Que poco dura la felicidad cuando te reúsas a aceptarla y Seiya lo acababa de descubrir seguía en la cama sentado aunque ya vestido, había sido un error tras otro todo lo que había pasado esa noche
- No debí dejar que lo hiciéramos en mi cuarto- ahora que pasaría cada vez que estuviera acostado en esa cama junto a su aroma, junto al recuerdo de lo que había pasado recordando su calor su pasión – soy un maldito…- la mirada de Ikki cuando le dijo que no volverían a estar juntos tal vez se había pasado pero si no lo hacía se iba a arrepentir- es lo correcto… Shun si podría estar con el….- aunque en el proceso el muriera de un derrame de bilis o terminara perdiendo a su pollo y a su lechuguita al mismo tiempo
Seiya se levantó no podía seguir en esa habitación no podía arranco las sabanas con cierto coraje y fue a echarlas a la lavadora debía aprovechar que su papa y su mama no estaban en casa no quería tener que dar explicaciones o tener que inventar una excusa lo mejor era atenderlo ahora mismo suspiro mientras veía a la lavadora trabajar
- Soy un idiota…- Seiya suspiro de nuevo mirando su celular dudando si marcarle a Ikki o no, pero si le hablaba que le iba a decir y si lo hacía volver ¿para qué? Era mejor así tal vez Ikki se enojara lo suficiente con él para poner la distancia que estaban necesitando, dejo su teléfono sobre la lavadora y se recargo en la pared aun sin decidir qué hacer cuando fue el teléfono el que sonó pero ese número no lo reconocía- diga?...
Y Seiya solo palideció conforme la voz del otro lado de la línea le explicaba que estaban llamando del hospital regional y lo que había pasado con Ikki se deslizo por la lavadora hasta quedar sentado en el suelo con la boca bastante abierta cubierta por su mano las lágrimas ya se habían agolpado en su rostro y apenas la llamada se cortó se levantó corriendo ignorando por completo los calambres en las piernas y el escozor entre sus nalgas tenía que llegar, tenía que ir con Ikki… tenia…
- No te atrevas a morirte imbécil… o te voy a matar- se puso el calzado y tomo su cartera mientras marcaba el número de Aioros que solo sonaba, lo que le faltaba su padre escogió ese día para poner el teléfono en silencio
Hyoga salió de su casa acomodando su casco de motociclista y tomando la calle central, había quedado de verse con Shiryu en el árcade era agradable poder pasar tiempo con alguien que no solo se fijaba en cuanto pudiera gastar o a donde los invitara, por eso era que había perdido la guerra con las mujeres, Siberia no era un lugar muy grande y ya saben el dicho “pueblo chico… infierno grande”
Sin embargo apenas había llegado a Tokio todo era muy diferente se encontró abrumado, ahí fue verdaderamente consiente que significaba ser rico, en Siberia no importaba tener dinero si no tenías en que gastarlo
Cambio esa moto de nieve por una hermosa moto de colección, la mejor tecnología y lo último en gadgets ropa de marca todo lo que pudiera pasar por su mente, ok lo reconocía estaba bastante malcriado pero tal vez su mama lo hacía por compensar el divorcio con su padre llego al centro comercial y estaciono su moto junto a la moto de Shiryu y sonrió Shiryu podía entenderlo por qué le había pasado algo similar el creció en china en la granja familiar aun que lo de granja era solo un nombre Shiryu vivía con su abuelo tenían un sembradío de arroz y una destilería fabricaban sake al estilo tradicional un sake bastante famoso y por qué no costoso pero mientras él se dio por el despilfarro Shiryu continuo con su estilo de vida y sus creencias de la sabiduría zen y todas esas cosas
- Lamento la demora mama tuvo una cita ya sabes con quien- y el pelinegro sonrió
- Te voy a creer que van a terminar siendo familia- se rio y Hyoga tardo un momento en recordar al muchacho peli verde y bajo la vista par que Shiryu no notara su turbación el muchacho le había impresionado mucho
- Nunca he tenido un hermano aun que tengo un primo Isaac aun que él se quedó en Siberia a ayudar con la flota pesquera pero es lo más cercano a un hermano que tenía tal vez por eso es que me siento tan aprehensivo… él siempre me cuido, creo que ahora yo quiero cuidar a alguien
- Shun es perfecto entonces- el pelinegro noto algo pero prefirió no comentarlo- el necesita que lo cuiden
- Me doy cuenta… Jabu es un idiota- solo le había bastado conocerlo para darse cuenta, el tipo le había caído como patada al hígado era todo lo que odiaba en una persona abusivo presumido y también demasiado egocéntrico y…. y molestaba a Shun!
- Ahí Hyoga…- Shiryu negó al parecer la leyenda Shun no estaba tan equivocada al final…. Bueno a él que, él ya era… pero Ikki y ahora el rubio, aunque… ahora que lo pensaba el rubio nunca le hablo de sus preferencias pero hasta donde supo anduvo con un par de rubias… o eran tres? le miró fijamente tratando de recordar
- No empieces soy bi… he tenido pareja de ambos- se encogió de hombros – aunque supongo que mi debilidad seria el cabello rubio…- o tal vez a partir de ahora ¿los ojos verdes? No, no debía de portarse tan idiota no quería complicar la relación de su mama enamorándose de su tal vez futuro hermano menor
Seiya llego corriendo al hospital donde había sido trasladado su hermano preguntando atropelladamente por el en la sala de enfermería trata de verdad que lo intentaba mantener la calma pero no podía solo quería saber cómo estaba su hermano!
- Es familiar del paciente?- y la enfermera no le ayudaba en nada!
- Soy su hermano me llamaron de aquí, por favor necesito saber cómo esta
- No podemos darle informes a un menor de edad- la enfermera le miro apenada el muchacho se veía de verdad angustiado
- Pero…- Seiya sentía que la angustia le estaba rompiendo el corazón y la enfermera lo noto
- Pero podría decirte que doctor lo está atendiendo y tu podrías buscar su oficina – y la mirada de Seiya se ilumino antes de avanzar por el pasillo leyendo los letreritos en la puerta hasta encontrar la oficina correcta
- Radamantys wyvern cirujano general y laparoscópico…- si ese era se asomó al interior mirando al rubio observar unas radiografías en la pared
- Disculpe?... doctor.- el rubio le miro y si barrio a Seiya de pies a cabeza lo que lo preocupo lo que le faltaba
- Si? Que haces aquí?- por qué demonios había niños en su oficina es más porque había niños en el hospital a menos que estuviera enfermo no tenía nada que estar haciendo ahí
- Lo siento… es que trajeron a mi hermano y nadie me dice nada y mi padre no contesta- ahí no por favor que no empezara a llorar él no sabía lidiar con eso para eso estaban las enfermeras y las trabajadoras sociales
- ¿Quién es tu hermano?- si lo buscaba a él era porque estaban operándolo ¿no? No?
- Ikki Hyuuga tuvo un accidente en moto parece
- Traumatismo múltiple, con distención abdominal tuvo varios golpes internos, entre ellos tendremos que sacar la vesícula y el apéndice sin embargo está perdiendo mucha sangre por lo que puede tener comprometido el bazo…. – miro a Seiya que iba poniéndose más pálido y se sentó con un suspiro- está bien solo tuvo un golpe bastante aparatoso en el abdomen el apéndice y la vesícula solo sirven para inflamarse y que las saquen, sin embargo tu hermano tiene un tipo de sangre demasiado complicado incluso aquí en el hospital solo tenemos tres personas registradas con ese tipo estamos esperando al donador, por la hemorragia necesitara transfusiones
- Yo puedo donar, mi mama mi hermano y yo tenemos el mismo tipo de sangre!- Seiya se levantó esperanzado
- Eres menor de edad no puedes- rada le miro recordándole la realidad
- Peso más de 50 kg puedo hacerlo si es una emergencia y mi padre da autorización pero mi papa no contesta y mi mama después de su embarazo ya no puede quedo anémica hemoanemica… algo así y tiene bajo peso
- Si hago la solicitud prometes dejarme en paz tengo que trabajar y necesito operar a tu hermano en cuanto el cardiólogo y el anestesiólogo me den luz verde
- Si, lo prometo- Radamantys negó y saco esa hoja que lleno y firmo
- Es la solicitud, tendrás que ir primero te tomaran una muestra y si eres apto te llamaran a donar ve a banco de sangre y no hagas escandalo o hare que te saquen del hospital
Aioros llego al edificio de departamentos con una sonrisa de lado, era como haber viajado en el tiempo estaba completamente igual tenía el color ladrillo en la fachada con líneas blancas haciendo adornos entre los pisos la cafetería en el piso inferior así como una pequeña farmacia separadas por el elevador los así llamados edificios gemelos pero para el tenía muchos significados lo que más risa le daba era que kanon el hermano de saga vivía en el mismo complejo y para risa del ambos Vivian en el tercer piso solo que cada quien en un edificio incluso tenían el mismo número de departamento! Sus casas eran espejo Aioros solía burlarse mucho por eso
- No puedo creer que aun este aquí- Aioros rio al ver el extintor junto la puerta de saga donde solía esconder la llave para cuando él lo visitara y que no lo tuviera que esperar afuera ya que tenía una vecina muy chismosa
- Por favor dime que aun tienes la alfombra greñuda- saga le miro y levanto una ceja
- Ya no tengo veinte años Aioros soy un hombre serio
pero pese a ese hombre serio en cuanto abrieron la puerta Aioros vio esa alfombra en lo que era la sala de pelo largo y esponjosa en la que le gustaba echarse o andar descalzo y a la que apresuradamente se apresuró a abrazar pasando sus manos por la superficie
Saga sonrió al verlo era como si Aioros nunca se hubiera ido, se portaba exactamente igual que la última vez que estuvo ahí se acercó luego de sacarse la bufanda y desabrochar su saco quedando sobre el
- A veces te imaginaba aquí mismo bajo de mi…. Por eso no pude tirarla-le acaricio las mejillas enmarcando su rostro
- Saga…- ¿cuantas veces había estado sobre alfombra junto a saga? Ya ni siquiera lo recordaba para él era como si todos los días estuviera ahí- no tienes idea de cuánto te e extrañado como me hiciste falta
- Opino lo mismo… aunque trataste de ocultarte nuestros amigos me contaron lo que pasaba contigo como estabas apagándote cada vez hasta que ese niño llego a tu vida
- Mi Seiya…. No sé qué hubiera hecho sin el varias veces estuve a punto de tirar todo por la borda, pero no podía dejar a mis niños con Sonia… no me necesitan eran mi mundo
- Se parece mucho a ti sabes- se rio- tiene el mismo carácter quien tenías tu cuando estabas en la escuela
- Lo se… el me salvo saga, odiaba tanto mi vida en ese momento pero él lo cambio todo…
- Pero ahora necesitas que te salven de nuevo- las manos de saga empezaban a colarse bajo la playera de Aioros acariciando esa piel que había extrañado mucho
- Necesito sentirme vivo saga mi vida es un horror necesito – ni siquiera estaba seguro que necesitaba o tal vez si pero se negaba a aceptar que necesitaba a saga no podía… eso le recordó que tenía que deteners4e ahora sostuvo las manos de saga bajo su playera y negó- te dije…
- Lo se estas en un contrato – saga se recargo en el pecho de Aioros- y como lo odio… es como si no hubieras vuelto
- Pero es lo que tenemos- se sentó acomodando su ropa lo que al sentir el peso en su bolsillo recordó- demonios tengo el teléfono en silencio, olvide activarlo…- pero apenas lo vio levanto una ceja preocupado había varias llamas perdidas algunas de Seiya y otras de un número que no conocía eso le preocupo por que en cuanto marco esa voz mecánica le dijo “hospital general” eso no podían ser buenas noticias y no lo fueron
- Aioros?- saga le vio ir perdiendo el color incluso se puso detrás de él temiendo que iba a desmayarse
- Tengo que ir al hospital... saga llévame al hospital!- no podía ser no podía tenía que llegar y pronto!
Seiya estaba sentado en esas sillas de plástico esperando su turno mirando cuanta gente estaba ahí formada él lo único que quería era saber que Ikki estaría bien, que estaba bien pero al menos así sentía que podía hacer algo para ayudar miraba ese algodón en su brazo
- Seiya Hyuuga?- la chica salió a llamarlo y se apresuró a levantarse había estado juntando ánimos, a él nunca le habían sacado sangre a diferencia de Ikki él no era propenso a los golpes, bueno el quien Ikki fuera fan de los deportes tenía mucho que ver con sus viajes al hospital
- Soy yo…- se acercó tratando de evitar ese nerviosismo en su estómago y alejar la idea que la sangre se le iba a terminar o que se volvería vampiro pero se repetía que era por Ikki, es por el… tienes que resistir
- Seiya lo siento mucho pero no puedes donar- la chica lo miro apenado y como su cabecita empezaba a trabajar
- Pero tengo 8 horas de ayuno, di el peso y la altura y no he tenido enfermedades, le juro que tampoco tengo tatuajes mi madre me tiraría de un coche en movimiento si me pongo uno sin permiso…
- No Seiya no es eso, es que… no puedes donar por que no eres del tipo que necesitamos Ikki Hyuuga cama 302 15 años tipo de sangre ab negativo tú tienes tipo a positivo no puedes donarle
- Qué?!- no eso no podía ser… él era ab negativo igual que su mama y que Ikki eso decía su acta de alumbramiento…. Eso le habían dicho toda la vida- no eso no puedo hacer tenemos el mismo tipo de sangre… yo…
- Lo siento Seiya… pero no es así. La chica le miro sabía que el solo quería ayudar a su hermano- no es raro que los hermanos no tengan el mismo tipo de sangre a seguro tú tienes el mismo tipo de tu papa
- No…. Papa es o negativo….- y la chica se puso incomoda pero mejor no meterse de mas
- No te preocupes aquí ya llamaron a los chicos del registro tu hermano va a tener la sangre que necesita y va a estar bien – la enfermera se alejó un paso de Seiya y continuo llamando a los siguientes donadores