Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Te echo de menos... por Kitana

[Reviews - 3]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

 

Comentarios adicionales: bueno, ummmm hace mil años que no me paro por aquí, de hecho, podría decirse que estoy retirada de los fics, pero, me ganó la tentación de hacer esto, sólo por el gusto de hacerlo. Es un pequeño drabble, 500 palabrotas de su servidora, digamos que sirve como despedida del fandom.

Notas del capitulo:

Bue, simplemente hora de despedirse de todo este asunto de los fics  y don't worry que más se perdió en el diluvio >__<

 

 

En medio de la noche, espío tus pasos, guiándome en el silencio por tu aroma más que por mis ojos. Te anhelo. Te siento lejano, más que sí estuvieras muerto. De alguna manera lo estás, ¿no es cierto? Ese que viene a mí de tiempo en tiempo no eres tú, es él, el otro, ese que ni siquiera sé cómo debo llamar. Me arrepiento, de tantas cosas, de tantos silencios, de tantas frases tuyas que rompí con un beso, con una carcajada…

 

 

 

Pero de alguna manera, sigo siendo tuyo, siempre seré tuyo, ¿no es cierto? Aún en medio de este desastre que es hoy mi vida, de esto que llamamos presente, porque el futuro no existe y el pasado ya fue. Te echo de menos. Más de lo que es posible expresar con palabras. No puedo seguir adelante. Pero no tengo manera de dar marcha atrás. Lo hecho, hecho está. No hay más, ¿cierto? Cada día me repito que ha sido en parte mi culpa, y cada día también, me repito que de cualquier manera, no había nada que yo pudiera hacer para evitarlo. Tú elegiste. ¿Hasta dónde es mi responsabilidad? No lo sé, no quiero saberlo. Te dejaste abrazar por él como un día te dejaste abrazar por mí.

 

 

 

Cuando siento tus manos en mi cuerpo las siento ajenas, las siento dolorosamente lejanas, impropias de ti, aún si son verdaderamente tus manos. En realidad, no sé cómo explicarlo, estás ahí, pero no estás. Tus ojos son sus ojos, no me miras tú, sino él, mi superior, no mi amante, mi cómplice. Ya no me tomas en tus brazos con amoroso cuidado, no más. Me has abandonado, y yo, simplemente me muero… me muero de amor por ti. Ni siquiera sé sí un día volverás, ni siquiera sé si eso que siempre querías decirme era un te amo… ya no puedo saberlo. Te has ido. Debo asumirlo. Tal como asumo que te amo. Sí, es verdad, te amo, en este desesperado silencio. Te amo en brazos de él, de ese que no eres tú, de ese que me arrastra a su cama con tu rostro y con tus labios, que sabe a ti sin ser tú. Me enamoré de ti sin siquiera saberlo, me enamoré de ti como en un sueño, y cuando desperté, ya te habías ido. ¡Cómo me haces falta! ¡Cuánto te echo de menos!

 

 

 

Cada noche él se enreda en mi cuerpo, pero tú, tú te enredaste en mi alma… del único lugar del que no puedo borrarte, del único sitio de mi ser que sigue siendo mío y al que él, Arles, el patriarca, no puede ingresar. Porque te pertenece, aún sí es una flor marchita, aún si es una flor medio muerta, es tuya, completamente tuya como desearía serlo entero.

 

 

 

—Te amo, Saga…  —le digo al viento, rogando que mi susurro te alcance, que escuches mí lamento. Soy tuyo, con el alma, aunque no con el cuerpo. Todavía soy tuyo, aún si estoy casi muerto.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).