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DESTINADOS por Liss83

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Besos suaves bajaban por su espalda mientras pequeñas mordidas se hundían en su piel. Solo podía gemir mientras estaba en su cama apoyada sobre sus rodillas y las palmas de sus manos. Una pequeña palmada golpeó sus glúteos y en respuestas ella alzaba más sus caderas
 
- Gírate - dijo la mujer y ella obedeció al instante - Merlín, como necesitaba esto
 
- ve... ven... po... r e...llo más... se... se... gui... do... - gimió Molly sin ningún pudor abriendo mas sus piernas
 
- Si tus hijos te vieran en este momento - dijo la chica mientras le introducía dos dedos entre las piernas y le lamia los pechos
 
- La...zor... rra... de la... ca... cam... ma... no... ti... tie... ne... hi... hijos - gimió Molly moviendo las caderas al ritmo que la chica marcaba
 
- ¡Ma... má! - sollozo una voz detrás de ellas y ambas mujeres se separaron mientras se giraban al instante
 
- ¡Percy! - dijo Molly intentando cubrirse
 
- ¿Qué significa esto? - dijo Fred atónito
 
- ¡Hermione! - dijo Ron con un hilo de voz
 
- Yo se los puedo explicar - sollozo Molly
 
- ¿Desde cuándo...? - pregunto Billy
 
- Lo que le dijeron a Ginny... - susurro Percy 
 
- Me... me tengo - dijo Hermione - que ir
 
- Tenemos que hablar chicos - dijo Molly intentando abrazar a su hijos pero estos la esquivaron mientras Hermione recogía su ropa
 
- Te imaginábamos... sufriendo... -, dijo Ron mientras su ex compañera se vestía como podía - extrañándonos...
 
- Ron... - dijo la castaña cuando esta le intercepto el camino - perdón - y una bofetada le cruzo el rostro
 
- ¡Ron! - le dijo Molly sorprendida
 
- Me das asco - dijo el chico -... Ginny te vio en el callejón
 
- ¿Qué callejón? - dijo Molly asustada
 
- En el que te prostituyes - dijo Arthur entrando a la que fue su recamara junto a Blaise
 
- Ron, déjame explicarte - suplicaba la mujer que lo había traído al mundo
 
- Aléjate de mis hijos - sentencio Arthur interponiéndose entre el chico y ella - vayan al patio - ordenó
 
- Papá... - dijo Fred
 
- ¡Al patio! - ordenó el pelirrojo mayor y todos sus hijos obedecieron - no te vuelvas a acercar a mis hijos - sentenció antes de salir de la habitación seguido de su destinado
 
En cuanto estuvieron todos en el patio trasero de la casa se dirigieron en silencio al punto de aparición.
 
- Arthur - dijo Blaise - llévate a Fred, Charlie y Ron. Yo llevare a los demás
 
- Vamos chicos - dijo Arthur - hagamos lo que su padre dice
 
- ¡Él no es su padre! - gritó Molly desesperada desde la puerta
 
- ¡Si! - dijo Arthur girándose para encararla - ¡claro que lo es! Lo es porque tú nunca estuviste a la altura. Lo es porque tú nunca supiste ser una madre
 
- ¿Cómo te...? - dijo Molly
 
- Arthur, llévate a los chicos - dijo Blaise y no hubo más protestas. Cinco minutos después la familia entraba a la sala de la mansión Zabini
 
- Voy a mi recamara - dijo George
 
- No - dijo el Slytherine -, ninguno ira a ningún lado
 
- ¡Tú no nos mandas! - gritó Percy
 
- Allí te equivocas - dijo Blaise -, yo mando porque soy el padre
 
- Nuestro padre es... - Ron alzo la voz
 
- Claro que lo es - dijo Arthur - ¡Ya basta de rebeldías! ¡Denme un minuto de paz! Por si lo notaron esto tampoco es nada fácil para mi
 
- Pero papá... - dijo Billy sorprendido
 
- Nada de papá - interrumpió este -, soy su papi. ¡Su papi! Blaise es su padre. Y a partir de hoy así lo trataran ¿está claro?
 
- Nosotros no lo queremos - dijeron los gemelos
 
- Pues tienen dos años para aprender a hacerlo - dijo Arthur -. Y aún tenemos que hablar de su escapada
 
- No hay nada de qué hablar - dijo George
 
- ¿Por qué fueron a la Madriguera? - pregunto Blaise
 
- No es tu problema - dijo Percy dijo agarrándose su pecho - ¡Ah!
 
- ¡Percy! - dijeron Blaise y Arthur al mismo tiempo corriendo a su lado
 
- Me duele - dijo el chico empezando a llorar mientras se agarraba su pecho
 
- Déjame ver - dijo Blaise abriéndole un poco la camisa
 
- Su marca - dijo Arthur - voy a llamar a...
 
- No es necesario - dijo el Blaise
 
- ¿Eres ciego o qué? - dijo Ron molesto - ¡le duele!
 
- Ven aquí - dijo Blaise sentándose atrás del chico y empezando a abrirle la camisa
 
- ¿Qué... que ha... haces? - pregunto el chico asustado
 
- Respira hondo - dijo Blaise - Ginny, cariño, ve a mi cuarto. Sobre mi mesita de noche hay un bote pequeño, es una pomada. Tráemelo por favor - la chica corrió a obedecer
 
- ¿Qué le quieres hacer? - dijo Charlie furioso - no vamos a permitirte...
 
- Tranquilo cariño - dijo Blaise masajeándole suavemente el pecho ­- tranquilo. Piensa en cosas bonitas. ¿Te gusta jugar quiddich? - y Percy negó - piensa en lo que más te guste.
 
- Me gusta trabajar en el ministerio - dijo el pelirrojo entre sollozos
 
- ¿Enserio? - dijo Blaise 
 
- Pero me está costando ascender - dijo Percy justo cuando Ginny regresaba
 
- ¿Y eso? - dijo Blaise sorprendido - siempre fuiste bueno en la política
 
- No fui a la universidad - dijo Percy mientras Arthur tomaba la pomada y empezaba a aplicársela
 
- ¿Estabas juntando para ir a la universidad mágica? - pregunto Blaise y Percy asintió - hagamos un trato tú y yo. Van a ser dos años largos. En los que puedes aprovechar y estudiar una carrera
 
- Pero y... - preguntó el chico
 
- ¿Quieres solo ser amo de casa? - dijo Blaise y Percy negó - entonces mañana mismo buscaremos esa universidad para ti
 
- Gracias - dijo Percy emocionado - gracias
 
- Pero un favor antes - dijo Blaise
 
- ¿Cuál? - pregunto nervioso
 
- Tu papi y Ginny me dijeron que haces un estupendo pastel de chocolate - dijo Blaise y Percy se sonrojo - ¿me prepararías uno cuando te sientas mejor? - Arthur y Ginny rieron y Percy asintió sonriendo - perfecto. Ahora ven acá - dijo cargándolo - vamos a tu habitación. Necesitas descansar
 
- Yo los acompaño - dijo Arthur
 
- Hey - dijo Blaise girándose hacia los demás - ustedes en vez de escapar mejor pidan pizza para todos. Vamos - y subió al segundo piso
 
- ¿Dónde vas Ginny? - pregunto Ron cuando la chica corrió a la chimenea
 
- A pedir pizza - dijo esta
 
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Blaise leía en su recamara un contrato que iba a firmar con una empresa de calderos sueca mientras bebía una copa de vino tinto. La ventana estaba abierta y la brisa nocturna traía el aroma del jardín que inundaba la habitación. El día había sido agitado por lo que no había podido ver las cosas de la oficina
 
Un golpe suave lo hizo levantar la vista y caminar de prisa hacia la puerta, quizás Percy había vuelto a sentirse mal. 
 
- ¿Si? - dijo Blaise preocupado - ¿Arthur? ¿Paso algo con los chicos?
 
- No, no, no - dijo Arthur sonriendo - están bien.
 
- Merlín - susurro el chico cerrando los ojos -, por un momento pensé lo peor
 
- Solo quería agradecerte por lo que hiciste por Percy, por Ginny, por todos - dijo Arthur
 
- No tienes porqué - dijo Blaise - son mi responsabilidad
 
- Si las cosas siguen así, de a poco te los vas a ir ganando - dijo Arthur
 
- Quiero ser el padre que no tuve - dijo Blaise -. Hablando de hacer lo correcto, quiero que mañana vamos a Gringotts
 
- ¿Y eso? - dijo Arthur sorprendido
 
- Quiero abrirte una cuenta - dijo el muchacho -, allí te depositare dinero para ti y los chicos
 
- No te estamos pidiendo nada - dijo de pronto molesto
 
- Hey, hey - dijo Blaise intentando alivianar el ambiente - no me malinterpretes. Los chicos tienen gastos, lo mismo que tú, y no vas a estar diciéndome a cada rato necesito para esto o aquello. Quiero que seas independiente. 
 
- Gracias - dijo el pelirrojo - ¿Qué pasa? - pregunto cuando el joven se le quedo mirándose
 
- Eres... hermoso - dijo acercándose 
 
- Yo... - dijo Arthur cerrando los ojos y tímidamente rodeo el cuello del Slytherine
 
- Dame una oportunidad - dijo besándole la punta de la nariz - sé que puedo hacerte feliz
 
- ¿Lo dices por la marca? - dijo Arthur sonriendo suavemente
 
- No - susurro Blaise haciéndolo estremecer al Gryffindors - te estoy pidiendo que me des la oportunidad de enamorarnos realmente. De ser el padre de los chicos maravillosos que son tus hijos
 
- Te odian - dijo el pelirrojo
 
- No han visto aun lo encantador que soy - susurro haciendo reír al mayor -. Me encanta tu risa
 
Arthur respiro hondo y lentamente le abrió los dos primeros botones de su camisa. Blaise comprendió y suavemente le tomo ambas manos para detenerlo, pero sus miradas se cruzaron y la sonrisa suave de Arthur lo hizo colar sus manos bajo la camisa de su pareja y acariciarle la espalda.
 
- ¿Estás seguro de esto? - dijo Blaise
 
Con una suave sonrisa Arthur se entregó al beso más dulce y tierno que había compartido. Su corazón se aceleró de la misma manera que cuando era un adolescente que empezaba a descubrir lo que era amar. Lentamente el beso bajo por su cuello mientras las manos lo pegaban más al otro cuerpo
 
Arthur camino hacia atrás hasta chocar con la cama donde se sentó sin romper el beso. Cuando les falto el aire se separaron para mirarse fijamente. Arthur volvió a sonreír y fijó su mirada en la entrepierna de su pareja, lentamente pero con movimientos seguros empezó a desabrochar su cinturón, para luego abrirle el pantalón. Respiro hondo, bajo un poco la prenda íntima y el órgano viril de su pareja se liberó. 
 
- Arthur - dijo Blaise - no quiero que te sientas presionado 
 
- ¿Te estás arrepintiendo? - preguntó Arthur y Blaise inhaló hondo - si tú crees que...
 
Pero sus labios fueron silenciados con otro beso suave, dulce, pero a la vez apasionado. Blaise se irguió y su entrepierna quedo nuevamente a la altura del rostro del pelirrojo, que tomo el miembro del menor y suavemente extendió su aliento por él estremeciéndolo completamente
 
Las manos del Slytherine se deslizaron por el cabello del pelirrojo quien cerró los ojos dejándose llevar por los sentimientos que lo embargaban en ese momento mientras abría la boca acercándola a la entrepierna del joven 
 

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