Se encontraba sentado en el suelo, recostando su espalda en la cama, mirando fijamente a la ventana hacia la luna, la qual se veía a la perfección desde donde se encontraba. Sus ojos esmeralda no pudieron evitar soltar esas lágrimas que hacía ya tanto tiempo que no podía contener. En ese mismo instante se percato de lo que pasaba, con un movimiento rápido se levanto, con la manga de su uniforme azul se limpió las lágrimas y salió con un rápido movimiento de aquella oscura habitación.
-Wolf…
Escucho su nombre, le pareció aquella voz, aquella voz de una persona que no quería o no podía comprender, ¿quién era en realidad esa persona? ¿Qué quería de él?, pero se dio cuenta, no era él, solo era Yuri. Wolfram se encontraba delante de la puerta de su habitación, lo único que podía hacer en ese momento era mirar hacia ese chico intentando no aparentar como estaba por dentro, en una palabra, destrozado.
-¿Yuri que haces aquí?-dijo con aires de superioridad, y añadió- enclenque…
-¡No me llames enclenque! ¿Te encuentras bien?, tienes los ojos rojos.
-Si claro que si, solo estoy un poco cansado. Nada mas- mientras pensaba “Porque tiene que ser tan amable, estúpido enclenque” – ¿Y tú, qué haces aquí a estas horas?
-Solo quería ir a ver a Conrad…
Ese nombre hizo que el corazón de Wolfram diera un vuelco, “¿porque?” se preguntaba mientras Yuri le explicaba cosas que para él eran banalidades, ese nombre, solo ese nombre hacia que todo su cuerpo se estremeciera.
-Muy bien Yuri- dijo interrumpiéndole- dime, ¿Te importaría que me fuera una temporada a Walde?-dijo mirando al vacio.
-¡EHH!, pero si te fuiste hace muy poco.
-Lo sé, pero necesito descansar un poco más.
-Pero que te pasa Wolf, últimamente estas ausente, y no sé, me gus.. .gustaría ayudarte-
El color subió por las mejillas de Yuri, Wolfram lo noto, pero lo malinterpreto, dejo ir un suspiro y decidió mirarle serió.
-Gracias Yuri, pero no me puedes ayudar, solo quiero descansar un poco. Desde que enferme no he podido hacer vida normal y eso, - se veia cansado- por eso…
-Tranquilo, lo comprendo- se le acerco y lo abrazo-claro que puedes ir.
-Gracias-dijo mientras dejaba que el calor de su único amigo le acariciara el cuerpo recostándose en él, pero para Yuri era distinto, ese olor, esa calidez, esa suavidad, se le acelero rápidamente el corazón y tuvo miedo, miedo de que Wolfram lo sintiera, rápidamente se separo de él y sin decir nada dio media vuelta y salió de su acecho a paso ligero, mientras Wolfram se preguntaba qué es lo que le pasaba a ese enclenque.
Volvió a su habitación, se cambió de ropa y se dispuso a dormir, deseando no soñar con esa noche, no solo para no dar más vueltas a lo mismo, sino para no levantarse la mañana siguiente con una clara erección.
Wolfram despertó al escuchar unos pasos por el pasillo, sabia de quien se trataba y no pudo evitar esbozar una sonrisa cuando oyó una voz conocida diciendo:
-¿Gwendal, donde estas?
Los pasos se alejaron y pensó que si Anissina ya estaba buscando a su hermano debía ser tarde, se levanto, se vistió y salió a desayunar con todos en el comedor.
Mientras se dirigía a su destinación pensó, “Hoy es mi día de suerte, no he tenido que correr al baño cuando desperté y además mañana me iré de aquí…”. Cuando entró a la sala, dejo sus pensamientos y se sentó entre su madre y su hermano mas mayor, como siempre.
-Como has dormido Wolfy cariño-Dijo Cherry con una gran sonrisa.
En ese instante Wolfram se percató de que Conrad no se encontraba en la sala.
-Muy bien madre-contestó intentando parecer calmado por el recién descubrimiento.
-Me alegro aunque estoy un poco preocupada de que te vuelvas a ir -dijo -pero así aprovechare para seguir con mis viajes.
La madre esbozó una sonrisa y Gwendal hablo:
-Esta vez tampoco puedo acompañarte.
-No te preocupes hermano, no necesito que nadie me acompañe, de verdad.-Sabia que si continuaban así las cosas no acabarían bien, su hermano podía llegar a ser demasiado sobre protector, pero Gwendal no sabía que lo que propondría sería la peor solución para que Wolfram mejorase.
-Lo siento pero no permitiré que vayas solo, a demás es la decisión de su majestad, quien ha querido que te acompañara Conrad.
Lo sabía, lo sabía, lo sabía, su mente se nublo y no pudo controlar su corazón, el qual comenzó a latir fuertemente, pero.., el no quería eso ¿no?..., ¡claro que no lo quería!
-Porque no podéis entender que quiero estar solo… -Se dio cuenta que decir eso no era la mejor solución, pero la única estratejia que le quedaba era dar pena, ¿o era que en verdad si queria a su hermano con él?...
-Pero Wolf...-dijo Yuri- él es el mejor espadachín de Shin Makoku, quiero que estés bien protegido, como la ultima vez-Yuri se veia nervioso por enfrentarse a Wolfram, pero decidido-además es tu hermano, quiero que él te acompañe, no solo porque te proteja sino porque quiero que vuestra relación mejore y se haga mucho más estrecha.
En ese momento nadie lo notó, pero ante las últimas palabras de Yuri, Wolfram se sonrojo, se levanto y giro dirigiéndose hacia la puerta mientras decía:-hagan lo que quieran. Y salía por la enorme puerta del comedor.