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Sobreviviendo a Teyvat por La loca de los gatos fujoshi

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Temática de Febrero: Universos Paralelos


Después de un extenuante día de actividades, los chicos de Bangtan regresan a sus respectivos hogares, la ciudad de Seúl, ruidosa como siempre, no ofrecía el mejor de los escenarios para ver antes de dormir, pero aquel día, Suga regresa a su departamento y mira por la ventana las numerosas luces que acompañan la iluminada ciudad


—Ah, que cansado me siento, entre más populares nos volvemos se vuelve más complicado —lanzó un largo suspiro— Pero amo hacer esto ¿Qué se le va hacer?


La sonrisa que acompañó su rostro fue fugaz, luego se acercó al refrigerador y sacó de ahí una lata de jugo de uva, la que bebió tranquilamente, hasta que su teléfono celular sonó, vio la pantalla, se trataba de Jimin, sonrió amplio


—Nos acabamos de ver, pero ya me extrañas, que tierno —dijo de broma, como solía decirle cada vez que hablaban a solas


—No puedo, simplemente no puedo —comentó atareado sin saludar o decir algo respecto a las palabras de su compañero


—¿Qué pasa? ¿Está todo bien? —preguntó bastante preocupado


—Tienes que ayudarme por favor —urgió con desesperación


—Estás asustándome, habla ya —respondió un poco nervioso


—Necesito farmear Bruja Carmesí para mi Diluc, pero no puedo pasar el dominio —respondió casi al borde del colapso


Al oír semejante cosa, Suga casi se echa hacia atrás


—¿Qué te pasa? Me asustaste —regañó casi a punto de darle el patatús


—Vamos, conéctate, necesito esos artefactos para buildear a mi Diluc —insistió— No tengo mucho tiempo para jugar y lo sabes


—Eres un caso —lanzó otro suspiro— Deja al menos me baño


—Está bien, mientras haré las diarias —contestó todo feliz de la vida


Suga colgó el teléfono y bufó con un poco de fastidio, él también gustaba de jugar Genshin Impact, pero ese día estaba cansado, además que hace tiempo no juntaba protogemas y no tenía personajes nuevos, a diferencia de su amigo y compañero, que al parecer, acababa de obtener a Diluc en el Gashapon activo


Hizo lo que dijo y luego de comer algo ligero, conectó su consola y encendió el juego en su PS5, solicitó entrar al mundo de Jimin y este lo aceptó enseguida


—Mándame invitación al dominio —pidió luego de entrar


Enseguida la invitación para entrar al Palacio Oculto de la fórmula Zhou llegó, luego de elegir a sus personajes comenzaron a jugar.


Del otro lado de la ciudad, en su propio departamento, Jimin jugó emocionado porque esta vez iba a poder conseguir los artefactos de la bruja carmesí que necesitaba. Uno de sus personajes favoritos desde que jugaba era Diluc, pasó por más de un banner antes de poder conseguirlo, por lo que estaba muy feliz


Suga sentía tanto sueño, que comenzó a cabecear mientras se enfrentaban a los enemigos de ese dominio por cuarta vez, por lo que del otro lado, Jimin veía de repente como los personajes de su compañero se quedaban sin moverse


—¿Sigues ahí? —preguntó un par de veces, luego perdió y sus personajes murieron, así que tuvo que buscar una estatua de los siete, mientras esperó que el otro contestara


—Se quedó dormido seguramente —gimió con tristeza— No hay más remedio que desconectarme


Se puso de pie y de pronto un olor a quemado llegó a su nariz, miró hacia su consola y un poco de humo salía de ella, asustado, Jimin corrió y la desconectó, pero al hacerlo, una pequeña chispa de electricidad le removió las células del cuerpo


No se electrocutó, pero la casi imperceptible descarga lo hizo marearse y cayó al suelo poco después, perdiendo el conocimiento


—Ay, mi cabeza —se quejó mientras intentaba abrir los ojos


Poco a poco pudo hacerlo y ante él, lo que vio, le dejó casi atónito, haciéndole creer que seguramente estaba teniendo el sueño más loco de su vida. El cielo azul resplandeciente lo confundió pues era irreal, a su alrededor el escenario parecía conocido


—¡Oye tú! Cuidado —escuchó una voz de mujer que le resultó por completo conocida


Terminó de despertar y se sentó en el suelo duro donde estaba acostado, a su lado, una flecha se clavó en el árbol junto a él, después de mirarla, enfrente vio a una chica acercarse rápidamente con cara preocupada, esa chica era ¡Amber! La cazadora del gremio de aventureros


—¿Estás bien? —preguntó al llegar, sacando la flecha que no logró dar sobre el jabalí que intentaba cazar para la comida


—Esto está de locos —expresó emocionado, aun creyendo que era un sueño— Eres tan linda


—¿Qué dices? —inquirió desconcertada


—Esto debe ser —miró a sus alrededores— Agua clara, en Mondstadt —dijo con emoción


—No eres de aquí ¿cierto? —observó sus ropas


Jimin no era consciente aún de cómo se veía o si acaso era un personaje, pero estaba muy entusiasmado con la idea, aunque si era sincero, le gustaría ser Diluc, pero dada la reacción de Amber, eso no era posible


—Lo siento, debo irme —corrió hacia la laguna para poder ver su rostro


Como sospechaba, lucía como un personaje de la historia, pero para tristeza suya, no era un personaje principal, parecía como un ciudadano común de Liyue


—Ni siquiera tengo una visión —revisó toda su ropa y no encontró nada, eso lo desanimó— Bien, puede que encuentre algo interesante


Caminó tranquilamente, era extraño, su cuerpo se sentía como él mismo, pero no podía correr, por mucho que lo intentaba, solo podía caminar. Su estómago comenzó a gruñir de hambre, lo cual parecía extraño, porque en sus sueños nunca sentía eso


—¿Tendré moras? —revisó el interior de su pantalón y encontró un saco, lo abrió y efectivamente encontró mora, pero no mucha— Caminare a Mondstadt —decidió y lo hizo, pero a medio camino sintió cansancio


Se detuvo un momento a descansar, no faltaba mucho para llegar a la ciudad, pero el hambre no ayudaba tampoco. Finalmente pudo llegar y fue directo al Gran Cazador por algo de comer, compró un poco de pollo asado a la miel y una vez que se sintió satisfecho comenzó a recorrer la ciudad


Con gran fascinación vio ante sus ojos la hermosa ciudad, era como estar en un cuento medieval


—Si estoy aquí entonces —sus ojos brillaron— Tal vez pueda ver a Diluc, con suerte estará en el Obsequio del Ángel, que tonto fui ¿Por qué no me dirigí primero al Viñedo del amanecer? —lamentó


Arrepentido de no haber trazado mejor plan, probó suerte a ir a la taberna, pero aunque preguntó a Charles, este no le dio razón de Diluc. Decepcionado, Jimin decidió seguir revisando la ciudad, primero fue a la Catedral, maravillándose de la hermosa arquitectura


Luego de un par de horas y tras haber visitado todos los lugares habidos y por haber, Jimin terminó agotado, tirado en una de las jardineras de la ciudad


—¿Quién anda ahí? —oye una voz dulce de mujer


Jimin se levantó rápido de la jardinera y vio sentada en una banca, a una chica linda con los ojos vendados, obviamente reconoció a la chica como Glory


—Hola, mi nombre es Jimin —respondió sonriente— Soy de Liyue


—Mucho gusto —sonrió con dulzura— Siempre imagino muchas cosas sobre Liyue, mi amado Godwin me manda muchas cartas de esa ciudad y de todo Teyvat


—¿Ah sí? —dijo con tacto— Pobrecita, viviendo engañada —pensó con pesar— ¿Sabes? Debo irme —para no quedarse mucho tiempo ahí decidió alejarse


—Cuando quieras, puedes venir a verme


Dicho eso, Jimin se alejó de ella, buscó un punto de teletransporte, pero estos no existían en su sueño, por lo que pensar ir a Liyue o Inazuma parecía imposible. Salió de la ciudad de los vientos y caminó tranquilamente hacia el Valle de los recuerdos


Un sonido extraño sonó cerca de él, pero apenas alcanzó a reaccionar, sintió que alguien, o algo, lo empujaban con fuerza, por lo que cayó, sintiendo un poco de calor, abrió los ojos, confundido y ante él, vio un enorme slime pyro, la sensación fue tan real que gritó


—No, aléjate —pidió con susto, pero la cosa esa sin inteligencia no respondió


—¡Corre muchacho! —escuchó una voz que le resultó familiar


Jimin se arrastró por el suelo un poco para alejarse, viendo como uno de los personajes principales se acercaba portando su espada y su visión cyro, dispuesto a ayudarle


—Ka... Kaeya Alberich —dijo con emoción


Asombrado y maravillado, vio como el Capitán de Caballería acababa con el slime fácilmente, de la criatura saltó un item que Kaeya agarró, este desapareció en su mano, el capitán, extrajo su saco de moras y verificó que tuviera ahí la recompensa


—¿Estás bien? —extendió la mano hacia él


Jimin sujetó la mano que le daban y sintió algo extraño, era la primera vez que tocaba a otro personaje dentro de ese mundo, no era diferente a lo que sentía en la realidad, aunque el gráfico luciera tal cual en el juego


—Este sueño ya duró mucho, comienzo a preocuparme —pensó mientras se ponía de pie


—Pareces de Liyue ¿me equivoco? —el cantante negó


—Estoy perdido ¿Cómo regreso a Liyue? ¿Hay puntos de teletransporte?


—¿Qué? —preguntó confundido


—¿Cómo se trasladan?


—Pues en carretas, el globo aerostático, planeador, solo si tienes licencia de vuelo, claro, la waverider, en barco ¿Por qué preguntas? ¿no eres de Teyvat? ¿vienes del espacio? —bromeó con lo último


—Perdón, debí golpearme la cabeza al caer


—Eso debió ser, ven, te invito un trago al Obsequio del Ángel


—Claro —respondió con emoción


Los dos caminaron hacia el lugar, en la ciudad, Kaeya saludaba a un par de personajes, todos lo trataban con amabilidad y cariño. Llegaron a la taberna y pidieron sus bebidas, a Jimin comenzaba a resultarle natural todo


—¿Está pasando de verdad? —cerró un instante los ojos y trató de recordar sus últimos momentos antes de despertar ahí, entonces lo recordó, se electrocutó o algo así después de jugar— ¿Será posible?


Ante la serie de casualidades y el hecho de que no podía despertar de un sueño tan largo y explícito, consideró la posibilidad de estar en el juego, realmente


—Pero ¿Cómo salgo? ¿Qué tengo que hacer? ¿podré volver a mi mundo? —agitado por primera vez, bebió todo de un sorbo


—Bebe con calma —pidió Kaeya tras reír


—Estoy un poco cansado y no tarda en oscurecer ¿sabes dónde puedo quedarme a dormir? —preguntó con seriedad


—En mi casa, por supuesto, me caíste bien y no te voy a desamparar —respondió un ya pasado de copas Kaeya, menos misterioso que antes, parecían viejos amigos


—¿De verdad? Gracias


Pidieron la cuenta y salieron de ahí, ya había oscurecido. Caminaron hacia un lado del juego que Jimin nunca había visto, pero se veía tan real al resto del mundo, no parecía un bug o algo así. Llegaron a una casita como las que había en Mondstadt, a Jimin se le ocurrió que quizás estaban dentro de alguna Relajatetera


—Toma —dio al cantante una cobija— Dormiré en el suelo, usa la cama


—No puedo aceptarlo, usaré el suelo


—Eres mi invitado, deja de insistir, mañana prepararé unas panquecas —no dijo más y se echó a dormir en el suelo con apenas una sábana y una cobija encima


—Extraño mi mundo —aunque no tenía tanto tiempo atrapado en Teyvat, extrañaba su hogar, a sus compañeros de grupo, a las fans, pero pese a todo, no sentía miedo


Cerró los ojos luego de acostarse e intentó dormir, cuando por fin pudo dormitar un poco, sonó un fuerte viento que hizo que todo se moviera y retumbara, tanto que incluso el profundo sueño de Kaeya fue interrumpido


El Capitán de caballería de los caballeros de Favonius despertó y sacó su espada, poniéndose en alerta, miró hacia su invitado


—Quédate ahí —dijo y salió de la casa


Jimin no se pudo quedar quieto y salió también de la casita, mirando con asombro hacia los cielos, ligeramente iluminados con el aura de la mañana, ahí, sobrevolaba un enorme dragón de color azul con blanco, a quien rápido identificó como Dvalin, a quienes los ciudadanos nombrarían Stormterror


Dada la reacción de Kaeya al verle, Jimin supuso que era la primera vez que dicho dragón era visto por los vastos cielos de Teyvat


—Ahora entiendo por qué no hay puntos de teletransporte, esta parece la historia antes de la llegada del Viajero a Mondstadt —analizó rápidamente


—Volvamos adentro —ordenó Kaeya, los dos entraron— Debes esconderte acá. Necesito ir a la Sede de los Caballeros de Favonios para hablar con Jean


—¿La maestra intendente? —preguntó con emoción— Llévame —pidió luego que Kaeya le confirmara que ella


—Es peligroso, esa criatura...


—Ha sido manipulada por la orden del abismo, pero no es mala —explicó sin pensar en consecuencias— Es amiga de Barbatos


—Por los Siete ¿Qué estás hablando? —cuestionó asombrado Kaeya, entonces Jimin se tapó la boca con las dos manos


—Creo que sigo borracho


—Bien, quédate aquí —ordenó de nuevo y salió corriendo de ese lugar


—No puedo quedarme sin hacer nada —decidió, saliendo de ahí


El cantante se dirigió hacia la orilla de la playa, según sus cálculos, el viajero ya encontró a Paimon, solo que aún no llegan a Mondstadt. Entonces pensó que si el otro día se encontró con Amber cazando en las cercanías, quería decir que muy pronto ella y el viajero se encontrarían


—Oh, con suerte y es Lumine a quien me encuentre —dijo con emoción, él jugaba con la gemela


Llegó hasta la orilla de la playa, ahí no estaban ni el personaje ni Paimon. Los cielos aún se veían tempestuosos en la lejanía, sobre la medieval ciudad


El día llegó y ya el sol estaba brillante en los cielos, Jimin se detuvo cerca de un bloque grande color rojo, al que identificó como un punto de teletransporte sin descubrir, pensó que si se acercaba y lo tocaba, este se activaría, como si él fuese el viajero, pero eso no pasó


—Tengo hambre —pensó agobiado, vio sus moras y no eran muchas, entonces recordó cuando Kaeya lo salvó del slime, cuando lo hizo, las monedas aparecieron en su saco automáticamente, entonces si quería mora, debía hacer algo de eso— Pero no tengo un arma —lamentó con tristeza


No tuvo más remedio que volver a la casa de Kaeya en el lugar del juego desconocido, ahí el caballero lo esperaba con enojo


—¿Dónde estabas? —preguntó alterado— Te dije que era peligroso —cruzó los brazos, preocupado


—No fui lejos ¿Qué pasó con el dragón?


—Jean no sabe nada, ni siquiera Lisa, pero buscará en los libros de la biblioteca de los caballeros, parece que puede haber algo ahí


—Entiendo —hizo pausa— Quiero un arma y cazar, necesito mora


—Oh espera, vas muy rápido ¿no? ¿siquiera sabes usar un arma?


—Necesito ganarme la vida en algo


—Puedo ayudarte con eso, sin necesidad que pongas en peligro tu vida


—Muchas gracias —sonrió emocionado— Por cierto ¿no hay un viajero o viajera por ahí pidiendo información sobre el paradero de un familiar?


—¿De qué rayos hablas de nuevo? —preguntó intrigado


—Nada, perdón —se disculpó rápidamente— El segundo en conocer al viajero es Kaeya, seguro en cuanto se encuentre con Amber será con él— pensó tranquilamente


Los dos salieron de ahí para dirigirse al viñedo del amanecer, Jimin miró con emoción el lugar


—Mi hermano es el dueño —dijo sonriente— Te dará trabajo


Jimin sonrió con tanta emoción que no pudo esconderlo, por fin conocería a Diluc


—¿Tú hermano? —preguntó como si no supiera


—Adoptivo pues —rascó su cabeza— Diluc Ragnvindr, no es el más lindo ni amable, pero es buena persona —definió al chico de cabellos rojos


—Por fin, por fin —musitó entusiasmado


Llegaron al Viñedo del Amanecer, pero Diluc no estaba, trataron a Kaeya casi como si fuese un segundo dueño y las sirvientas de ahí no se negaron en acoger al cantante


—Debo atender unas cosas, por favor cuiden bien de él, que haga unas tareas en lo que Diluc elige qué ponerlo hacer, por favor —indicó al grupo de mujeres, luego se marchó


Jimin tuvo que hacer un par de tareas simples y comunes, como en las misiones diarias del juego, tales como llevar cartas, recoger hojas, juntar algo de frutos en el camino y un gran etcétera


Pasaron dos días más y no conoció aún a Diluc, incluso Kaeya no volvió a acercarse y temió que se quedara varado como un personaje de lo más irrelevante


—¿Escuchaste los rumores? —dijo un día una de las sirvientes del viñedo


—Sí, dicen que apareció un viajero, ha ayudado a liberar a Mondstadt del terrible stormterror


El cantante escuchó todo y se emocionó mucho, parecía que esos agitados días ocurrieron muchos sucesos en el juego, entonces los puntos de teletransporte seguro estaban activados, así que pidió permiso para alejarse un rato de sus obligaciones y buscó uno de los que conocía, ahí vio uno de color azul, señal de que estaba activado


—Bien, a viajar —cerró los ojos y se paró junto a uno, pensando fuertemente en otro de los puntos alrededor, pero no pasó nada


—No se puede, solo él puede usarlos —escuchó una voz conocida, pero no sonaba tan amable como antes, Jimin volteó y vio a Kaeya acercarse— ¿Quién? Te preguntarás. Pues un viajero, curiosamente buscando a su hermana perdida —lo miró acusadoramente


—Este, yo...


—Puntos de teletransporte, sobre Dvalin y Barbatos, un viajero en busca de su pariente ¿Quién eres en realidad? —preguntó enojado


Kaeya se acercó más a Jimin y lo sujetó amenazadoramente por el cuello de la camisa


—¿Eres de los Fatui? ¿Perteneces a la orden del abismo? ¡Habla!


—Nada de eso —urgió con prontitud— Te diré la verdad, no me mates —suplicó


—¿Matarte? —preguntó asombrado— No mato, pero te llevaré ante Jean


—Escúchame, aunque sé que no me vas a creer, pero quiero explicarte


Kaeya se cruzó de brazos y escuchó atentamente toda la explicación, aquel chico le dijo que venía de un mundo fuera de Teyvat, una cosa extraña sobre algo llamado videojuego que Kaeya no tenía idea lo que significaba, también escuchó sobre algo llamado Kpop y cosas raras de una Army, que él creyó, quizás ese chico lideraba un ejército llamado BTS o algo así


—¿Esperas que crea eso? Eres un Fatui, confiesa


—¡No soy un Fatui! Ni siquiera soy de Liyue, aparecí con esta ropa porque la última vez que me conecté al juego fue en un dominio cerca de esta ciudad


—De cualquier modo, te llevaré con Jean —agarró a Jimin y contra su voluntad lo comenzó a jalar de regreso a la ciudad medieval, el cantante se seguía oponiendo


—Pero ¿Qué pasa aquí? —escuchó una fuerte y masculina voz cerca de él


Jimin volteó hacia allá cuando Kaeya se detuvo y ante sus ojos, con una luz brillante y roja, o así lo vio él, se acercaba a ellos dos Diluc, guapo y majestuoso, los ojos de Jimin se iluminaron


—¿Ahora te dedicas a secuestrar extranjeros? —preguntó con seriedad, llegando a donde estaban, con los brazos cruzados, mirando directo a Kaeya, como si lo ignorara a él


—Lo llevo con Jean, sabe cosas muy peculiares —respondió el capitán de caballería


—Me llegó un mensaje de mis trabajadoras, que pedías acilo para un chico de Liyue, ahora te veo arrastrarlo como animal ¿hay explicación para eso?


El par de amigos se miraron fijamente con seriedad, luego Kaeya sonrió


—Vaya seriedad hermanito —bromeó para hacerlo enojar


—Déjalo aquí y vete con esos inútiles de Favonius —dijo con moderado desprecio


—Me temo que no será posible —se opuso Kaeya


Pero para Diluc no existían las negativas, así que se acercó sin dejar de mirarlo a los ojos. Jimin se quedó en medio, pero sin dejar de observar a su ídolo, este se dignó al fin a posar los ojos sobre él


—Ven conmigo —estiró la mano y jaló su brazo, pero Kaeya puso resistencia


En la lucha por el pobre chico, Jimin cayó a los brazos de Diluc, sonrojándose por completo, aquel cuerpo era tan cálido como su visión pyro. Jimin no sabía que aquel extraño sentimiento podía sentirse dentro del juego


Kaeya dejó de oponerse y Diluc se llevó al cantante hacia el viñedo de nuevo. El Capitán de caballería vio a los dos alejarse y sintió algo extraño, una molestia que nunca en su vida había sentido


Regresaron al lugar y Jimin estuvo callado todo el tiempo, Diluc le hizo un par de preguntas y luego lo miró tan fijamente que lo puso todo nervioso


—Entonces ¿Qué deseas hacer?


—Quiero ser tu ayudante personal —dijo sin vacilaciones


Aunque Diluc era serio, echó a reír. No tardó en aceptar aquel cargo y con emoción Jimin empezó una extraña travesía como ayudante del personaje. No supo cuánto tiempo pasó, la idea de volver a casa se comenzó a difuminar y estaba viviendo una vida tranquila, podía escuchar las hazañas del viajero, incluso pasó la época del rito de ascenso y la supuesta muerte de Rex Lapis


Un día tuvo que volver a Mondstadt y por primera vez se topó con Aether y Paimon, aunque solo había podido oír hablar de ellos, sintió tristeza de no ver a Lumine, pero no dudó en acercarse y hablarles un poco, Paimon era tan agradable, tragona e interesada en las moras como en el juego, pero Aether era un poco extraño, su personalidad podía variar


Después de charlar con ellos, paseó por la ciudad, tenía mucho sin ir ahí, pero cerca de la sede de los caballeros, se topó con Kaeya, a quien no había visto desde el percance con Diluc, este se acercó hacia él con amabilidad


—¿Cómo te va con mi hermanito?


—¿Ya no estás enojado?


—No confío en ti —dijo sin vacilación— Pero algo me dice que no eres mala persona, además investigué y efectivamente no eres un Fatui, aunque tu historia de otro mundo es extraña


—Pero es verdad


—Me hace dudar el hecho de que nuestro caballero honorario, parece no ser de estas tierras tampoco, así que me mantendré escéptico —explicó


Los dos se despidieron y Jimin regresó al viñedo del amanecer, en el camino, escuchó historias sobre Inazuma, al parecer, el decreto de captura de visiones por parte de la Shogun había comenzado.


Un par de días después, aunque perdió la cuenta, no le importaba, era feliz siendo de utilidad a su ídolo, al que cada vez admiraba más, los días de glamour y animados conciertos parecían parte de una realidad alterna de la que comenzaba a olvidarse


Se escucharon historias sobre un grupo de refugiados que logró escapar de Inazuma antes del decreto de cierre de fronteras, por lo que todo mundo estaba a la expectativa. La ciudad de Mondstadt y sus alrededores no fueron la excepción. Diluc se ofreció a regalar algo de buen vino de diente de león para dar la bienvenida al grupo


Jimin se encargó de organizar todo y se armó una reunión en las inmediaciones del viñedo, los refugiados comenzaron a llegar, se les veía asustados y desconcertados, pero la bienvenida logró hacerlos distraerse un poco del miedo y se sintieron bien recibidos


Después de un rato, llegó otro grupo, Jimin se acercó a éste y al instante, su mirada se cruzó con alguien que le resultó conocido, este se acercó a él efusivamente


—Estás aquí —dijo alegre, agitándole los hombros mientras lo miraba con emoción


—¿Qué? ¿Quién eres? —preguntó confundido


—Soy yo, Suga, ¿no me recuerdas? —cuestionó intrigado


Jimin frunció las cejas en un intento desesperado por recordar, de repente, algunos trazos de su memoria acudieron a él, música, gritos de chicas, la sensación de estar acompañado de un grupo. Comenzó a sentir dolor de cabeza


—Jimin ¡Reacciona! —gritó un poco molesto


Decenas de personas voltearon, intrigadas. Entonces se acercó Diluc, Suga no se sorprendió de verlo ahí, de hecho, se había topado con algunos personajes del juego en Inazuma


—Oye, déjalo —apartó al cantante del otro cantante, mirándolo desafiante


—¿Qué pasa? —entonces un Kaeya desconcertado se acercó


Mientras Jimin estaba confundido, mirando a los tres ahí, de pronto, comenzó a recordar a ese chico, su mirada, su cara, su sonrisa, su voz, un sentimiento de nostalgia lo invadió


—Somos amigos, solo que al parecer, ha perdido la memoria, no somos de Teyvat —informó con seriedad el rapero


—Vamos acá —indicó Diluc, llevándose del brazo a Jimin


Tanto Kaeya como Suga miraron aquello con enojo, esos dos tan cerca. Luego ambos fueron detrás del otro par, entraron los cuatro al viñedo


—Un día desperté y estaba aquí, dentro de Genshin Impact —informó el chico


—¿Genshin Impact? —preguntó confundido Diluc


Kaeya, que ya había oído ese nombre antes, se mantuvo callado. Suga no se atrevió a decirles que no eran reales, sino personajes de un juego, pero sí dijo que aquel, Teyvat, era un mundo diferente al Planeta Tierra y que el tiempo era diferente también


—Veo que tienes una visión —miró aquello Diluc, sorprendido, aunque no mucho, la visión era electro— ¿Cómo la obtuviste?


—Solo apareció —respondió— Pero no vine a eso, solo trataba de sobrevivir al caos, ni siquiera sabía que Jimin estaba acá —explicó con tranquilidad— Ahora que lo sé, necesito que regresemos a casa


Jimin miró a quien ahora aun era un extraño y se escondió detrás de la silla de Diluc, parecía realmente asustado y confundido. Suga tuvo la teoría de que a su compañero, a diferencia de él, le gustó tanto vivir dentro del juego, que comenzó a formar realmente parte de él


—Esto es grave, necesitamos volver a nuestro mundo —pensó el rapero


—Como sea, no te lo llevarás hasta que él decida irse, que sea su decisión —miró al cantante con cariño— ¿Por qué no vas a disfrutar la fiesta?


—Sí —respondió el chico, se despidió y salió de ahí, quedándose los tres


—¿Cómo te llamas?


—Solo llámenme Suga, es un nombre artístico


Los dos personajes lo miraron en silencio


—Necesito hablar con Kaeya ¿nos dejas solos? —pidió al idol y este estuvo de acuerdo


Suga salió del viñedo e intentaba acercarse a Jimin pero este lo evitaba


—¿Qué piensas? —preguntó Diluc


Entonces y por primera vez, Kaeya le contó todo a Diluc, desde su encuentro con Jimin hasta el hecho de que él sabía cosas que antes eran desconocidas para ellos


—¿Y qué piensa Jean?


—Ya la conoces, ella solo quiere que lo mantengamos vigilado —explicó— Por eso dejé de entrometerme y tratar de llevarlo a la sede, mientras se comporte y no haga nada extraño


—Pienso lo mismo de ese Suga, pero en cuanto a Jimin, he llegado a apreciarlo y si es necesario, lo protegeré —determinó Diluc


A Kaeya, esas palabras no le agradaron del todo, ese repentino afecto de Diluc hacia él le estaba molestando mucho, eran como celos y él creyó que se trataba a su relación de casi hermanos, que se sentía desplazado, pero quizás era algo más.


La fiesta terminó, Kaeya se ofreció a darle especial refugio a Suga y este aceptó


—Ese amigo tuyo ¿cuida bien del mío? —preguntó el rapero}


—Ya lo viste, le tiene mucha confianza, se refugia en él —respondió un toque molesto


Los dos conversaron un poco hasta que se quedaron dormidos. A la mañana siguiente, Suga insistió en visitar a Jimin en el viñedo y aprovechó que Diluc se encontraba fuera para intentar convencerlo de buscar la forma de regresar a casa


—Por favor déjame en paz —pidió el cantante, asustado


—Tienes que recordar, somos cantantes de Kpop, somos BTS, somos Bangtan, nos deben estar buscando como locos —explicó desesperado


—No sé de qué me hablas


—Lo sabes, solo es cuestión que lo aceptes —se acercó a él y lo abrazó con fuerza— Me sentía solo, en este mundo, entonces vi que estabas tú, no pienso renunciar a ti


Por extraño que pareciera, aquel abrazo se sintió tan familiar que un calor reconfortante inundó el corazón de Jimin, por instante abrazó también a Suga


—¿Qué pasa aquí? —preguntó Diluc que acababa de llegar


El chico se acercó a los dos y se veía más serio de lo normal, lo acompañaba Kaeya, pero este miraba contento la escena, como si esperara que esos dos se marcharan de una vez


Los dos cantantes se soltaron rápidamente, avergonzados


—Lo siento, pero debemos volver, Army nos espera, nuestras familias, el presidente de la compañía, todos nos esperan


—No se irá, vete tú si quieres —dijo Diluc determinante, agarrando del brazo a Jimin, pero este se quedó quieto, sin moverse— ¿Qué pasa?


—Siento que debo ir, algo me lo dice —comentó afligido, luego miró a Diluc— Pero también quiero estar aquí, contigo —sus dulces ojos se posaron en él y Diluc sonrió


Kaeya no pudo soportarlo más, esa amabilidad de Diluc, su interés en ese chico, entonces estalló en celos, agarró a su amigo de la infancia por el brazo y lo jaló hacia él


—¿Qué haces? —preguntó enojado


Kaeya no respondió y se lo llevó lejos de ahí


—¿Qué sientes por él? —preguntó Suga con tristeza agachando la mirada


—Me siento seguro a su lado —respondió sin dudar


—¿Y por mí? —lo miró a los ojos, fijamente


—No lo sé, es que yo...


Intentó hablar, decir algo, pero Suga no lo soportó más y lo atrajo hacia él, dándole un beso en la boca que lo dejó abriendo los ojos con amplitud, sorprendido, la sensación era totalmente desconocida para él.


Mientras tanto en el otro sitio, Diluc se deshizo del agarre de Kaeya, enojado


—¿Qué pasa?


—No me gusta lo que haces


—¿Qué se supone que hago? —cuestionó enojado, cruzando los brazos


—Ese chico ¿te gusta?


—¿De qué hablas? —preguntó bastante sorprendido y un poco sonrojado


—Eso te pregunté, si te gusta ¿lo quieres? —mostró tristeza en sus ojos


—No lo sé —desvió la mirada, con tristeza— Los últimos meses me he sentido extraño, como si no fuera parte de nada


—Eres parte de mí —dijo con vergüenza, también sonrojado


—¿Qué dices?


—Trataba de negarlo —dio un paso hacia él— Traté de impedirlo —otro paso— Pero no pude, por mucho que quise, estoy celoso de ese mocoso —dijo a pesar de ser Jimin mayor que él


—No digas tonterías


—Tontería es no haberme dado cuenta antes —sonrió con tristeza— Que estoy enamorado de ti


Diluc abrió más los ojos, muy sorprendido, no podía creer lo que oía, pero por algún motivo, su corazón latió tan deprisa que sintió que saldría de su pecho, su poder pyro se sintió como si ardiera desde su interior


Kaeya no lo soportó más y se acercó decidido, sujetó su rostro con ambas manos y lo besó en la boca, tan naturalmente como darle un simple abrazo. Diluc no se opuso y respondió, abrazándose a la cintura de Kaeya, a quien empujó hacia el árbol que tenía detrás, acorralándolo


Después de ese beso se miraron a los ojos, respirando con dificultad


—No sé qué fue eso —confesó Diluc apenado— Pero sentí que debía hacerlo, que yo también...


Kaeya no lo dejó terminar, se aferró con fuerza a su cuello y se fundieron en otro beso, la cosa era clara, para su fortuna, Diluc le correspondía y se sentía completo, dichoso. Afuera del viñedo, Jimin empujó con fuerza a Suga tras el beso, agitado y asustado


—No por favor —intentó alejarse corriendo, pero no podía, solo caminar


—Jimin ¡te amo! —gritó el otro, desesperado


El aludido volteó, sorprendido


—Me lo quise negar por mucho tiempo —admitió con tristeza— El grupo, nuestras carreras, las fans, el miedo a perderte como amigo, todo jugó en mi contra y me guardé ese sentimiento por muchos años, a medida que nos hacíamos más y más famosos, la idea de estar contigo fue desapareciendo, pero solo me engañaba, bastó perderte para darme cuenta, entonces te reencontré aquí y no pienso separarme de ti nunca más


La larga y sincera confesión dejó perplejo a Jimin, que no podía creer aquello. Entonces todo regresó a su mente con rapidez, cuando lo conoció, el debut del grupo, su ascenso a la fama, su gran amistad, los otros chicos, las armys, todo, todo lo que más amaba y tenía significado en su vida real volvió a él como una tormenta entre los vientos de Mondstadt


—Suga —musitó, como si aquel nombre ya tuviera el mismo significado de antes— Suga estás aquí —dijo con emoción y se acercó a él


Cayó en sus brazos y recibió respuesta, sollozando sobre aquel cuerpo que tanto anheló


—Yo también te amo —confesó finalmente sin pena, mirándolo a los ojos— Tenía miedo de ser señalado, que me rechazaras, que me dieran la espalda, por eso me negué a mi mismo que estos sentimientos eran reales y los enterré por tanto tiempo que no me di cuenta


Los dos chicos por fin se dieron un tierno y duradero beso


—Quiero volver, a tu lado, con nuestras fans, a nuestro mundo


—Yo también —respondió, pasándole el cabello detrás de la oreja


Se volvieron a dar un beso y luego se separarse quedaron juntos, casi abrazados, entonces los otros dos volvieron, para sorpresa de los dos idols, Diluc y Kaeya se agarraban de la mano, Diluc se veía avergonzado, pero Kaeya demasiado alegre, él lo convenció de que no tenían por qué ocultarse de los demás


—Ya recordé todo —dijo Jimin con franqueza— Quien soy y a donde pertenezco, quiero volver, junto al hombre que amo —miró con dulzura a Suga


—Gracias por todo —respondió Diluc, soltando a Kaeya solo para extender la mano hacia Jimin— Te aprecio de verdad


—Yo también —sonrió con mayor emoción, había conocido a su héroe y lo había amado, quizás no de forma romántica, pero fue feliz a su lado, Diluc también al suyo


—¿Saben cómo volver?


—No, pero buscaremos al viajero y a Paimon, quizás tengan una idea —respondió Suga


—Mucha suerte —dijo la pareja de personajes


—Gracias por cuidar de él —finalmente Diluc y Suga hicieron las paces y estrecharon sus manos


La pareja de cantantes se alejó de los personajes y buscaron a Aether, estaba con Paimon cerca de la estatua de los siete cerca de Mondstadt. Ambos contaron sobre ese mundo al que pertenecía, el viajero que conocía diferentes mundos junto a su hermana nunca llegó a oír de ese sitio, pero les ayudó diciendo como usaba los puntos de teletransporte que solo él y Paimon podían activar


Suga y Jimin se abrazaron con fuerza y pensaron en el sitio al que querían ir, de pronto la visión electro del rapero comenzó a brillar y tras un rayó de poderosa luz morada, el cuerpo de ambos se agitó en una sensación de vértigo jamás conocida. Apretaron el abrazo y fueron incapaces de abrir los ojos, el torbellino de sensaciones inexplicables se sintió tan irreal como su paso por Teyvat, pero finalmente terminó y pudieron abrir los ojos


—Oh vaya ¿los dejamos solos? —una burlesca y conocida voz se escuchó cerca


Era Jin y junto a él, los otros miembros. Suga y Jimin volvieron del juego y estaban abrazados en medio de la sala donde Jimin tenía su consola de videojuegos, rápidamente los dos se soltaron


Entonces no tuvieron más remedio que explicar lo que había pasado, pero ninguno les creyó absolutamente nada, hasta pensaron que quizás les dio un ataque epiléptico de tanto jugar


Lo último que Suga recordaba antes de despertar en Inazuma, es que a la mañana siguiente de haber jugado con Jimin no pudo contactarse con él y así el resto del día, por lo que se preocupó y fue a buscarlo, logró que el casero le abriera la puerta y lo vio inconsciente en el suelo, cuando quiso auxiliarlo lo tocó y sintió una ráfaga eléctrica que lo recorrió de pies a cabeza, luego despertó dentro del juego y el resto fue historia


Aunque los chicos de Bangtan no creyeron lo del viaje al otro mundo, tuvieron que aceptar el hecho que ahora sus dos amigos estaban juntos y eran una pareja, claro que nadie más lo sabría, ni siquiera en la compañía, solo ellos


Y así, después de tan loca travesía, la pareja pudo estar juntos en un bello romance, que dicho sea de paso, solían jugar seguido, Jimin usaba a Diluc y Suga a Kaeya, jugaban juntos Genshin Impact cada noche, pero también un par de juegos para adultos, solo entre ellos, dentro de su íntima habitación.


FIN


 

Notas finales:

Espero les haya gustado esta idea loca, por favor, déjenme comentarios, se los agradecería mucho, los quiero mucho, bye bye


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