- Renji...- susurr Byakuya.- Esta noche vuelve aqu.
- Renji suspir asintiendo y sali por la puerta del despacho.
- Maldito...- iba pensando.- Se aprovecha de que es mi superior y encima aristocrata para hacer lo que quiera conmigo.
Ya era ms de media noche, el capitn estaba sentado al lado de la ventana con un vaso de sake, esperando. Dnde se haba metido? Estaba tardando demasiado...
Oy que se abra la puerta, mir y una sonrisa perversa se formo en sus labios.
- Llegas tarde.- susurr lavantndose. Renji no contest.- Estaba pensando que ya estoy arto de este sitio, podamos ir a uno ms comodo y apropiado, no te parece?
Renji sigui sin responder, cosa que tampoco molesto demasiado al otro, ya que desde que ese extrao juego de posesin haba empezado meses atrs, su teniente apenas le diriga la palabra.
Byakuya sali de all seguido por Renji. Recorrieron todo el edificio hasta llegar a la habitacin del capitn.
Una vez dentro y con la puerta cerrada, el moreno volvi a convertirse en el mismo hombre posesivo de todas las noches. Hizo que Renji se echara y una vez sobre el habia comenzado a besarle. El otro simplemente responda a los besos y caricias por temor a las posibles consecuencias. Se dejaba desnudar intentando contener aquellos pequeos gemidos que se le escapaban, por culpa de lo que estaba haciendo la mano de Byakuya.
El moreno sonri, Renji siempre se haca el duro con l, a pesar de saber que lo estaba disfrutando. Pero era demasiado orgulloso para admitirlo, prefera seguir pensando que su capitn lo violaba... Oblig al pelirrojo a ponerse sobre l, este ya saba lo que le estaba pidiendo. Recorri el pecho desnudo de Byakuya rpidamente con sus labios, hasta llegar al que era su destino. Pas su lengua por el miembro de su capitn maldiciendo que le hubiera encantando or el gemido que se haba escapado de su boca. Repiti la accin, repitindose el gemido y el estremecimiento por parte de Renji.
Enfurecido consigo mismo sigui su tarea, se lo meti completamente en la boca y empez a jugar con su lengua a medida que se lo meta y lo sacaba.
Byakuya no paraba de suspirar. Su mirada no se separaba de Renji mientras se morda el labio inferior, le encantaba.
Cuando Renji noto que el otro estaba a punto de llegar se separo asqueado.
Al momento Byakuya agarr por el cuello al pelirrojo, acercndolo a l y, mientras le volva a besar se gir para quedar otra vez encima. Con ambas manos separ las piernas de Renji para acomodarse entre ellas y sin ms dilacin, cuando se las hubo calzado bien dio la primera embestida.
Renji abri los ojos, aun sabiendo lo que se avecinaba lo habia cogido desprevenido, haciendo que le doliera mucho. Respiraba forzosamente intentando recuperar rpido la compostura, sabiendo que Byakuya no le dara mucho tiempo ms para acostumbrarse a la invasin.
Y as fue, sin estar Renji calmado del todo el moreno empez a embestir fuertemente. Con una mano fue hasta el miembro de su teniente y comenz a masturbarle a la misma velocidad a la que l se mova.
Renji se morda el labio para que los gemidos que queran salir sonaran como leves protestas. No le dara el gusto al moreno de saber lo bueno que era.
Sin embargo cuanto ms cerca estaba el final, ms le costaba disimular el placer. Hasta que llegado el final, por mucho que lo intent, se le escap todo lo que haba intentando aguantar. Sacndole con eso una sonrisa entre pervertida y maliciosa a Byakuya.
Se separaron y empezaron a vestir. En cuanto estuvo listo Renji sali de all lo ms rpido que pudo.
- Hasta maana Renji.- oy tras de s.
Al da siguiente cuando Byakuya lleg al despacho de la sexta divisin Renji ya estaba all.
- Que madrugador te has vuelto ltimamente.- coment sonriendo el capitn.
Renji alz la vista hasta l un segundo odindolo a muerte.
- Pas por aqu el capitn Hitsugaya hace una hora preguntando por usted.- inform secamente.
- Bien.- sonri, le encantaba tenerlo con ese enfado suyo todo por culpa del ego.
Fue hasta el despacho de la dcima divisin para ver que quera Hitsugaya.
Al quedarse solo Renji suspir. A pesar de todo lo que le odiaba no poda evitar ponerse nervioso cuando estaba a solas con l. Senta que si se despistaba un solo segundo su capitn le iba a devorar y l no se vea con fuerzas para pararlo...
A la media hora ms o menos volvi Byakuya. Al verlo entrar Renji se tens, pero el otro lo ignor completamente. Abri un cajn de su mesa y sac algo que su teniente no vio, y entonces se dirigi a l.
- Hitsugaya y yo tenemos una misin, Renji. No creo que vuelva antes de maana, as que no me esperes...
-Qu clase de misin, capitn?
Solo te puedo decir que ser bastante complicada...- hizo una pausa mirando al teniente intensamente.- Si llegara a morir...Sera un alivio para ti, verdad?
Renji baj la mirada mordindose el labio, sin saber que contestar. Byakuya esboz una sonrisa algo triste y se fue.
En la cabeza de Renji todava segua flotando la pregunta de su capitn. Cmo se sentira si Byakuya muriera? Aliviado o triste? En un primer momento pens que aliviando, pero tras meditarlo un momento se dio cuenta de que no. Por qu? Porque era su ideal para hacerse ms fuerte?...S...Deba ser eso...
-Pues yo no creo que sea por eso.- coment esa noche Rangiku.
Se haban reunido para beber despus del trabajo Renji, Rangiku, Kira y Hisagi. Cuando ya estaban todos un poco afectados por el alcohol a Renji se le ocurri consultar sus dudas internas con ellos.
-Yo tampoco.- dijo Hisagi.
-Ni yo.- dijo por ltimo Kira.
-Verdad?- continu Rangiku.- Con un capitn as es normal sentirse atrado por l. Eso simplemente vindolo, as que si te acuestas con l ya sera la locura.
-Eso es porque t eres una depravada Rangiku! Pobre de tu capitn cuando crezca...
-Tendr una suerte...- murmuraron como para si mismos Hisagi y Kira.
-Y t eres un cabezota!- le espet Matsumoto.- Si no te atrae, por qu no te niegas?
-Porque me matara, tal vez me expulsara del Seireitei...
-Sabes que eso es imposible,- dijo Hisagi.- por mucho que l lo intentara tendran que estar de acuerdo con l el resto de los capitanes y no creo que la razn “no quiere tener sexo conmigo” sirva para convencerlos. Adems, t tambin sabes que las violaciones estn prohibidas aqu por ley. Si tan ultrajado te sientes vete a hablar con Yamamoto y el expulsado ser el capitn Kuchiki.
-Es que...
-Excusas, excusas...-dijo Rangiku moviendo arriba y abajo la mano.- Que te gusta, no hay otra. Ya veras cuando se entere la hermana del capitn con lo aficionada que se ha vuelvo a estas cosas por culpa de unos cmics del mundo real...-coment sonriendo.
Renji suspir resignado.
Esa misma noche en su habitacin, el teniente de la sexta divisin no era capaz de dormir. Senta que ya comenzaba tener resaca, adems de que tanto las palabras de su capitn como las del resto de los tenientes con los que haba estado no dejaban en paz su cabeza.
Se dio cuenta de que s era realmente un estpido por no haber ido a hablar con Yamamoto, pero...Por qu no lo haba hecho? Justo al pensar en eso record la sonrisa pervertida que le sola dedicar Byakuya y se estremeci. Record tambin su tono de voz seductor, sus besos y caricias, su mano recorriendo juguetona su intimidad...
De repente despert. QU… HACA PENSANDO EN TODO ESO!? Y lo peor de todo era que su cuerpo haba reaccionado. Buf, se puso boca abajo intentando relajarse, pero al cerrar los ojos para hacerlo le venan imgenes de Byakuya sobre l. Ya le haba ocurrido otras veces, pero normalmente poda apartarlas de su mente con cierta facilidad.
-Maldita sea!
Se sent en el borde de la cama posando sus codos en sus muslos y apoyando su cabeza en sus manos, cerrando fuertemente los ojos.
De repente sinti el riatsu de otro shinigami.
-Teniente Abarai?- oy a travs de la puerta.- Vengo de a cuarta divisin.
-Qu pasa?- pregunto molesto.
-Es el capitn,- a Renji le dio un vuelco el corazn, ya haba vuelto y le iba a pedir que fuera?- acaba de volver de una misin y esta herido...
Sin entender despus muy bien por qu, Renji, se levanto rpidamente de la cama y fue hasta la puerta abrindola.
-Vamos!
De camino hasta la sede de la cuarta divisin el shinigami le fue informando del estado del capitn.
-No esta muy grave. Nos dijo que no haca falta que usted se enterara de nada, pero no nos pareci bien.
Llegaron rpidamente hasta la habitacin de Byakuya, a la puerta se encontraban el capitn Hitsugaya y la capitana Unohana.
-Acaba de dormirse.- inform Unohana al ver llegar a Renji.
-Da igual, me quedar con l.
Unohana sonri.
-Que leal...-susurr y justo con el capitn de la dcima se fue.
A Renji aquel comentario le haba dejando incomodo. No sabia si la capitana lo haba dicho con segundas intenciones, pero no le haba agradado nada el tono.
Entr en la habitacin y vio a Byakuya con el pecho y el brazo derecho vendados, apoyado en el costado izquierdo durmiendo. Renji llev una silla el lado izquierdo de la cama y se sent. Se qued observando a su capitn dormir. No estaba acostumbrado a verlo as, ahora de l solo recordaba su faceta pervertida. Un respingo le recorri la espalda al volver a visualizar una imagen de l as. Aun as le gustaba ver esa faceta que su capitn siempre le esconda y ahora se mostraba ante l.
No se senta capaz de apartar su mirada y su corazn lata considerablemente ms rpido. Por fin baj la mirada y se mordi el labio.
-Imposible...- susurr.
A la maana siguiente Byakuya se despert al sentir la luz del Sol entrando por una ventana. Sinti que haba un peso sobre su cama y se incorpor como pudo protestando un poco por el dolor. Abri muy sorprendido los ojos al vez que aquel peso era su teniente dormido, con los brazos apoyados sobre la cama y su cabeza entre ellos.
Al sentir el movimiento Renji tambin despert. Protest dbilmente antes de abrir los ojos. Al hacerlo se dio cuenta de dnde estaba y maldijo internamente. No haba sido su intencin quedarse all toda la noche, pero es que se haba quedado mirando a Byakuya dormir y no recordaba muy bien en que momento se haba apoyando en la cama y haba terminado por dormirse. Renji se sent rpidamente en la silla pensando en una excusa que podra sonar creble.
-Mira que les dije que no te avisaran...- murmur Byakuya esbozando una sonrisa.
Renji no saba que contestar a eso. Todava no saba muy bien por qu haba ido por la noche...
-Me...Me alegr de que esta bien capitn...-susurr sin mirarle.
-No mientas...Renji...
El nombrado noto cierto tono de angustia en el capitn, trag saliva.
-No estoy mintiendo capitn!- hizo una pausa en la que cerr completamente los ojos. No poda creer que realmente fuera a decir aquello.-...Yo...Estuve ayer pensando en la respuesta lo que usted me dijo y...-trag saliva.- Si usted muriera, capitn, yo...- Demonios! Por qu era tan difcil? No estaba del todo seguro, pero senta que se le estaba subiendo el color a la cara.- Cr-creo que...me entristecera, capitn...
Byakuya sonri.
-Aun despus de como te he tratado por ser un egosta?
Renji alz la vista confundido.
-Capitn...Cmo es que se ha dado cuenta ahora de que es un egosta?
Antes de contestar Byakuya le dedico una mirada helada, haciendo pensar a Renji que tena que haberse mordido la lengua.
-Por muy extrao que parezca, ese nio...Hitsugaya, hay cosas en las que es ms maduro que yo...Y me hizo reflexionar...- hizo una larga pausa antes de seguir.- Sin embargo, de que otra forma poda reaccionar? Si t cumplas todos mis deseos y me mirabas de una manera que me apeteca devorarte. A veces senta cierta culpabilidad, pero a pesar de tu enfado siempre acababan accediendo.
Renji haba ido abriendo la boca a medida que su capitn haba ido hablando, pareciendo ahora estpido. No poda creerse el razonamiento de su capitn, pero reconoci que en cierto sentido la culpa tambin era suya por lo negarse. Se tap la cara con una mano Dios! Qu tonto que era!
Suspir. Byakuya se acerc ms a su rostro.
-Pero prometo no volver a obligarte a nada...- sonri.
-Eso espero...-susurr algo colorado Renji dejndose besar, pensando que tal vez no fuera necesario que le obligase de ahora en adelante.
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