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El Reino De un Dios por Natsy

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Notas del capitulo:

Hola chicos aqui esta el nuevo cap. espero que les guste 

En otro lado

Un par de figuras caminaban por un pasillo oscuro y húmedo, apenas iluminado por un farol que llevaba uno de ellos. Ambos estaban ocultos bajo una capa.

-¿Oye estás seguro de que es aquí? - pregunto el que estaba atrás. Su cabello blanco, ojos violeta y dientes afilados como tiburón.

-Ya te dije que si - Aspecto el de frente. un joven rubio de cabello largo y ojos azules. Deidara volvió a caminar, siendo seguido de muy mala gana por Sugetsu.

Sug - este lugar realmente apesta - dijo molesto.

Dei - ¿puedes dejar de quejarte por un momento? -

Sug - si realmente quieres eso, entonces apresurémonos y salgamos de este lugar - afilo su mirada "Necesito rescatarla" pensó para él.

Tras lo sucedido en el bosque, Sugetsu había descubierto la verdad detrás de lo que ellos habían estado haciendo a lo largo de los años. Parecía difícil de creer que la persona que los había salvado a el y a Karin resultó ser un maldito sin moral, pero no pudo negarlo cuando Naruto le mostró la verdad, de la verdadera razón por la que Orochimaru había buscado a karin durante tantos años. Pero eso ya no importaba.

Lo único que Sugetsu deseaba era rescatarla, incluso si tenía que caminar por ese asqueroso lugar con el traidor de Deidara.

Dei - Llegamos - Sugetsu estaba tan absorto en sus pensamientos que no se percató cuando llegaron a su destino. Una puerta color madera. En la parte superior parecía haber una rejilla de donde se podía distinguir algo de luz. Deidara tocó tres veces la puerta, 10 segundos después la puerta se abrió.

Un hombre bajo y cubierto totalmente por una capa negra como la noche se asomó. Era mucho mas bajo que ambos jóvenes. Su mirada viajó hacia el rubio.

-Joven Deidara - la voz sonó rasposa, parecía la de un hombre mayor.

Dei - Ha pasado un tiempo - con una especie de... gruñido, el hombre abrió la puerta y dando espacio para que ambos jóvenes entraran.

-El amo te espera - Dei y Sugetsu se internó en la pequeña habitación. El cuarto a diferencia de la cueva estaba confeccionado con un material, que parecía ser metal, lo suficientemente fuerte para resistir un derrumbe. En el fondo divisaron una cabellera blanca como la nieve. Una persona mayor estaba encorvado frente a su mesa de trabajo, Este estaba lleno de objetos que parecerían de un joyero.

Deidara no sabía el nombre del "Vendedor de Joya" casi todos lo conocían por ese seudónimo y pocos lo habían visto en persona. Pero si algo estaba claro era que no había ninguna pieza que esta persona pudiera conseguir.

-asi que el Bombardero ha decidido venir a visitar - el hombre no se volteo para verlo. Hubo un tiempo en que Deidara había hecho varios trabajos para el. Aunque para ser preciso, mas bien fue su  mentor. El fue el que le enseño a usar las Bombas. Al principio usaba su habilidad para hacer túneles, pero cuando no pudo soportar pasar tanto tiempo bajo tierra se fue. 

Dei - ha pasado un tiempo - dijo con respeto

-SII - El anciano tomó una pequeña piedra entre sus manos - Escuché que estabas con un grupo problemático - la mirada del rubio se tensó. mientras el antaño alzaba la piedra sobre sus ojos

Dei - eso está en el pasado - Contestó con brusquedad - Necesito tu ayuda - El anciano bajó la piedra y miró por el rabillo del ojo, notando la mirada dorada de los ojos, que pese a los años no había perdido su intensidad - Necesito un cristal de Kyubi - el hombre parpadeo.

-Hoo, eso si es nuevo - dejó la piedra en su mesa de trabajo y se levantó - Nunca pensé que te interesaras por esa pieza tan extraña -

Dei - hay pocas personas en el mundo que podrían tener una -

-muy cierto, pero es una piedra tan rara incluso, yo tengo dificultades para obtener una -

Deidara sabía que no mentía. Según la leyenda cada bestia con cola había creado una piedra que transmite su energía y poder. Por ellos estas siempre se encontraba donde, se creía que residían. Pero la piedra del Kyubi era diferente.

Según las historias él fue el creador de vida, por lo que la piedra debería estar en cualquier lugar, el problema es que es tan escasa que podrías destruir una montaña entera y con suerte podrías conseguir un mísero fragmento.

-aunque me sorprenda que vengas a buscarme a mi - dijo con frialdad - ya que has estado visitando a otros vendedores para conseguir joyas - "Mierda" pensó " al viejo no se le escapaba nada" anteriormente, cuando le mandaban a buscar las piedras de las bestias, se las había ingeniado para no conseguirlas a el. y.. para alguien que se jactaba de ser el mejor en su rama, era una traición imperdonable.

Sog - ¿Me estás diciendo que no tienes lo que busco? - aspecto peliblanco. la mirada del anciano viajó al peliblanco, evaluándose. Deidara se puso en medio, esperando que la intervención del peliblanco resultara beneficiosa.

Dei - ¿tienes algún fragmento? - No importaba que tan difícil sea encontrar esa joya.

-Por supuesto - dijo con algo de indignación en la voz, el alivio atravesó su mirada -Sin embargo escuche que no eres el único en busca de uno ¿Verdad Dei? -

Sug - ¿Qué quiere decir abuelo? - aspecto con rudeza. El anciano pegó su mirada al rubio

-tu sabes la ley con la que me rijo, el primero que llega se lo queda todo - El temblor le creció en las manos.

Sog - te pagaremos mejor - reclamo

-No es una cuestión de dinero joven - dijo con dulzura - sino una cuestión de honor, ¿que clase de persona sería si vendo dos veces una pieza única a dos personas, es poco ético -

Dei - ¿A Quien? - dijo preocupado. Él sabía que no importaba cuanto discutiría, el viejo era tan terco que no se atrevería a decir. Pero él nunca se había negado a revelar a la persona interesada de comprarla.

-Por supuesto, esa persona es ............. - Apenas Sogetsu y Deidara escucharon su rostro palidecieron.

Seg - ¿pero.. por que..? - no lo entendía del todo, esa persona por su posición debería tener una de esas gemas, ¿Por qué buscaba otra?

-Eso no me concierne - dijo el joyero.

Sog - Si es esa persona estoy seguro de que aceptara prestársela el entenderá que.... - Deidara levantó su mano. Había algo que le molestaba de esta situación, no le gustaba.

Dei - Necesito que nos des esa gema - antes él había admitido que la tenía, eso significaba que el intercambio todavía no se había realizado. Antes de que el anciano hablara Deidara dijo - Creo que conoces lo que está sucediendo en Konoha -

-He escuchado rumores -

Dei - el árbol sagrado ha invadido el país y sus raíces han abierto la tierra, si tenemos éxito en nuestra misión, seguramente el árbol que esta hay desaparecerá -

Sog - oye - intentó callarlo pero el rubio lo ignoro

-¿Por que decirme todo esto? -

Dei - el árbol sagrado tiene propiedades que nunca nadie ha visto - El anciano lo vio interesado - ¿No te interesa saber que hay en la el reino de Konoha una vez que esto termine ?- Un pequeño brillo surco en los ojos del vendedor de Joyas.

-Te escucho -

Sasuke

Apenas me di cuenta de que ese tipo con máscara de caracol estaba detrás de Naruto, me las ingenié para poder llegar a él, sentí un fuerte punzada de dolor en la pierna, pero la ignore totalmente. Seguí avanzando hasta llegar al brazo del rubio. Lo siguiente que supe es que nos encontrábamos en este.

El espacio era infinito, y oscuro, pero por alguna razón había suficiente luz para poder distinguir diferentes niveles que parecían flotar alrededor.

Nar - ¿Donde..? - lo mire. Apenas habíamos llegado a este lugar me había levantado. Pero no le había soltado la mano. Naruto no se veía bien. Estaba pálido, y gotas de sudor resbalaban por su frente.

-Haaa - Apenas escuchamos ambos miramos hacia el costado. El tipo de la máscara estaba sentado en uno de los niveles superiores mirándonos con una sonrisa - ¿que hago?, sasori me dijo que solo trajera al Kyubi, pero ese tipo se metió en medio, mm será difícil explicarlo -

Sas - ¿Quién es este tipo? - le pregunté al rubio lo mas bajo posible.

Nar - Su nombre es Tobi - dijo con algo de dificultad - el.. puede transportarse -

Sas - ¿como? -

Nar - si lo supiéramos no estaríamos en esta situación - dijo algo cansado. - Pero sé que él no puede transportarse a todos lados - dijo algo cansado. - aunque no sé la razón- Vaya problema. Maldición. eso quería decir que ese tipo tiene ventaja. No solo podía transportarse sino también a nosotros.

Tob - MMM bueno - se levantó, antes de que pudiera preguntar mas - solo tengo que deshacerme del otro - Se lanzó hacia mi.

Naruto

Sasuke, tiró de mí y me cargó en sus brazos antes de retroceder.

Nar - Suéltame - le dije. Mi cuerpo seguía pesado, y si me llevaba de esa forma solo le estorbaba en la pelea.

Sas - Como si pudiera - Dijo. Tobi lanzó unos kunais que Sasuke logró desviar.

Nar - ¿que? -

Kur- El mocoso tiene razón -

Nar - ¿qué quieres decir? - Le pregunté.

Sas - si que eres idiota - le escuche, mientras seguía moviéndose - Tu eres su objetivo, si logra separarnos se acabo - En eso lo entendí. Sasuke salto de nivel, la caída libre.

Nar - Pero no puedes luchar así - Grite.

Sas - Cállate -

Tob - los encontré - al mirar a un costado, toby estaba a nuestro costado, estiró su mano hacia mi, pero sasuke en un movimiento lanzó una cuchilla que le atravesó la cara. por reflejo yo use mi Kunai para intentar herirlo y el detuvo el ataque con su mano. Sasuke al percatarse de esto dio una patada en el aire apartándose de nosotros. Apenas tocó la superficie aprovechó el impulso para avanzar.

Nar - Mierda - mis movimientos se estaban volviendo mas lentos y mis ojos me pesaban.

Kur - Ni se te ocurra dormir - Me aspecto Kurma.

Nar - no es como si lo hiciera a propósito - sentía mi voz apagada

Sas - ¿Que? - Todo se estaba poniendo negro.

En otro lado

Cuando se percataron de que Naruto y Sasuke habían desaparecido en el remolino del enemigo, fue cuando los mayores entendieron las consecuencias de su duda. Pero para ellos fue inevitable.

Conocen a los menores desde niños, los habían entrenado y preparado. Parecía imposible que ellos los traicionará de ese modo.

La ira y la tristeza estaba en los ojos de los mayores, no era momento de arrepentimientos. Tsunade rápidamente trato su estado. Dado a su profesión su cuerpo tenía una mayor resistencia a venenos y sedantes. Además en cuanto percibió el olor activo sus células para que la procesaran mas rápido Y Sobre todo tenía que darle una lección a esos mocosos. 

 

Notas finales:

Hasta aqui el cap de hoy, espero que les haya gustado. nos leemos en la proxima. 


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