-¡Yo sigo el sendero sangriento!-decía un chico desbocado a todo pulmón mientras que se reía. Estaba en lo alto de la grúa sujetando a Occhan, el chico estaba inconsciente debido a la fuerte paliza que le había metido su contrincante. Ikki estaba con los demás, pero sentía un sentimiento extraño en su corazón cuando vio por primera vez al muchacho, quien tenía ahora la vida de su nuevo amigo. Quería verlo de más cerca, pero sin que saliera herido, así que sin que se diera cuenta se fue a donde se encontraba Agito.-Jajaja…reza todo lo que sepas, porque este día será tu fin-mientras lo balanceaba para tirarlo al vacío, de repente sintió algo en sus rodillas que le hizo perder el equilibrio, perdiendo así a su carga. Mientras abajo los demás, con las ropas que dejó Ikki al subir hicieron una especie de cama elástica para que amortizara el golpe de la caída.-¡Qué haces!-decía furioso Agito-¡Oh no se me va a mover el parche! -Los niños como tú deberían de estar ahora en la cama con las luces apagadas-decía burlón Ikki.-¡Ahg!¡No digas tontería!-decía exasperado Agito. Entonces Ikki sin pretenderlo se acercó hacia Agito y susurró en su oído para que sólo el chico supiera lo que le dijera.-Ey si no dejas en paz a mis amigos, te veo mal para andar ¿sabes? Porque a mi me gusta dar fuerte en todos los sentidos…- a esto último se acercó tanto que sin querer (más bien queriéndolo) le rozó los labios al chico, quien se sonrojó de forma misteriosa, al ver esto Ikki le mordió su oreja izquierda, escapándole a Agito un gemido. -Dudo que puedas satisfacerme-decía como si tuviera un as en la manga.-Aún no me has visto en acción-decía mientras le metía mano al pequeño.-¿Pero qué haces?-decía alterado el otro-Relájate-le susurraba en el oído mientras que pasaba su lengua por el lóbulo -¡Ah…! Para-decía Agito”Oh no el parche”-Ikki, ¿qué estas haciendo?-gritaban los demás.-Este lugar es muy peligroso-dijo de repente Agito, pareciera como si hubiera cambiado de personalidad. Al notar esto Ikki se dio la vuelta y se encontró a un chico muy diferente con el que estaba hablando. Era un chico demasiado mono para ser real. Su ojo era muy claro y a la vez puro, pero no pudo fijarse más en sus detalles debido a que de repente sintió una bala en su cabeza.-¡Qué diablos le estás haciendo a mi hermano, moviendo esa cosa fea por todas partes, bastardo pervertido!-le apuntaba un hombre de pelo largo a la cabeza.-¡No hermano!-decía preocupado Agito.-Ahora no queremos a Akito sino a Agito-haciéndole cambiar el parche.-¡Chicos salgamos por patas!-gritaba a todo pulmón Ikki, mientras que salía zumbando del lugar.Los demás cogieron a Occhan e hicieron lo que dijo Ikki.-Ey que nos están dejando colgados, ¡atrapadlos!-decía furioso el hermano mayor.Agito perseguía a Ikki, todo iba bien hasta que de repente la carretera se cortó dando así con un barranco el cual era la única salida de salvación así que saltaron al vacío.-Haz lo que quieras pero que sepas que lo que estas viviendo es una mera fantasía, si vienes conmigo se te cumplirán todo lo que desees. Agito ya sabiendo que había perdido se cambió de lado el parche y se fue hacia Ikki y le dio un beso en toda la boca delante de todos dejándoles las mandíbulas desencajadas Al principio fue sólo un pico pero después Ikki que había quedado bastante impresionado le fue correspondiendo al beso ante las miradas anonadadas de los demás.
-¡IKKI!-decía enfadada una chica con dos coletas pelirroja furiosa-¡ME LAS PAGARÁS! CONTINUARÁ---