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Schneckentraum por shice

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Notas del fanfic:

Gravitation no es mia ni los personajes, tampoco la trama como dije es de I.S.P.

Notas del capitulo:

Que mas se puede decir solo esperar a que les guste y esperar sus opiniones

Schneckentraum “El Sueño del Caracol” Día tranquilo en la cuidad de Tokio, Japón, tranquilo pero a la vez un poco frió, perfecto para un buen café pensó el chico pelirrosa. Eran cerca de las cinco de la tarde cuando Shuichi decidió dejar a un lado sus composiciones y dirigirse al café de la cera de al frente. Al llegar al local busco la habitual mesa cerca de la ventana que siempre reservaban para él por ser cliente recurrente. Pidió lo de siempre: un cappuccino (N/A: o capuchino es lo mismo) y mientras esperaba su pedido se fijo en un chico que estaba en la barra muy cerca de la cajera. Era rubio, muy guapo, con la mirada fija en el libro que tenia entre las manos, Shuichi suspiro, le encantaría poder hablar con él pero era demasiado tímido además no se conocían... Pasaron varios minutos (horas según Shuichi) en los que no despego ni una vez los ojos del rubio, quien parecía no notar la presencia del joven pelirrosa, hasta que miro hacia donde se encontraba Shuichi y levanto un brazo... Shuichi desvió la mirada pensando que se dirigía a él, pero de inmediato vio pasar a su lado a una mesera que llego hasta donde se encontraba el rubio y se tranquilizo un poco. -¿Cuánto es?- dijo el rubio a la joven mesera.- Un dólar y 50 centavos señor- dijo la mesera-Aquí tiene- dijo el rubio y le paso el dinero.- Gracias, que tenga buen día. El rubio pasó por el lado de Shuichi y salio de local, en esos momentos Shuichi cerró sus ojos y se dio valor para hacer lo que le dictaba el corazón: Seguir al rubio.  Pagó el cappuccino y salio tras el rubio, lo vio cruzar a la cera de al frente y luego doblar a la derecha, sin pensar en lo que hacia Shuichi fue tras los pasos del rubio, este doblo hacia la izquierda y Shuichi aprovecho para correr tras él para no perderle el rastro, llego justo a la esquina donde el rubio habia doblado y lo vio adentrarse en lo que parecía un callejón, Shuichi lo siguió y vio que subía unas escaleras y entraba a un local con un letrero afuera. Shuichi subió por dichas escaleras y vio lo que el letrero decía: “Librería y Boulevard Anyu”.  Entro al local y vio que este parecía lúgubre y un poco triste, había uno diez estantes gigantes que llegaban hasta el cielo del local repleto de libros de distintos tamaños, paseo entre los estantes esperando ver al joven rubio, por fin lo encontró muy cerca del ultimo estante, en un rincón ordenando unos libros. Se quedo petrificado ante la belleza y hermosura de aquel hombre... a los pocos segundos el rubio miro a Shuichi e hizo que Shuichi saliera de su trance y tomara el primer libro que sus manos tocaran y se puso a hojearlo, el rubio siguió con su trabajo y de vez en cuando miraba al pelirrosa y este hacia lo mismo. Al fin el rubio termino su labor y se dirigió hacia Shuichi. -Ohayo- dijo el rubio.-Ohayo- dijo Shuichi. -¿Le puedo ayudar en algo?- Preguntó el rubio. -Si...no... Si, me gustaría comparar este libro- dijo Shuichi con voz nerviosa. El joven rubio tomo el libro entre sus manos y lo examinó.-¿Le gustan los caracoles?- Pregunto el rubio.-Nani?-“Caracoles”- dijo el rubio apuntando al titulo del libro.- Hai... Ie... la verdad es que no es para mí, es un regalo.-dijo Shuichi -¿Se lo envuelvo?-pregunto el rubio, Shuichi solo asintió.-Mire, ahí esta la caja, espérame por favor un momento, ahora mismo vuelvo- dijo el rubio y se alejo de Shuichi con el libro. Mientras esperaba por el libro Shuichi se dedico a ver unos cuadros que decoraban las paredes del lugar, una tos detrás de él lo sobresalto y miro hacia la caja, el rubio lo esperaba tras el mostrador, Shuichi se acerco. - Son cinco dólares- dijo el rubio y Shuichi le pasó el dinero- Que pase buen día.-Arigatou.- dijo Shuichi, tomo el libro y se marcho. Al llegar a su departamento Shuichi dejo a un lado el paquete y su mochila y se dirigió hacia el balcón, no podía dejar de pensar en  los ojos amatistas del rubio, ese día decidió seguir yendo a la librería para ver al rubio y así lo hizo, cada vez que iba se arreglaba y partía hacia el local. En estas visitas, que siempre terminaban en la compra de algún libro, descubrió que se llamaba Eiri, cada vez que veía a Eiri lo saludaba con un ligero movimiento de cabeza y este le sonreía y le saludaba con la mano.  Una de las tardes en que se disponía a ir a la librería Shuichi por fin se habia decidido a hablarle. - Eiri, ¿vas a hacer hoy algo después del trabajo?, podríamos ir a beber...Eh...tomar...Me gustaría invitarte un café. – dijo Shuichi mientras se miraba en un espejo en su departamento.- Me gustaría ir a tomar un café contigo, ¿vas a hacer algo después del trabajo?, si así mejor.   Shuichi por fin salio de su departamento rumbo a la librería, por el camino se detuvo varias veces pensando en regresar, en que solo perdía el tiempo con Eiri, después de todo quizás no le gustaban los hombres, pero algo en él le decía que continuara y rápidamente retomaba su rumbo hacia “Anyu”. Cuando llegó el lugar estaba casi vacío, solo habia una anciana, que Shuichi siempre veía en un rincón apartado, busco entre los estantes a Eiri, pero no lo encontró, llego hasta la caja y vio tras el mostrador a una chica desconocida. -¿Le puedo ayudar en algo?- pregunto la chica, Shuichi solo negó con la cabeza.  Se dirigía hacia la salida cuando vio a un anciano sentado dentro de una pequeña oficina y se acerco. -Buenas tardes- dijo Shuichi.-Ohayo- respondió el señor mirando a Shuichi.-Perdone, ¿no trabaja hoy Eiri?- pregunto Shuichi.-¿Eiri?- dijo el señor.- ¿Es usted familiar?-Ie... ie, soy... únicamente... bueno, un amigo... Shuichi salio de local con dificultad, le costaba respirar. Al fin cuando llego a su departamento se apoyo en la pared y dejo caer, un par de lágrimas se dejaron ver en los ojos del pelirrosa recordando las palabras de aquel señor. Flash Back. -Gomenasai- comenzó el señor.- Pero Eiri tuvo ayer un accidente con su coche. Creo que el entierro será mañana o pasado, no lo sabemos exactamente. Lo mejor será que nos llamase... Fin Flash Back Shuichi se tiro sobre su cama, no sentía ganas de nada y las lagrimas salían silenciosamente de sus ojos, recordaba sus momentos con Eiri... se incorporo como pudo en la cama y saco de un pequeño estante el paquete con el primer libro que compro. Rasgo el papel y leyó el titulo, lo abrió y vio como en la primera pagina habia algo escrito:  “Dos de Abril: Sé que me seguiste hoy desde el café, no creo que hayas comprado este libro con la intención de regalárselo a nadie. Sé que es una locura hacer lo que estoy haciendo, escribirte así en este libro, pero la verdad es que me encantaría volver a verte, ¿volverás a visitarme de nuevo? Eiri.” Shuichi no podía creer que lo que veía, fue y saco el siguiente libro, el segundo que compro, rasgo el envoltorio y abrió el libro, leyó:  “Tres de Abril: Aunque no hablas conmigo puedo leer lo que tus ojos me dicen. Eres precioso.” Shuichi saco el tercer libro que compro lo abrió y leyó:      “Cinco de Abril: ¿Cómo te llamas? Aun no lo sé, por favor habla conmigo o dame una señal” Busco el cuarto libro, lo abrió y leyó:  “Nueve de Abril: ¿Sabes? Anoche soñé contigo, deseo cada día poder volver a verte, me encanta tu sonrisa” El quinto libro decía:  “Doce de Abril: Me confundes, ¿Por qué no me respondes? Y por fin el último, rasgo el papel, lo abrió y leyó: “Catorce de Abril: Ai shiteru. Eiri” Shuichi lloro amargamente, las lágrimas no se detenían, se aferro al libro y continúo llorando. Tras unos momentos se fue a la cama, aun con el libro entre sus manos, se acomodo en posición fetal y ahí se quedo mirando al  vacío.  Fin.            
Notas finales:

gracias gracias y miles de gracias


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