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Entre amor y ser amante por kazeyue

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Notas del fanfic:

hola bueno yo y un nuevo fic es corto y espero que les guste

Notas del capitulo: Kaze: holaaaaa bueno aquí con un nuevo fic aunque no he terminado los otros u_uUYue: Baaaaaakaa Kaze: si y nuevamente ella esta, pero no la pelen Yue: por si no te había dado cuenta estoy aquíKaze: ñ_ñU si si lo que digas adelante con el fic aaaaaaaa muy bonito Yue: LO dices porque tú lo hiciste kukukuKaze: ¬¬ cállate
 

-Me voy- dijo con su voz monótona haciendo eco en la habitación.

 

-¿Tan pronto?, si apenas acabas de llegar-Me dirige una mirada de cansancio.

 

-Entiendo- se que no quiere lastimarme o quizá es lo que quiero pensar, no quiero que mi mente me diga que ya no me ama y quizá solo esta conmigo por puro placer. Aunque a veces me demuestra que es así, en mi mundo solo existe él, él conforma mi todo. No se que haría si él no estuviera a mi lado.

 

Hoy como todos los días, vino, hicimos el amor y ahora se va; empiezo a pensar que solo soy una marioneta del cual solo necesita placer carnal. No ¿Por qué? ¿Por qué mis ojos empiezan a derramar lagrimas?, siempre pasa cuando lo veo marchar porque se que tiene un lugar en el que lo espera su...familia...su esposo.

 

Desde que lo conocí, he sido el otro, si, el otro, ante todo mundo no somos nada, nada. Lo veo desde la oscuridad cuando estamos fuera de este, mi mundo.

 

Al principio todo era miel sobre hojuelas o al menos eso pensaba yo. Él me empezó a conquistar y poco a poco caí en su red perdidamente enamorado, pero poco después me entere por su propia boca que era casado, me dio a elegir dos opciones: quedarme con él y ser el otro o dejar lo que teníamos en ese momento hasta allí. Mis ojos derramaron tantas lágrimas y con todo el dolor de mi corazón decidí quedarme con él.

 

Era perfecto todo, cada vez que salía de esos labios un te amo, sonaba tan dulce, tan hermoso, lleno de no se cuantos sentimientos pero ahora... esos te amo suenan tan... vacíos...

 

Haría todo lo que me pidiese, todo, no importa lo que fuera, claro esta una cosa que jamás haría y esa es dejarlo, eso jamás ya que seria como darme por muerto puesto que él se ha vuelto parte de mi, tan importante como el mismo aire que respiro, tan indispensable como el agua.

 

Ya se ha ido y yo no lo he despedido, empiezo a creer que esta relación ya va de bajada pero me parte el alma tan solo pensarlo.

 

He hecho de todo para que esto no muera pero siempre termina igual, él llega cansado, me queda viendo con la misma mirada...fría, que me congela todo. Dios, me pregunto como he podido soportar todo... claro estoy enamorado...enamorado pero...no se si correspondido.

 

Me tiro en la cama y entre sollozos menciono su nombre, ese nombre que me va destrozando poco a poco, que destruye lo que queda de mí y yo sigo aquí brindándole lo que aun existe, mi amor.

 

Me levanto debido a que tocan a la puerta, me pongo una bata, voy al baño, trato de arreglar un poco mis abultados ojos y con paso lento me dirijo a la puerta.

 

-¿Quién?- pregunto pero se quien es...

 

-Kankuro, ¿Qué ya no me recuerdas?- si, mi mejor amigo y mi paño de lagrimas.

 

Abro la puerta y me pegó a su pecho, descargando toda la tristeza y frustración que hay en mí. Aun abrazándome, cierra la puerta y camina al living.

 

No dice nada, no hace nada, solo esta allí consolándome y tratando de entenderme.

 

-Kankuro yo...yo...- trato de hablar pero no puedo mis lagrimas y tantas palabras se aglomeran en mi garganta, pero no me dice nada, es probable que sepa que quiero decirle, tantas veces que lo he repetido que ya se sabe lo que diré.

 

Me aferró a su pecho escondiendo mi cara. Su calido abrazo a veces me recuerda cuando Sasuke lo hacia de esa forma, protectoramente, haciéndome sentir tan bien entre su brazos, como extraño esa sensación.

 

-Dios, ¿Cuánto... mas?... ¿Cuánto... mas tiempo voy a soportar esto?- le digo ya por fin

 

- El tiempo que quieras- alguien contesta atrás de nosotros. Volteo a ver y allí esta él con un semblante serio.

 

-Sasuke-murmullo

 

-Se me olvidaron unos papeles- va a la habitación y yo corro tras él.

 

-Sasuke...yo...yo...-

 

-No tienes porque darme explicaciones, Naruto, desde este momento eres libre de hacer lo que quieras-¿Qué acaba de decir? Mis lagrimas corren por mis mejillas, lo quedo viendo como un idiota esperando a que me diga que todo esto fue una broma pero no, no dice nada , no hay indicios que me digas que fue eso, una broma.

 

-No te preocupes por los gastos que tienes, yo te depositare una cantidad para que puedas vivir como hasta ahora- pasa a mi lado, es...es cierto, me ha dejado y yo no puedo decirle nada. Escucho como cierran la puerta, y por fin reacciono salgo corriendo abro la puerta y veo como se aleja en su auto, me dejó caer de rodillas. ¿Cómo...cómo ha podido dejarme así como así?

 

Mis lagrimas corren, salen y yo me hundo en este vació llamado soledad, me he quedado solo, completamente solo.

 

-Nooooo...nooooo...Sasuke...no me dejes...noooo...onegai...noooo- grito como desquiciado. Mis manos cubren mis ojos; mi cuerpo tiembla por los hipos de los sollozos y allí en la noche fría y oscura unos brazos protectores me estrechan y me reconfortan y yo me entregó a ellos, no importa a quien pertenezcan, si son para un bien o no, no importa ahora yo...yo...quiero sentirme querido, protegido y al menos ya no vacío.

 

Caigo rendido, mis ojos se van cerrando, mi cuerpo se siente pesado, mi cabeza no deja de nombrarlo.

 

En mis seños escucho la voz de alguien que no se descifrar, no se donde estoy, esto no parece mi casa. ¿En dónde estoy? ¿Kankuro?, si es él, en donde estuviera reconocería su colonia, olor a jazmín, dulce y delicioso.

 

-¿Qué ha pasado?- le digo ya abriendo mis ojos.

 

-Te desmayaste, Naruto, que has estado haciendo, el doctor dice que tienes principios de anemia- se ve preocupado.

 

-Yo...yo-

 

-No, no quiero excusas, el hecho que ese Uchiha no te ame, no significa que te dejes morir, no lo vale-

 

-Kankuro...pero yo lo...-

 

-Lo amas, si lo se, tantas veces me lo has dicho que lo tengo muy bien entendido. Pero Naruto, ya te has dado cuenta que él no te ama y aunque lo hiciera te ha dejado y no le ha importado que estés aquí-

 

-¿Le has... llamado?- parece arrepentido por habérmelo contado.

 

-Si, y lo único que me dijo es que le mandara los gastos del hospital-

 

-No te ha dicho algo más- tomo las mantas del la camilla con fuerza esperando que no sea una negativa.

 

-No-

 

Escondo mi cara en mis manos y otra vez empiezo a llorar.

 

-Vamos, Naru no te deprimas así, no te hace bien- se acerca y me acaricia los mechones de mi cabello.

 

-Es que... ¿Cómo ha podido hacerlo?...Kankuro - le agarro de su camisa - ¿Dime cómo se atrevió a dejarme? ¿Qué hice mal?... ¿Qué hice mal? Kankuro dime...responde- le grito y mis lagrimas caen mas y mas. El me abraza y escondo mi rostro en su pecho, dios ¿Por qué a mí? ¿Cuál fue mi error? ¿Cuál? ¿Cuál fue?

 

He salido del hospital y Kankuro me viene a supervisar para que no haga ninguna tontería, me ha visto tan mal con el pasar de los días que ha llegado a quedarse en mi casa.

 

Llamadas de Sasuke, ninguna, algún amigo... tampoco, pues no tengo, Kankuro es el único que he tenido y el que me ha ayudado mucho.

 

En este momento me encuentro recostado en mi cama, perdido en mis pensamientos en mis sueños locos en los que disfruto de una vida con...mi familia... la que perdí hace mas de 17 años. Ellos también me dejaron solo cuando apenas tenia 4 años, y ahora él me deja. Esta bien que enamorarme de una persona casada es un error pero ¿Tan grave es lo que he hecho como para hacerme sufrir de esta manera? ¿Qué tan cruel puedes ser Dios para castigarme por ser la única persona que sobrevivió a ese incendio? ¡¡No fue mi culpa!! ¡Mi madre me salvó!, ¡¡¡Por que ella me amaba!!! ¿Acaso era yo quien debía morir? ¡¿Era yo?!

 

Cada vez que recuerdo eso, en mi mente se dibujan los rostros de mi padre y mi madre que me amaban y de mi hermano mayor que aunque me molestaba se que me quería.

 

-¿Naruto?... Naruto, despierta, tienes una llamada-

 

Puedes ser él. Me levanto cojo el teléfono.

 

< Alo >

 

< ¿Hablo con Uzumaki Naruto? >

 

< Así es, ¿en qué puedo ayudarle? >

 

< Hablo del hospital Heaven, un paciente desea hablar con usted >

 

< ¿Puedo saber de quien se trata? >

 

< Claro, es el señor Uchiha > mi corazón se detuvo, Sasuke esta en un hospital.

 

< ¿Disculpe hay alguien allí?>

 

< ¡¡ ¿Dígame cómo esta?!! >

 

< No le mentiré, esta muy mal, por favor venga lo más pronto posible >

 

Cuelgo y salgo por un abrigo. Kankuro me queda viendo estupefacto.

 

-Sasuke esta en el hospital- logro decirle

 

-Espera yo te llevare- 

 

Salimos lo mas aprisa, en cuanto llego me bajo y corro a pedir información.

 

-Busco a Uchiha Sasuke- le digo a la pobre enfermera que me queda viendo con un semblante serio.

 

-Lo siento, hace apenas unos minutos acaba de fallecer- me dice un medico que estaba a mi lado.

 

Mi corazón se rompe en millones de trocitos, es eso posible Sasuke mi Sasuke esta muerto.

 

-Ha...ha...muerto- digo y mis ojos empiezan a derramar lagrimas

 

Kankuro llega en ese momento y me abraza. Dios no puedo creerlo, si pensé que podía haber alguna oportunidad de volver con él todas se desvanecieron en este momento.

 

-¿Puedo verlo?- le pido al doctor, me ve y le suplico con mi ojos que me deje.

 

-Claro, habitación 14 en el segundo piso-

 

Corro lo mas rápido que mis piernas pueden hacerlo. En cuanto veo la habitación mis piernas me empiezan a fallar, me acerco con miedo a enfrentarme a la realidad, tomo el pomo y mi corazón no deja de decirme que no debo hacerlo, abro lentamente la puerta y mis piernas me dejan caer al piso y empiezo a llorar y todo por que allí, en la cama esta...esta...Uchiha...Uchiha Itachi.

 

- Después de todo fue solo un susto-hablo de manera conciliadora mi amigo.

 

Me acerque con cuidado al cuerpo inerte de Itachi, para mi era como mi hermano y él siempre me decía lo mismo. Lagrimas rodaron por mis mejillas, pero esta vez era un dolor por perder a un hermano.

 

Kankuro me dejo solo por un buen rato, cuando creyó que era el momento entró.

 

-Naruto, el doctor quiere hablar contigo-dijo tomándome del hombro.

 

-Si, esta bien iré en un momento- me seque con mi antebrazo las lagrimas y salí; una enfermera me esperaba y me llevo con ella. Llegamos al consultorio del doctor donde me esperaban un señor de traje y el mismo doctor.

 

-Siéntese por favor- hablo el hombre calvo de traje.

 

Como me ordeno lo hice, me senté en un sofá a lado del escritorio.

 

- Antes de que el señor Uchiha falleciera, dejo algo para usted- hablo el medico.

 

-Como fue algo que decidió como ultimo deseo, nosotros debemos cumplirlo- dijo mirándome el tío ese.

 

- Por favor síganme- hablo el doctor. Lo seguimos por un largo pasillo. El erudito se paro enfrente de una sala. "maternidad" por lo que pude leer.

 

-Por favor acérquese- me pidió amablemente. En el gran ventanal pude observar a muchos bebes, de diferentes tamaños y colores. Todos eran unos lindos niños.

 

-Ve a ese bebe de allí- señalo a un bebe que estaba en una tipo caja de cristal. Creo que una incubadora, su cabello azul, pero sus ojos no los pude ver ya que estaban cerraditos, su piel blanca algo rojita.

 

-Ese bebe el es hijo del señor Uchiha y de su esposa Konan por lo que tengo entendido- lo quede viendo con un signo de interrogación a que venia todo eso.

 

-El señor Uchiha dejo a esa pequeña a su cuidado- término de decir el tipo de traje.

 

-Claro, si usted no desea tener a la pequeña será llevada con su familia, pero antes debo entregarle esto- me extendió un pequeño pedazo de papel -El señor Uchiha lo escribió antes de morir- explico

 

Hola Naruto si lees esto es porque ya pase a mejor vida, si lo se no es momento para mis bromas.

 

Como sabrás, hace algún tiempo deje de estar en contacto con mi familia, de eso ya sabes, el punto es que sabes Konan murió al dar a luz a mi pequeña hija y yo no podré vivir para verla crecer, me encuentro muy mal, por eso y debido a que te considero como parte de mi familia te pido este gran favor, hazte cargo de mi pequeña hija, esto también lo desearía mi querida esposa.

Sabes que mi familia son personas frías y sin sentimientos, aunque se que estas con mi ototo, se que sabrás criarla. No dejes que mi familia se quede con ella por que llevara una vida infeliz como la que yo lleve. Por favor cuídala y déjala ser feliz a tu lado. Gracias por todo querido Ototo. Itachi Uchiha.

 

Apreté los labios, durante todo este tiempo unos mis grandes soportes fueron Itachi y Konan. Ahora también los pierdo pero me dejan a su pequeña ¿Cómo no voy a cuidarla? Aunque me muera por cuidarla me quedare con ella así tenga que enfrentar a la familia Uchiha mas de una vez, no me importa.

 

-Claro que acepto-le digo al doctor.

 

-Entonces, señor Uzumaki sígame, tendrá que firmar algunos documentos para que legalmente la pequeña sea su hija-

 

 

 

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Los días pasaron y por fin la pequeña Suzuki se pudo ir a casa conmigo. Kankuro tuvo que ayudarme en los primeros días pero ya acostumbrado pude atender a la pequeña. Aunque es una cría, ella llena un poco el vacío que siento, la soledad ya no se están deprimente. Ahora he formado una pequeña familia. Suzuki es una pequeña sorprendente, aprende muy rápido.

 

Hace apenas un año que me moría porque Sasuke me había abandonado. Con todos el dinero que disponía, me mude a una casa algo grande para vivir mucho mejor, Kankuro me pidió que contratara una nana para Suzu-Chan pero yo no quise, no es que desconfíe de las demás personas solo quiero que ella crezca en una familia, aunque pequeña, que sea calida, están pequeña y debe de sentir el cariño de alguien que no sea un desconocido.

 

Toc-toc

 

Alguien toca a la puerta, corro abrir no se de malas que Suzu-Chan se despierte si apenas se acaba de dormir y es una lata para que se duerma.

 

-Naru- me saluda mi amigo Kankuro

 

-Hola, Kankuro, ¿Qué haces por aquí?-

 

-Vine a visitar a mi pequeña sobrinita- me dice y saca un mapache café de felpa

 

-Kawaiiiiiiiii- grito y tomó la cosita entre mis manos, la abrazo con fuerza y Kankuro me queda viendo sonriente.

 

-jejeje, Naru es para Suzu-Chan pero si quieres puedo traerte uno a ti también-

 

-Kankuro te quiero- le digo abrazándolo

 

-Para ti será un ¿Gato?- me dice

 

-¿Un gato?-

 

-Si porque te encantan o ¿Prefieres un zorrito?-

 

-Lo que tu quieras esta bien por mi- le sonrío -Puedes ir a Suzu-Chan esta acostadita asíque no hagas ruido porque si no tu te encargas de ella-

 

-No te preocupes no quiero despertarla- sube al cuarto de la pequeña y yo me voy a la cocina.

 

Después de un buen rato escucho que Kankuro baja, salgo para decirle que se siente porque vamos a empezar a comer, pero cuando saco la cabeza me doy cuenta de que Misuzu viene entre sus brazos.

 

-Se la levantado- dice frotando su mejilla con la de la pequeña, desde que llego a casa Kankuro a sido mas que un tío para la pequeña.

 

-¿Adivina que acaba de decir Suzu-Chan?- dice algo emocionado

 

-No tengo idea, ¿Qué dijo? Espera que voy por la cámara para grabarla- digo emocionado ya que seria su primera palabra.

 

-Vamos Suzu-Chan dile lo queme dijiste- la pequeña me mira y sonríe, se ve tan tierna apenas tiene un año pero es tan traviesa.

 

-Oto-san- dice quedito mis ojos empiezan a derramar lagrimitas de felicidad me aviento a ellos y los abrazo.

 

-Suzu-Chan dilo otra vez- le pido pero la pequeña me queda viendo media enojada, jajajaja con esa mirada parece...Sasuke. Mi mirada se empaña ahora de recuerdos tristes. Entonces Kankuro me susurra al oído.

 

-Naruto, no pongas esa cara nos pones tristes a los dos, ¿Ne Suzu-Chan?- levanto la mirada y veo como Suzuki tiene ganas de llorar, le sonrío dulcemente y ella hace lo mismo.

 

-Vamos a comer ya, la cena esta casi lista- Pronto estábamos lo tres cenando, yo por supuesto que le daba de comer a Suzu-Chan y pero como toda niña intranquila jugaba con la comida y cuando yo le llamaba la atención salía de su boquita un "Oto-san" y no podía enojarme, cada vez que lo repetía eso sentía una enorme felicidad. Después de comer Kankuro tuvo que irse, dijo que tenia que verse con alguien, he empezado a pensar que Kankuro esta enamorado, muuuy enamorado para ser precisos.

 

-Suzu-Chan debes de dormirte mañana airemos a supermercado- le digo arropándola. Ella me sonríe y cierra sus ojitos

 

-Oto-san- dice y se queda dormidita

 

Me voy a mi habitación y me meto a la ducha para después dormirme, a decir verdad aunque son las 7 de la noche me siento algo cansado, quizá esto de ser padre no es para todos, pero definitivamente si es par mi.

 

Salgo de la ducha, medio me seco el cabello con una toalla y me meto a la cama tan pronto caigo en ella me dejo llevar por Morfeo aun lugar desconocido.

 

El despertador suena desde hace rato marcando las 7 de la mañana, dentro de media hora Suzu-Chan pedirá su lechita, como todo buen padre me levanto, tomo una yukata y voy a la cocina, meto a hervir el biberón, mientras me hago un café, escucho el llanto de Suzu-Chan, subo las escaleras y por ir bostezando caigo al suelo, eso me despierta por fin, llego y la veo allí con su pequeño mameluco se ve tan mona. La cargo y bajamos ella con una enorme sonrisa  y yo con lagrimitas en los ojos causa de los grandes bostezos. Siento que la pequeña Misuzu me da un intento de beso en la mejilla.

 

-Oto-san-dice sonriendo

 

Desayunamos, nos bañamos y luego salimos de paseo y al supermercado.

 

La pequeña señalaba todo lo que se veía deliciosos a sus ojos, entonces vimos a un payaso y en vez de llorar o de reír, puso su seño fruncido, reía para mis adentros cada vez se parece mas a Sasuke e Itachi.

 

Llegamos a "enlatados", una mujer se acerco a nosotros, una pelirrosa.

 

-Pero que pequeña y hermosa niña-dijo la mujer acariciándole una mejilla, Suzuki estaba seria.

 

-Oto-san -dijo aun seria pero esta vez mirándome. Más o menos entendí.

 

-¡¡Kawai!! Tan pequeña y ya habla- dijo la mujer más que emocionada.

 

-Gomenne, tenemos que irnos- le dije a la mujer y dio una caricia a la mejilla de la pequeña y se fue.

 

Salimos del super, Suzu-Chan estaba dormidita. Así que fue un lío cargarla y cargar las bolsas gracias a Kami que había un buen hombre que me ayudo.

 

Maneje con cuidado para que no se despertara. En un semáforo sentí como si alguien me dijera "voltea" mi sorpresa fue encontrar a la mujer de hace unos instantes a lado de ¿Sasuke? La mujer se colgaba de su cuello, por azares del destino él  no volteo a verme, temblé al pensar que lo haría no mostraba algún sentimiento, sus ojos veían al frente y de pronto arranco, escuche el claxon de otros autos y me di cuenta que el semáforo estaba en verde. Conduje sin conciencia a donde iba, mis ojos de abrieron con sorpresa al encontrarme en mi antigua casa. Con el letrero de "en venta".

 

Me baje del auto, cargando conmigo a la pequeña. Entre a la casa ya que aun guardo una llave, esta tal y como el deje, mantas blancas cubriendo los muebles, no me lleve nada para no recordar, quería comenzar de nuevo y no quería tener ningún recuerdo de él.

 

Después de un recorrido, algo largo, me subí nuevamente al auto, mis ojos querían que llorar, recordar tantos momentos buenos y malos que pase allí me hacían pensar que no debía venderla, pero no fue así, me contuve. Llegue a casa ya algo tarde, lleve a Suzu-Chan a su camita y la deje allí, yo baje y saque una cerveza del refrigerador y empecé a tomar. La puerta sonó pero no conteste, luego el teléfono y tampoco conteste. Sonó mi celular y paso lo mimo.

 

Escuche que se marchaban de la entrada, entonces me puse a llorar, Sasuke ya había encontrado suplente para mi y era una mujer muy bonita. Que fácil había sido para el y cuando me vio ni una sonrisa nada.

 

Los llantos de mi pequeña hija me despertaron, torpemente me levante y camine a la habitación. Abrí y me encontré con Suzuki paradita, tomada de la cuna. Sus ojitos mostraban que desde hace rato estaba llorando.

 

-Oto-san- dijo con su vocecita entrecortada. Era verdad Sasuke había sido mi pasado, ahora tenia que cuidar de la pequeña mi presente y futuro. La saque  y arrulle entre mis brazos hasta quedar los dos dormidos.

 

 

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Notas finales:

La continuacion ya lo tengo terminada asi que siguiiiiiiente


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