Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Te busque... por yaoiana

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Hola a todos¡¡ este es el primer fanfic que publico en esta categoría, hace tiempo lo tenía escrito pero por fin me decidí en publicarlo.  Espero les guste 

 

 

Un rubio se encontraba sentando frente a la ventana, viendo ensimismado como las gotas de agua pegaban en la ventana, aquellas gotas se deslizaban lentamente por la ventana así como sus lágrimas hacían lo mismo por sus mejillas.  Secó sus lágrimas y se levantó de allí, pero en aquel intento se mareo un poco, por fortuna alcanzó a pegarse de la pared y no caer. Camino despacio hasta la cama y se recostó, las nauseas y mareos se habían hecho mas frecuentes en su octavo mes de embarazo… embarazo que su Seto había rechazado.

 

-        Porque… Seto… * suspirando* porque rechazaste a nuestro hijo…

 

Cerró fuertemente sus ojos y se quedo pensativo… tal vez Seto no lo amaba y ahora el tenia que proponerse a seguir su vida con su hijo, su pequeño era la prueba mas grande de cuanto amor le ofreció a ese hombre. Se durmió hasta el otro día, despertando cuando sintió la puerta ser tocada; se levantó algo desanimado y abrió.

 

-       Yami ¡¡

 

-       Hola Joey, como estas?

 

-       Bien… gracias, pasa

 

Vio a su amigo entrar y luego cerró la puerta. Yami era de las pocas personas que sabia de su paradero luego de dejar a Kaiba. No podía negarlo, era quien más le había ayudado desde que supo lo de su embarazo.

 

-        Joey, en verdad estas bien? , mira tus ojeras y estas pálido

 

-       Bueno… es que la comida no me pasa y no he dormido bien… son cosas del embarazo * riendo nervioso*

 

-       Aun sufres por el… no es así?

 

-       Te preparare un café

 

 

Se puso de pie y fue hasta la cocina, comenzando a preparar la bebida negra para su amigo, pero se sorprendió al sentir como Yami lo abrazaba por la espalda, estrechándolo contra su cuerpo. Se sintió cálido en aquel momento… aquellos brazos le recordaban a…

 

-        Ya…. Yami…  * tartamudeando*

 

-       Es hora de que lo dejes atrás tal y como él te dejo… olvídalo y has una vida conmigo y el niño que llevas

 

-       De… que estas hablando Yami?

 

-       Te amo Joey… ámame tu también

 

Se giró y quedo frente a su amigo, había olvidado lo atractivo que podía ser; su cabello, sus penetrantes ojos, su altura y ese aire varonil. Lo observó por varios segundos, perdiéndose en esos posos negros… tendría razón?... seria lo mejor ¿ comenzar de nuevo?

 

-        Yami… yo

 

 

Quiero sentirme mejor

Quiero sentirme mejor

Cariño mío sentirnos mejor, por eso…

           

 

En otro escenario, se encontraba un castaño agarrando fuertemente su cabello en son de desesperación; llevaba meses buscando a Joey y ninguna pista de él… presentía que muchos sabían donde estaba pero se lo ocultaban. No dejaba ni un momento en recriminarse por lo idiota que había sido, pero la vez que su rubio le había dicho que esperaban un hijo, tan solo pudo reaccionar de aquella manera. Se incorporó y camino hasta el buró donde se hallaban sus fotos con Joey, había una donde retrataba su colegio, su preparatoria y cuando ingresaron a la Universidad. Las tomo una por una, pasando la yema de sus dedos por el rostro de su rubio amor, intentado recordar la agradable sensación de los labios de su cachorro.

 

 Se recostó en la cama exhausto de pensar, poniendo las fotos en su pecho y mirando fijamente al techo… en aquel instante, toda la escena que lo había llevado a su actual estado, golpeó estrepitosamente su mente.

 

 

// Flash Back//

 

 

Aquella noche había llegado realmente cansado del trabajo, cuando entró al cuarto pensó que encontraría a su amante dormido, pero se sorprendió al ver a Joey despierto y con una gran sonrisa adornando sus labios.

 

-       Porque no te has dormido? Mañana tenemos universidad cachorro

 

-       Ya lo se… es que… no podía dormir

 

-        A … no? * arqueando una de sus cejas* y porque?

 

-       Pues… * nervioso* porque no estabas aquí conmigo

 

Sonrió y luego se metió en la cama con el rubio, abrazándolo contra su pecho; aquel aroma a miel y almendras de su cachorro siempre lo estabilizaba cuando se encontraba anímicamente mal. Cuando estaba cerrando sus ojos para descansar, sintió el cuerpo del menor removerse entre sus brazos.

 

 

-       Seto…

 

-       Mhm?

 

-       Estas muy cansado?

 

-       Porque lo preguntas?

 

-       Bueno yo * sonrojado* quiero estar esta noche contigo

 

Miro a su avergonzado cachorro y tan solo sonrió, amaba verlo así cohibido y apenado… Joey aun no aprendía que con sus gestos podía provocarlo. Lo abrazó aun mas y comenzó a besarle la mejilla, luego su frente, nariz y finalmente sus sensibles labios; los probó con lentitud, inmiscuyendo con calma su lengua en la cavidad del otro, enredándose una que otra vez con la lengua contraria.

 

Giró de posiciones, dejando al blondo bajo su yugo, sintió la pierna de su amor enroscarse en su cintura mientras el con cuidado metía sus manos bajo la camisa; adoraba la piel de Joey, era delicada y sensible… tan accesible y seductora que no podía resistirse.

 

-       Se… Seto…

 

-       Que sucede cachorro?

 

-        Me amas?

 

-       Claro que si Joey… porque lo preguntas?

 

-       Es que… tengo algo importante que decirte

 

 

Vio a su amor tomarle una de sus manos y llevarlas a su delicado vientre. Lo miró confuso y se sintió algo nervioso y extraño cuando Joey lo miró cariñosamente… intentándole transmitirle con aquel gesto algo de ternura.

 

 

-       Estamos esperando un hijo Seto

 

Miro fijamente al blondo, pensando que le jugaba una broma, pero luego de un largo mutismo supo que no fue así. No supo como sentirse… por un lado estaba feliz pero por el otro asustado y defraudado, aun tenían mucho por delante como para tener que hacerse cargo de un niño, además, aun están muy jóvenes para una carga así.

 

-        Se…to

 

-       Joey… aun estamos muy jóvenes para una carga así * sentándose a la orilla de la cama*

 

-       Que estas insinuando con eso? * parándose molesto*

 

-       Que aun no quiero ser padre Joey… mira estoy en lo mas alto de las empresas y estamos a mitad de la universidad… no ahora Joey, por favor, no me arruines la vida ahora con esa noticia

 

-       Así es como ves a tu hijo * aguantando las ganas de llorar*

 

-       Cachorro… no te alteres

 

-       No me vengas con eso¡ * gritando* sabes que… olvídalo Kaiba… olvídate de mi y de que alguna vez estuviste esperando un hijo

 

-       Que piensas hacer?

 

-       Pues me voy… nos vamos de tu vida para no arruinarla señor ricachón * comenzando a empacar sus cosas*

 

-       Si eso quieres… no te detendré, pero luego no vuelvas con el rabo entre las piernas Wheller

 

 

 

Vio al rubio dejar derramar unas cuantas lagrimas mientras terminaba de empacar su ropa; le dolió en el fondo de su alma pero pensó que tal vez seria una pequeña pelea que al otro día podía olvidarse. Miro a Joey en todo el proceso y antes de salir del cuarto lo escucho susurrar.

 

-       Aun si tu no nos amas… nosotros a ti si Seto

 

 

// Fin Flash Back//

 

 

Te busqué

Debajo de las piedras y no te encontré

En la mañana fría y en la noche

Te busqué, hasta enloquecer

 

 

 

En muchas ocasiones pensó que tal vez Joey había encontrado a otro hombre y que quizás ese hombre estaría amándolo y haciéndose cargo de su hijo.  Pensar en eso lo hacia enfurecer, no recordaba en que ocasión, destrozó todo su cuarto por aquella hipótesis… pero, si fuese así, el era el único responsable de todo aquello.

 

 

Pero tú llegaste a mi vida como una luz

Sanando las heridas de mi corazón

Y haciéndome sentir vivo otra vez

 

 

Por otro lado, Joey se encontraba en los brazos de Yami, es verdad que este lo había ayudado mucho y le debía su agradecimiento pero, el no podía olvidar tan fácilmente a Kaiba, el era el amor de su vida.   Cuando iba a responderle una punzada fuerte en su vientre le hizo perder el aire y lo hizo transpirar.

 

 

-       Joey… que te sucede?

 

-       Ya… ahhh… Yami… creo que… ya va a nacer

 

 

El rubio mayor tan solo corrió ante lo dicho por el ojos miel,  subió  hasta el cuarto y tomo la pañalera ya lista; ayudó a su amigo a caminar hasta el taxi y juntos fueron rumbo al hospital.  Durante el transcurso del taxi,  el doncel se sujetaba el vientre con algo de dolor y jadeaba,  siendo observado por el mayor.

 

 

-       Joey… shhh… tranquilo estamos por llegar  

 

-       Ahh… si… si

 

 

Yami al bajarse del taxi lo cargo hasta la camilla del hospital, luego de eso lo vio perderse en la sala de quirófano esperando que todo saliese bien.  Contacto a Serenity y a los demás informándoles de la situación.

 

En la sala de quirófano, Joey estaba siendo atendido y poco a poco perdía su conciencia debido a la anestesia para la intervención.  En aquel lapso de poca conciencia, recordó momentos con Kaiba y otros en su desamparado embarazo… tan solo esperaba que su niño naciera sano y salvo debido a todas las condiciones por las cuales tuvo que pasar.

 

 

No quería ni hablar

Ni tampoco comer

No quería cantar

No sabía que hacer

 

 

No sabía cuanto tiempo había pasado ya, se sentía algo aturdido por la anestesia pero cuando la enfermera le enseño a su pequeño, todo mal estado se esfumo, dejando  que por sus ojos resbalaran varias lágrimas de felicidad.  Su niño tenia su mismo tono de piel,  su cabello tenia visos rubios y  cuando por suerte le vio sus ojitos,  vio que eran azules como los de Seto.

 

 

Esa herida sangro

Y mis ojos perdí

Pero ahora yo soy

El futuro de los dos

 

 

Mientras cargaba a su niño, sus familiares y amigos entraron en la estancia, conociendo al pequeño.   Todos decían que se parecía al rubio pero un comentario en aquella reunión sorprendió a todos.

 

 

-       Se parece también a mi

 

 

Todos en la estancia miraron reprobatoriamente y con rencor al hombre que acababa de entrar;  su porte altivo y de egocentrismo hacía que a más de uno le hirviese la sangre en aquel momento.

Joey, por su cansancio, no demostró como se sentía en aquel momento, pero les pidió el favor a los demás que lo dejaran a solas con Seto Kaiba.

 

 

Quiero sentirme mejor

Quiero sentirme mejor

Cariño mío sentirnos mejor, por eso…

 

 

Varios minutos de silencio se hicieron presentes entre ambos pero fue roto por el llanto del pequeño; el rubio lo acomodo y lo amamantó,  siendo observado por los penetrantes ojos del castaño.

 

 

-       Es… hermoso Joey

 

-       Lo se… es mi hijo después de todo

 

-       Querrás decir… nuestro

 

-       Dijiste que no lo querías, no entiendo porque ahora si

 

-       Porque fui un tonto Joey…  porque no supe que lo verdaderamente valioso lo estaba alejando de mi lado

 

-       Porque ahora Kaiba?  * mirándolo fijamente*  porque ahora que nace el niño?

 

-       Te busque luego de que te fuiste… nadie me dijo de tu paradero, al parecer todos me odian  * bufando* 

 

-       Ja… tu crees?  * con algo de sarcasmo*

 

-       Esta bien… están en todo su derecho… pero no sabes como me sentí al buscarte y no poder encontrarte Joey… te amo y quiero que regreses conmigo, no quiero volver al ser el mismo Seto Kaiba frio y amargado de antes… te necesito conmigo

 

-       No es tan fácil Kaiba

 

-       Es Seto * acariciándole la mejilla* y se que no es nada fácil pero… te lo imploro cachorro dame otra oportunidad

 

-       Si regreso contigo no seré solo yo,  mi niño también

 

-       Lo se, Joey,  los quiero a ti y a el conmigo

 

-       Estas seguro Seto?... estas dispuesto a cuidar de él, a levantarte en las noches, a escucharlo llorando, a protegerlo?

 

-       Si Joey… estoy dispuesto a eso y mucho más

 

-       Esta bien Seto… regresaremos contigo  * sonriéndole* 

 

-       Joey… hay… algo que quiero preguntarte y… no me molestaré ante la respuesta  te lo juro

 

-       Que?

 

-       En estos meses… estuviste con algún hombre?  * intentando que su voz no se escuchara lastimera*

 

 

Te busqué

Debajo de las piedras y no te encontré

En la mañana fría y en la noche

Te busqué, hasta enloquecer

 

Pero tú llegaste a mi vida como una luz

Sanando las heridas de mi corazón

Y haciéndome sentir vivo otra vez

 

 

El rubio acomodo a su niño  quien ya se encontraba dormido en la cama, le acarició la cabecita y luego lo beso.   Miró fijamente a Seto y luego le golpeo la cabeza

 

 

-       Como se te ocurre pensar en eso Seto?

 

-       Auch… bueno yo…

 

-       Crees que yo te dejaría de amar de la noche a la mañana?  En estos meses jamás dejé de pensar en ti  y  creo que tendría que morir para dejar de hacerlo Seto

 

 

El castaño  besó con intensidad al rubio ante tal declaración, el tampoco había dejado de pensarlo y también tendría que morir para dejar de amar a su cachorro.   Muchos lo catalogaban de “tonto” por tener a muchas personas a sus pies y tan solo estar con uno, pero no le importaba, Joey le daba todo  y mucho más de lo que los demás podrían ofrecerle.   Lo recostó levemente en la camilla, posicionándose encima  de él pero un gemido lastimero lo volvió a la realidad.

 

 

-       Cachorro te lastime?

 

-       Aun me duele un poco

 

-       Ven  * recostándose en la camilla y posicionando al otro en su pecho*  descansa cachorro

 

-       Si… si

 

Aspiró el olor a miel y almendras y arrullado por esto se quedo dormido con su amor y su hijo a su lado.

Yami  entró preocupado al ver la tardanza del castaño en la habitación, cuando entró su rostro mostró un gesto lastimero… allí en la cama estaba Kaiba abrazando a su rubia obsesión y éste, abrazaba al pequeño; los demás entraron y suspiraron al ver la tierna escena y supieron de inmediato, que esos dos habían arreglado todo el problema.

 

 

-       Yami…

 

-       Que pasa Tristan?

 

-       Hermano… resígnate con Joey, no quiero verte sufriendo mas  por un amor no correspondido

 

-       No importa… digan lo que me digan yo seguiré queriendo a Joey y se que él terminará eligiéndome

 

 

Una semana pasó para que Joey y el pequeño pudiesen salir del hospital, en el transcurso de aquel tiempo, Kaiba les pidió disculpas a todos los conocidos y familiares de Joey; estos terminaron aceptando la disculpa y entre todos le colaboraron para acomodar la mansión antes de la llegada de Joey.  

Cuando el rubio llegó, vio al lado del cuarto que habitaba con su castaño, otro cuarto muy bien decorado con cosas infantiles, habían muchos juguetes y grandes armarios con cosas de bebes.

 

 

-       Seto… tu lo decoraste?

 

-       Bueno… no fui yo solo, todos me ayudaron

 

-       Es hermoso cariño  * sonriendo*

 

-       Cachorro, aun no hemos decidido el nombre de nuestro hijo

 

-       Lo estuve pensando… nuestro hijo es sereno y apacible… creo que deberíamos llamarlo Yusei

 

-       Yusei Kaiba Wheller…  me gusta  

 

-       Si… es perfecto para él

 

-       Joey… * mirándolo fijamente*  casémonos

 

-       Ehh¡¡  * sorprendido*  Seto… hablas enserio?

 

-       Jamás hablé mas enserio

 

 

Joey acomodo al pequeño en la cuna y luego se tiró a los brazos de su castaño; no esperó y comenzó a devorar los labios de Kaiba.   El mayor lo apresó de la cintura, sabiendo que el beso confirmaba su respuesta.

 

-       Quiero… casarme contigo cariño

 

-       Cachorro prometo que jamás voy a lastimarte, seremos una familia unida… si?

 

-       Si Seto  * sonriéndole*  aun quieres continuar con lo de la noche pasada?

 

-       Noche pasada?

 

-       Si… antes de irme… te dije que quería estar contigo 

 

 

Seto sonrió y besó a su rubio… realmente el dinero no podía comprar la felicidad y aquella era una lección que había aprendido de su cachorro.

 

 

La felicidad no consiste en todo tener, sino en saber sacar lo bueno que te da.

 

Notas finales:

Espero sus mensajes, son mi recompensa n_n


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).