen excitarnos cada vez más, nuestros cuerpos se acoplan como si hubiesen nacido para estar juntos en perfecta sincronía, espero que nos amemos hasta que llegue el mañana y que nada pueda separarnos después de esto. Te acercas lentamente a mi oído y dices las palabras que siempre he querido escuchar.

                                                                           “te amo”

De un momento a otro mis ojos ´parecen volver a humedecerse cuando del bolsillo de tu camisa sacas una pequeña cajita ¿quién hubiera podido imaginar que la felicidad más grande pudiera encontrarse en algo tan pequeño? Ese hermoso anillo de oro blanco con un zafiro azul parecido al de mis ojos brilla en medio de la luz que nos otorga la luna. Cubro mi boca con ambas manos, no puedo creer lo que acabas de decir, pues es algo más grande de lo que pude haber esperado.

                                                          “¿quieres casarte conmigo?

No puedo evitar pensar en mis padres y en su enorme codicia ya que ellos quieren para mi algo que yo nunca he deseado, como obligarme a casar con Elizabeth. Sé que no debo aceptar, pues no quiero hacerte ningún daño, tengo que decidir rápido de una vez o si no te alejarás de mí. Pero como hoy me lo has entregado todo, haré lo mismo por ti y aceptaré, olvidaré ese horrible anillo de oro que me ofrecen mis arrogantes padres que viven en un matrimonio infeliz. Solo por una vez  seré egoísta y huiré para siempre contigo. Ya que sé que es la única cosas de la que nunca podré arrepentirme. No negaré más mis sentimientos, no quiero ser como cenicienta que por mentirosa fue devorada por el lobo así que esperaré una noche más tu llegada y nos iremos juntos para ser felices por siempre.

                                                             “Si, yo también te amo”

 

Notas finales:

Espero que les haya gustado, lo escribí con todo mi corazón y por ello apreciaría mucho que dejaran un comentario o review, ya que me motivan a seguir escribiendo y no saben lo gratificante y alentador que es que a alguien le guste lo que has hecho.
Espero que estén bien, y les deseo un buen día, tarde o noche.


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