Despertó por la luz del amanecer realmente quemaba un Yamato Ishida mejor conocido como “Matt” uno de los siete chicos que había llegado a ese nuevo mundo tan extraño despertó con un poco de dolor de cabeza y todo mojado dado a la tormenta que azoto a el y sus amigos provocando una abrupta separación lanzando a los siete chicos a diferentes lugares del Digimundo.
Matt mareado aun, se levanto y se dispuso a emprender marcha en la búsqueda de los demás, camino durante horas buscando a sus amigos.
-Esto es una mierda me duele todo y aun no logro encontrar a nadie – caminaba con el seño fruncido producto del hostigante frío en sus pantorrillas, sus piernas se adormecían por el frio de la tela que se apegaba a la piel de sus piernas
La tormenta lo había dejado sumamente cansado y con una gran molestia en uno de sus pies que incrementaba con cada paso pero decidió seguir su marcha
Por otro lado de la isla resguardado en las profundidades de una cueva estaba Taichi Kamiya “Tai”, despertó cansado y sumamente preocupado por sus amigos pero mas por el atractivo y serio chico de ojos azules y el cabello rubio, sintió que un frio recorrió su espalda al darse cuenta del pensamiento que acaba de tener.
- ¿Que es lo que me pasa?, ¿Matt Atractivo? -sonrojándose y sacudiendo su cabeza en forma de negación, pero sus pensamientos fueron acallados por un ruido de ramas resquebrajándose.
- ¿Quien anda ahí? - grito el moreno de forma amenazadora.
- ¿Tai eres tu? - respondió emocionado al reconocer la voz del chico castaño que provenía de la cueva y comenzó a avanzar adentrándose al refugio.
- ¿Te encuentras bien Matt?- pronuncio el castaño abriendo unos enormes ojos al ver que Matt venia cojeando, este se paro inmediatamente preocupado por el chico ojiazul
- Si estoy bien Tai, solo es este maldito pie que me duele un poco-
-¡Matt mira como estas! , estas todo empapado y rasguñado déjame ver tus heridas – esto era lo que decía con toda la preocupación del mundo el castaño al rubio de ojos azules.
- Arrgggh estoy bien Tai no me toques solo es un rasguño en realidad no me duele mucho – dijo el arisco y obstinado chico dándole la espalda al moreno.
Al rechazo del rubio Tai frunció el seño y ardió de rabia por que el solo se estaba preocupando por su compañero y no tenia por que reaccionar así esto enfado tanto a Tai que se paro y saliendo por la cueva le grito.
-¡Vete al carajo Matt ni modo que me preocupe por ti idiota! - dicho esto salió con el pecho algo apretado y con una extraña sensación, pero Tai no se dio cuenta dado a la rabia que tenia hace solo unos segundos había estado preocupado por el chico de ojos azules pero solo tomo el mismo tiempo para que se separaran nuevamente.
-¿Quien se cree que es ese Kamiya tratarme a mí de idiota? - no le tomo importancia que su compañero a uno de los que había estado buscando se había ido nuevamente, pero esta vez por su culpa y por un instante sintió algo de remordimiento y pensó que le debía una disculpa no debió haberlo tratado así después de todo solo se estaba preocupando por el , pero al recordado como le había gritado este volvía a malhumorarse y arrugaba su cara diciendo – que se pierda me da absolutamente lo mismo- pero a al vez sentía que algo no andaba bien y sintió una ligera preocupación desmesurada por Tai
Tai seguía caminando enojado cuando vio que el cielo se nublo completamente y comenzaron a caer una gotas de agua, así que Tai se refugio bajo un tronco hueco de un árbol la lluvia se hacia cada vez mas fuerte y comenzaba a correr en asenso el viento , castaño sabia que el mejor refugio seria la cueva donde se encontraba Matt pero la personalidad orgullosa de este no se lo permitía, el aguacero no tardo en penetrar el apolillado y hueco árbol
Sus ropas comenzaban nuevamente a mojarse por a tormenta y sus cabellos también empapados se pegaban contra su rostro, comenzaba a crearse una tormenta nuevamente pero esta vez una mas fuerte que la del día anterior, se podían escuchar truenos y relámpagos que iluminaban como un flash el lugar se podía sentir el olor a humo que provenía de algún árbol que fue alcanzado por los rayos.
En un ataque de ansiedad y preocupación Matt impulsivamente salió corriendo de la cueva no tomo en cuenta que aun le dolía el pie, corría buscando a Tai asta que finalmente lo encontró temblando y con sus labios morados por el frío, alzo al chico de un brazo y le dijo bruscamente que se fuese con el a la cueva ya que estarían a salvo pero el castaño decidió ignorar al rubio y soltarse de su agarre , así que Matt no encontró mejor forma que tomar nuevamente al castaño del brazo esta vez con mucha mas fuerza obligándolo ir a la cueva junto con él.
Tai se resistía le dio un golpe al rubio pensando que eso bastaría que se fuera pero el rubio instintivamente se lo devolvió, al ver su reacción Matt no alcanzo ni a disculparse por su la acción que había tomado, cuando Tai se lanzo contra él botándolo al suelo intentando golpear al rubio, el de los ojos azules no se dejo y forcejeo para zafarse haciéndolo que este quedara sobre Tai tomándole ambas muñecas con las manos.
-¡Suéltame Ishida!- gruñía el castaño que se encontraba en el piso forcejeando.
-No asta que te tranquilices -dicho esto un rayo cayo al lado de ambos chicos justo donde se encontraba Tai hace unos pocos minutos.
-Debemos irnos deprisa – reitero el ojiazul mientras el castaño seguía forcejeando con este, haciendo que poco a poco el rubio se a cercara mas y mas al rostro del moreno dejándolos con una minúscula separación entre ambos rostros, esto hizo que ambos chicos se sintieran incomodos pero sin saber porque ambos seguían acercándose mas y mas asta casi rozar sus labios....
Continuará...