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Infidelidad por Aquarius No Kari

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Notas del fanfic:

Este fic tardé como tres años en acabarlo... espero que sea de su agrado

Notas del capitulo:

Debido a algunos puntos y temas que he leido por ahí, decidi hacer este fic XD, ya que –como lo dijo una de mis amigas- siempre ponen a Milo como infiel .

Así que esta vez, no solo Milo, si no también Camus será el infiel… y lo mejor es que ellos son los infieles dentro de sus propias relaciones ... bueno no sé si me de a entender XD…

En fin, espero que les guste n.n

 

"Algo más"

La relación no era rutinaria, solo necesaria para poder llevar una vida más "interesante". Al menos así lo pensaban Camus y Milo.

Ambos eran amantes desde hace tanto: habían compartido su primer beso… su primera vez, y ahora el soportar el compartirse mutuamente con otras personas –aunque supuestamente eso no importaba-.

Milo estaba casado con un actor de teatro, llamado Mime Langler; mientras que Camus mantenía una relación con un ruso estudiante, de nombre Hyoga Ivanov

¿Qué eran entonces? Digamos que ni siquiera ellos mismos lo sabían, solo que el deseo era mucho más fuerte que cualquier otra cosa.

-.-.-.-.-.-

El hermoso rubio se encontraba bebiendo de un poco de su copa de vino, mirando de vez en cuando la ventana… esperando a que él apareciera por la puerta que tenía a sus espaldas.

Al escuchar el rubio del sonido de la madera siendo golpeado con timidez y miedo mezclados, supo enseguida de quién se trataba. Y mientras una sonrisa se escapaba de sus labios, llevándose segundos después la copa de cristal a los labios… se dirigió hacia la puerta para ver una vez más a la persona que había estado esperando –un tanto impaciente- desde hacia unos minutos

-"No puedes cambiar la hora para vernos, cada vez que quieras"- Dijo un pelirrojo entrando apresuradamente en la habitación, sin notar el gesto de los labios de Milo por reclamar un beso de "hola, ¿Cómo estás?... yo también te extrañé…" Camus simplemente se deshizo de la gabardina y se tendió de brazos abiertos en la cama –"Te recuerdo que también tengo un trabajo y una vida"

Milo frunció el ceño. Aparte de que no le gustaba en los más mínimo la actitud del pelirrojo, tampoco su tono de molestia que solía usar a veces. Simplemente cerró ka puerta, dejó la copa de vino en una pequeña mesa y recargó ambos brazos en su cintura, haciendo un notorio gesto de molestia.

Camus se sentó en la cama y le miró confundido –"¿Qué?"

-"Mejor dime que quieres ir a ver a Hyoga"- El pelirrojo notó cierto aire de celos en su voz; pero no le causó ni la menor gracia, sabiendo lo que seguía a continuación

-"Quedamos que ni yo hablaría de tu esposo ni tú lo harías de mi novio"

-"A mi no me molesta hablar de Mime, eres tú quien se enfurruña cada vez que oyes su nombre"- Camus se levantó ofendido y caminó hasta él

-"Eso es porque siempre que discutimos es por él"

-"Mentiras…"- Negó con la cabeza

-"¡Lo estamos haciendo ahora!"

-"La última vez que peleamos fue por Hyoga"

-"Esa vez, TÚ iniciaste todo"-

Milo bufó molesto, desesperado y quizá hasta cansado –"¿Pelearemos toda la tarde?"- Se acomodó el flequillo de la frente –"Debo volver al trabajo"

Camus sonrió olvidándose del problema anterior –"Yo también…"

El rubio le tomó la mano y lo llevo hacia la cama, ambos se abrazaron y se fundieron en un beso… después en un rito de sus propios cuerpos… confesándose en silencio lo que sus propias palabras no podían decirse por miedo a que el otro se alejara…

Y es que según Milo y Camus, en su relación no había nada sentimental…

o.o.o.o.o

El rubio y el pelirrojo estaban recostados en la cama, ambos boca arriba mostrando sus pechos desnudos… uno bebiendo de su copa de vino, otro fumando un cigarro –pensando de pronto, si lo que ambos hacían era lo correcto-

-"En que piensas?"- Le preguntó Milo besando suavemente la comisura de sus labios. Camus le miró unos instantes sin saber que responderle. A los pocos segundos giró el rostro hacia otro lado

-"Nosotros"- Respondió casi en susurro.

El bello rubio sonrió y dejó la copa a un lado, después se giró hacia él y le besó el cuello, dejando pequeños y suaves besos en cada parte sensible del pelirrojo, provocando que poco a poco perdiera el control y que de nuevo fuera cediendo a sus encantos…

Pronto Milo estuvo una vez más arriba del Camus, entrelazando sus manos temblorosas a causa de los besos, succionando con mayor esmero el cuello del pelirrojo para llevarlo de nuevo a su propio paraíso de la pasión…

Sin embargo, la sola idea de que todo estaba mal no abandonaba a Camus, mucho menos la pequeña sacudida que sentía dentro de sí cuando él intensificaba aquella muestra de deseo

-"Hace calor"- Dijo de pronto aventando a un lado al rubio, para sentarse en la cama. Se llevo los dedos a los labios mientras intentaba calmar el ritmo cardiaco de su corazón, dejando que un suspiro saliera de su boca y que todo su ser cosquilleara por el recuerdo del rubio sobre él.

Milo frunció el ceño y se cruzó de brazos. Ahora se sentía… ¿frustrado?... Si, se sentía frustrado, ya que el bello pelirrojo le había quitado la inspiración, solo para hacer una exclamación bastante obvia

-"Te recuerdo que TÚ escogiste el hotel y la habitación"- Camus se levantó de la cama mostrando su cuerpo completamente desnudo, para dirigirse hacia la ventana –cerrada por persianas- y tratar de respirar un poco más de aire para calmarse.

-"Eso es porque esta entre la calle 10 A y la calle 25… aquí nadie nos conoce"- Contestó aún respirando con dificultad

-"El mundo es muy pequeño"- Respondió con una sonrisa y sin mucho interés, ya que él se sentía más preocupado por la actitud que hasta entonces estaba mostrando el francés. Se levantó de la cama y se dirigió hacia donde él se encontraba, colocando sus manos en los hombros del pelirrojo y que de esta forma volteara a verle –"Te conozco mejor de lo que nadie te podría conocer, y tú sabes perfectamente que no puedes ocultarme nada"- Los labios de Camus se movieron sin poder pronunciar palabra; así que simplemente bajó la vista… algo que no le sirvió de mucho ante la sutilidad con la que el rubio levantó su mentón –"¿Cuál es el problema?"- El pelirrojo fundió sus ojos con los de su amante

-"No creo que estemos haciendo lo correcto"- Respondió con la voz apagada, sintiendo como en su garganta crecía algo que no le permitía hablar muy bien…

El rubio hizo una mueca de desconcierto, se rasco levemente la mejilla sin comprender todavía las palabras de Camus

-"¿A que te refieres?"- El pelirrojo se apartó del desnudo griego, un tanto exasperado

-"Tú lo sabes"- De nuevo lo miró –"Mira, yo no creo que sea muy correcto ponerle los cuernos a Hyoga…"- Milo bufó furioso, rodó los ojos y se fue caminando hacia el armario para ponerse una bata, murmurando

-"Otra vez ese nombrecito"- Camus caminó hacia él y se le puso al paso

-"Te guste o no, Hyoga es mi novio; así como a mi, me guste o no, Mime es tu esposo…"- No soportó el sentimiento que lo embriagó en esos momentos y bajó la mirada

-"¡Dioses, Camus!"- Exclamó Milo un tanto desesperado –"Tenemos meses… años, de llevar esta relación y nunca te habías quejado"

-"Es que me di cuenta de que no es lo correcto. Aioria acaba de divorciarse… Afrodita, bueno él es caso perdido… Mu esta por casarse… y yo tengo este vacío en mi vida"

-"Camus, tú y yo somos felices así... mírame"- Levantó su barbilla con la punta de los dedos mientras sonreía –"¿Lo eres o no?"- El pelirrojo no supo que responder, ya que esa rara sensación dentro de él por el roce del rubio no lo dejaba pensar…

-"¿Tú que crees?"- Se limitó a decir

Milo sonrió levemente y dejó un suave beso en los labios del francés, provocándole que esa rara sensación y cosquilleo en su estomago aumentara, que el hormigueo en los labios se extendiera aún más… y que todo su cuerpo se electrizara sin sentido alguno…

Y mientras el rubio y él entraban en calor de nuevo, Camus se preguntó una vez más si tanto él como Milo, eran inmunes a los sentimientos dentro en su rara "relación"

… o … o …

Notas finales:

Yo sé que muchos quería lemon XD… jajajajaja… yo lo sé!... pero no se preocupen porque si tendrá ;D… solo que como era el primer capitulo, decidí que fuera un poco leve ... en fin, nos vemos y gracias por leerme n.n

P.d. ODIO EL HYOGA X CAMUS! ... lo respeto, pero no me gusta ^^uuuu


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