Disclaimer: Hunter x Hunter no me pertenece, si no al Señor Yoshihiro Togashi, yo sólo me he inspirado en su obra y sus personajes para hacer este fan fiction.
El muro
Cuando cerraste los ojos por última vez fue que recordé que yo tenía un corazón latiendo dentro de mí, no había podido escucharlo antes, ya que un alto, fuerte e impenetrable muro, no dejaba entrar a nadie, ni a mis propios sentimientos, esta pared de ladrillos era intachable… hasta que te conocí.
Me sorprendió tu resolución de venganza, el potencial que poseías en el arte de la lucha y la fortaleza de tu temple, capturaste totalmente mi atención, cosa que no muchos logran, pero desde el momento que asesinaste a ubog, que te atreviste descaradamente a suprimir mi nen con tu cadena y te llevaste la vida de paku con tu sentencia, desde ese momento te volviste una obsesión para mi.
Cuando al fin después de tantos meses logré exorcizarme de tu condena, juré que te encontraría y vengaría a los míos, pero era solo una excusa para luchar contigo, para volver a ver tus ojos rojo sangre.
Ese día había llegado, en ese encuentro a muerte por primera vez luchaba contigo y no dejaba de maravillarme con tu astucia, tu inteligencia despierta, el arte con el que combatías, la belleza de tus movimientos, aún con esa mirada fulminante me parecías el tesoro más grande del mundo, sí desde entonces te volviste una yaga en mis recuerdos… kuruta.
Aquella vez desapareciste de la escena como por arte de magia, te busqué por cada rincón del mundo sin temerle a tu cadena del juicio, había aprendido la manera de burlarla, ya no era efectiva contra mí, pero cuando creía que ya eras mi presa segura, resultaba que había caído en tu trampa. Cuantas veces me llevaste al umbral de la muerte con la ira de tu poder, con tu retorcida actuación pasiva y en ese instante daba gracias de tener a mis miembros, quienes me advertían a tiempo de tus planes.
A solas en mi guarida, recordaba la textura suave de tu piel cuando se rozaba con la mía en un intento por agredirme, esos recuerdos me alimentaban día tras día y noche tras noche, mis oscuros ojos permanecían perdidos en un punto distante del refugio mientras mis arañas intentaban saber que me ocurría, se preocupaban por el constante silencio, las preguntas sin respuesta que ni a mi mismo podía contestar.
Volví a buscarte como un desesperado en plena madrugada y al encontrarte, tus ojos escarlatas que brillaron con el rojo más bello que haya visto, me hicieron perder la razón, te defendiste de mis ataques y yo me defendí de los tuyos, la sangre corría ensuciándonos la ropa, pero aún así no cedíamos tregua, la batalla fue intensa para los dos, pero nada me haría desistir de mis planes, quería que fueras mío… en un momento de desconcierto aproveché el momento para capturarte bajo mi yugo y abusé de ti desgarradoramente, porque pensé que de esa forma te humillaría, borraría tus malditos recuerdos de mi mente y saciaría mis mundanos deseos de tenerte, sé que te hice daño más allá de lo físico, destruí hasta el último rastro de orgullo que pudiera quedar en ti, te vi retorcerte de dolor contra el suelo, como un muñeco roto y te dejé vivir, abandonándote en la noche oscura y fría, a pesar del disgusto de mis arañas que añoraban que te borrara del mapa para siempre. Mis deseos estaban en conflicto, no quería volver a verte y al mismo tiempo quería que vivieras. Inevitablemente la confusión me fue llevando al borde de la locura… porque aún estabas ahí taladrando como un tornillo en mi cabeza, haciéndome recordar tus lágrimas, tus suplicas para que me detuviera, tus quejidos haciendo eco en mi mente.
Creí que con eso bastaría para que mi obsesión hacia ti menguara y olvidaras tu venganza, alejándote con ello de mi muro… que de niño había creado con tanto esfuerzo, para mantener a raya al resto del mundo, pero………………………………ahí estabas otra vez frente a mi, había pasado un año y volvías a enfrentarme con más fuerzas, con más odio, te habías vuelto considerablemente más poderoso que yo, más sabio que yo y sinceramente… te admiraba, eras una obra de arte y me sentía tan minúsculo en comparación contigo, eso era algo que nunca había experimentado antes, no obstante, no me rendí ya que me convencí de que la única forma de quitarte de mí, era eliminándote, como tanto me habían aconsejado shalnark, machi y Nobu.
Y es que este muro que era la coraza de mi ser tenía fisuras que habías dejado con cada pelea, volviéndolo más endeble y vulnerable con el paso del tiempo, pero con este último encuentro, terminaste de romperlo en pedazos, haciendo caer hasta el último ladrillo, obligándome a escuchar por primera vez después de tanto el palpitar del órgano que me permite vivir en este mundo lleno de incoherencias, porque es una incoherencia que hayas agonizado desangrándote en mis brazos y que en vez de ver tus ojos escarlata mirándome con odio, haya contemplado tus zafiros ojos acuosos de lágrimas y para hacerlo todo aún más bizarro, que hayas dedicado tu sonrisa más pura y cristalina a un asesino como yo, que te quitó a tu familia, a tus amigos, tu niñez y tu inocencia, te lo quité todo y aún así, al final de tus días ¿me diste una sonrisa?
Te tengo abrazado contra mi pecho, sintiendo la frialdad de tu cuerpo vacío, sabiendo que te has marchado hace horas y que no regresarás jamás.
Antes de que el muro cayera, la muerte para mi era sólo un proceso natural y no debía sentirme abatido, ni sentir emoción alguna por ello, sin embargo, ahora siento como si algo se hubiera removido en mi interior entre los escombros de mi ser, se desgarran mis emociones con tanta violencia que el dolor se propaga por toda mi piel, empujando a las lágrimas a caer de mis ojos, un sentimiento de pena y de pérdida tan infinito que no podré acabar con él aunque me muera… y seguirá ahí eternamente, pues me di cuenta de lo valioso que eras para mí, porque me había enamorado perdidamente de ti y traté de negarlo con mis acciones, si tu fantasma me viera ahora mismo ¿se reiría de mí?
El líder del Geney Ryodan llora la muerte de su enemigo… seguro que te burlarías, dalo por hecho.
Fin