Capítulo 4.- Mitos y leyendas
Shun abrió los ojos y lució desorientado, la tapa de su ataúd se había movido y Hyoga le tendía la mano para ayudarlo a salir
- Aún no me acostumbro a dormir en un ataúd, lo encuentro… mórbido… - Shun se levantó y salió del ataúd con bastante gracia, se había caído la primera noche que Hyoga lo había despertado
- No es mórbido, es una necesidad, en especial ahora que eres tan joven, el sol es mortal para todos los vampiros, pero eres mucho más susceptible porque eres nuevo
- No atardeceres ni amaneceres para mí entonces – Shun dijo esto con un dejo de tristeza en su tono de voz
- Los puedes ver en televisión, eso siempre es bueno – Hyoga le sonrió a Shun que aceptó una bolsa de sangre humana que el rubio le dio, estaba fría, pero funcionaba de maravilla para saciar su sed
- Ok., dijiste que me ibas a contar todo lo que debería saber sobre ser un vampiro – Shun se arregló la ropa y caminó con Hyoga hacia la planta alta en donde los mayores estaban, ellos habían ido a cazar juntos las últimas noches, el rubio le estaba enseñando a su pequeño aprendiz a beber con moderación para no llamar la atención, ese concepto no había sido complejo de explicar a Shun porque él disfrutaba mucho de las series de televisión policiales y de criminalística
- Has mejorado mucho en tus técnicas de caza en poco tiempo, la más importante ya la dominaste, la técnica del pequeño bocado nos permite vivir sin estrés y sin sed, y lo más importante, sin miedo de ser cazados – Hyoga le había enseñado a Shun a cazar a sus víctimas, beber de ellas sin matarlas, y a hipnotizarlas para que olviden que fueron mordidas en primer lugar, Shun fue algo torpe al momento de morder a sus víctimas, y en algunas ocasiones mordió con demasiada fuerza rompiendo la arteria de los humanos, que murieron desangrados en cuestión de segundos, eso había practicado esos días con Hyoga, y mejoró mucho, en lo que no necesitó mucha ayuda fue en la parte de hipnotizar a los humanos, Shun resultó ser natural para ello, con una mirada podía manipular sus recuerdos y someter su voluntad, a Cristal eso no le había parecido raro considerando que Shun fue creado con la sangre de Norman, que era un vampiro bastante antiguo
- Nosotros somos los cazadores, no las presas – dijo Shun recordando lo que Camus le había dicho una de las noches anteriores, ellos como vampiros, estaban en la cima de la pirámide alimenticia, eran los depredadores naturales de los seres humanos, nadie estaba por sobre ellos
- Si… pero eso no es del todo cierto, desde hace muchos años, muchos muchos años, se han formado organizaciones de humanos que saben la verdad de nuestra existencia, se han librado batallas desde tiempos inmemoriales para matarnos, los humanos temen a lo que no entienden, y en esa categoría caemos nosotros, entonces… siempre han existido cazadores que nos buscan, dependiendo de sus recursos, nos acorralan y nos asesinan, por ello no debemos llamar la atención hacia nuestra raza, por ello debemos pasar por desapercibidos, es la forma más segura de asegurar nuestra existencia
- ¿Podemos ser asesinados?, pensé que solo la luz del sol podía matarnos – Shun se mostró genuinamente asustado, a él le habían dicho en las noches anteriores que ahora él tendría vida y juventud eterna, que la muerte y la enfermedad no volverían a tocarlo, y ahora le dice Hyoga que pueden asesinarlo, estaba algo confundido por lo que preguntó: - ¿Entonces todo lo que dicen las películas y los libros de vampiros es real?
- No… no todo es real, pero hay algunas cosas que si debes tomar en cuenta, hola Shun, espero que hayas tenido un buen descanso – Camus estaba de pie en la estancia principal, miraba la luna, era luna llena esa noche
- Buenas noches maestro Camus, si… me siento bien… - Shun respondió medio cortado, Hyoga pensaba que Camus lo intimidaba, usualmente el muchachito frotaba sus manos sin necesidad cuando el formidable peliazul estaba cerca
- Eso es bueno, en algunos casos la transición de humano a vampiro, presenta sus desafíos, me agrada ver que ese no es el caso contigo – dijo Camus en un tono bastante imparcial, en estos últimos días había bajado casi completamente las animosidades contra Shun, no estaba de acuerdo completamente, pero no podían botarlo a la calle, solo esperaba no tener problemas con el Juez por ello
- ¿Qué desafíos? – Shun se sentó en el mesón de la cocina, no en la sillita, en el mesón, usualmente hacía esto, a Hyoga le parecía adorable, a Camus le irritaba hasta la médula, decía que era un muchachito malcriado, Albeore le repetía una y otra vez que debía tener paciencia, pero eso es mucho más fácil decir que hacer
- El primero es que la transición no se lleve a cabo exitosamente, ha habido casos en los que los humanos no toleran el cambio y… literalmente mueren – explicó Camus, aunque parecía que no encontraba las palabras precisas
- Bueno… no mueren, los tenemos que cazar y matar, el término que más se asemejaría al resultado de una transformación a medias o no exitosa sería, un zombie – aclaró Hyoga, Shun abrió la boca en completa sorpresa al decir:
- ¿Entonces no siempre salen bien las transformaciones?
- Bueno, los zombies son casos extremadamente raros, es mucho más común que se de en humanos que ya han pasado la plenitud de la juventud, Norman es un ejemplo de ello, él lucía como un anciano, descuidado y pordiosero, es verdad que tenía más de mil años pero fue transformado cuando en su vida humana debería haber tenido al menos 60 años, siempre pensamos que ese era un factor para su excentricidad, por eso no es muy recomendable hacerlo tan tarde, porque las costumbres humanas están por demás arraigadas en la persona, la edad perfecta para la transformación es la plenitud de la juventud, entre los 18 y 30 años humanos más o menos – explicó Camus a Shun que sintió y preguntó:
- ¿Qué otra complicación puede presentarse?
- Cuando los humanos muy jóvenes son transformados, en la mayoría de los casos, pierden la razón y se convierten en criaturas sin sentido de humanidad, matan por matar, y no les importa nada, son fuertes, pero no tienen consciencia alguna, por lo que representan un peligro para todos, en esa categoría entras tú – el peliazul señaló a Shun que se llevó ambas manos al pecho al decir:
- Pero yo sí tengo consciencia
- Por el momento si – dijo Camus y ahí fue que Shun entendió las razones de la desconfianza del líder de ese grupo en particular
- Maestro por favor, si ese fuera el caso de Shun, ya se habrían manifestado los primeros síntomas, pero no es así, Shun tiene consciencia, sentido de lo prudente y de lo que no lo es, es un buen estudiante, vamos a estar bien, además la sangre de Norman fue la que lo creó, eso cuenta – dijo Hyoga todo preocupado
- Claro que cuenta, no te preocupes Shun, estás seguro con nosotros – dijo Albeore que entraba a la cocina, lucía cansado, lo cual era bastante extraño, a decir verdad
- Les agradeceré eso de por vida – dijo Shun y sonó muy sincero
- Eso espero, y la tercera y última complicación, que en tu caso es por demás improbable, es un apego irracional e inexplicable hacia tu creador, eso podría sonar bien, pero a la larga no lo es – dijo Camus y meneó la cabeza ligeramente
- ¿Por qué?, no entiendo – Shun lució confundido
- La relación de un vampiro con su creador es muy especial, es un lazo indestructible que los unirá siempre, al inicio de la vida de cada vampiro, son años que pasará junto a su creador, aprendiendo a vivir, luego inexorablemente buscará independencia, y eso está bien, querrá crear vampiros para una nueva generación, querrá recorrer el mundo, en fin… la vida de un vampiro y su creador no está ligada para siempre, y eso está bien, es la ley de la vida, todo lo que te he explicado se basa en el respeto y en la libertad de acción y pensamiento, pero… en algunos casos que son bastante extraños, el vampiro nuevo desarrolla un apego irracional hacia su creador, no necesariamente romántico si es lo que estás pensando, es más bien por el lado de… servilismo, vampiros que hacen ciegamente lo que su creador ordena, eso suena bien, en teoría, pero inevitablemente lleva al desastre – el tono de Camus era bastante grave
- ¿Por qué?
- Porque en el afán de complacer al creador, el vampiro creado deja de lado su libertad de pensamiento y acción, eso limita su funcionalidad como individuo, lo vuelve paranoico y violento, en todos los casos en los que he visto en mis quinientos años, por una u otra causa, el vampiro creado termina matando a su creador, para luego buscar la muerte – Camus miró a Shun y vio horror en sus ojos
- Eso no te puede pasar a ti, tu creador ya está muerto, y tú no tuviste nada que ver con ello, porque de ser así, no podrías cargar con la culpa de matar a tu creador, eso es sabido – dijo Hyoga muy seguro de sí mismo
- ¿En serio?
- Hay dos crímenes entre los de nuestra raza, y ambos son penados con lamuerte, el primero es el crear vampiros muy jóvenes, que no pueden valerse por si solos, eso acarrea la muerte del vampiro nuevo y de su crador, y el otro crimen es el de matar a tu creador, eso es imperdonable y también se paga con la muerte – dijo Albeore muy serio
- Ok., lo de matar a mi creador está fuera de discusión para mí, pero, ¿y el otro asunto?, ¿en verdad me matarán? – preguntó Shun todo preocupado
- No lo creo, estás manteniendo bajo perfil, lo que es prudente, y no hemos tenido visitas del juez o sus hombres, entonces por el momento no le veo el problema, además para que tengan bases para querer matarte deberían presentar un motivo, que causes riesgo de exposición por ejemplo, pero eso no es el caso, además nuestra palabra cuenta y nosotros empeñaremos nuestra palabra por ti, eso ya lo hemos hablado y acordado – explicó Camus y los mayores asintieron
- Eso es bueno saberlo, no quiero morir, soy muy joven para morir – Shun llevó sus manos al cuello y meneó suavemente su cabeza
- Tranquilo, todo va a ir bien – dijo Hyoga con una pequeña sonrisa
- Genial, ¿y qué de las formas en las que pueden matarme?, eso no me han explicado, ¿tengo que cuidarme de la estaca en el corazón?
- No necesariamente, la estaca en el corazón no siempre funciona, la estaca debe atravesarte completamente para que funcione, y se puede lograr el mismo efecto con armas de cualquier tipo que no sean de madera, la madera es el mito, el ataque al corazón es lo que nos mata – dijo Albeore haciendo una seña con la mano que a Shun le pareció de diversión
- ¿Entonces? – insistió Shun todo intrigado
- Bueno… la luz del sol nos incinera, el fuego también, no necesariamente tenemos mucha resistencia y nuestro cuerpo se convierte en cenizas rápidamente, decapitación también funciona, o que nos arranquen el corazón, eso también funciona – Hyoga dijo todo esto contando con sus dedos
- ¿Y los crucifijos? – preguntó Shun
- Los crucifijos nos queman, al igual que las iglesias, no necesariamente podemos entran en ellas sin estallar en llamas, el agua bendita nos quema, pero eso nos daña, no nos mata – respondió Albeore, Shun solo asintió al preguntar:
- ¿El ajo?
- No, no nos agradan los olores fuertes porque tenemos desarrollado el sentido del olfato, pero no nos repele, solo no nos agrada – dijo Hyoga como quien no quiere la cosa
- ¿Y la plata?, había una leyenda con balas de plata – preguntó Shun haciendo memoria del folcklore de los vampiros
- No, no somos alérgicos a ningún tipo de metal – completó Camus
- Entonces si nos disparan, no morimos – esta no era pregunta, era una afirmación de Shun, que sacó como conclusión por todo lo que estaban hablando
- No necesariamente, si nos dan un balazo que no nos pegue en el corazón, no… no morimos, ahora, si nos lanzan una granada, un cohete, nos disparan con una bazuca, ahí si morimos, por la explosión, mas no por la bala en sí – clarificó Hyoga, y Shun asintió al decir:
- Lejos de la milicia, ese siempre es un buen consejo, ¿no vamos a salir esta noche? – preguntó Shun saltando del mesón, listo para una nueva aventura
- No… es noche de luna llena, no es prudente salir – dijo Camus con un leve suspiro
- ¿Por qué no?
- Hombres lobo – contestó Camus encogiéndose de hombros
- ¿Existen los hombres lobo? – Shun no podía salir de su asombro
- Las brujas también, pero eso es historia para otro día – contestó Hyoga con una sonrisa divertida
- Y los hombres lobo no se llevan con los vampiros, ¿o cuál es el lío?
- Bueno, la mordida de un hombre lobo es mortal para un vampiro, lo bueno es que nosotros somos inmortales, ellos no, nosotros somos ágiles y con el tiempo nos hacemos más fuertes, ellos envejecen al ritmo normal humano, eso siempre es una ventaja para nosotros – dijo Albeore en tono conversacional
- Una pregunta, Camus es el vampiro más antiguo de este grupo, por ende, es el más poderoso, ¿verdad?
- Así es – respondió Camus mirando a Shun con curiosidad
- Ok., ¿quién es el vampiro más antiguo del mundo?, pregunto porque Norman, mi creador tenía más de mil años, Camus tiene aproximadamente 500, pero cuál es el más antiguo, ¿y es ese vampiro el más poderoso de todos?
- Ohhhhhh… ya veo lo que estás preguntando, lastimosamente no podemos contestar tu pregunta porque honestamente no sabemos, mi creador tenía cerca de mil años, si estuviera vivo bordearía los 1300 años, es el vampiro más antiguo que conocí alguna vez – dijo Camus ladeando la cabeza
- El juez… ¿qué tan antiguo es el juez? – preguntó Hyoga genuinamente interesado
- No lo sé, los rumores es que debe bordear los 800 años pero yo creo que eso es lo que él quiere que creamos, no hay como confiar en los rumores sobre nombres o edades, es la información más importante para los de nuestra raza, lo que sé es que el vampiro más antiguo de este lado del mundo era Norman, en Europa y Asia es en donde moran los más antiguos, una vez escuché de labios del mismo juez, que su creador era el anciano maestro, pero dudo que haya sido sincero – dijo Camus caminando de un lado a otro de la estancia
- ¿Anciano maestro?, ¿hay un anciano maestro? – preguntó Shun
- Es más mito y leyenda que otra cosa, se dice que es el vampiro más antiguo y más sanguinario que alguna vez haya existido, al parecer se tomó a pecho la tarea de ponernos en raya a todos nosotros, es más un cuento de terror que todos sabemos, y lo usan como medida para imponer miedo – dijo Hyoga encogiéndose de hombros
- No entiendo – Shun lució confundido
- El anciano maestro, dictó las reglas que te hemos explicado, a los clanes de vampiros del mundo
- ¿Tenemos reglas?
- Es de lo que hablamos en el parque, y luego con Camus la primera noche que te traje con nosotros, te dije que debíamos ser hermosos, poderosos y carecer de remordimientos, ¿lo recuerdas? – Hyoga apretó la mano de Shun suavemente, el muchachito asintió, pero se volteó porque Albeore completó al decir:
- Lo que Hyoga no te dijo es que debemos ser selectivos con quienes elegimos para transformar en vampiros, por eso hablamos de Norman y del hecho de que él nunca encontró a nadie digno de compartir su sangre, el asunto es que, de acuerdo al anciano maestro, el don oscuro, o el vampirismo, como quieras llamarlo, no es para cualquiera, no somos asesinos simples o depredadores, debemos vivir y morir con gracia y decoro, no como animales en los bosques, o como los nidos de vampiros que se han estado formando en las zonas rurales de esta ciudad los últimos 20 años
- ¿Nidos?, ¿clanes?, ya me confundí – dijo Shun mirando a los mayores por turno en la habitación
- Si hablamos de clanes, nos podrías tomar a nosotros como ejemplo, somos un grupo pequeño, todos han sido creados por mí a excepción tuya, pero has aceptado vivir con nuestras reglas, ni Cristal, Albeore o Hyoga, han creado vampiros nuevos, y hemos vivido ocultos de los humanos por casi 200 años en esta parte del país, Hyoga era el más joven, hasta que tú llegaste, tenemos registros de mi creador y del suyo, y hasta ahí llegamos pero podemos trazar una línea sanguínea, hay clanes inmensos, otros como el nuestro que no lo es, preferimos vivir fuera del radar de los demás, no queremos poder o control de ciudades, como el Juez, pero esa es otra historia, en cambio los nidos que han proliferado estos últimos años, no tienen un líder determinado, no tienen reglas y no respetan la relación de vampiro y creador, la mayoría de ellos ni siquiera saben quién los creó, son como tú en ese sentido pero eso no es bueno, son libres pero no en el mejor sentido de la palabra, son anarquistas que viven bajo su propia cuenta y riesgo, bajo la creencia de que la raza humana sirve para nuestro deleite, entretenimiento y sustento, esos nidos no tienen el menor respeto por la vida humana y no necesariamente les importa si como raza, somos expuestos o no ante los humanos o ante quien sea – explicó Camus encogiéndose de hombros
- El juez, en buenas cuentas, es el brazo ejecutor de la ley, el anciano maestro la dictó, y él la ejecuta, en Europa ha exterminado a clanes enteros, arrasó con cientos de vampiros que causaron problemas en la edad media, si no fuera por él, la historia de Drácula sería muy diferente a lo que has escuchado, él nos ha mantenido ocultos y seguros desde el oscurantismo, lo que no se sabe es el destino del anciano maestro, pero Hades, el Juez, es el que actúa en su nombre en esta ciudad – completó Albeore
- Además, personalmente yo creo que no ha dado mucha atención a los nidos de vampiros por estos lares, porque está con las manos ocupadas, él quiere dar pelea a los grupos de cazadores que han llegado a la ciudad los últimos años, siendo la Orden de Aurelius la más prominente, el Juez cuenta con un grupo reducido de allegados de confianza, y han asestado golpes a la Orden por años, pero no han podido destruirla – acotó Cristal
- Son como cucarachas que por más que mates a una, tres aparecen en su lugar – dijo Hyoga por experiencias de primera mano, la Orden de Aurelius contaba siempre con nuevos miembros dispuestos a dar la vida por sus creencias
- Pero volviendo al tema de los nidos clandestinos, por llamarlos de alguna manera, no sé quién los protege, no sé si alguien los proteja o si estén organizados de alguna manera, pero definitivamente es una forma de vida bastante temeraria, esos nidos han sido atacados cada vez con más frecuencia por la Orden de Aurelius, o por cualquier otro grupo de cazadores, hace tiempo había una organización que se llamaba El Consejo, de ellos nos hemos sabido en años, pero estas organizaciones no se comparan con la rapidez con la que los vampiros nuevos son creados, ellos no tienen el menor respeto por la santidad del don oscuro, a falta de mejores palabras, ellos convierten en vampiro a cualquiera, la pureza de la sangre se va diluyendo y los nuevos vampiros no presentan ningún tipo de ventaja psíquica como la que tú si tienes, ni son tan fuertes como tú si lo eres – Camus explicó todo esto a un confundido Shun
- ¿Quién es este Juez del que tanto hablan?
- Es un vampiro que vino de Europa hace aproximadamente 300 años, llegó con un grupo de seguidores de 108 vampiros, fue un acontecimiento la verdad, su nombre real es Hades, aunque muy pocos lo saben, no le agrada que lo llamen por su nombre – dijo Albeore estirándose es su silla
- ¿Por qué no?
- Dice que los nombres dan poder, lo cual no necesariamente es cierto, aunque nadie sabe el nombre real del anciano maestro, pero todos le temen, nadie sabe cómo luce, porque cuando reaparece y sale de su confinamiento, es para acabar con clanes enteros de vampiros, con el Juez a su lado por supuesto, aunque ahora que lo pienso, estos últimos dos meses varios nidos de vampiros han sido eliminados, eso me lo contó un antiguo amigo que vive en la parte opuesta de la ciudad, en el Bronx, me dijo que esto ya se conocía en el círculo interno del Juez, yo pensé que los cazadores de la Orden de Aurelius estaban siendo más violentos de lo usual, y lo son, pero en estos exterminios recientes al parecer no son ellos los responsables, mi amigo está interesado en ello porque hay duda dentro del círculo de Hades, ellos no saben quién es el responsable del discreto exterminio de estos nidos, entonces se asumiría que ellos tampoco lo son, es algo inquietante, los tiempos nuevos a veces nos traen sorpresas nada agradables, quería comentarles esto para que sean prudentes, especialmente tú Shun – contestó Camus
- Yo soy prudente, Hyoga me mantiene seguro, aunque tengo una duda, ¿no que el anciano maestro solo dictó las leyes?
- No necesariamente, si vamos a creer los rumores y dar por cierto que Hades no llega aún a los 1000 años, cuenta la leyenda que el anciano maestro tiene más de 4000 años, es extremadamente poderoso y fuerte, el más antiguo que camina en la tierra, y que inverna cíclicamente porque no tiene un clan, entonces duerme por largos años, hasta que despierta con sed de sangre y reescribe la historia – dijo Hyoga con una leve sonrisa, claramente estaba bromeando
- ¿No crees que el anciano maestro exista?
- No sé si exista o no, nunca he escuchado de un vampiro que inverne, son solo historias Shun por lo que no debes preocuparte, en el supuesto no consentido de que el anciano maestro viniera por New York, no nos tomaría en cuenta a nosotros, a la final vivimos según sus reglas, por eso no hemos tenido problemas con el Juez tampoco, lo hemos visto de lejos, no tenemos relación con ellos o con ningún nido clandestino, es mejor nuestra vida así
- Eso es bueno saber
- Pues si… ¿vemos una película o algo? – propuso Hyoga frotando sus manos, la noche estaba fría, ellos tenían calefacción en casa pero eso no evitaba que sintieran la inclemencia del clima
- ¿Es en serio lo de que no vamos a salir en luna llena?, ¿has visto alguna vez un hombre lobo o una bruja? – preguntó Shun un poco más tranquilo
- Si los he visto, no he sido atacado por uno, pero no quiero arriesgar el cuello sin necesidad, ven… acompáñame a escoger la película… - Hyoga llevó a Shun a la otra estancia para escoger la película, Albeore miró a Camus y le dijo:
- Deberías dejar las reservas con el chico, Hyoga está entusiasmado con él
- Puede ser, pero hay algo que no me acaba de gustar de él
- ¿Qué?
- No lo sé… pero lo voy a vigilar…