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El nuevo edificio de la faculltad. por LECTERSWAN

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Notas del capitulo:

Aqui la actualización¡¡ 

Espero no haberme atrasado, esto de actualizar todo el mismo día me esta trayendo loco¡¡ pero bueno, no digo nada más salvo que los personajes no son mios, son de Eichiro Oda, yo solo los tomé para entretenerlos un rato

Al fic¡¡

Despiertas y estas atado, no te puedes mover, tu boca esta amordazada con una pelota de plástico. No puedes gritar.

La silla a la que estas atado esta justo enfrente de ese salón, varias bancas se alinean frente a ti. Respiras agitado ante la escena, te mueves desesperado tratando de liberarte, pero es imposible, las cuerdas que te mantienen prisionero son muy fuertes. Te detienes solo para observar el lugar, es un salón común es verdad, la puerta de salida se encuentra  a tu izquierda mientras que a tu derecha hay una gran ventana que deja pasar la luz de las farolas que iluminan los patios. Agudizas tu vista y estiras tu cuello tratando de ver el exterior, tal vez así te des una idea de donde estas.

¡Clic¡

La luz se enciende dejándote ciego por unos cuantos segundos.

-Buen día clase- reconoces al voz en cuanto la escuchas, te estremeces al oír como un coro de personas le responden con un “buenos días”. Tus ojos se acostumbran a la luz y por fin puedes ver a los 30 alumnos que tienes sentados frente a ti.

Todos están perfectamente sentados, derechos y con las manos en la paleta de la banca, todos visten igual; una chaqueta blanca con pantalones y camisa  juego. Intentas gritar pero la mordaza no te deja; estas aterrado los presentes te miran atento…o al menos eso parece pues ninguno de ellos tiene ojos, parece que alguien se los extirpo de la forma más dolorosa posible dejando en su lugar unos huecos irregulares y sanguinolentos. Reanudas tus intentos de huida agitándote y retorciéndote en la silla para liberar tus manos.

-Hoy es un día especial- de reojo alcanzas a ver como la extraña figura blanca se desplaza hacia ti con un extraño objeto metálico en la mano.- Hoy estudiaremos anatomía de la piel. Pero no pongan esa cara, la anatomía es muy interesante- En cuanto está a pocos centímetros de ti una mano te toma de la barbilla y te hace girar la cabeza hasta quedar frente a frente con tu agresor.

“Ojos azules” te quedas como hipnotizado viendo esos grandes ojos aguamarina que se esconden detrás de los cristales de unos lentes.

-Es más divertido si tienes la piel de tu espécimen en tus propias manos enguantadas- un simple movimiento y sientes como la punta de un bisturí se clava entre tus cejas, gritas de dolor y de la impresión.-Te arrancare la piel- la voz de tu agresor se ha transformado, ahora parece emanar maldad pura-y dejare tus músculos expuestos y después…-hace una pausa mientras mueve el bisturí a un lado dejándote una cortada profunda- jugare contigo hasta que desees morir¡

 

*        *       *

Plic Plic

Pequeñas gotas de sangre caen en el inmaculado suelo manchándolo. Te sientes débil, demasiado débil, tanto así que podrías cerrar tus parpados y sumirte en el más profundo de los sueños…………..claro eso sería si aún tuvieras parpados.

Según tus cálculos han pasado aproximadamente dos horas desde que tu suplicio comenzó. Es curioso como el tiempo parece arrastrarse más lento cuando estas sufriendo. Ahora ya no tienes piel que cubra tu cara, estas expuesto, en más de un sentido. Tu ropa ha desaparecido así que el frio aire que entra por las rejillas de las ventanas te hace estremecer.

En ausencia de tus parpados puedes ver absolutamente todo lo que te rodea, no puedes evitarlo. La blanca figura se mueve de un lado a otro frente a ti explicando algo que no logras entender. A tu alrededor solo hay dolor y frio, un frio punzante que te lastima lo que te queda de piel.

Plic Plic Plic

El flujo de sangre que viene de tu cara se aumenta y no lo puedes detener, tal vez al momento de seccionar y separar tu piel han cortado una vena importante “como si todas no fueran importantes” piensas con algo de amargura.

Una mano te toma del cabello (que aun conservas) y jala tu cabeza hacia tras haciendo que levantes la vista y la fijes en el foco fluorescente que esta sobre ti.

-Debemos realizar una pequeña incisión en este punto- sientes la punta del bisturí abrirse paso en la carne de tu cuello-no presionen mucho o perforaran la arteria carótida….- el filo del bisturí se desliza hacia abajo provocándote varias oleadas de dolor, sientes la sangre escurrir hasta tu pecho, ya no puedes gritar más pues te han destrozado las cuerdas bucales. Ahora ya no puedes emitir un ligero chillido.

El dolor es inmenso, pero no lo suficiente como para desmayarte y poder librarte así del sufrimiento, pero tal parece que el destino no considera lo mismo. Sigues consiente, atento a cada nueva punzada de dolor.

El bisturí sigue su camino, bajando hasta la mitad de tu esternón, el suave goteo que bajaba desde tu cara se ha convertido en un torrente, tu propia sangre mancha tus piernas hasta llegar a tus pies y derramarse finalmente en el piso.

La figura blanca aleja el bisturí de tu piel y emites un suspiro de alivio, eso no parece gustarle pues clava de nuevo la punta de este en tu clavícula y comienza a cortar, esta vez sin seguir un patrón en específico, solo corta y corta dejándote con varias tiras de piel colgando desde tus hombros hasta tu ombligo. Ya no aguantas más, las fuerzas se te han ido al completo y el dolor es tanto que ya no crees poder sentir uno mayor.

Eso piensas hasta varios de los que ahí habían se acercan a ti, acercando sus manos pálidas y huesudas hasta tu torso donde empiezan a arrancar las tiras de piel que aún permanecían unidas.

Desgarran, jalan, incluso algunos comienzan a arañar tus brazos y tus piernas. Todo se vuelve color rojo, de las bocas de los extraños entes sin ojos escurre la sangre aun tibia. Tus músculos aparecen ante ti, todos rojos y sanguinolentos.

Cada vez más entes se acercan a ti hasta  tener a todos a tu alrededor, ya no te queda piel para que sea arrancada así que comienzan a tirar y desgarrar tus músculos arrancándolos y masticándolos entre sus asquerosos dientes.

Alzas la mirada y te topas de nuevo con el foco que asemeja un extraño ojo luminiscente deseas por una sola vez en la vida poder tener parpados para poder cerrar los ojos. No dejas de mirar el foco fluorescente hasta que poco a poco vas perdiendo el conocimiento y esta vez para siempre.

Notas finales:

¿Me dejaran algun review? espero que si¡ pues los leo con anasias¡¡


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