La mañana llegó con una aura extraña la familia Weasley quien siempre estaba ruidosa estaba en ese momento silenciosa. Lo sucedido el día anterior y el hecho de que las presentaciones se cancelaran dejaban mucho que pensar, pero algo que casi todos notaron y era que la familia se había fracturado, más al ver a el tercer Weasley se sentara junto a los mafiosos y sus hijos, con algunas sonrisas tentativas a su alrededor. Era bien recibido por aquellos desconocidos, que por su propia familia y amigos.
Encaja con perfección, fue el pensamiento de Arthur al verlo hablar con el extraño grupo y ver como sus ojos brillaban al sentirse aceptado, la culpa que se había asentado a su mente desde el día anterior, más al ver el brillo que su hijo tenía, uno que ya no se podía apreciar en la madriguera.
El desayuno termino y todos se acomodaron para ver las siguientes presentaciones, estaban ansiosos por conocer a los nuevos chicos, si bien hasta el momento no había nadie que los vinculara de forma directa, les estaba permitiendo estar en el colegio y podían hacer magia y ver a sus amigos, sin escuchar los regaños por sus calificaciones o acciones.
En la tarima el nuevo encapuchado ya se encontraba listo para poder darse a conocer, así que sin esperar mas dejo caer la capa mostrando a un joven de cabellos oscuros, tez morena y ojos grises que tenía un brillo interesante, de hecho para algunos parecía tener cierto brillo de locura. Vestía con un pantalón de cuero y una playera sin mangas. Llevaba una pistola en la pantorrilla izquierda.
Los gritos de las chicas no se hicieron esperar como tampoco los gruñidos de los chicos. El joven que estaba ahí solo rodo los ojos debido a la actitud tan fastidiante de esas chicas.
-- Sé que es una locura, pero creo que es la versión masculina de Bella--susurro Sirius siendo escuchado por Fon y Remus. Haciendo que este último también observara al chico, el recordaba a Bella y la similitud de Andrómeda, notando que si realmente parecía tener ciertas características de ellas-- claro que sin tanta locura.
--Buenos días a todos, diré mi apellido al final y el nombre de mi padre lo dirá mi hermana, la última princesa. Soy Ares, tengo dieciocho años y soy un doble, mis padrinos son Andrómeda Tonks y Viper o Mamon como lo quieran llamar. Mi llama es del cielo y también poseo la llama de la tormenta. En ocasiones apoyo al equipo de Radegast. ¿Preguntas?
-- ¿Novia o Novio?
-- No tengo pareja-- exclamó y aunque no hubo cambio alguno en sus facciones sus ojos demostraban tristeza
-- No te preocupes Ares los demonios y yo nos haremos cargo-- exclamó Alexa con una sonrisa sádica, provocando que su padre le mirara y que los chicos que les conocían sintieran un escalofrió así como también casi sintieran lastima por la victima de los tres.
-- Gracias Alexa pero prefiero que no pierdan su tiempo con alguien como esa…
--si, bueno ya tenemos un plan para aquello—fue la respuesta mientras alzaba los hombros
-- Esa se pierde del partido que eres-- exclamó Sirius—estoy seguro que hay alguien mejor para ti
--Claro que si mirara a otros rumbos estaría con la persona correcta—exclamo en un susurro Orión mientras miraba de reojo a los hermanos Lupin, acción notada por Harry quien era el más cercano
-- Ahora dinos quien es tu madre—exigió Sirius, estaba ansioso por saber si su sospecha era cierta—Vamos Ares, dinos quien es tu madre
-- Madre tiene razón, eres muy impaciente tío Sirius. Bueno para calmar al tío Sirius, mi madre es nada más ni nada menos que Bellatrix Black.
El silencio rodeo el lugar y Sirius simplemente sonrió. Todos lo miraron extrañados debido a su actuar, pero Orión se había encargado de contarle sobre bella y como estaba, así como el hecho de que esta se hubiera divorciado de Rodolphus.
-- ja lo sabía-- exclamó con una sonrisa—espero que la pareja de Bella la sepa controlar
--Se complementan ambos tío—fue la respuesta de Ares, quien sonrió al recordar algunas de las peleas de sus padres--¿Preguntas?
--¿Por qué el nombre de Ares?—cuestiono Narcissa, mirando a su sobrino, ella se encontraba feliz de saber que su hermana por fin había cumplido su sueño—la tradición Black es el nombre de una estrella
--Bueno cuando iba a nacer, mi madre y mi padre hicieron una apuesta, misma que no voy a mencionar, para evitar problemas. Mi padre gano, a él siempre le había gustado la mitología griega así que de ahí tomo mi nombre, pero mi mama no sabía cuál era nombre, debido a que papa quiso que se mantuviera en secreto, cosa que crispo los nervios de mi mama, creyendo que me pondría un nombre débil, así que cuando escucho seria Ares, quedo encantada
--De ahí que los enemigos le llamen el dios destructor—susurro Xiang a su hermano, quien asintió.
Ares se había ganado su apodo después de un intentó de asedio a su hogar y con algunos de los más jóvenes en el lugar, demostrando así que había heredado cosas de ambos.
Mientras Ares terminaba su presentación, en la sala donde Fenrir se había encontrado, Bella, la madre de Ares, se encontraba llorando de felicidad en brazos, de quien se imaginaba seria su exesposo. Ellos habían sido comprometidos y casado casi a la fuerza, se querían como amigos, pero nunca sintieron atracción entre ellos, Bella sabía que Rodolphus le gustaban más los chicos que las mujeres, de ahí que nunca pudieron tener un heredero y tampoco lo intentaron por otros medios.
Sin heredero podían separarse sin ningún problema, habían querido hacer aquello antes de que la guerra explotara la primera ocasión, pero por algún extraño motivo, Bella se sintió obsesionada por Voldemort, una obsesión bastante enfermiza.
Tom miraba con cariño a la mujer, agradeciéndole a los dioses que Bella fuera feliz, lejos del ambiente toxico de Londres.
--Bueno es todo de mi parte sigues linda.
El siguiente encapuchado se quitó la capa dejando ver a una joven de cabellos negros, con ojos violeta. Su tez blanca y pequeños labios. Vestía un sencillo vestido blanco con unas sandalias de tacón pequeño. Lo único que resaltaba era su dije en forma de estrella, que tenía llamas de las niebla activas, llamando la atención a los portadores.
Así como sucediera con Ares, sucedió con la chica, quien no dudo en sonrojarse, provocando un gruñido en Reborn, todos esos idiotas estarían bajo una tutoría especial, el escalofrió general se sintió. Tsuna simplemente suspiro, esperaba que aquello no causara muchos problemas con el nuevo amigo de su abuelo.
Decido dirigir la mirada a los dos ancianos y no pudo evitar tensarse, el brillo en los ojos de ambos
--Si no quieren perder puntos se callaran—fue la voz de MacGonagall, que hizo que todos guardaran silencio—puedes presentarte linda
--Se lo agradezco madame, mi nombre es Kirene y soy la segunda hija de Skull
--Tengo una hermosa princesa—exclamo alegre el motociclista siempre quiso una hija, una princesa
--Gracias papa, continuo tengo diecisiete años, mi llama, por extraño que suene, es la del sol, soy alumna del tío Reborn—dijo alzando los hombros, provocando que el mencionado sonría de lado, el enseñara a esa princesa a defenderse de idiotas que no merezcan ni respirar su aire—mis padrinos son el tío Tsuna y el tío Hibari, no me pregunten porque, pero él se ofreció
--si ofrecer es amenazar a nuestros padres—susurro Yue
--soy buena tocando el piano y se artes marciales, mi padre quiso que aprendiéramos a defendernos. Antes de que pregunten, no, no tengo pareja, aún no ha llegado la persona indicada. ¿Preguntas?
--¿Quién es tu padre? Kora
--Como diría Viper debes pagar para obtener la información antes de tiempo. Es todo, tu turno.
La chica bajo de la plataforma y beso a su padrino Tsuna y a su papa, mientras miraba como su padre ocultaba de nuevo su mirada. Sus ojos se dirigieron a donde Demian y asintió ante la muda pregunta que estaba, al fin y al cabo su hermano les había avisado de algo que había supuesto.
El último chico del futuro apareció y dejo caer su capucha permitiendo que vieran sus ojos color celeste y el cabello rubio cenizo, su tez blanca. Vestía un jeans deslavado con tenis y una playera, en la muñeca izquierda llevaba una pulsera de cuero.
--- hola personas del pasado soy Ian Kakimoto tengo 19 años y pertenezco a kokuyo que es una subdivisión de vongola mi llama es sol y soy considerado uno de los mejores hackers del mundo.
Chikuza miraba sin expresión a quien se presentaba como su hijo, aunque por dentro tenia sentimientos encontrados por un lado estaba feliz de tener un hijo pero por otro la tristeza de que no era del chico que llevaba tiempo enamorado, cosa que ya había sospechado ante la presentación del hijo de Ken, pero saber que iba a encontrar a alguien que lo quisiera, pero aun así mantenía un ligera esperanza de que ellos estuvieran juntos.
-- mis padrinos son el tío Mukuro y la tía M.M.
-- ¿que por qué ella?-- cuestiono Ken sintiéndose un tanto confundido con eso, ya que ellos casi no se llevaban, aunque sabía que había ocasiones de que la chica les ayudaba
-- mi papa dijo que de no ser por ella nunca hubiera estado con papa.
-- gracias Chikusa, en tu cara bestia—fueron las palabras de la chica quien sonreía arrogante, sabía que la apuesta estaba por terminar y podría tener a Ken como su esclavo por un año
Ken simplemente decidió ignorarla y ver al chico, tenía una buena corazonada con ese chico
-- no tengo novio por el momento. Espero conseguirlo pronto. Bueno tengo un hermano y… es difícil-- exclamo acariciando su cuello in tic que grupo kokuyo reconoció como de Ken, alegrando más al mencionado
-- ¿qué sucede?-- cuestiono el chico de lentes preocupado por la actitud de su hijo
-- durante una misión tú y papa estuvieron involucrados. Todo estaba saliendo como lo planeado, pero… hubo algo que no esperaban y tú decidiste quedarte atrás para poder proteger a padre y bueno… recibiste mucho daño…
-- caíste en coma-- exclamó Johan mientras abrazaba a Ian, quien estaba a punto de derrumbarse, el ambos habían sido apegados a ambos padres, pero la perdida de Chikusa había sido un golpe muy duro para los tres-- un año antes de irte, teníamos seis años cuando eso paso.
--La familia se hizo cargo de nosotros, el décimo y el tío Mukuro siempre nos mantuvieron juntos, pero papa cayo en depresión y estamos más que seguros—dijo Ian mientras suspiraba profundamente-- que papa nos dejara pronto
-- ya somos independientes así que papa dice que ya no lo necesitamos, el simplemente ya no quiere vivir, se siente culpable de tu muerte
--Creo que es más que obvio quienes son nuestros padres, pero para dejarlo más seguro lo diremos
--Somos los hermanos Joshima Kakimoto
Ken sonrió y como el rostro de Chikuza para plantarle beso tipo telenovela. Pero en aquel beso también estaban las lágrimas por lo que sucedería. Perdería a su amado y eso no lo iba a permitir
-- olvídate de ir a esa misión-- exclamó mientras lo abrazaba-- te quedaras en casa con los niños
El chico del yoyo correspondió el abrazo y ocultando las lágrimas que sentía.
-- Lo hare si prometes regresar- susurro.
Mientras ambos se abrazaban, Tsuna se prometía que no permitiría perder a nadie, era consciente de que abría ocasiones de que sería imposibles de evitar aquello, pero evitaría siempre que pudiera que sus amigos sufrieran.
Albus decidió que se tomaran un descanso después de aquella emotiva presentación, así que todos salieron.
El viejo director vio con tristeza como ninguno de los pelirrojos se acercaba al chico Percy, parecía que aún no sabían que hacer. Además que Arthur parecía estar perdido.
--Espero que actúen pronto. —susurro mirando a la familia