Año nuevo chino, los líderes de los clanes hacían una pequeña reunión para pedir a los ancestros por un buen cultivo, suerte, prosperidad, paz.
Hace meses, desde que se arregló lo del patriarca de Yiling, los problemas se acabaron, la verdadera historia se sigue transmitiendo, algunos perdones han sido dados.
Acabada la ceremonia, el primer líder en salir es Chéng, la ceremonia de ese año estaba ocurriendo en Gusu, él buscó despejarse, así que fue hasta la cascada para sentarse en la orilla, encontrándose los curiosos conejos de Hawang Jún, no les prestó mucha atención, estaba ahí para recordar a la señorita Wen Qing, sacó el peine que una vez le dio, cerrando los ojos, rememorando su rostro, la hermosa médico no tiene un lugar de descanso, nada quedó de ella, salvo ese artículo que portó por un corto período, mismo que atesora.
Inmerso en las pocas memorias de la chica médico, el Jade mayor logra verlo a la distancia, fue el segundo en salir. Durante los últimos meses se ha comportado similar a los dieciséis años de luto de su hermano menor, era como si hubiera perdido a su esposa, y es que las traiciones provocadas por el que creyó su confidente, que si bien a él jamás le hizo daño, eran imperdonables, además que, después de tanto, aún dudaba si asesinarlo fue correcto, ¿de verdad iba a atacarlo?, la culpa aún lo molestaba en las frías noches.
Zéwù Jún terminó sentándose a su lado, con una apropiada distancia de metro y medio, tomando un par de conejitos blancos, él también los quería mucho. A diferencia del líder Jiāng, Zéwù tenía infinidad de recuerdos, sobre todo una voz diciendo que con él nunca mintió, y que todo por el era real... el Jade mayor no quería ni podía creer.
De pronto el ambiente armonioso se cortó con la risa de un Wei Wuxian ligeramente ebrio, hablando alto, seguido de Lan Zhan, los hermanos abajo en la cascada abrieron los ojos, Chéng recién notó al mayor, no lo saludó, sólo guardó el peine y se levantó, rozando suavemente a Zidian, indicio de amenaza o muerte según cultivadores de bajo rango, sin embargo Zéwù se acercó colocando una mano en su hombro, invitándolo a beber té, para hablar del curso de los clanes.
La siempre cautivadora y templada voz del Jade mayor, pudo tranquilizar al impulsivo joven líder, ¿cómo negar una invitación tan seria y pacífica?
—He de aprovechar para hablar sobre mi sobrino y su discípulo.
—Por supuesto, líder del clan Jiāng.
Amenamente, ambos subieron, al toparse ellos con sus hermanos, Zéwù saludó muy bien a Hawang Jún, diciéndole que era bueno verlo animado, internamente Chéng se volvió a preguntar cómo podía adivinar el sentir del 'estirado e inexpresivo' de Lan Zhan, mas se guardó el comentario, mirando simple a su hermano mayor.
—Intenta no hacer desastres, Wei Ying. —Traducido a que se cuidara, a su vez, la frase provocó una sonrisa en Zéwù, podía ver a través del líder de morado tan fácil como ve a través de su hermanito.
El primer amor es indiscutible, incambiable, irremediable, inolvidable, ¿pero por qué hay que lamentarse en soledad?, eso es algo que poco a poco iban a descubrir los líderes de Gusu y Yunmeng.