Harry miro confundido a Tom, quien se había detenido de contar la historia, mas su confusión desaparición, cundo Huj apareció indicando que la cena estaba lista y que Severus había avisado que llegaría un poco más tarde
--Bien Harry sube a lavarte y después acompáñame al comedor
--¿continuarás la historia?
--Lo hare—fue la respuesta de Tom para ver a Harry irse
Con un suspiro decidió lavarse en el baño que se hallaba en ese piso, el chico estaba casi curado, tomando en cuenta las heridas visibles, pero había más que tardarían, también estaba el hecho de que debían decirle la verdad, pero tanto el como Severus tenían sus reservas de como Harry lo tomaría.
Las acciones de Dumbledore para poder controlar a Harry hicieron que sus encuentros fueran entre un intento de decir la verdad o proteger la vida de su hijo, la única ventaja que se podía decir que tenían era que el anciano desconocía que sabían la verdad del niño.
Se sentó en espera del joven, quien no tardo en bajar y mirarlo con aquellos ojos verdes, que se miraban tímidos, en ese momento.
--Debido a la orden de Abraxas a su hijo, sabia casi todos los movimientos de Severus, por eso supe, que se había visto involucrado en un conflicto con los merodeadores y otros chicos, pero no me lo aviso, sino hasta el lunes, donde recibí la carta de Severus disculpándose por su falta y explicándome la situación a grandes rasgos, en un intento de que confiara más en mí, le pregunte del por qué no le había dicho nada a su jefe de casa, la amargura que estaba seguro que él y sus compañeros sin conexiones sentían, ya que Horace nunca les prestaba atención, al no poder obtener un beneficio con ellos, ese hombre simplemente miraba hacia los lados
--Me hubiera gustado que ese hombre fuera mi profesor—exclamo Harry y ante la mirada interrogante de Tom, explico—así sabiendo quien soy, tal vez hubiera puesto más atención a mis palabras, me hubiera creído
El susurro amargo del chico le hizo ver que MacGonagall le había fallado gravemente al joven frente a él.
--Hay quienes se creen más que nosotros por ser profesores o estudiar mucho, ese es probablemente la ruina de muchas asociaciones.
--¿Qué sucedió?
--Tome cartas en el asunto literalmente
*/* Flash Back */*
Severus estaba con Lucius y Regulus, si bien ya había enviado la carta con disculpa y habían agendado otra cita, se concentraba en planear una nueva venganza en contra de los merodeadores, por suerte nadie lo vincularía con dicho suceso, la poción era de efecto retardado, así que decidió ver la llegada de las lechuzas, Lucius recibiendo algunos dulces de parte de su padre, mientras que Regulus recibía el periódico, ninguno le presto la atención a la lechuza que se dirigía a su jefe de casa, no hasta que los murmullos se hicieron presentes.
"Horace Slughorn…
Un Slytherin apoya a otro, aunque sea joven, un Slytherin siempre protegerá a su compañero, un Slytherin es astuto…tú no eres un Slytherin has fallado a muchos de los principios que Salazar impuso…no eres digno de ser el jefe de la casa de las serpientes.
Jóvenes Slytherin si este hombre vuelve a fallarles, no duden en acusarlo con sus padres o tutores…yo me encargare de que sufra las consecuencias de sus acciones y del darle la lección de su vida.
Atte. Un Slytherin real"
La mayoría de los alumnos sabían de mi existencia como heredero, así que supieron que la carta venia de mi parte, entre los profesores solo Dumbledore sabia de mi herencia, así que ellos simplemente ignoraron la mirada de reproche del anciano y se divirtieron con la mirada perturbada del viejo Horace.
Las cartas entre Severus y yo eran casi diarias, en un principio eran en cuestiones académicas, cosa que aceptaba, debía atraerlo poco a poco, si podía le mandaba un libro de algún tema que le interesara, sobre todo de pociones, en ocasiones accidentalmente olvidaba poner el hechizo y Severus
Lo regresaba, era un extraño juego entre nosotros.
Por fin después de un mes, que fue lo que duro su castigo pudimos ver y me enseño como realizar el hechizo, así como también de otros hechizos, el intercambio era sencillo el me enseñaba a lanzar un hechizo, mayormente de su colección propia o me mostraba que había logrado dominar uno de los libros que le mandaba, así que yo le enseñaba uno parecido o le explicaba la falla en el lanzamiento de uno en especial.
Uno de los hechizos que más les conto a ambos era el patronus, pero aun así lograron realizarlo, aunque pasarían algunos meses antes de que estos tuvieran apariencia física.
Cuando la confianza era por ambas partes, los encuentro para practicar hechizos o dudas escolares, pasaron a segundo plano permitiendo platicas de sus planes, de sus deseos, en algunas ocasiones también se dejaba entre ver los miedos y debilidades, eran mínimas las ocasiones en las que se hablaba de dicha situación, pero aun así estaba presente.
Cuando se acercaba el fin de curso y durante la última salida, Severus no estuvo tan animado como en ocasiones anteriores.
--¿Príncipe?—a pesar de conocer el nombre de Severus, Tom había optado por llamarlo príncipe cuando estaban solos--¿qué es lo que te aqueja?—cuestiono mientras ponía una mano en el hombro de Severus, quien le regalo una mueca en lo que debió ser una sonrisa
--No es nada Tom, solo que pronto las clases terminan y debo regresar a casa
--¿Lucius o Regulus no te han invitado a su casa?
--No quiero causarle problemas a ninguno de ellos
Tom no dijo nada, conocía la actitud de Walburga y sabía que era más para evitarle problemas al joven Black, mientras que los Malfoy saldrían del país, Severus no quería ser una carga para ninguno de ellos.
--Las cosas se arreglaran, ya lo veraz príncipe—exclamo con una sonrisa misma que fue respondida por el joven
Dejaron ese tema y comenzaron en hablar de cosas más mundanas, en ese momento lo único que importaba era conocerse más a fondo.
El curso termino y Severus se despidió de sus amigos, negándose por última vez a las peticiones de los dos jóvenes, así que con un suspiro de resignación, comenzó a caminar con la intención de ir a aquel infierno que era su casa, pero antes siquiera salir de la barrera una mano le detuvo
--¿Tom? ¿Qué haces aquí?—cuestiono mirando a aquel hombre que se había convertido en alguien importante
--No iba a permitir que pasaras las vacaciones con ese ser, así que por eso te iras conmigo a mi casa
--No es necesario
--Lo es para mí Severus, vamos sujétate nos apareceremos ahí
Severus en los meses anteriores había descubierto que Tom era terco, al igual que él, en ocasiones el ganaba y en otras Tom, por esa ocasión dejo ganar al hombre enigmático, ya que el en verdad no desea regresar a casa, años anteriores lo había hecho por su madre, pero ya no existía ese motivo.
Durante ese verano Severus y Tom se conocieron más profundamente, sus sueños, sus fortalezas, sus debilidades.
Severus había encontrado en Tom un confidente, si bien podía contarle cosas a su amigos, era consiente que ellos también tenían sus propios problemas, por eso evitaba agobiarlos con los suyos, pero por algún extraño motivo con Tom los podía hablar, porque sabía que si bien él no le daría la solución a ellos, le daría consejos y el apoyo que necesitara, por un momento lo considero como su mejor amigo, casi un hermano título que se habían ganado a pulso los herederos Malfoy y Black, pero sentía que aquello incorrecto, tan incorrecto como decir que veía a Tom Ryddle como a un padre.
Tom desde un principio había visto a un joven que era una promesa en el mundo mágico, la pureza de la sangre no valía cuando conocías a mestizos poderosos como lo era el mismo y Severus Snape, había encontrado un compañero, un amigo similar a lo que era el propio Abraxas, pero se percató de que cada vez que hablaba de sus planes, aquellos que le alejaban de Londres, era doloroso ya que no podría ver de nuevo aquella joyas oscuras, obligarlo a quedarse era algo que se veía incapaz, Severus ya no era un joven más, era alguien muy importante.
Un par de ocasiones Tom volvió a tocar el tema de los mortifagos teniendo la misma respuesta del menor, posteriormente se percató que el mismo ya no lo quería como un subordinado, no, él quería a Severus Snape como su igual.
El inicio de clases fue doloroso por ambos, ninguno quería separarse, pero el más joven debía terminar el colegio para poder continuar con sus planes, mismos que habían cambiado en ese verano.
*/* Fin Flash Back */*
--entonces el profesor y tu ¿se enamoraron por la convivencia?
--Así fue, hay ocasiones en que la convivencia te permite conocer mejor a las personas, claro que tú eliges eso, puedes convivir siete años con las mismas personas pero si tu no quieres que te conozcan, entonces no lo harán
--Conocerán solo la máscara que quieres que conozcan—termino Harry mirando al hombre quien le asintió
--Solo a Abraxas le permití conocerme lo suficiente para que el me llamara amigo, pero era solo eso un gran amigo, en cambio Severus le permitió a Regulus Black y a Lucius Malfoy ser sus hermanos, ellos le conocían casi tan bien como yo
--Ya veo
--continuando con la historia, durante los primeros días me era imposible trabajar sin estar pensando ¿en cómo estaría? ¿Que estaría haciendo? Me percate que extrañaba su sarcasmo, su risa, su compañía, lo extrañaba
--Él tenía planes de irse—susurro recordando lo dicho por Severus--¿Qué sucedió?
--Sucedió que cambie de planes—exclamo Severus mientras entraba y le sonreía a ambos—resulta que en Hogwarts yo también me preguntaba lo mismo que él y había una pregunta más ¿él también me extrañaría? Recibí burlas de Regulus según el siempre que esa pregunta aparecía yo me sonrojaba, después de un platica con él, me di cuenta de que estaba enamorado de Tom, lo conocía a él y gracias a algunos compañeros conocía también a Voldemort, sabia de sus ideas para el mundo mágico, los cambios que quería hacer y el hecho de que las famosas matanzas de los mortifagos no eran ciertas, de cinco ataques dos o muy extrañamente tres eran su culpa. Conforme pasaron los meses más me convencía que quería quedarme con él, ese era mi nuevo sueño, para mí en ese momento era un sueño muy grande—exclamo mientras se perdía en sus recuerdos—en el momento en que me di cuenta de que estaba enamorado me comunique con mi principal confidente después de Tom: Lucius Malfoy
*/*Flash Back */*
Severus observaba como siempre lo hacia la llegada de las lechuzas, en esa ocasión recibió dos cartas una era de Tom y la otra de Lucius
“Severus:
No hagas planes con Tom, necesitamos hablar, te veo en las tres escobas.
Atte.: Lucius”
Por suerte aquella ocasión Tom le había dicho que no podría verlo, que tenía una reunión importante, recordándole a Severus quien era realmente aquel hombre.
Lucius miro a su amigo llegar, aunque su máscara era perfecta para todos, Severus podía ver la preocupación por el, una vez estuvieron en privado el heredero Malfoy no dudo en abrazar a quien consideraba su hermano menor.
--Lucius—fue el saludo que dio el joven de negro
--Me alegra verte Severus, pero ambos sabemos que esta visita no es completamente de cortesía. No puedes ser un mortifago, no eres capaz de ver a alguien torturar
--Puedo hacerlo, debí hacerlo. Lucius es la única forma en que puedo estar con el
--Hay otras formas, Sev, habla con él, no hagas ninguna estupidez
--Avery ya lo sabe
--Severus Snape—exclamo exasperado Lucius, Avery era el reclutador de ese año—habla con Tom dile la verdad, toda
--¿Crees que el aceptara a un mestizo sin nada que ofrecer? Seré un excelente mortifago, así el me vera
--Sev, él ya te ve; lo que estas planeando solo te matara, debes torturar en la iniciación
Lucius observó como Severus solo negaba con la cabeza, pero se podía ver en su mirada que así como estaba decidido estaba también temeroso, haciendo que este suspirara con resignación.
--Habla con el Sev, dile lo que planeas, no le gustan las sorpresas
Con aquella platica los dos se despidieron, Lucius no iba a permitir que su hermano hiciera una gran estupidez por un amor que posiblemente no era correspondido por lo que decidió decirle a su padre.
La máscara de Abraxas se rompió por unos momentos, antes de recuperarse y dirigirse donde estaba su compañero, necesitaban evitar una tragedia
Abraxas conocía casi por completo a Tom, así que sabía que Severus se había ganado un puesto importante en la vida del Lord.
--Tom, cita a Severus para la próxima semana debes hablar con el
--Estamos a vísperas de las nuevas marcas, Abraxas
--Severus va a hacer una estupidez que pone en peligro su vida, así que te recomiendo que vayas a verlo
Tom miro a su compañero notando la preocupación en sus ojos, aunque no lo quisiera admitir lo dicho por el lord Malfoy le hizo sentir preocupación por su querido príncipe.
Así una semana después ambos se encontraron y Tom comprendió el porqué de la urgencia, Severus mientras estuvo con él había decidido aprender oclummancia y legenremice y en ese momento odiaba que lo hubiera hecho, ya que no podía leerlo, pero aun así su cuerpo mostraba señales de preocupación y nerviosismo.
Severus estaba nervioso, cuando recibió la carta de Tom estaba feliz porque lo vería, más la plática con Lucius había vuelto a su mente y estaba nervioso, no sabía cómo decirle al hombre frente a él, la verdad
--¿Todo bien Severus?
--si, solo…solo me estoy preparando para lo que hare dentro de dos semanas
--¿algún examen?—cuestiono, la fecha no le agrado para nada
--Hare las pruebas para mortifago—dijo mirándolo de frente
Tom estaba sorprendido por aquello, comenzó a reírse creyendo que era una pésima broma del joven enfrente de él, pero al ver la seriedad en aquel hermoso rostro, así como el miedo oculto en los ojos le hizo detenerse
--No me gustan las bromas
--No es una broma, me convertiré en mortifago
--Severus Snape ni se te ocurra presentarte a la iniciación—exclamo de forma fría el heredero de slytherin
--Quiero ser un mortifago—respondió Severus, en esa ocasión el ganaría
--No tienes la madera para serlo—comenzó y antes de que Severus contestara—probamos el cruciatus en un ratón, te pusiste pálido, no pudiste realizar el hechizo; esa es la iniciación, lanzar un cruciatus y la maldición asesina.
Severus se puso pálido ante lo mencionado, Lucius ya se lo había advertido, aquello era cierto, pero el necesitaba ser un mortifago, deseaba estar junto al hombre y esa era la única forma en que lo concebía
Tom se había alejado, respiraba profundamente, durante los primeros meses antes de conocer a Severus de forma profunda, deseo escuchar aquellas palabras, pero ahora, escucharlas hacía que su corazón latirá con miedo de perder a su príncipe.
Se había hecho a la idea de no verlo más cuando se graduar, de tener solo la correspondencia, pero ahora, escuchaba aquellas palabras como una condena a su príncipe
--Ya…ya di a conocer mi decisión
--Maldita sea Severus ¿Por qué no me lo consultaste?
--No eres mi padre para pedirte permiso—exclamo con furia
Severus sabía que Tom nunca lo vería como algo más que un mortifago, pero ahora ya no estaba seguro de nada, de alguna forma había ideado una vida cerca de ese hombre, aunque el final era la muerte
--Cuando nos conocimos querías que fuera mortifago ¿Qué cambio?
¿Qué cambio? Era la pregunta que Severus le hacía y la respuesta era tan fácil de dar, como también difícil, cambio que lo había conocido, que vio al ser más hermoso, en ocasiones comparaba a Severus con alguna hermosa ave, misma que no podía enjaular.
--¿Qué le ofreces a los mortifagos? ¿Qué te ofrecen ellos a ti?
--Mis habilidades como pocionista, mis hechizos, eso ofrezco, ellos…ellos me ofrecen poder
--Respuesta equivocada, ¿Qué te ofrecen los mortifagos?
--Poder…pertenecer a… algo
--Casi, poder no es algo que te interesa
Severus observo el rostro libre de emociones de Tom, así que decidió decir parte de su verdad
--Deseo pertenecerle por completo a Lord Voldemort
El joven había descubierto durante las vacaciones quien era realmente Tom Ryddle, y a pesar de aquello no le importaba
Tom frunció el ceño ante aquella respuesta, observo como el joven se hincaba ante lo dicho, aquello le molesto, su príncipe no debía hincarse
--Entregarle mi vida por completo mi lord
Severus mantuvo la mirada fija, no tenía nada que ofrecerle a Tom más que su lealtad completa, sintió como una mano le tomaba de la barbilla permitiendo encontrarse con aquellos ojos carmín que eran símbolo de Voldemort, no tembló ante estos, simplemente se maravilló de poder verlos, de ver todas las facetas de Tom.
--Tu intensión de convertirte en mortifago es para que yo sea tu absoluto dueño—susurro provocando un escalofrió en el más joven
--si
--tus pensamientos, tus palabras serán completamente míos
--Ya lo son—respondió mientras intentaba ver a otro lugar que no fueran los labios que se le presentaban
--No desvíes la mirada Severus, si yo te pidiera tu cuerpo ¿me lo entregarías?
--Completamente, mi alma, mi vida y mi cuerpo son tuyos
--¿Qué es lo que deseas de mi Severus?
--Que… que me correspondas, que me ames como yo lo hago
Susurro cerrando los ojos al darse cuenta de lo que había dicho, se había dejado hipnotizar ante las promesas que aquellos ojos le daban. Sintió como lo levantaban, pero aun así mantuvo los ojos cerrados
--Nunca te hinques, el mundo es quien debe hincarse ante ti mi príncipe, mi igual
Terminando aquella frase beso los labios que habían sido su tentación desde hacía tiempo, Severus simplemente correspondió creyendo que estaba soñando o que había muerto ante su insolencia.
*/* Fin Flash Back */*
--El día de la iniciación llego y para evitar que algunos idiotas comenzaran a hacer preguntas, cree un homúnculo que tomo el lugar de Severus durante ese día y cada vez que lo mandaba a misión
--¿Nunca se dieron cuenta?—cuestiono Harry-- Digo ver al homúnculo y al profesor
--Así como me viste aquel día Harry, así siempre me presente ante los mortifagos, todo el mundo sabía que yo era lo más valioso del lord, por lo que tenía guardias personales, Lucius, Regulus y el homúnculo, solo estaba uno de ellos por lo que nadie sabía la verdad, solo unos cuantos
--La prioridad era cuidar a Severus, evitar que mis enemigos supieran de él, en algún momento un traidor hablo del príncipe pero era imposible saber quién era, debido a un amuleto, este tenía una variante del hechizo glamur, así que había ocasiones en que aparecía siendo rubio, pelirrojo u otra característica, hasta que la guerra no terminara, no arriesgaría a mi pareja
Harry observo como Tom besaba la mano de Severus y este se sonrojaba, desde que había llegado a esa casa, había visto el amor que el mayor mago oscuro le tenía a su profesor, no pudo evitar desviar la vista, pensando que así era como se sentí ver a sus padres tener un momento romántico.
--Gracias por compartir conmigo su historia
--No fue nada Harry—exclamo Severus con una cálida sonrisa
--El señor Dorian tiene razón, hay que conocer las dos versiones de la historia, yo me retiro que descansen
La pareja asintió observando como el menor desaparecía del comedor, Tom aprovecho eso para besar hasta quitarle el aire a su pareja, sabiendo que a Severus le encantaba aquello.
Severus suspiro una vez que el beso termino y se recargo en el pecho de su pareja, en ese momento estaba a salvo en los brazos de su esposo, el miedo de que Harry los rechazara estaba ahí aun, pero por el momento se imagina una familia cálida con su pequeño.
--Hay que prepararnos Severus, Harry no tardara en preguntar sobre aquello
--Lo sé, pero solo quiero disfrutar un poco más de mi pequeño Tom, solo unos días más
--Unos días más amor, solo unos días mas