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Fragmentos Del Amor Inocente (ShaMu) ShaMuTober2022 por AMMU TEIKOKU YUDAINA

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Notas del capitulo:

Mis terrones de azúcar. Aquí mamá terrón de azúcar, dándoles el capitulo numero viente.

Jajajaja terrones, no importa cuanto nos tardemos, cuanto tiempo pase, vamos a terminar de publicar todos los One Shot del ShaMuTober2022, así que... 

¿Listo para leer?

Por que yo estoy mega alegre de que muchos terrones y geniales escritoras continúan, vamos, debemos terminar, por que es nuestra shipp preferida. 

Les are la pregunta del día de hoy, pienso volver a hacerlo, ya que recuerdo que era sumamente divertido hacerlo.

De todas las generaciones de dorados que conocemos, si, incluye canon y no canon (Para mi todos son canon jajajaja)

¿Quienes crean que sean los mas llorones (Sensibles) de sus generaciones?

Del siglo XX, perdón pero Mu y Camus los he visto derramar mas lagrimas, son mas sensibles.

Fíjense que del siglo XVIII, me es difícil...  Por que... Poco se ha visto de eso, pero creo... Que aunque lo oculte, Degel podría ser, ademas de Dohko, también los veo así. 

Del Siglo XVI, Krest, junto con Sage... 

Espero sus respuestas y opiniones que son mega buenisimas. 

Día 20.- Sales Gemelos: Referencia hacia los dos arboles donde se dice que Buda ascendió al Nirvana. Igual en el anime y manga en donde Shaka, combatió contra los tres dorados en Sapuri.

Advertencia: Extrema dulzura, amor, yaoi, y momentos paternales, como románticos.

Disfruten la lectura.

Su vida, como la de todos había cambiado radicalmente para bien.

Había dejado de ser el caballero dorado tan serio, reservado y que por nada del mundo salía de su templo.

Encontró el amor, o más bien… Se dio cuenta de ese sentimiento y acepto que si deseaba algo, debía luchar por ese alguien especial.

Con una ayuda inesperada, logro tener la oportunidad de conformar sus sentimientos a la persona que le pertenece su corazón.

Pero no solo logro el amor de su preciado y amado Mu, sino que también obtuvo mucho más de lo que alguna vez imagino.

Una familia, eso fue lo que Mu le dio aparte de su eterno amor.

Si bien, Kiki no era precisamente un hijo biológico del Lemuriano, siempre lo ha amado como si lo fuera, e igual lo acepto como tal.

Además, de que se dio cuenta que no era un niño malo, solo un poco juguetón, pero no por eso irresponsable en sus entrenamientos y deberes.

Gracias a ese pequeño Lemuriano, y sus demás compañeros de armas, pudo tener la fortuna de manifestar su enorme amor por Mu, y por ello…

Una nueva vida se creó en aquella tormentosa noche. Todo por la imprudencia de su Diosa… Al darles órganos femeninos.

Pero claro, eso es algo que ya muchos conocen, el cómo esa situación se dio, meramente una historia de amor, donde mucho se llevó acabo para que pudieran estar juntos, amándose y amando a sus ahora dos pequeños.

Desde luego es bastante curioso, pero no imposible que justamente sus hijos, nacieran bajo las estrellas guardianas de sus padres, además de anunciarse que ellos ostentaran sus títulos como caballeros dorados en algún futuro.

Si bien, Kiki ya tiene un camino trazado y más lúcido en lo referente al entrenamiento para futuro Aries y reparador de armaduras del santuario…

Existen ocasiones en la cuales le cuesta un poco mantenerse calmado y sereno, aún tiene algo de esa energía infantil a sus trece años.

Cosa que le da bastante gracia a quien ahora figura como su mamá, pero a quien es su papá… Claro que le gustaría que controle un poco esa energía hiperactiva, que la redirija en algo más proactivo a su ver.

Por eso, decidió que se integraría a la meditación que realiza en una zona privada y única del sexto templo.

En donde nadie que no sea Shaka, puede entrar, aunque igual, su pequeña familia puede pasar.

Es como, sí el jardín de los Sales Gemelos, reconociera los sentimientos y lazos importantes que el actual caballero de Virgo tiene por ellos.

La idea no le pareció para nada negativa ni al adolecente, ni al pelilila, de hecho les pareció maravillosa, aunque si sabía muy bien a lo que se debía a tener el peli naranja.

Además, el rubio y el adolecente Lemuriano, no estarían solos para empezar a meditar como un pequeño y extra entrenamiento para el futuro Aries, sino, que una pequeña niña rubia, que igual está empezando su acercamiento a este deber a una muy corta edad, los acompañara.

Así pues, se inició este entrenamiento… Donde los tres van a diario a ese jardín que Virgo posee, y empiezan a meditar…

Si bien, a Kiki le costaba un poco mantener el ritmo de la meditación, pues quería hacer otras cosas y su energía a veces le impedía estar sumamente quieto y concentrado, lo intentaba fervientemente, se esfuerza mucho para jamás decepcionar a quien ahora y siempre será su figura paterna.

Sin duda alguna, Shaka ha sido alguien que prefería mantener las relaciones interpersonales muy lejos, y posee aun su semblante serio y algo amargo. Pero eso no quita que demuestra su alegría y cariño a sus hijos, y desde luego su amado ahora esposo cada que lo desea. Que de hecho es siempre.

Se volvió un poco más comprensivo, flexible y paciente…

Claro que eso le ayudo mucho para controlar la hiperactividad del mayor de sus hijos, a quien le llego a dar concejos para que la meditación no le resultara tan difícil.

Kiki, siguió esas instrucciones al pie de la letra, y sí… Poco a poco logro mantener un control más intenso de su meditación, se fue acostumbrando a ella…

Es una enorme fortuna, que ese jardín este alejado de cualquier distracción, siempre es tan calmado, con hermosas flores de diferentes colores, un fragante aroma silvestre y dos árboles tan preciosos como imponentes, los cuales tienen un gran peso en la historia Budista y sus creencias, por lo tanto todos los caballeros de Virgo pasados, presentes y futuros conocen…

En ocasiones, al terminar su entrenamiento, Shaka les explicaba a sus hijos, sobre el significado de este sagrado lugar, la gran importancia que tiene para ellos y para él.

Aunque Kiki ya conociera esas palabras, disfrutaba escucharlo.

Pero no solo él, también la pequeña Anshin, quien, aunque sea una niña de tres años para comprender por completo cada palabra que el adulto pronuncia, está atenta y se muestra asombrada.

Aunque ella aun tengan una muy corta edad, ya demuestra que tiene un gran parecido con su padre, al ser seria y también intentar mantener todo el tiempo posible cerrados sus grandes ojos de color esmeralda, con un actuar calmado y reservado. Sin embargo, también revela la herencia de Mu, pues en ocasiones expresa asombro con su mirada, exclama sorpresa con su dulce voz, pequeñas sonrisas y una que otra risita tímida, cuando un pequeño chiste sale sin querer.

Si el Shaka de hace diez años atrás, supiera que su versión adulta, lograría estar al lado de su primer amor, su amado Aries, y tendría con él dos bonitos hijos, posiblemente habría terminado rojo de vergüenza, apenado, sin poder creerlo y demostrando enojo como mecanismo de defensa predilecto. Y ni se diga el hecho de que dos niños estén en el jardín de lo Sales Gemelos, se moriría de la sorpresa… Y sobre todo se pondría más alterado, sí conociera que a veces ríe discretamente por los chistes que el mayor de los niños deja escapar repentinamente.

Sí, la segunda oportunidad que la vida les dio, ha sido sumamente perfecta, sin duda la mejor de todas.

Amar y ser amado por Mu, tener una familia con él, jamás se cansaría de repetirse la enorme suerte que tiene, de que ese preciosos y perfecto Lemuriano es solo suyo y le dio la fortuna de dos más, que también adora a su manera.

Obviamente así como hay días en donde el entrenamiento da buenos resultados, existen otros en donde a veces el cuerpo y cosmos no pueden seguir el mismo ritmo…

Confirmándose que a veces se necesita un breve descanso entre ejercicios, algo a lo que Shaka no está muy acostumbrado, pero da el permiso a los más jóvenes de tenerlo.

No le molesta permitirles estas pequeñas oportunidades. Y con ello, sí que se da cuenta que con sus hijos es algo suave, sabe que no es malo ceder de vez en cuando… Sin embargo, no le gustaría que su pequeña tuviera que irse a la India para tener un entrenamiento similar al suyo.

También él debe esforzase para demostrar que sus sentimientos no se interpondrán en darle los conocimientos necesarios, para volverla una digna sucesora de su armadura.

Si bien, sus hijos han demostrado que son los perfecto herederos de sus padres, esforzándose a veces también demás, hasta caer agotados… No es algo que le gustara, pero lo entiende muy bien…

Sin embrago hoy, y solo por hoy… Pensó que podía darles un instante de descanso, que puedan también disfrutar de solo estar allí, sin tener que estar entrenando en su autocontrol del cosmos o manejar la telequinesis espontanea lo mejor posible.

Solo por un día, permitir que sigan teniendo esos instantes de infancia y adolescencia que ellos no tuvieron…

La brisa es tan cómoda, es cálida, agradable, perfecta para solo cerrar los ojos, y entregarse a un pequeño instante de meditación o en su defecto sueño.

Shaka, decidió que seguirá meditando, en su típica pose de flor de loto, con la espalda erguida, sus manos sobre su regazo, sus piernas cruzadas al nivel de sus pantorrillas, los ojo cerrados, los cabellos rubios como el sol mismo ondeando levemente por el aire, sus ropas traiciónales del Budismo, el Kasaya de tonos naranjas.

Se mantiene tranquilo, concentrado en su meditación, o bueno no del todo, un poco al pendiente de los dos Lemurianos cerca de él.

No puede evitar pensar en lo bueno que tiene ahora, sonríe discretamente por sus recuerdos, pensando en todo lo que ha podido disfrutar, en lo que alguna vez creyó innecesario para su vida, hora le es completamente indispensable para seguir adelante.

Los momentos con su Mu, los miles de abrazos que ha tenido con él, los millones de besos que ha depositado en esos delicados labios, las caricias, las palabras de amor que ambos se dedican, las noches tan apasionadas y mágicas que han tenido y fueron de las mejores, tantos pensamientos… Todo pareciera un sueño del cual teme algún día despertar…

Y eso sin contar, los instantes con sus hijos… Los concejos que ha podido darle al mayor, las conversaciones que creía difíciles y logro traspasar, por el bien del peli naranja, las palabras de aliento, a veces sí tenía que regañarlo y las discusiones que debió afrontar por su nueva responsabilidad… Pero todo valía la pena si lo mantenía a salvo, o mejor dicho lo más seguro posible que podría estar al ser un aprendiz de caballero dorado, la veces que también seco sus lágrimas, y no le permitía derrumbarse… Tomo su papel de padre sumamente enserio, pues no decepcionaría a nadie, ni siquiera a él mismo.

Simplemente, Shaka ya está muy orgulloso de Kiki y de lo que se ha llegado a convertir, solo espera que el menor se dé cuenta de lo poderoso y asombroso caballero dorado que se volverá muy pronto.

Además que comprendió que criar a un niño ya más cerca de la adolescencia es bastante complicado, al igual que aprendió que un recién nacido es mucho más difícil, pero… Si su Mu lo hizo siendo bastante joven, él igual podrá hacer su parte.

Ahora son un equipo y van hacer todo juntos, por el bien de sus amados hijos. Nunca olvidara las noches que toda la familia pasaba en vela, cuando la pequeña se sentía mal, como termino algunas veces lleno de vómito, los cambios de paños, aprender a hacer las papillas, preparar formula, pues al crecer la bebé, la leche materna del Lemuriano no sería suficiente…

Jamás se llegó a imaginar que sería capaz de hacer todas esas cosas

Sí, los deberes eran más difíciles cada día, pero los momentos de alegrías siempre han sido de los mejores.

Verla sonreír, jugar, hacer muecas por imitar al mayor, su risa, su primera palabra, cuando empezó a hablar, los primeros gateos, sus primeros pasos con confianza, los primeros sustos por usar su telequinesis, todo lo que hacía su pequeña para él es sombroso, lo llenaba de mucho orgullo, que a veces la emoción se escapa de menare discreta con una lágrima de felicidad, que solo Mu era capaz de ver y guárdalo como secreto.

Sabe que el tiempo pronto pasara, y así como Kiki comenzó su arduo entrenamiento, así como ellos también lo tuvieron. La pequeña iniciara uno muy demandante, similar al de su padre… Debía prepararse para a veces verla llorar por lo difícil que será su preparación futura dorada de Virgo, por eso la debe empezar a preparar con lo más importante desde ahora, así entenderá muchas cosas a temprana edad y le serán menos dolorosas.

Pero claro que no va a empezar con eso en este momento, solo quiere traer a su mente instantes felices, realmente agradables, que lo hagan sonreír, aun estando en su meditación diaria.

Plasmados en sus labios una sonrisa se dibuja, lanza pequeños suspiros, su ceño se frunce, dándose se acentúa su Bindi.

Jamás creería que podría ser así de feliz algún día, y ahora lo es en toda la extensión de la palabra, al tener a sus dos hijos allí con él, lo único que podría ser mejor este momento es…

Tener a su amado Aries.

-¿En qué estás pensando?- Esa calmada y relajante vocecita, suave y dulce, que logra iluminar el corazón de su familia con un simple susurro.

-En algunas cosas- Contesta con un tono gentil, intentando no relevar su felicidad, pues a veces se apena por ello.

-¿Esas cosas, tiene que ver con nuestros pequeños niños?- Pregunta, dejando delante del rubio una pequeña canasta, para dirigir sus pasos hacia los dos imponentes y preciosos arboles gemelos.

-No solo con ellos, sino también contigo- Jamás podrá volver a ocultar algo de su amado Lemuriano, y está bien por él.

Una sonrisa amorosa se dibuja en los labios del pelilila, que gentilmente observa a ambos niños dormir, su instinto maternal es de siempre procurar que estén bien sus pequeños retoños, y darles una pequeña muestra de su inmenso amor, acariciando sus rostros con gentileza, y depositarles un beso en sus frentes.

-Cayeron rendido esta vez- Los mira un instante más, para dedicarles una sonrisa y dejarlos seguir durmiendo sobre esa hamaca, que solo por una idea del peli naranja, Shaka acepto ponerla…

-Tal vez he sido muy exigente con ambos- Deja su posición de flor de loto más relajada, abre sus ojos, dirige su mirada hacia el pelilila y los dos niños durmientes, lanza un leve suspiro, dejando las manos sobre su regazo.

-No lo creo, estás haciéndolo bien- Toma asiento sobre ese pasto fresco, a lado de su rubio favorito, para seguir sonriéndole, y darle un pequeño beso en la mejilla de forma fugaz que enciende sus mejillas –Solo que a veces es necesario un breve descanso- Sus manos se dirigen a la canasta, para con cuidado sacar una pequeña bandeja cerrada y ofrecerla a su esposo.

-¿Es tu manera de decirme que yo igual debo tomarme uno?- Sostiene aquel objeto que Mu le entrega, abriéndolo con cuidado, sabiendo que tipo de contenido tiene.

Dándose cuenta con esto, que Mu es el único que pude sacarlo de su obstinación, y obligarlo a calmarse un poco.

Sin duda este Aries, puede hacer como lo desee a este Virgo, a quien no le molesta ese hecho.

Sentado sobre sus piernas, dejando sus manos glacialmente sobre el regazo, la espalda recta, el cabello atado en una coleta baja, con ropas similares a las que usa de manera civil, con la excepción de la bufanda y los zapatos, que en vez de los típicos, lleva unas sandalias iguales a las de Shaka y sus niños, es como una forma de respeto para ese sagrado lugar, sus hermoso ojos verdes con calidez miran a su amado –Puede ser. Prepare unos bocadillos de vegetales y frutas-

-Querías un pequeño picnic, ¿No es así?- Igual como Mu lo conoce muy bien, Shaka también tiene esa ventaja sobre el Lemuriano. Arquea una ceja, dirigiendo su vista al pelilila.

-Me conoces bien- Asiente, dando un vistazo hacia los menores que duermen plácidamente –Creo que debería despertarlos-

-Tranquilo, comieron unas manzanas antes de meditar. Además… Anshin cayo primero dormida sobre mi regazo, y luego Kiki la siguió, quedándose dormido al meditar en la misma postura- No le causa molestia revelar la manera en que ambos niños se quedaron profundamente dormidos.

-Ja, ja, ja- Cubre sus labios con la mano derecha –Kiki es igual ti, ¿Recuerdas que así también terminabas dormido al meditar, cuando éramos uso niños?-

Las mejillas rojas, por tan solo recordar como ese hecho vergonzoso lo vuelve a perseguir –Solo fue una vez-

-Fue más de una vez- Se divierte avergonzando a su amado esposo –Recuerdo muy bien que en una de esas ocasiones, al acompañarte a meditar, terminaste cayendo sobre mis piernas, y nuestras mejillas se pusieron tan rojas como un tomates por ello- Para el Lemuriano ese hecho es simplemente divertido.

-¿Entonces, es mi culpa que nuestros hijos se queden dormidos al meditar?- Pregunta serio, arqueando una ceja, pero no está para nada molesto, ya que toma con cuidado uno de esos momos en sus manos, para apreciarlo un instante.

-No es tu culpa, solo que lo heredaron de ti- Ladea su cabeza, para ver al frente y admirar como en ese punto que es más alto, puede ver ese hermoso jardín en su total esplendor, se respira tanta paz, que es fácil quedarse dormido –Además que los tres lucen muy lindos al dormir. Kiki la abraza con mucho cuidado, y Anshin está muy cómoda en sus brazos-

-Kiki sabe cómo ser un buen hermano mayor, es protector, amable y muy cuidadoso, al igual que tú lo eres, y Anshin es bastante competente, energética cuando debe y paciente cuando la situación lo amerita, similar a tu actuar… Además ambos son bastante adorables al dormir, porque son más parecidos a ti físicamente y eso es sumamente hermoso para mí- Dice su verdad, con palabras sencillas y cortas como es su costumbre, mientras ofrece el primer momo de frutas que tomo de aquella bandeja a su Lemuriano.

Un detalle de darle el primer bocado de lo que coma, es romántico a su manera, y no piensa cambiar eso aunque ya sean esposos y tengan una preciosa familia, al contrario… Piensa seguirlo siendo a pesar de que una vida entera les espere juntos.

Esos detalles siempre avergüenzan al Lemuriano, pero no los desprecia, con las mejillas teñidas de rojo carmín, su corazón latiendo por esta vida que tiene, agradecido con su Diosa por esta oportunidad, su boca con cuidado se abre para delicadamente probar las exquisiteces que preparo para su familia, manchándose levemente sus labios de un poco de esa mermelada casera que hace para este platillo.

Su semblante puede parecer sereno e imperturbable siempre, pero… Ver ese pequeño detalle en la boca del pelilila, una manchita de color naranja, dejada por la dulce mermelada, le tienta tanto, que claramente no puede evitarlo.

Se inclina hacia su izquierda, para besar esos labios, justamente en donde la mancha quedo, en la comisura derecha, lamiéndolo con cuidado a la vez, para de esta manera, demostrar lo pícaro que puede llegar a ser, y así con la satisfacción de ese gesto, regresar a su postura normal con suma calma, después de haber ofrecido ese bocadillo a su esposo

El cual se ha quedado por completo estático, rojo como la grana, y avergonzado por la manera espontánea de ser del rubio, que en momentos así de cotidianos se presenta ante él.

-Sha… Shaka… No deberíamos hacer algo como esto… Aquí en el jardín…- Su pena en tartamudeó se presenta, desviando la verde mirada que posee.

-¿Por qué no? No es nada malo, es solo un beso- Dice esto, para sujetar esa delicada mano del herrero del santuario, y darle un momo con el relleno siendo secreto –Estamos casados, y no me avergüenzo, no considero que sea irrespetuoso que quiera demostrarte mis sentimientos en cualquier lugar- Aclara su punto de vista, para seguir comiendo calmada y ceremonialmente, para mirar al frente, y apreciar el esplendor de esa recamara sagrada que tiene en su templo, ocultando que igual esta rojo de las orejas, pero intenta disimular.

Puede sentir su corazón latir como loco, al tomar ese bocadillo entre sus manos, mostrándose asombrado, y sumamente feliz con la sonrisa de amor en sus labios que habiendo sido previamente tomados por su esposo, sabe que es lindo y tierno cuando quiere, es espontaneo y amoroso, por estarle explicando que un beso entre ellos jamás será considerado como una falta de respeto a este lugar.

Suavemente recarga su cabeza y parte de su peso en el hombro izquierdo del rubio, sintiendo el aroma de incienso que ya es característico del Hindú, dejando que un leve suspiro se escape y a la vez, probando lo que preparo, descubriendo que el suyo es de vegetales, principalmente de zanahorias y brócoli, esta cómodo en ese lugar que es solo suyo, a lado de la persona que más ama en esta tierra, bueno de forma romántica, pues tiene mas a quienes también ama pero de manera muy distinta.

-Gracias, entonces- Decidieron así ambos, disfrutar solo un instante de esa deliciosa comida, en donde sus manos libres se toman, para seguir disfrutando ese bocadillo y admirar el ambiente.

Igual como si solo fueran un par de novios, y no es como si desearan olvidar sus responsabilidades paternas, es solo un momento que así se dio y sus pequeños les regalan.

Y más, porque ambos niños habían despertado, y lejos de querer interrumpir ese escenario tan lindo y romántico de sus padres. Discretamente los ven, dedicándoles unas sonrisas y pequeñas risitas, por sentir una bonita calidez en su corazón por ver el inmenso amor que sus progenitores se demuestran.

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quién me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar?

Y me encuentro bien.

Espero que respondieran la respuesta de día de hoy.

La verdad este capitulo me encanto tanto escribir, de verdad espero lo disfruten.

Gracias por leerme y comentar.

Los mega quiero.

Cuidense mucho.

Ammu se va.


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