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Joya del Mar por uchihagirl5

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Notas del capitulo:

Disculpen el retraso, pero aquí estoy, con un capitulo nuevo. Disfrútenlo!

Dakoskos un joven soldado de tés clara, cuerpo algo menudo pero hábil y sin cabellera. Aquel soldado se encontraba separado del resto de soldados contratados como guardias adentro del barco. Caminaba por pasillos solitarios y obscuros, en sus brazos yacía un misterioso objeto largo y pesado, cubierto por sabanas viejas. Apenas el soldado podía ver con tanta oscuridad a su alrededor cuando tropezó contra un pecho firme. Su cuerpo rebozo y de sus brazos cayo el misterioso objeto. De repente una luz aguda le segó la visión por unos segundos. Ya se había adaptado a la oscuridad.

 

“Dakoskos?” Fue la voz del extraño quien le ajusto la visión. Una sirvienta, alta y mucho mas muscular que él, con su mano aguantaba un platillo con una vela derretida hasta la mitad mostrándolo en frente suyo y sobre sus hombros un cuerpo inconsciente.

 

Abrió y cerró los ojos varias veces, hasta que el al fin reconoció a la ‘sirvienta’ en frente suyo. “Buena suerte de habernos topado contigo y no el enemigo.” La ‘mujer’ le sonrió, dándole espacio al soldado de moverse y recoger el misterioso objeto que yacía en el piso, medio descubierto. Dakoskos recogió el objeto, envolviéndolo más, de forma en que nadie supiera lo que era. “No te olvides del plan, y tu papel en este teatro lleno de mentiras.” Fue su última palabra

 

La ‘sirvienta’ le entrego la vela a Dakoskos antes de marcharse. Aceptando la vela, la ‘mujer’ dio la vuelta, dándole la espalda al ‘soldado’ mientras que este observaba y reconocía la carga que llevaba.

 

Abrió los ojos bien grande.

 

~~


Con tal de distraer a Wolfram, antes de que este empezara a celarle más de lo común, le invito a bailar. Algo con cual el rubio estaba muy feliz de aceptar. Tristemente su radiante sonrisa se esfumo cuando se dio cuenta que Yuuri no pida bailar, aunque su vida dependiera de eso. “Yuuri… Mira a mis pies, sigue my ritmo.” Trato de instruirle. El pelinegro accedido y observo los pies del otro con mucha atención, tratando de repetir los pasos cuando empezó a pisotearlo. Algo avergonzado intento hacer diferentes pasos, alterando el curso del baile y una vez más pisoteando a su pareja de baile.

 

Arrepentido del consejo que le dio, le dice algo enojado. “No mires a mis pies!” Yuuri dejo de mirarle los pies. Lastimosamente para Wolfram los pisotones continuaron, de forma doble. “No me pises!” El rubio jadeo la cintura fuertemente. “No sirves para nada en el baile! Vamos a tener que hablar con Gunter para que tomes clases de baile.”

 

Yuuri se rio nerviosamente. “Ya tengo esas clases, Gunter ha estado tratando de ensenarme como bailar pero…” Le confesó. Wolfram enfureció. Sus cachetes se tornaron rojos de la furia, y Yuuri juro ver humo salir de sus orejas. AL rubio no le gustaba para nada que su prometido estuviera tomando clases de baile sin él saberlo. Bailar con alguien involucraba dos cuerpos apegados uno al otro en formas muy comprometedoras, algo que muy fácilmente podía llegar al acto sexual.

 

“Mira… Acabo de ver a Shori-nii-san… Voy a saludarlo, hace mucho que no le veo.” Fue la excusa de Yuuri con tal de escapar de un enojado Wolfram. Pero también era la verdad. Le vio al otro lado del salón y se mando a correr hacia su lado, Wolfram le siguió.

 

“Yuu-chan! Cuanto tiempo sin verte!” Shori era un hombre alto, de cuerpo musculoso y al igual que su hermano menor tenia pelo negro corto y ojos negros. “Cierto my querido hermano. Es bueno verte después de tanto tiempo.”

 

“No fue tanto, apenas fueron casi tres semanas.” Shori era estudiante de economía y contador, estudiaba fuera del reino. Iba y venía cuando podía. Ya casi terminaba sus estudios, por esas razones podía venir más a menudo que en el pasado. “No importa, para mí, estar alejado de mi adorado hermano menor es un milenio por cada segundo, minuto, hora, día, semanas, meses…Tengo que estar aquí para protegerte.”

 

“Exageras cuñado.” Fue la voz de Wolfram quien interrumpió a Shori, y a la vez a Yuuri quien estaba a punto de protestar. “No exagero.” Fue su respuesta. Shori y Wolfram se miraron intensamente por varios segundos, cuando el rubio desvió su mirada. “Quizás tu hermano no ande exagerando en esta situación. Hace tiempo que no se ven, les dejo. Voy a hablar con mi hermano.” Se excuso, partiendo de los hermanos de forma rápida.

 

~~


Wolfram no se fue hablar con su hermano. Al contrario, agarro la primera copa de vino que vio y se dirigió hacia la misma esquina donde había encontrado su prometido y Murata. Miro desinteresadamente el vino. Sus sentimientos se encontraban en un remolino que solo sabía dar vueltas y más vueltas.

 

A veces el rubio se preguntaba porque había decido aceptar aquel casamiento con Yuuri un año atrás. Pero Bob había sido convincente, le hablo días antes de soltarle la bomba a Yuuri, con fines de convencerlo y de que era lo mejor para el reino y Yuuri. Al final acepto, pare desde unos meses para ahora Wolfram empezaba a arrepentir.

 

Cuatro meses atrás empezó un romance secreto con la persona más equivocada y menos apropiada para eso. Le estaba engañando a Yuuri, y aun tenia la desfachatez de celarlo. A decir verdad, desde el comienzo del compromiso siempre le celo, y ahora que le engañaba le celaba más. Tenía miedo. Miedo de que Yuuri le descubriera, o pero aun, le engañara como venganza y desistiera del compromiso y someterse ante el enojo y desilusión del rey.

 

Por mucho que quisiera cancelar el compromiso y amara aquella otra persona no debía. Por la promesa que le hico a Bob y seguridad del reino.

 

Wolfram sintió nauseas. Aquel vino que anteriormente se veía deseable ante sus ojos ahora era un estorbo, un mal para su estomago revuelto.

 

~~

Gwendal von Voltaire, un hombre serio y firme se encontraba más serio de lo usual. Andaba preocupado. No hace mucho que había sido informado que un navío pirata fue visto brevemente y sin decir que la flota royal aun no daba señales de estar cerca. Habían zarpado juntos, pero aparentemente sus caminos habían sido desviados.

 

Enredado con sus propios pensamientos no logro notar la presencia de Gunter a su lado. “Gwendal,” El peliblanco le rompió la concentración, tomándolo por sorpresa. “Por Shinou-sama, Gunter avisa antes de asustarme.”

 

“Mis intenciones no eran de asustarte.” Gunter le hablo seriamente. Era algo raro ver aquel hombre hablando seriamente, a no ser que la situación fuera muy seria. Gwendal sabía que lo era, el vistazo del navío pirata, la flota royal perdida. Solo eran presagios de mal augurio. “Gwendal, Murata desapareció.”

 

“Estas seguro?” Como eran posibles tantas malas noticias en un día? Gwendal tenía el presagio que de aquí a ahora las cosas solo empeorarían. “Si, lo vi dejar el salón y no ha regresado aun. Mande uno de mis hombres a buscarlo, y aun no nada. No lo encuentran.”

 

“Esto es absurdo, quizás fue a su recamara.” Gwendal trato de buscarle explicación a la situación. “Ya le buscaron ahí, y nada. No está en ninguna parte. Gwendal, el sabia sobre el navío pirata y lo de la flota, sin decir que tenias sus sospechas.”

 

“Sospechas que no tuvo la menor intención de explicarnos.” Gwendal protesto, no veía como los incidentes pudieran estar conectados.

 

Fue ahí cuando su mirada se desvió, para alcanzar la de Stoffel von Spitzweg, un hombre reconocido por su poder y ambición. No era secreto que tenia aspiraciones al trono, y cuando su hermana fue reina aquel breve tiempo en el pasado, el se hiso pasar por su regente. Había tenido una prueba de lo que era ser rey, y le había gustado. Pero por su suerte, su hermana agarro riendas de la situación y le cedió el trono a Bob, después de haberse dado cuenta de quién era en realidad su hermano.

 

“Stoffel.” Murmuro Gwendal. “Crees que Stoffel tenga algo que ver con la aparición del navío pirata, la desaparición de la flota royal y Murata?” Todo le sonaba desquiciado en la mente de Gwendal. “A decir verdad, no lo sé, pero ese tipo no es de fiar. Gunter, mantente cerca de Yuuri, yo me encargo de avisarle a Bob y protegerlo yo mismo. Y por favor, no le digas nada a Yuuri o a hermano, y mucho menos al hermano de Yuuri. Debemos mantener esta situación bajo control absoluto.”

 

~~

 

Un hombre esbelto y de avanzada edad vestido de ropa elegante se dirigió al estándar, justo en el centro y frente de todos los invitados. Aclaro su garganta sonoramente llamando la atención de todos. “Hola y sean, si aun no lo han sido, bienvenidos a esta fiesta que festeja y conmemora el futuro. Disculpen por no invitarles a comer aun. La comida se retraso y yo ya no me aguantaba más las ganas de deleitarles un discurso, o en el caso de los jóvenes, aburrirlos hasta dormir profundamente.” El hombre sonrió, el público rio.

 

Yuuri miro al hombre fijamente. Era sin más ni menos Bob, el rey de Shin Makoku y el hombre que velo y acogió por el bien estar suyo y de su hermano después de la muerte de sus padres. Aun no creía que había sido el seleccionado para continuar con su legado.

 

“Hoy en esta increíble y maravillosa noche nos encontramos aquí reunidos para festejar el compromiso de mi ahijado y futuro rey de nuestro querido país. Shibuya Yuuri, de raíces humildes, criado bajo mi tutelo, hoy es la noche con cual aceptara formalmente su titulo como futuro rey y actual príncipe de Shin Makoku. Hozo a decir que va a ser el mejor rey que hemos visto desde varios siglos, mejor aun que el mismo Shinou-sama, con quien deseamos su más profunda bendición con esta decisión mía de entregar mi legado a Yuuri. También deseamos su bendición con su futuro casamiento. Si, nuestro futuro rey se casa, y en muy pronta fecha. Su futuro esposo y gobernante derecho será ni más ni menos el hijo menor de la reina anterior a mí, quien devolvió mi legado cual yo le cedí por causas mayores.”

 

Todos escuchaban atentamente cada palabra, especialmente Yuuri quien sentía los nervios a flor de piel. Algo cual su hermano mayor noto. “Yuuri, que pasa?”

 

“El discurso de su majestad, Bob era para después de la comida.” Ante eso Shori sonrió. “Calma, el mismo dijo que la comida estaba retrasada, quizás creyó esta ser la mejor oportunidad, cuando todo tiene hambre y son capases de cualquier cosa por tal de comer.” Yuuri no le encontró el chiste a la broma de su hermano. “Esto es serio Shori, toda este montaje… Digo fiesta tiene un orden para cada momento, el discurso de Bob y el mío era supuestamente para el final, después de la comida con la intención de dejar un impacto. Y si por alguna razón el orden fuera cambiado, yo debería haber sido informado con tal de estar preparado para mi parte.” Eso no era todo, había más razones por cuales sentía aflicción.

 

“Donde esta Murata, hace mucho tiempo que desapareció de la fiesta. El tendrá sus misterios y secretos, pero este comportamiento no es típico de él.” Yuuri miro fijamente a Gunter, quien desde hace algún tiempo desde atrás hasta hora andaba pegado a su lado. “No se preocupe Yuuri-sama, seguramente está en su recamara con alguna joven o doncel.”

 

“Yuu-chan, ya déjate de preocuparte tanto. Seguramente todo está bien y como lo dijo el…” Shori lo miro de reojo. “…Señor Gunter esta en lo cierto. Quién sabe, hasta lo mejor se encontró amante.”

 

“No lo sé, toda esta situación me huele a gato encerrado. Donde esta Gwendal, tengo que-“

 

“Yuuri-sama, Su majestad Bob le llama. Es tiempo de su discurso. Y si está confuso, yo fui advertido e esta citaciones hace algunos minutos, la comida esta retrasada y Su Majestad desea mantener el vigor y el entrenamiento de la fiesta vivo.”

 

Yuuri no tuvo más opción que de acatar las órdenes de su tutor por el momento. Pero todo no se iba a quedar así.

 

~~

 

Mientras tanto, en las afueras del salón, en la cubierta yacía Dakoskos, dos soldados más y dos hombres vestidos de gente común. Estos mismos hombres sonreían a la vez que las temblorosas manos de Dakoskos le entregaban el objeto envuelto.

 

“Lo conseguisteis! Fuegos artificiales recibidos sanos y salvo.” Uno de los hombres, era rubio de ojos azules vivaces, nariz rota y cachetes gordos. Su especialidad, a la igual que su compañero era de fuegos artificiales. Como lidiar con estos de forma salva para el público y de manejarlos de forma experta, logrando que estos lucieran en el cielo de forma magistral.

 

Fueron contratados por el reino para demostrar un espectáculo de colores en el cielo en celebración de esta noche especial. “Ayúdame a montar el aparato, todos ustedes, debemos apurarnos. Si fui informado correctamente, el show de los fuegos artificiales ha sido adelantado.”

 

~~

 

En la mar yacía un pequeño bote, iluminado vagamente por la pobre luz de una lámpara de aceite. Dentro de este remaba un hombre vestido de sirvienta de la corte realeza, y a su lado el cuerpo de un joven de pelos negros oscuros inconsciente.

 

“Ya casi es hora… Rayos… Donde están…” Miro hacia por todos los lados, derecha, izquierda, enfrente y atrás. A su atrás veía las luces del majestoso crucero de la realeza. Suspiro hacia sí mismo. Al fin, ya se había marchado de ese maldito navío y cumplido su misión. Toco su pecho, asegurándose que los papeles que había ‘tomado por prestado’ aun estuvieran ahí. Miro a su lado. Un imprevisto.

 

La posibilidad de que su capitán se enojaría por su brusca decisión de raptar al imprevisto era aparente. Y aun más ahora que al fin llego ver al galeón.

 

El hombre sonrió, remando hacia este. Un buque largo y majestuoso, de portes fuerte y elegante, de altura elevada.

~~

 

Dakoskos miro de reojo antes la escena en frente suyo. El lanza fuegos artificiales ya estaba armado y listo para disparar. El cuerpo le temblaba. Imágenes y voces del pasado cercano pasaban por su mente de forma rápida y sin piedad.

 

“Hijo mío, tengo una misión para ti. Un GRAN favor a un amigo.”

“Tu misión es ser nuestros ojos y oídos dentro de la realeza.”

“No te olvides del plan, y tu papel en este teatro lleno de mentiras.”

 

Las emociones fueron demasiado fuertes. Su cuerpo desvaneció, cayendo libremente como una hoja al suelo.

 

Los primeros fuegos artificiales fueron disparados, llenando el cielo de rojos, azules, verdes, amarillos espectaculares, llamando la atención de los invitados dentro del salón.

 

~~

Wolfram giro su cabeza de un lado, siendo sorprendido por el sonido de los fuegos artificiales. Les llego a ver, ya que a su lado había una ventana que le daba bastante vista al hermoso suceso.

 

Bajos las luces de estos, juro ver un barco pirata.

~~

Yuuri se encontraba parado en frente de todos sin ninguna palabra que decir. Las palabras se le habían quedado atravesadas en la garganta. Su corazón palpitaba fuertemente. El sonido de los fuegos artificiales le causo un apretón en este.

 

Tenía un mal presagio.

~~

En la mar, el buque recibía con brazos abiertos al pequeño bote, a la vez que los fuegos artificiales alumbraban el cielo.

 

El hombre vestido de mujer, antes de remar el bote dentro del buque completamente, le dio un último vistazo. En la obra viva de este, tallado a mano, en letra cursiva estaba escrito el nombre con cual el buque fue bautizado.

 

‘La Joya Del Mar’

Notas finales:

Disculpes las faltas de ortografía, si es que las ahí. No me doy cuenta y además estoy usando Word como Beta… -_-

 

Gracias especiales a la música épica de tema de fondo. Fueron mi mayor inspiración para terminar de escribir este capítulo, y posiblemente las culpables por tan suspenso final.

 

Me imagino que a estas alturas del partido ya saben quién es la ‘sirvienta’, y si no, lo sabrán en el capítulo que viene. Hablando de eso… La que me viene a mí, con las siguientes escenas de acción… Solo espero lograr hacerlo bien.

 

Hasta el próximo capítulo, sigan leyendo!


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