Ijuuin fue directo a su auto después de la advertencia a Luka sin mostrar un ápice de nervios y miró por donde los Takahashi habían abandonado el combini.
El mangaka se presionó la cabeza un poco, signo del estrés y mal humor multiplicado de estas últimas semanas, y si a eso le sumaba el interés desarrollado por Misaki Takahashi y sus groserías, el resultado era un alfa a nada de perder los estribos.
—Misaki me escuchó ¿cierto?—se preguntó a sí mismo—Y que ese niño obedeciera mi orden es porque empezamos a tener alguna conexión ¿NO?
Ijuuin se revolvió el cabello confundido por sus pensamientos, era cierto lo que Luka le dijo de que bien pudo ser suerte, un alfa podía controlar a los demás géneros con su voz u olor y solo unos cuantos no mostraban la sumisión total, siendo los betas, los menos afectados. Así como Tōdō que buscaba llevarle la contraria siempre.
Pero ni aún sabiendo eso dejaba de pensar que un pequeño lazo se había formado con Misaki. Ver su rostro sorprendido y algo sonrojado cuando uso la voz, hizo que sus motores se encendieran a mil.
—Me estoy viendo como un urgido y lo único que he conseguido de Misaki son sus golpes, desprecio y ...¿A alguien le importa?
Su móvil comenzó a sonar sacándolo de sus preguntas y vio un mensaje de Hiroki.
"Te estoy esperando, necesito que me des tu opinión sobre la dedicatoria que escribí para mi libro"
El mangaka escribió de forma rápida
"De seguro le dedicaste una frase de la canción que escuchamos hace muchos años ¿La recuerdas?:
Infrahumano
Espectro del infierno
Maldita sabandija
Cuánto daño me has hecho, Usami Akihiko
Rata de dos patas, te estoy...
Hiroki al instante le contestó
"Escupí el té . Eres un idiota Kyo"
"Lo mismo va para ti, Hiroki"
"No te mando a la verg@ porque sé que te encanta".
"Deberías escribir "Nos encanta" Por una de esas cosas es por la que lloraste durante años"
"Cállate y trae tu ponzoñoso trasero a casa de inmediato, tu jefe ha dado el visto bueno al manuscrito para que comiences el entramado.
Ijuuin bufó un poco, no quería saber nada de su manuscrito, suficiente era con terminar el dibujo y la historia del capítulo. A veces sentía que odiaba a Kirishima, todos los días estaba sobre él y más ahora con la ausencia de Tōdō.
Lo que hoy creía que sería un día tranquilo para relajarse, dibujar un poco y dejar de pensar en esos ojos verdes, se convirtió en una escena de ¿celos?. Ni él mismo lo sabía, pero por nada del mundo permitiría a Misaki estar junto a ese hombre que estaba seguro, seguía al beta.
Él mangaka dió otro vistazo a sus redes sociales y sonrió un poco cuando vio que "Tacos al pastor y otras 1059 personas les gusta la foto que compartiste"
Subió a su automóvil y miraba por los alrededores para comprobar que ese alfa en efecto, no estuviese todavía cerca.
—Tal vez debería hacer una investigación exhaustiva de ese tipo.
Kyo acomodó su material de trabajo y encendió el auto para ir a su hogar.
—Esta es la décima vez que te digo que YO NO ESTABA CON IJUUIN SENSEI
—¿No? ¿Entonces por qué huyó cuando me vio ingresar al combini?
—Ya te dije que no era él— contestó Misaki lo más calmado posible y escondió sus manos con las mangas del suéter para que Takahiro no viera el temblor de ellas.
—Lo reconocería ahí y donde sea. Te dije que no quiero que tengas ningún trato con ese Alfa.
—¡No tengo tratos con él! e Ijuuin Sensei puede andar donde se le dé su regalada gana, en todo caso que fuera él a quien viste, y ya deja de tratarme como si estuviera loco. Te he demostrado que soy capaz de muchas cosas, me he superado bastante desde que nuestros padres murieron.
Misaki dio la vuelta dispuesto a marcharse a su habitación y su hermano mayor le cogió de la muñeca.
—Lo siento Misaki, no quise que te alteraras
Takahiro le acarició el cabello y el castaño se soltó del agarre para subir por las escaleras
—Estoy bien. En un momento bajo a preparar la cena.
—La haré yo, Misaki. Te avisaré cuando esté lista
Apenas si ingreso a su habitación y Misaki fue corriendo al sanitario para mojarse el rostro, esto no podía estar pasando, él no había escuchado la voz del alfa de Kyo, eso era imposible. Y para colmo volvía a mentirle a su hermano sobre la presencia de Ijuuin Sensei en el combini.
Se restregó la cara varias veces y fue a su gaveta para sacar una toalla, el rubor era una cosa que permanecía en su piel de forma insistente y no le agradaba del todo.
Respiro varias veces y salió para encender su computadora portátil y busco "voz"
"Una orden dada por un Alfa, que obliga a los géneros inferiores de la jerarquía a seguir el comando sin importar su opinión o voluntad de seguir dicha orden..."
Misaki se sabía de memoria esa definición, pero esto fue totalmente distinto. No era como cuando algún alfa como Kirishima ó Kaoru san se dejaban escuchar por la editorial, incluso al castaño le costaba trabajo distinguir los comandos de voz así como los olores de ellos.
Escuchar a Ijuuin Sensei, fue igual a la ocasión que huyó de sus brazos cuando lo besaba en el auto.
Misaki volvió a sentir esos labios por los suyos y sacudió la cabeza varías veces para borrar el recuerdo.
Quizo buscar algo más de información y su móvil comenzó a hacer mucho ruido por una llamada de Yokosawa Takafumi
—Yokozawa san, buenas noches ¿Qué se le ofrece?
—Buenas noches Misaki ¿estarás ocupado el fin de semana?
—No. ¿Por que la pregunta?
—Bueno... es que...
—¿Si?
—No le digas a nadie pero quiero ir a ver a Onodera, de acuerdo al calendario ya paso la cuarentena del nacimiento de sus hijos, entonces no habrá problemas si nos acercamos al nidito de amor, quiero confirmar que estén saludables.
—Oh, ya veo. Me sorprende mucho su interés
—Si, ya sé que no me porte muy bien con el en un principio. Pero nunca es tarde para hacer lo correcto, le prometí que iría a verlos en cuanto pudiera y me agradaría que me acompañaras.
—Con todo gusto, el problema es mi hermano.
—Si es por eso no te preocupes, puedes comunicarlo conmigo y le diré que saldremos a varias librerías por estadísticas de Marukawa.
Misaki no lo pensó dos veces y como resorte se paró de la cama para ir con Takahiro quien se encontraba picando unas verduras, no pasó desapercibido su semblante triste y el castaño le ofreció el teléfono
—Es mi jefe Yokosawa san. Quiere hablar contigo.
El castaño se apartó de él y una pequeña sonrisa se formó en su rostro, ya tenía tres meses que no veía a Ritsu y aún le faltaba tiempo para regresar a Marukawa, Onodera fue uno de los primeros en instarle por entrar a la compañía, seguido de Tōdō quien también fuera su senpai en la Universidad.
Vio como Takahiro asentía a la propuesta de Yokozawa y terminó la llamada haciendo que el castaño diera brinquitos de felicidad.
—Yokosawa san tendrá que venir por ti hasta acá.
—No hay problema con eso.
—Solo dile que se asegure de usar su medicamento, no me agrada la idea de que un omega y un beta anden solos por todo Tokio.
—La mayoría de las personas creen que Yokosawa san es un alfa, no creo que haya problema con eso hermano.
Misaki pudo ver los ojos vidriosos de Takahiro y se acercó de inmediato.
—¿Qué te ocurre?
—Nada, es la cebolla que me hizo llorar. Ya casi está listo, ve acomodando los platos para que cenemos Misaki.
Takahiro dio la vuelta y fue a revisar su curry.
Misaki veía al hermano, que sin duda había sido como padre todos estos años.
El menor se sintió algo triste por su expresión y fue a atender su orden.
Después del beso fallido y la respuesta a su voz, no podía apartar a Misaki de su cabeza. ¿Por qué le era tan difícil desprenderse de ese recuerdo?
Ijuuin sintió como le pellizcaban el brazo y Hiroki gruñó un poco
—Si vas a estar tonteando mejor ya vete a dormir Kyo.
—Ya te dije que el prólogo y el primer capítulo son muy buenos, la dedicatoria a mamá también es muy emotiva.
—Gracias, Tōdō me dijo lo mismo. ¿En serio no vas a requerirlo para terminar tu manga?
—No, ya lo estás contratando tú. Además todavía tiene la oferta de Isaka san, así que trabajo no le va a faltar a ese mocoso.
—Hablando de mocosos ¿Que hay de ese tal Misaki?
Ijuuin se tenso, no era dado a hablar de otras personas y menos de ese niño.
—Me sorprende que lo invitaras a cenar ¿Tienes interés romántico por ese omega?
—¿Que dijiste?—volteó confundido Kyo
—Que si tienes interés romántico por Misaki
—Él es beta.
—A mi me pareció lo contrario por su apariencia y es sorprendente que ya lleve 2 meses cerca de ti y no te lo hayas llevado a la cama. Eso me agrada, tal vez lo invite a salir también.
—No digas tonterías Hiroki. No le quieras hacer de alfa por el rechazo del novelista.
—Nadie dijo que me quiera acostar con Misaki. Lo digo porque, para que mi querido hermanito se haya interesado en él, entonces es alguien que me agradaría conocer.
Kyo lo miraba absorto y busco por su cajón los documentos de Misaki. Encontró el expediente del castaño y se lo mostraba a Hiroki.
—Ahí dice que es beta, así que tus suposiciones son tontas.
Hiroki leyó las primeras líneas y arrugó el documento muy sorprendido
—¡¿TAKAHASHI?! En serio su apellido es TAKAHASHI. Esto no puede ser posible
—¿Por qué no?
—¡Ay no! ¡Sí es!—volvió a leer—¡este niño es el hermano de Takahiro!
—¿Y?
—¿Como que y? ¡¿Ya se te olvidó mi historia?!
Hiroki agarró del cuello a Kyo y le golpeó en la frente—Ya me di cuenta que mis platicas te las pasabas por el culo, Ijuuin Kyo
—Auch ¡¿Que te pasa?!
—!Misaki es hermano de Takahiro Takahashi!
¡El hombre que Usami Akihiko no podía olvidar!
Ijuuin comenzó a toser por él estrangulamiento de su medio hermano y le apartó las manos para poder respirar.
—Lo..lo siento, sí olvidé esa parte ¿Quieres contarla otra vez?
—Idiota
—Bueno, si no quieres, te entiendo. Pero eso ya fue hace muchos años. No deberías perturbarte por eso Hiroki.
—Ya está superado, pero la última vez que vi a Akihiko me pareció que él no lo asimila del todo.
—Ahora que recuerdo, dijiste que ese hombre vivía en Inglaterra haciéndote competencia. ¿Por que Takahiro Takahashi cambió su residencia a Japón?
—Ni idea. Es una gran coincidencia que te hayas encontrado con el hermano menor aquí en Tokio. ¿Y sabes? A esas cosas a veces le llaman destino.
—Esas son tonterías Hiroki y lo sabes. No por nada seguimos solos—dijo algo inseguro el alfa—Iré a ducharme y después a trabajar con mi manuscrito.
—Por cierto, en el correo decía que Isaka san desea que el entramado sea hecho de forma manual.
—¿Está loco? Me tardaré los años haciéndolo así. Voy a comunicarme con él.
Ijuuin desapareció de la sala dejando a Hiroki muy pensativo...
—Ritsu, creo que estoy mal de la cabeza
—¿Lo dices por lo de Ijuuin Sensei?
—Así es.
—Me sorprende bastante que no te hayan echado de Marukawa por agredirlo. Y más tú Misaki, que tengas las agallas para querer golpearlo, esto solo me recuerda cuando los omegas defendemos nuestro territorio ó a nuestros hijos. ¿No le parece así, Yokosawa san? —Preguntó Onodera viendo a Takafumi que sostenía a uno de sus bebés.
—No hablen tan alto, no quiero que perturben a los bebés—Yokosawa acomodó el gorrito del niño llamado Suki —Y coincido con Ritsu, somos agresivos ante el peligro de nuestra pareja o hijos. Tuviste suerte Misaki y Ryuichiro Sama dijo que necesitaba hablar contigo de nuevo.
Misaki se tenso al oír eso y abrazo con fuerza a Rumi, el gemelo, ambos copia fiel de Takano Masamune. Si contara lo del beso y la voz de Ijuuin, de seguro lo tildan de loco por completo.
—Ustedes se verían muy bien con hijos y al parecer mis niños están de acuerdo, no se han despertado por estar en brazos de otras personas—sonrió Ritsu para ambos y Yokosawa acarició las mejillas del bebé.
—No te voy a negar que ver a tus hijos hace que me despierte el instinto maternal, pero no me siento preparado para una responsabilidad así.
—¿Bromea Yokosawa san? Si algo de lo que estoy seguro es que de los tres, usted es el más apto para cuidar bebés. No debería demorarse en eso. Estoy seguro que Kirishima san está más que ansioso por tener un hijo suyo. Y tú Misaki, bien podrías adoptar ó enlazarte con un omega y así...
—¡No!..—Misaki se cubrió la boca por el grito—digo no lo sé, yo quiero estar con... con—calló muy asustado.
—¿Con quien Misaki? ¿Hay alguien que te guste?
Misaki no sabia que contestar, la imagen del mangaka fue recreada en su mente, por suerte el bebé Rumi comenzó a abrir los ojos y Ritsu lo cogio entre sus brazos. El castaño agradeció la interrupción del retoño de su amigo y veía a Onodera sostener al pequeño con mucho amor.
—¿Como le haces cuando ambos se despiertan y quieren comer?—preguntó Takafumi besando la frente del bebé
—Por suerte eso solo ha pasado un par de veces y Masamune me ayuda a acomodarme a los bebés. Me siento con varias almohadas por el sillón o la cama y los dejo que se prendan al pezon como les sea más agradable. Son unos niños muy lindos.
—Nada que ver con el odioso padre—siseó Misaki— Es broma.
—Te admiro por cuidar a los bebés tu solo en lo que Masamune está en la editorial. Mi amigo hizo una buena elección contigo sin duda.
Ritsu sonrió por las palabras de Takafumi mientras Misaki los veía absorto y algo triste. Él nunca sabría lo que es tener un bebé en su vientre y si quería gozar de la paternidad tendría que adoptar o estar con un omega como lo dijo Onodera. Recordó las palabras de Yokosawa san y preguntó algo para dejar de pensar en bebés y embarazo.
—¿Que es eso que quiere hablar conmigo el señor Isaka?
—Creo que es algo referente a Ijuuin Sensei.
Misaki desvió la mirada por la respuesta, tal parecía, que librarse de Ijuuin Kyo no sería fácil y menos cuando él se lo había buscado.
Una nueva semana inició en Marukawa, ya estaban en fin de ciclo y Misaki podía ver a los editores corriendo, otros tantos parecer zombi por lo mal de su aspecto y unos escasos tirados por los diferentes departamentos de la editorial.
Agradecía ser del área de ventas y dedicarse en mayor parte a los balances y números. Una que otra ocasión ayudaba en la edición como lo hizo con Aikawa y su autor enfermo, cosa que también disfrutaba.
Escuchó ruido por la oficina y volteó para encontrarse con Isaka san. El omega lo veía con su sonrisa bonachona y Misaki le dio la bienvenida
—Buenos días Isaka san
—Buenos días mi querido chibi, que guapo. Me gusta mucho la nueva loción que usas últimamente, estás siendo un éxito.
Isaka le olió el cuello haciendo que Misaki lo viera con la ceja alzada.
—¿Qué se le ofrece Isaka san?
—Pues bien niño, como podrás ver ya estamos cerca de la fecha límite y todos aquí están como locos. Y tengo un autor que se quedó sin editor hace más de un mes, para mi mala suerte no hemos encontrado el reemplazo y es ahí donde entras tú mi estimado Misaki Takahashi.
—No.. no quiero si se refiere a Ijuuin Sensei
—¡Y también lees la mente! Qué habilidades las tuyas Chibi, Chibi.
—No..—Misaki sentía que respiraba entrecortado por la noticia— Además..mi hermano no permitiría que fuera con Ijuuin Sensei.
—No te preocupes por eso, llegarás aquí y yo personalmente te llevaré al lugar de Ijuuin Sensei todos los días para que le ayudes a terminar el entramado del nuevo capítulo. Me gustó mucho el trabajo que hiciste con el autor de Aikawa y eso que fue hecho a la antigua.
Estoy seguro que el nuevo tomo de The kan será un éxito, así que recoge tus pertenencias que ahora mismo vamos con Sensei y no te preocupes por Yokosawa san, el ya estaba informado de esto.
Misaki quedó estático, oyendo a Isaka san por el teléfono pidiendo un taxi para llevarlos.
Unos minutos después, el director de Marukawa le sonreía y casi de forma robótica agarró su bolso, con su corazón latiendo apresurado.
—Así que no vendrás a ayudarme, pues que desconsiderado. ¡Te recuerdo que mi manga nos da de comer a los dos Kirishima Zen!
—Callate Kyo, es tu trabajo y tienes que hacerlo. Y yo te recuerdo que es tu culpa que Tōdō no esté para ahí ayudarte y tampoco es mi culpa que los demás dibujantes estén ocupados. He mandado a Shizuku para auxiliarte, además Isaka san dijo que también iría a verte.
—No quiero a Isaka aquí
—Pues te jodes, tengo asuntos llamados Yokosawa Takafumi y su celo, así que, adiós.
Ijuuin arrojó el móvil después de que le colgaran y regresó a su estudio para continuar con el entramado, era más fácil hacerlo a través del ordenador pero no lograba el mismo efecto y por obvias razones se darían cuenta.
Tan ensimismado se hallaba con su manuscrito que el tiempo pasó volando, escuchó el timbre de su lujoso departamento varías veces.
—¡Tsk..! ¿Por qué no entra Isaka san? Siempre pasa como si estuviera con Asahina en su departamento.
El mangaka se puso de pie y a toda prisa fue a abrir, al llegar a la sala el olor le hizo tambalearse y sucedió otra vez:
~MISAKI~
El castaño tras la puerta escuchó su nombre y pasó algo de saliva por la sorpresa
—Creo que me estoy volviendo loco, esto no puede estar pasando....