Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿Un error? por Kaiya

[Reviews - 214]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

 

 

 

 

[Naruto pertenece a Masashi Kishimoto]

 

1.Así empieza todo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

-Ringgggg- “¡Mierda!”- Ringggg-

-¡Maldita sea! -el moreno golpeó con furia el despertador que no dejaba de sonar sobre la mesita de noche. Escondió su cabeza bajo la almohada, notando cómo un pinchazo se hacía presente, “como aguijones atravesándome el cerebro”, pensó.

 

Había tenido una noche demasiado agitada. Demasiado para ser un martes cualquiera. Últimamente sus noches eran así.

 

Miró a su derecha para encontrar lo evidente. Su “polvo de rutina”, como solía llamarlos.

 

-Ah... dobe -dijo con una sonrisa en los labios.

Lo habían pasado bien. ¡Qué coño! Lo habían pasado muy pero que muy bien. Ese rubito sabía cómo volverlo loco en todos los sentidos.

 

Se levantó dispuesto a ir a la ducha, recordando la noche anterior con placer.

Dirigió una mirada más a su conquista, observando cómo éste se acurrucaba buscando el calor en su parte vacía de la cama. Sonrío de medio lado mientras sostenía una toalla en la mano. "Usurantonkachi...".

 

 

****************

 

Se desperezó tranquilo. Estirando sus brazos al aire de forma perezosa. Se sentía bien.

Abrió los ojos lentamente, acompañando el gesto con un sonoro bostezo. Miró al techo algo confuso.

 

Giró la vista hacia la derecha,observando la ventana con las persianas aún bajadas, percibiendo cómo los rayos del Sol se infiltraban tímidos a través de las rendijas.

 

No estaba en su casa... Esa no era su habitación...

 

Se levantó de golpe, impulsado como un resorte, quedando sentado sobre la cama.

Un pinchazo acudió rebelde hasta su sien, causándole un dolor insoportable.

-Dioos... -se quejó-. ¿Cuánto bebí anoche?

Intentó recordar lo que había pasado y qué demonios hacía allí.

Palideció cuando los recuerdos comenzaron a venir a su mente.

 

-¿A... a tu casa?

-Sí. ¿Acaso no quieres?

 

-Oh, mierda... -se quejó mientras golpeaba su frente-. ¡Mierda!

 

El sonido del agua correr le llegó desde el baño.

 

¿Por qué no imaginó que las cosas acabarían así?

 

-Estúpido -casi gritó mirando asustado en dirección al baño-. Eso es lo que eres, ¡joder!

 

“Ya puedes estar orgulloso”, pensó con un puchero en los labios. “Ya formas parte del polvo Uchiha”.

 

Sabía que tarde o temprano ocurriría. Intentó por todos los medios resistirse, pero joder, Sasuke sabía que cuando estaba cerca se ponía a mil, y tarde o temprano iba a caer.

Iba a caer, porque no podía evitarlo. Sasuke era su maldito punto débil desde que podía recordar.

Ambos mantenían una extraña relación ,pero nunca habían llegado tan lejos.

Y ahora seguramente el moreno conocía sus sentimientos y con eso, todo terminaba entre ellos.

Sasuke no quería relaciones, y eso lo sabía desde el principio. ¿Qué sería ahora de ellos?

 

Se levantó sintiendo una angustia en el pecho. Se vistió tan rápido como pudo. Lo que menos quería ahora era un encuentro con él. ¿Qué cara pondría cuando lo viera?

-Joder... -sollozó lastimero mientras ataba los cordones de sus zapatillas-. ¿Qué has hecho, Naruto?

Se encaminó rápidamente hacia la puerta, dirigiendo una última mirada hacía el baño.

Salió de allí tan rápido como pudo.

 

 

 

****************

 

Pero nada era tan fácil, una historia nunca puede empezar por el final. ¿Verdad?

 

****************

 

 

 

-¡Sasuke, espérame, ttbayo! -gritó un rubio de ojos azules radiante de felicidad.

-Eso te pasa por ser tan lento, dobe.

-Temee... -corrió deprisa para estar a su altura.

 

El rubio estaba feliz. Lo estaba y mucho. ¿Quién le iba a decir que él y Sasuke acabarían en la misma universidad?

Habían elegido carreras distintas y, aunque no coincidieran en la misma facultad, se sentía feliz. Se habían trasladado a la ciudad, escapando del pueblucho en el que vivían, Konoha. Por fin eran independientes. Habían elegido un par de estudios en el centro . No vivirían juntos, claro. El moreno no tenía paciencia para convivir con nadie, y menos con cierto rubio hiperactivo. Pero aun así, uno al lado del otro, como siempre.

-¿No estás contento, Sasuke?

-¿Por? -preguntó indiferente.

-Bueno... al fin eres libre, ¿no?- cuestionó con una sonrisa en los labios.

Sasuke no llevaba una bonita relación familiar que digamos.

Odiaba a su hermano, con el cual le habían impuesto convivir cuando tenía seis años y sus padres murieron. Siempre le habían dicho que habían muerto en un accidente de coche, aún así Sasuke nunca había dejado de culpar a su hermano por ello.

-Tsk... -gruñó irritado. No le gustaba hablar de su familia, ni siquiera con Naruto.

Ellos se conocían desde que eran pequeños, viviendo siempre uno al lado del otro. El rubio era el único que podía presumir de conocer algo a Sasuke, ya que éste no era muy receptivo a la hora de hacer amistades. Simplemente no le gustaba la gente. Le fastidiaba demasiado.

 

 

Llegaron pronto a su destino y fueron a deshacer las maletas. Quizá cierto rubio con más emoción. No cabía en sí del gozo. Él y Sasuke vecinos. Ya empezaba a imaginarlo... charlas eternas, cafés por la mañana, películas los domingos... Un momento, ¿en qué estaba pensando? ¡Por dios! Era Sasuke, el de toda la vida, más seco que un palo y el ser más insociable que había pisado la tierra.

Debía bajar de las nubes y ser realista. Las cosas seguían igual, por mucho que ya no estuvieran en casa.

-Va a ser difícil... -suspiró.

 

 

*****************

 

La noche se hizo tan rápido que apenas se dio cuenta. Había estado ocupado, sacando todo de la maleta y molestando a cierto moreno buenorro que tenía ahora como vecino.

 

Obligó a su amigo a ir hasta su casa y quedarse a cenar, ya que este nunca se invitaba por sí mismo.

 

Sasuke entró con unas latas de cerveza en la mano y un cigarrillo en los labios.

 

"Sexy" pensó Naruto.

 

-Deja de mirarme así y échame una mano, dobe.

-Sí... -contestó algo ruborizado al verse descubierto.

El rubio cogió las cervezas sin dirigir si quiera una mirada a su amigo y se encaminó hasta el salón, donde esperaban dos tazones de ramen instantáneo.

-Te morirás de indigestión si sólo comes esta porquería -dijo sentándose en la mesa.

-Calla, teme -replicó a la defensiva-. Sé hacer mucho más.

-Seguro -contestó irónico.

 

 

Naruto no dejaba de hablar. Mientras, Sasuke lo escuchaba con cara aburrida.

Siempre era así, el rubio hablaba y él lo observaba.

Le gustaba ver el entusiasmo que siempre ponía a todo, no era como él, que sinceramente, todo le importaba una mierda.

-Y mañana empezamos con el nuevo curso, no sabes lo nervioso que estoy ttbayo... ¡Oye! -replicó-. ¿Me estás escuchando?

-Sí -respondió cansado mientras le daba un sorbo a su cerveza-. Estás nervioso por mañana.

-Eso es. ¿Cómo puedes tener siempre esa cara?

-¿Qué cara?

-Esa -lo señaló con el dedo índice.

-Pues la que tengo, dobe.

 

Se quedaron ambos en silencio, mirándose. Naruto empezó a notar cómo sus mejillas iban tornándose de color carmesí, al sentir la mirada oscura clavada en sus ojos. Debía admitir que llevaba una temporada siendo vulnerable a esa mirada, y cada vez los sonrojos y los suspiros se hacían más evidentes.

 

Se preocupó por ello. ¿Qué tal vez Sasuke sospechaba alguna cosa?

 

Negó con la cabeza algo nervioso, dándose cuenta de que el moreno lo miraba intrigado.

 

-Bueno, me voy a casa -dijo apartando la mirada y apurando el último trago de cerveza-. No te duermas, usurantonkachi -sonrío con burla.

-Hasta mañana, teme -dijo con un bufido, pero aliviado de que finalmente se fuera a casa.

 

Naruto estaba algo preocupado. Últimamente la atracción que sentía por el moreno se había intensificado de una forma que no lograba comprender. Sasuke siempre le había gustado, eso lo tenía claro, pero de unos meses en adelante, la sensación de querer estar con él se había vuelto mucho más necesaria.

Además de que sus hormonas pedían a gritos estar más cerca del moreno. Cada vez que lo miraba con esos ojos no podía evitar el imaginarse cómo sería el estar con él, el ser besado por esos labios, desnudado por esas manos...

 

-Necesito una ducha fría... -suspiró de forma lastimera.

 

 

**********************

 

 

Sasuke se tumbó en la cama aún algo confuso.

 

El dobe llevaba una temporada demasiado extraño. Notaba su mirada diferente. Cómo en ocasiones lo absorbía con ella. Y eso no le gustó.

Sabía lo que pasaba si alguien se enamoraba de él, ¿pero Naruto? No, él no.

 

Abrió otra lata de cerveza, mientras encendía un cigarrillo.

Últimamente había estado bebiendo demasiado.

Estaba cansado de todo. De Itachi, de sus padres muertos, de su maldita existencia, todo.

Y no podía hacer más que refugiarse en lo único que sabía hacer: beber y follar. Eso es.

 

Y en Naruto, claro. Lo hacía de manera inconsciente, pero así era. Le gustaba su entusiasmo. Y que no dejara de hablar en todo el santo día. Eso lo mantenía con calma,Naruto serenaba sus sentidos.

Y el rubio era feliz con sólo formar parte.

Pero nunca lo dejaba entrar. Podía estar con él, pero nunca saber lo que pensaba.

Todo era demasiado complicado para Sasuke.

 

-A la mierda con todo -dijo dando un nuevo sorbo a la cerveza.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).