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NO TE NECESITO por LIAMSUZUKI

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Estupefacto. Esa era la palabra que mejor describía a Misaki por ver a Kyo arrastrando a Luka y así alejarlo de su cuerpo.

No podía asimilar que de verdad el alfa estuviera ahí, tal y como lo había pedido minutos antes. Escuchaba el ruido de los golpes, de algo quebrándose; probablemente era algún hueso del par de alfas que se movían con sigilo por toda la habitación. 

Misaki aspiró la esencia de Kyo y sus ojos se tornaron muy grandes al hacerlo, era la primera vez que lo olía en su totalidad y le pareció fantástico.

Lavanda y rosas se mezclaron haciendo que Takahashi sintiera un calor muy placentero por su cuerpo y logró tranquilizarse un poco.

Movió su cabeza para ver el rostro del mangaka y notó algunos moretones, con el ojo izquierdo muy inflamado y sollozó por verlo así.

 

 

Ijuuin no escuchó a su omega por estar concentrado en Luka y le propinó un par de puñetazos por el estómago

 

—¡Imbecil! ¡Te dije que te no te acercaras a Misaki!

 

—¡El no es tuyo! 

 

Luka le dió un golpe a Ijuuin que le hizo girar su cabeza de forma brusca hacia la izquierda y pudo ver de reojo a Misaki. Él omega temblaba y eso le causó una ira incontrolable.

Crozzeira apenas si pudo ver el siguiente movimiento de Kyo y el puñetazo sobre sus costillas le hizo tambalearse, para cuando quiso reaccionar, una patada le llegó hacia la cara  y cayó de rodillas.

Luka intentó agarrar a Kyo abalanzándose sobre el y lo único que consiguió fue otro golpe en la espalda.

 

—Eres muy débil y yo que creí que..

 

Luka sonrió al tener cerca al dibujante y de forma ágil jaló su brazo para darle un puñetazo en la cara. Ijuuin sintió como sus labios se partieron y la sangre comenzó a resbalar de su barbilla.

 

—Mangaka idiota, solo quería cansarte.

 

Una patada en el estómago lo arrojó al piso y Kyo perdió el aire de sus pulmones, la silueta se movió muy rápido alrededor de él golpeándolo muchas veces por el estómago y cuello hasta que quedó tendido boca abajo. Luka estaba por dar otro golpe cuando Misaki lo detuvo.

 

<Detente, déjalo en paz..>

 

Ijuuin volteó al escuchar la voz del omega, por fin hacía uso de ella aunque no pudiera moverse. El rostro de Misaki era de completo dolor con lágrimas descendiendo por su mejillas.

 

Luka aprovechó el momento para ir con Misaki  que permanecía en estado catatónico, lo sujetó con firmeza y quiso abandonar la cabaña.

 

<NO, NO LO HARÁS>

 

La voz de Ijuuin inundó el lugar, quedó a espaldas de Luka y con un par de golpes por sus costillas liberó a Misaki que cayó de forma lenta al piso.

Takahashi veia por primera vez una expresión en Kyo de odio, enojo y repulsión a quien le causó todo este daño.

Lo siguiente fueron incontables golpes para Luka quien se retorcía por el dolor, al cabo de unos segundos vio a más personas entrar a la cabaña, gritando y tratando de detener a Ijuuin que no desistía en su misión de acabar con Crozzeira.

 

Misaki percibió un aroma a dulces de menta con unos ojos color miel que lo miraban absorto y sin poder entender las palabras que salían de la boca de ese omega.

—¡Takahashi kun! No cierre los ojos—pidió Yuki—Intente mantenerse despierto, diga algo.

—Tu.. tu eres el de las nutrias 

La temperatura de Misaki descendió drásticamente y su vista volvió a fallarle, sus ojos nunca habían pasado por tales dificultades para enfocar su entorno. Sabía que esa oscuridad no era normal y antes de todo fuera teñido de negro, alcanzó a mirar a Kyo que corrió para abrazarlo.

<MISAKI!>

 

 

 

 

Hiroki yacía con la cabeza agachada, a lo lejos escuchaba a Shinnosuke con un poco de hipo y tratando de dar su testimonio de lo ocurrido hace unas horas. 

Kamijo no quería soltar esa mano que se asomaba de la cama, era muy tétrico para quien lo viera, pero no le importó parecer un completo demente mientras todavía sujetaba a Akihiko.

Las lágrimas caían por su zapatos, la culpa le carcomía por no ir a buscar primero a Takahiro y traerlo a los brazos de Usagi san. Si tan solo hubiese hablado sincero con Akihiko esto jamás habría pasado. 

Una mano se posó en su hombro, no volteó a verlo pero supo que se trataba de Haruhiko, escuchó un ligero sollozo de parte del Usami mayor y Kamijo soltó a llorar como hace mucho no lo hacía.

Haruhiko tampoco podía expresarse, era cierto que su medio hermano le resultó detestable durante su adolescencia pero de ahí a que tuviera un final tan doloroso por culpa de esa mujer, le hizo que maldijera a Natsuko,

Cogió su teléfono y marco rápido a uno de los hombres que hicieron retén por varios puntos de Osaka para evitar su huida.

—Dime que la tienen.

—Lo siento Usami  Sama, pero Natsuko san tomó un vuelo comercial, se mezcló con las azafatas y nos dimos cuenta cuando ya hacía el despegue.

—¡Son unos imbeciles! ¡La quiero ahora mismo de vuelta!

—Eso no será posible por él momento, pero en cuanto llegue a su destino que es China, le aseguro que pediremos a la policía de aduana que la detengan. Disculpemos Usami Sama.

Le he preparado todo para el funeral de su hermano y de Takahiro san. Lo siento mucho, no fue nuestra intención causarle tantos inconvenientes.

 

Haruhiko ya no escuchó lo último y arrojó su móvil al piso. Era verdad, nadie tenía la culpa más que esa mujer trastornada, si antes la detestaba porque ella fue pieza clave en el sufrimiento de su madre, ahora la odiaba con todo su ser por causar este daño irreparable.

Escuchó el llanto de Hiroki y se agachó para abrazarlo.

—No llores, él está más que agradecido por todos los años de amistad que le brindaste, no es tu culpa Hiroki. Akihiko te quizo mucho.

 

Kamijō sintió como esas palabras le llegaron a su corazón y dejó que Haruhiko besara su mejilla para después estrecharlo muy fuerte.

 

—¿D..Donde está Kyo? ¿Como está Misaki? Quiero verlos.

 

—Van rumbo al hospital privado de mi pertenencia, tú hermano está bastante golpeado pero bien en lo que cabe, el que me preocupa es Misaki.

 

—¿Por qué? 

 

—Takahashi quedó en shock y no ha despertado.

 

Hiroki cubrió su boca por esa noticia.

—Estaremos aquí hasta que se nos autorice llevarnos a mi hermano y podamos reunirlo con Takahiro. Gracias por tu ayuda Hiroki, fuiste muy valiente al proteger a esos niños. Nowaki ya viene en camino por ti.

 

Kamijō  asintió y volvía a agarrar la mano de su amigo, Usami vio los dedos de Akihiko y lloró a lado del omega.

 

 

 

Isaka san y Yokosawa cubrieron su boca cuando confirmaron lo que Haruhiko Usami les dijo por teléfono: Takahiro Takahashi había perdido la vida.

Takafumi se acercó  al cuerpo cubierto con una manta blanca, no podía creer que de verdad esto ocurriera si hace unas semanas lo vió muy enérgico y queriendo golpear a Kyo por besar a Misaki. 

Agachó la cabeza y volvió a cubrir al hermano mayor, sacó su teléfono y se comunicó con Kirishima para decirle que no llegaría a la cena.

Al cabo de unos minutos el médico de nombre Tatsumi le extendía el documento a Isaka san que explicaba la causa de muerte de Takahiro así como las dolencias que presentó durante estos años separado de Akihiko. Ryuchiro los tomó con mucha tristeza y volteó a ver a la mascota de Misaki. 

 

—Chibi lo perdió todo, este tipo de finales no son los que deberíamos tener por ser alfas y omegas. No es justo.

 

El director de Marukawa suspiró, unas manos muy gentiles lo abrazaron por la espalda y dejó que Asahina lo consolara con su aroma.

 

 

 

 

 

 

Kyo permanecía estático, viendo la respiración acompasada de Misaki y con el suero conectado a través de una intravenosa por la mano del omega.

Su ojo izquierdo ya estaba cerrado y la cara la sentía muy tirante a causa de todos los golpes que recibió de Luka.

Miró la muñeca de Misaki con 2 piquetes más, Yuki le había administrado un supresor muy fuerte para controlar el celo y aroma del omega.

Lo agradeció de verdad o de lo contrario hubiera sido un caos mientras fuera trasladado y atendido en el hospital por todos los alfas que había a su alrededor.

El aroma a rosas de Misaki era muy intenso, incluso Ijuuin tuvo el pensamiento insano de llevárselo a otro lado y por fin unirse haciendo el amor como su cuerpo se lo pedía.

 

~Soy un enfermo por pensar esas cosas, perdóname Misaki~

 

La puerta fue abierta y el médico entró para revisar el suero y la frecuencia cardiaca de Misaki, miró a Kyo que ni parpadeaba, su ojo bueno estaban en total concentración en Takahashi, como un fiel guardián.

 

—Debería probar la cena Ijuuin san. Si gusta puedo pedir que la vuelvan a calentar.

Kyo negó, no tenía hambre. Su único interés era ver que Misaki abriera los ojos. Si no lo hacía, jamás podría perdonarse por no llegar antes. Por no ayudarle con Takahiro.

—El joven Takahashi se encuentra bien, depende de él que quiera despertar. Su cuerpo está procesando todos los cambios que le fueron inhibidos y si a eso le sumamos que la conexión con su hermano fue rota, entonces le está costando mucho trabajo. Le tomará algunos meses acostumbrase al celo y puede que le sea muy doloroso. Por lo demás es un omega saludable, cualquier cosa de la que tenga duda, no dude en llamarme Ijuuin san.

 

Kyo hizo un leve movimiento, el médico supo que quería continuar solo con el niño y salió muy despacio de la habitación.

El alfa se acercó para agarrar la mano de Misaki y besar el dorso.

 

 

 

 

Hiroki seguía incrédulo a toda la historia que dijo Luka y Shizuku en el informe preliminar para la investigación de Natsuko. Quizo romper las hojas y Nowaki las arrebato de sus manos antes de hacerlo.

 

—Debes tranquilizarte Hiro san

 

—No puedo, lo que hizo esa mujer es imperdonable. ¡Es una loca! Y mas me enoja que no puedan incriminarle porque el principal afectado no está despierto. !¿Que espera ese mocoso para despertar?!

 

—Solo es una semana que lleva inconsciente Takahashi kun. Lo que sí me preocupa será su reacción al ver el cuerpo de su hermano. Es muy lamentable tenerlo resguardado en la morgue de los Usami junto al de Akihiko para que Misaki mire a ambos antes del sepelio.

 

Kamijō apretó los labios, no quería volver a llorar por Akihiko, pero el sentimiento lo invadía con fuerza, se dejó caer por el sillón y tocó su frente. Nowaki percibió su aroma a vainilla y fue a acariciarlo.

 

—¿Podrías pensar un poco en mi? No tienes idea de cuanto sufrí al enterarme que te tenían secuestrado.

 

Hiroki volteó a verlo, Nowaki también tenía rastros de la pelea con los hombres de Natsuko  además de que no descansó ningún día para estar con él y protegerlo.

 

—Discúlpame por favor.

 

Kamijo percibió la tristeza y el amor que Kusama le profesaba día a día, así había sido desde que se conocieran en el parque y Nowaki no dudara en cuidarlo, esto le motivó a acercarse y rozar sus labios con los suyos.

 

~Hazme olvidar, Nowaki~

 

El médico se sorprendió mucho de escuchar la suave voz del omega de Hiroki y reaccionó cuando los labios de su amado devoraban los suyos de una forma tan pasional.

Kusama no dudó un segundo y recostó a Hiroki para besar su cuello mientras sus manos le despojaban de la ropa...

 

 

 

 

 

—¡Con un demonio! ¡Te estoy diciendo que tienes que ir a tu departamento! ¡ Y ya apestas Ijuuin Kyo! 

—No grites Isaka san.—Contestó el mangaka tomando un poco de agua y dejó el vaso en la mesa—Y lo que dices es mentira o de lo contrario las enfermeras harían cara de asco cuando me ven. Siempre que entran me sonríen y las oigo hablar por el pasillo, dicen cosas agradables de mi.

Isaka san infló las mejillas por la renuencia de Kyo en abandonar la habitación donde seguía postrado Misaki.

—Tu no entiendes, no entiendes que aunque estes aquí no puedes hacer nada por Misaki. Y no has atendido ninguna de tus responsabilidades, tu manga ya salió a la venta y tampoco te has tomado la molestia de ver las opiniones o las ventas. Te recuerdo que eres mi socio y te puedo dar una patada en el trasero si sigues con esa actitud mediocre.

 

—Yokosawa me entregó un informe y lo leí un poco, los fans están contentos con mi trabajo y se los agradezco profundamente. No quiero sonar malagradecido pero eso no me consuela si él que deseo que lo lea, no despierta—Ijuuin miró de nuevo a su Misaki.

 

—Eres un tonto, si no te cuidas tú, no podrás hacerlo con Misaki.

 

—Es lo mismo que le digo, pero es muy terco el cabrón.

 

Hiroki había llegado al hospital y le arrojaba un cambio de ropa a Kyo.

Ijuuin sonrió de ver a su hermano y aspiro profundo.

 

—Creo que estas confundiendo los aromas Isakan san, quien apesta es Hiroki. Hueles a sexo hermano, por fin calmaste la ansiedad de Nowaki. Ya veo porque no veniste a verme estos 2 días.

 

—¡Callate mangaka tonto! De seguro quieres que te cierre el otro ojo.

 

—¿De verdad ya lo hiciste con Nowaki?—preguntó emocionado Ryuchiro y Hiroki enrojeció confirmando lo dicho por el alfa.

 

Ijuuin quiso seguir bromeando pero el ruido de uno de los aparatos a los que estaba conectado Misaki hizo un ruido extraño. El alfa se acercó a toda prisa y revisó el monitor. 

 

—¿Qué sucede?—dijo Hiroki

 

—El médico dijo que posiblemente Misaki esté soñando y tiene esos sobresaltos. Ha estado así desde ayer en la noche pero este episodio le duró más tiempo.

 

Ijuuin dejó ver una cara muy triste y sin pensarlo volvió a poner la silla para sentarse a lado de Misaki y estrechar su mano.

 

Hiroki e Isaka veían al mangaka concentrado en Takahashi y liberando su aroma como para tranquilizarlo. Jamás lo habían visto preocupado y esmerándose tanto por una persona, no a tal grado de no querer comer ni dormir para no desviarse de su tarea.

 

—Esto no está bien Kyo—Hiroki le acomodo el cabello algo sucio—Hazme caso, ve a casa y dúchate, yo cuidaré de este niño.

 

—No Hiroki, no me iré. Estaré con Misaki hasta que abra los ojos. 

 

Ambos omegas lo miraron resignados, al parecer no había poder que hiciera entrar en razón a Ijuuin. Así que decidieron acompañarlo por el resto de la tarde.

 

 

 

 

~Misaki ¿Qué  haces aquí?

 

~Como no llegabas, quise alcanzarte. Te traje un paraguas Takahiro, pero creo que ya no tiene mucho caso. Te has mojado por completo.

 

Mi hermano sonreía, ni la lluvia mermaba la hermosura de su rostro y no tuve mas remedio que preguntar.

 

~¿Por qué estás tan contento hermano?

 

~He ido al médico 

 

~Eso lo sé y ¿que te dijo?

 

~Tendré un hijo Misaki, Un bebé de Usagi san y mío.

 

Mis ojos se abrieron enorme y solté los paraguas para correr y abrazarlo. Quise decirle que Usagi san había ido a buscarlo pero eso no tenía caso. Estoy seguro que Usami san estará muy contento de escuchar tan maravillosa noticia, que desistirá de irse.

Takahiro alzó mi rostro y me dio un beso en la mejilla.

 

~¡Estoy muy feliz por ti nii-chan!

 

~Mi fe es grande Misaki, también se que donde sea que Usagi san, nuestro hijo y yo nos encontremos, vamos a ser muy felices.

No importa la distancia o el tiempo que nos lleve hacerlo, es inevitable que nos encontremos. Nacimos como parejas preestablecidas para vivir en este mundo y nos reuniremos aquí o en la otra vida.

 

~No digas esas cosas, pareciera que hablas de muerte. Y no quiero ese destino si alguien sufrirá por mi culpa, no es bueno ser un omega.

 

Mi hermano no contestó pero en ningún momento dejó de sonreír.

 

~Yo te protegeré Misaki, siempre lo haría. Es momento de que regresemos a casa. Mañana iré a buscar a Usagi san. ¿Ya tienes pensado que hacer para ir a conocer a ese mangaka del que tanto hablas?

 

~Sí, entre a la rifa 36 veces para ganarme un boleto y verlo en su firma de autógrafos. 

Mi hermano agarró mi rostro para besar mi frente y escuché sus últimas palabras.

 

~Es hora de volver Misaki. Sé feliz

 

La imagen de mi hermano muy sonriente a lado de quienes ama, me enseño el camino....

 

 

Ya era media noche e Ijuuin veía a Misaki sollozar con movimientos algo fuertes por su cuerpo y se asustó, a toda prisa buscó el botón para llamar al médico y un respiro muy profundo de parte de Takahashi lo dejó atónito.

 

Misaki quedó en calma, abrió los ojos muy despacio y un par de lágrimas salieron de sus ojos.

Ijuuin por fin soltó el aire retenido por la sorpresa y le hablo a su omega.

 

—Misaki, mi amor.

 

El castaño movió los ojos hasta dar con la figura de Kyo y entre abrió los labios. Tardó un momento en que su boca emitiera sonido pero lo logró.

 

—¿Q..qué haces aquí, I.. Ijuuin ?


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