Severus observó a su hijo platicar con su madre en el cuadro respecto al cambio de clases, mientras ellos hablaban de cómo podrían ayudarle con las clases durante este último mes, Severus se dirigió con Tom al estudio de este último, entre los regalos de Harry estaba un espejo de doble vía, este había sido mandado por Sirius Balck y tenían que hablar con Harry respecto a eso.
Tom observaba el espejo, era antiguo rodeado por runa y de un color plateado, además que en la parte posterior se podían apreciar los famosos apodos de dicho cuarteto, suspiro no era extraño que los Black tuvieran este tipo de objetos, si bien eran valiosos y muy útiles, en ese momento no eran más que una amenaza para ellos.
--¿Qué haremos cuando Black quiera hablar con Harry?—Cuestiono Severus mirando con molestia el objeto, por suerte o de forma inconsciente, Harry no se había acordado de los últimos bromistas
--Nos apegaremos a la versión que le manejaremos gemelos, yo lo encontré, lo traje a mi casa donde le estoy proporcionando lo que el por estupidez no puede y yo solo quiero lo mejor de Harry contratando a los mejores y entre ellos está el más sexy pocionista que existe
--Si Black te escucha decirme sexy se volverá loco—exclamo con una ligera sonrisa, mientras su esposo lo abrazaba
Debido a culpa de muchos Severus no se creía guapo, pero para Tom Severus tenía una belleza, si bien no en era común o bajo el estereotipó típico, era una belleza que él había descubierto, una belleza inexplicable, enigmática, eso sin contar el poder que tenía.
--En gustos no hay nada escrito—respondió este, mientras tomaba posesión de aquellos labios que lo tenían adicto--cuando Dumbledore sea destruido haremos la prueba de paternidad de Gringotts para evitar que crean que la falsificamos, seremos felices como la familia que somos.
Severus simplemente negó con la cabeza ante las palabras de su esposo, mientras se acurrucaba en los brazos de este, dejándose embriagar por la magia de este, y aunque quería quedarse ahí, no podía, así que no le quedaba más que separarse de aquellos brazos que amaba.
--es mejor que me prepare para ir a spider End—dijo mientras sonría ante la mueca que hizo Tom
--Sigo sin comprender por qué tiene que ir a esa casucha—Tom conocía la historia de esa casa y también sabía que era el lugar del homúnculo, lo que le molestaba era que su príncipe tuviera que ir a ese lugar
--Dumbledore tiende vigilar a sus peones y quieras o no, yo soy uno, así que no tardara en ir a verme y amargarme la existencia, así que durante dos días no estaré en casa
--¿Por qué? —interrogo Harry entrando, lo que había escuchado era algo que no le había gustado
--Tengo que ausentarme por Dumbledore—exclamo Severus acercándose a su hijo y tomar su rostro—serán solo dos días y llamare todas las mañanas y noches
--¿no es peligroso?—cuestiono pensando que Dumbledore podría dañar a su papa
--Se cuidarme Harry, lo hecho durante mucho tiempo, serán solo dos días, regresare e iremos por tus útiles y a donde tú quieras.
--solo quiero que regreses a salvo papa—exclamo mientras lo abrazaba, cosa que Severus sonrió y beso la cabeza de su hijo
-Serán solo dos días—exclamo mientras Tom sonreía—los llamare dos veces por día, ¿les parece?
Harry hizo un puchero, pero asintió mientras seguía abrazado a Severus, Tom también asintió sabiendo que no podría hacer cambia de opinión a su esposo.
--Bien que te parece si vemos alguno de los inicios en runas para que puedas tener una idea de lo que vas a trabajar—exclamo Tom mientras tomaba los hombros de su hijo y besaba su coronilla
--Está bien
Severus sonrió mientras se retiraba y dejaba a la ambos para irse a preparar para ir por aquellos dos días a pesar de ser solamente dos, Severus sabia como era Dumbledore, quien tendía a lanzar "ligeros" hechizos de espionaje, para ver la fidelidad de su espía, aunque el anciano tendía a olvidar que él era una serpiente, una de las más importantes.
Unas horas después Severus había terminado de hacer su maleta y había mandado a Huj a su casa en aquel barrio para que se hiciera cargo de que la ese lugar pareciera haber estado habitado desde finales de junio. Cuando regreso a la oficina donde pudo ver los avances de Harry quien había demostrado que tenía una mente rápida, ya que había aprendido lo básico de runas y ahora se encontraba leyendo un libro de un segundo curso de runas.
La cena fue tranquila, aunque la actitud de gatito tierno de Harry y la manipulación de su esposo hizo que Severus se quedara esa noche e irse a primeras horas de la mañana, aunque siendo sinceros no es que el pusiera mucha defensa a aquellos “ataques” dado por sus dos amores.
Después de darle un beso de buenas noches a Harry ambos entraron a su habitación, Tom no dudo en besar aquellos labios que había sido su perdición, sabiéndose correspondido con pasión por su esposo, los últimos días había sido estresantes para ambos y no habían estado como esposos, así que en ese momento Tom comenzaba a acariciar a Severus por sobre la ropa, mientras que este repetía sus acciones.
Poco a poco se fueron acercando a la cama, donde esa noche se amaron como no lo habían hecho en catorce años.
Al otro día Harry despertó temprano, él no quería que Severus se fuera, pero sabía que tenía que hacerlo por protección de ambos, así que fue a la habitación de sus padres esperando que estos aun durmieran y para su alegría a si fue, abrió ligeramente la puerta para ver a Tom Ryddle abrazando por la cintura a Severus Snape, quien lo usaba como almohada ignorando que sus torsos no había pijamas.
Con sigilo cerró la puerta y se fue a la cocina, quería prepararles algo y así después convencer a los dos elfos pudo prepararles el desayuno, claro que estos no le quitaron un ojo y apoyándolo cuando este se los pedía.
Severus despertó al sentir un rayo de sol ante él, así que se fue moviendo hasta hallar el rostro pacifico de su esposo, había extrañado noches como la que habían tenido y despertar así, habían sido duros todos esos años, sueños que parecían reales, sueños que terminaban en pesadilla, ahora tenía miedo de moverse y despertarse en aquella fría casa, estando completamente solo, su esposo en quién sabe dónde y su hijo siendo lastimado por aquellos seres, un beso en la frente lo saco de sus pensamientos depresivos.
--Buenos días amor—saludo y después beso a su esposo con una pasión que le dejo sin aliento
--Buenos días Tom, hay que levantarnos, debo partir a Spinder End—fueron las palabras después de recuperar el aliento
--Gracias por fastidiarme la mañana—exclamo con un bufido y Severus lanzo una ligera sonrisa.
Ambos se levantaron para ducharse y que Severus pudiera irse, así que una vez listos se dirigieron a la cocina, donde no pudieron evitar sorprenderse al ver que Harry ya estaba ahí y en la mesa había lo que parecía ser un exquisito desayuno.
--Buenos días padres—saludo con una sonrisa Harry al verlo
--Buenos días príncipe—exclamo Severus besando la frente de su hijo y Tom se acercaba para besar la coronilla del joven
--El joven amo Harry les preparo el desayuno—exclamo Huj, provocando un sonrojo en el joven un pensamiento negativo en los padres, que no muestran y que desaparece de forma rápida
--Bueno hay que disfrutar del exquisito desayuno hecho por nuestro niño.
Aunque Tom y Harry quisieran alargar más el tiempo de Severus con ellos, sabía que no podían, el intentar que el pocionista se quedara, era ponerle en peligro. Así que con algo de amargura ambos se despidieron de Severus.
Una vez que se quedaron solo, se dirigieron a la oficina de Tom donde este escribiría una carta y Harry continuaría con sus estudios en runas y posteriormente en pociones, quería mejorar en la materia a pesar de que parecía haber heredado el don de Severus.
Severus no tenía mucho de haber llegado y estaba checando sus reservas de pociones que mantenía en ese lugar, la casa era más una bodega para pociones bastantes básicas, cuando el flu sonó, Dumbledore acaba de llegar.
Un suspiro salió de los labios del príncipe de los mortifagos, debía ser una excelente serpiente, por lo que sus escudos de oclumancia estaban en lo alto, dejando que el anciano simplemente mirara algunos pensamientos recurrentes.
--Severus mi muchacho—fue el saludo que el anciano dio, mientras que con su magia se encargaba de escanear con su magia la casucha donde se encontraba
--Director—exclamo con la propiedad y frialdad que le caracteriza.--¿Se le ofrece algo?
--Solo venia visitarte, saber que estas bien, tomando en cuenta de que no tienes familia cercana.
Severus hizo una mueca, ante las apalabras del anciano y comenzó a hacer la rutina que siempre llevo cuando no estaba con su familia, con algunos comentarios del anciano, todos con un trasfondo de obtener alguna reacción de su espía, pero siempre teniendo muy vagas reacciones.
Después de dos horas el anciano se fue indicando que tenía otras ocupaciones. Se despidió dejando una estela de magia, que había sido provocada por los hechizos de espionaje que dejaba siempre.
Una vez que el anciano se había ido, el dueño de ese lugar se dirigió a su laboratorio donde se pudo calmar un poco, ya que en ese lugar no había ningún tipo de hechizos.
--Pronto será tu caída viejo, y la disfrutare como no tienes idea.
La noche cayo en Londres y en la casa de la familia Ryddle-Snape se encontraba en la espera de la llamada de Severus, cuando las llamas de la chimenea se encendieron, el rostro de Severus apareció, aunque su rostro mostraba una sonrisa por ver a su esposo e hijo, también se podía ver cierto cansancio.
--Tom, Harry, buenas noches
--Papa—exclamo con felicidad Harry--¿Qué tal tu día?
--Excelente, a excepción de la visita de Dumbledore con su constante brillo, pero pude adelantar algunas pociones y ustedes ¿Qué hicieron?
--Estuvimos estudiando runas, jugamos ajedrez, he mejorado mucho en eso, duro más de quince minutos y los abuelos me contaron algunas anécdotas.
--Las anécdotas de ellos son únicas—respondió con una sonrisa Severus—y con el ajedrez, me alegro mucho de tus avances Harry, en cuanto regrese espero una partida
--Claro que si papa.
Harry y Severus platicaron un poco más, Tom por su parte sonreía, y aportaba algo cuando creía conveniente, parecía que ambos tenían mucho tiempo en no verse, y habían sido solo unas horas de separación, pero los entendía él también se sentía así, además comprendía a su esposo, ya que esta solo en una casa que le traía malos recuerdos y necesitaba aferrarse a que Harry ya estaba con ellos
--Tom—llamo Severus sacando al mencionado de sus pensamientos
--¿Qué pasa Sev?
--Estaba pensando que Harry debe aprender oclumancia—aquella idea había estado rondando en su mente, aunque estuviera prohibido, Dumbledore no se tentaba el corazón en utilizar legemancia con los alumnos, sobre todo aquellos que estaban dentro de sus planes y para mala suerte de ellos, Harry era uno de ellos
--Si tienes razón, esta misma noche iniciaremos con los ejercicios—no necesitaba leer a su esposo, él había sufrido de las entradas a su mente por parte Dumbledore, por suerte Abraxas le ayudo a aprender oclumancia
--¿Qué es oclumancia?
--Es una forma de proteger tu mente, hay magos como nosotros y Dumbledore que saben legimmens, que le permiten ver tus recuerdos y pensamientos, la oclumancia lo impide—fue la respuesta que le dio Severus
--Y para protección debes aprenderlo, es lo mejor
--Este bien—exclamo con seriedad Harry, le encantaba aprender cada cosa que le interesaba y lo que mencionaron sus padres lo parecía
--Bien me tengo que ir, los llamo mañana temprano
--Hasta mañana Severus
--Descansa papa
El flu se apagó dejando a Tom y Harry solos, Harry miro a su padre y Tom le sonrió, mientras le indicaba que se sentara con él y llamaba un libro, no iniciarían las lecciones de esas habilidades, pero si le explicaría a grandes rasgos e incluso le quitaría alguna materia para poder centrarse en la oclumancia.
--Como te mencionamos la oclumancia es proteger a tu mente, ponerle barreras para evitar que vean cosas que no quieras, para muchos sangre pura es más que nada el evitar que conozcan los secretos familiares o los pensamientos que tienes, en este caso que ya sabes la verdad es peligroso de que alguien entre a tu mente y descubra de quien eres hijo
--¿Cómo empezamos?
--Hay muchas técnicas para hacerlo, pero todas tienen como base fundamental la meditación, entrar en un estado de relajación y concentración, y posteriormente la creación de las barreras en la menta y como mantenerlas siempre levantadas, aquí en casa Severus y yo podemos relajarnos y dejarlas caer, pero cuando salimos las levantamos; veremos dos opciones para ver cuál te sirve a ti, una de las opciones será poner tu mente en blanco, no pensar en nada, solo en algo blanco la otra opción y en las que muchos les es incluso un poco complejo es buscar una imagen y en ella colocar todos tus recuerdos
--¿Cuál usaron ustedes?
--A Severus le funciono poner en blanco su mente, a mi ambas; durante una semana practicaremos con que mantengas tu mente en blanco, después con la otra opción, lo que debes hacer antes de irte a dormir es vaciar tu mente, no pensar en nada, así se inicia
--Suena complicado
--Lo es de ahí que la meditación es tan importante para poder aprender esta disciplina, como muchas cosas Harry será difícil y te frustraras, pero valdrá la pena ya que podrás proteger a los tuyos—Harry asintió—Harry eres consiente que Severus y yo seremos duros en este caso ¿no es así?
--Lo soy padre, sé que serán duros, pero porque es por mi bienestar y por nuestra protección.
Tom beso la frente de su hijo, después lo mandar a lavarse y bajar para tomar una merienda, después de tomarla, tomaron asiento en el sillón y Tom le conto algunas de sus aventuras en el colegio, Harry termino dormido en su regazo, provocándole una ternura que nunca se imaginó.
Severus y Harry eran su mayor tesoro, por ellos haría lo que fuera con tal de protegerlos, aquel pensamiento le hizo tener un amargo sabor de boca, ya que por un simple desliz suyo su hijo había vivido un infierno y su esposo había vivido solo y bajo el yugo de Dumbledore, pero haría pagar caro a esos malditos.
Cargando a su hijo lo llevo a su habitación, donde lo acostó y cubrió. Miro a la lechuza que se encontraba ya dormida, así como también a Jalil que estaba ya acomodado en su terrario, no pudo evitar sonreír al recordar que Nagini hacia aquello hasta que descubrió que él era más cálido.
Salió de la habitación donde después de darse una ducha, se preparó a dormir, ya una vez recostado se quedó mirando a la nada, pensando en los movimientos que haría en ese momento, todo para destruir a Albus Dumbledore, pero sobre todo proteger a su amado esposo e hijo.
Era consciente de que no dormiría mucho ante la cama vacía y fría, sus pensamientos se dirigieron a su esposo, pensando que él había soportado aquello por catorce años, así que él podría soportar dos noches sin su esposo.