No me dejes solo…
Por qué siempre que te veo me siento así, más solo y hundido en la miseria, supongo que es mi culpa, porque supe desde el momento en que te conocí que íbamos a ser enemigos…pero siempre fui un idiota y a pesar de todo… me enamoré de ti…
Por supuesto este día es peor que ningún otro, porque hoy es día de San Valentín y mientras yo acaricio mi sexo fantaseando con tu cuerpo desnudo, en un destartalado y sucio baño del gimnasio, después de haberte visto en las duchas, tú solo esperas encontrar al menos un chocolate en tu casillero como los que recibieron la gran mayoría de los miembros del equipo…
Y por supuesto yo sé que no será así, porque hoy lamentablemente no vas a recibir nada… también sé que te vas a molestar conmigo por recibir docenas de chocolates, tanto en persona, como en mi casillero… mientras que yo fingiré que no me importa, e hipócritamente voy a actuar como si fuera la victima de tus acosos… cuando el que debería ser considerado culpable de acosarte soy yo… por tomar los chocolates de tu casillero y arrojarlos a la basura para que no sepas de esas malditas estúpidas que buscan tu atención… y por decirles a las chicas que te buscaban para declararte sus sentimientos, que tú ya tenías novia…
Ahora que finalmente termino de masturbarme patéticamente pensando en tu cuerpo, y puedo salir del baño, finalmente te veo allí abatido por no recibir ni un chocolate, y lo peor, es que es mi culpa, pero eso no me hace sentir culpable… por esta necesidad de poseerte, de ser él único en tu mente, como tú eres él único en la mía… porque tengo que admitirlo, soy enfermizamente celoso de ti, porque te amo… y al mismo tiempo te deseo, te necesito y te pertenezco… aunque dudo que tú quieras saber que eres el dueño de mi alma y mi cuerpo… además del dueño de cada fantasía sexual que me embarga.
Me acerco a ti esperando que explotes como siempre haces, que me grites y me digas que me odias, y que trato de humillarte o alguna de esas bobadas que siempre dices, todo para poder oír tu voz, aunque solo sean insultos, y para tener al menos un ínfimo contacto físico, aunque no sea más que un golpe, eso no me importa, porque es tu piel en contacto con la mía y es más que suficiente para mí…
Pero… tú no me dices nada, tus ojos parecen hundirse aún más en la tristeza al verme, acaso mi sola presencia te causa dolor, te das media vuelta y comienzas a caminar, sin decir nada, supongo que para no escuchar a los del equipo que aún están aquí, comentando sobre lo que recibieron el día de hoy.
-do’hao-
Si a pesar de todo te llamo, necesito oír tu voz, necesito tener al menos un contacto contigo, porque hoy más que ningún otro día, necesito un poco de tu atención, y aún así no me miras… acaso tan molesto estas que ni siquiera vas a notarme…
-do’hao, juguemos un uno a uno-
Finalmente te giras y me miras sorprendido, pero por primera vez en mi vida, no sé interpretar tu mirada.
-no me interesa jugar el día de hoy kitsune-
-que pasa tienes miedo-
-por si no te diste cuenta estúpido kitsune, es día de San Valentín, por eso me voy, que acaso no tienes una novia que visitar o algo-
-no me interesa ninguna de las tontas que me molestan cada día y tú con tu cara de do’hao, estoy seguro que no puedes conseguir una tonta para que sea tu novia… tal vez por eso es que no veo ni un chocolate en tus manos-
No sé porque dije todo eso, sé que mis palabras fueron excesivamente crueles, tus ojos están vidriosos.
-ja, nadie jamás podría fijarse en mí ¿verdad kitsune?-
No quiero verte así, tan dolido, tan herido por mi culpa.
-no lo sé, dicen que para cada persona hay alguien, juega un uno a uno conmigo-
-tal vez, pero jamás será la persona que yo quiero, y ya te dije que no quiero jugar hoy-
-qué pasa do’hao pensé que no eras un cobarde-
-piensa lo que quieras, Haruko me esta esperando, lo siento mucho si nadie te espera a ti, pero no me vengas a joder a mí por eso-
Dijiste que Haruko te espera… y sin duda sé quien es esa tonta, Akagi Haruko, mi estúpida enamorada, que irónicamente es la persona que tú amas… por qué tengo que sentir esto por ti, si tú no eres capaz de corresponderme… o mejor dicho si yo no soy capaz de ganarme tu amor… y por eso por mucho que trate… al final tú siempre te vas, todos lo hacen, pero no quiero que tú me dejes… no tú.
Te veo salir del gimnasio y mi corazón se encoge, te sigo sin siquiera pensar … pero no soporto verte marchar, no así, no sabiendo por quien te marchas…
-Hanamichi…-
-no me llames Hanamichi, además qué mierda quie… Rukawa ¿estas bien?-
Demonios, no me di cuenta, pero estoy llorando, no puedo evitarlo, no quiero seguir viéndote lejos de mí.
-yo… Hanamichi…yo…-
-ven vamos al gimnasio-
-no, yo-
-entiendo no quieres que los demás te vean llorar, vamos al parque que esta aquí cerca ¿quieres?-
No sé que pasa, ¿estas preocupado por mí?… pero no dices nada, solo caminas a mi lado, quiero oírte, quiero saber que piensas…
-Hanamichi, no vayas con ella-
-mierda, debí imaginármelo, ahora vas a decirme que Haruko te gusta, porque mierda me odias tanto, jamás te fijaste en ella y ahora que te digo que me esta esperando repentinamente la amas, ¿por qué lo haces, por qué?-
-¡idiota me importa un carajo la niña esa, ¿eres imbécil?, es a ti… a ti te amo!-
Qué hice, te dije lo que siento, y no dices nada, solo te quedas allí inmóvil, sin decir nada, acaso te da asco, acaso me odias más que antes.
-no te burles de mí kitsune-
-te amo… y ya no sé que hacer, por qué las cosas como esta, pasan sin siquiera imaginarlo, por qué aunque sé que somos hombres, aunque sé que te gusta esa niña, no puedo evitar sentirme así… y si ahora te vas, lo entiendo, pero ya no lo soporto, quiero contemplarte sin esconderme, quiero decirte que te amo con locura a cada instante, quiero ser para ti, la mitad de lo que tú eres para mí-
-kitsune…-
-dame una oportunidad, dame una chance… te amo, de verdad te amo, y sé que no te merezco, yo que solo sé causarte daño, pero te necesito, eres… tú eres lo único que necesito en este mundo-
-Haruko…-
-¡maldita sea, por qué solo puedes pensar en ella, sé que no significo nada para ti, pero al menos no me digas que por ella no puedes darme ni una oportunidad!-
-…Haruko, quería que la ayudará a elegir chocolates para ti…-
-jamás quise que ella me amará, si la vida fuera justa, tú me amarías a mí y ella amaría a alguien más, lamento que no te corresponda por mi culpa, pero si ella no te corresponde entonces por qué no lo intentas… juro que si lo intentas, juro que si me das una oportunidad, yo te voy a demostrar todo lo que siento por ti, Hanamichi por favor…-
-siempre lo dije eres un baka kitsune, por mucho que quiera darte una oportunidad, no soy capaz de lastimar a Haruko así-
Dijo “por mucho que quiera darte a una oportunidad”…de qué mierda habla… acaso él…
-¡¿qué?!-
-me voy-
No, si hay una mínima oportunidad de que sientas lo mismo que yo, no te permitiré que te vayas, no ahora…
-dime que quisiste decir con eso Hanamichi-
-ya suéltame, kitsune-
-¡no! Hanamichi te amo, si esa niña no quiere verlo me importa poco, pero si sientes algo por mí, por mínimo que sea debes seguir a tus sentimientos, por qué aún si tú no me correspondes, jamás la amaré, yo solo te puedo amar a ti-
-Rukawa-
-dime Kaede, por favor, dime por mi nombre-
-Kaede, yo… también te amo, pero no quiero dañar a alguien como ella-
-…-
Me ama, Hana me ama, a mí…
-adiós Kaede-
Hanamichi me ama… ¡qué dijo ¿adiós?, no, no puedo dejarlo ir, jamás!
-¿por qué prefieres dañarme a mí Hanamichi? te lo suplico, no puedo dejarte ir no después de saber que tú sientes lo mismo que yo-
No puedo, sencillamente no puedo dejarte huir, por eso te abrazo desesperadamente, por eso mis labios buscan consuelo en los tuyos, no dejaré que repliques, no te voy a dejar marchar, y aunque mi amor sea un amor distinto, un amor egoísta e impuro que me obliga a dañarnos a ambos, no puedo dejarte ir… porque sin ti, me quedaré solo…
-Kaede yo…-
-no te vayas… Hanamichi quédate conmigo, no me dejes solo, te amo-
-no lo haré Kaede, porque aunque quisiera irme no puedo dejarte-
-Hana… Feliz San Valentín-
Owari