La vida puede cambiar en un instante para bien o para mal.
Sawada Tsunayoshi sufrió aquellos cambios, la primera a la edad de cinco años, donde las circunstancias hicieron que su vida cambiara para mal convirtiéndose en dame; un instante volvió a darse y su vida cambio para bien a la llegada de su tutor Reborn y ahora la vida le volvía a dar un instante, recordándole su pasado y trayéndole alegría.
Todo lo que Tsuna había deseado se había cumplido de forma que el agradecía, tenia amigos, hermanos, todo aquello que siempre había deseado, pero por miedo nunca había pedido.
Tenia amigos, grandes chicos que eran capaces de dar su vida por el, había encontrado también el amor, siempre creyendo que la persona que amaba nunca le correspondería al ser quien era, tenia a pequeños bajo su cuidado como su hermano, además de que existía alguien que le quería como a un hermano menor, ahora la vida le sonreía al permitir a un hombre al que admiraba mucho tenerle como su padre.
No podía desear nada más, incluso los recuerdos de si infancia había desaparecido y solo tenía recuerdos agradables.
Su vida había mejorado de gran forma y el lo agradecía.
Mas existía un pero en todo esto y es que desde hacia un mes, antes de que Giotto apareciera había comenzado a tener nauseas, extraños antojos y mareos, no le había dicho a nadie sus síntomas, pero estaba seguro que su papa y Reborn ya se habían percatado de ellos, el no quería preocupar a nadie, por eso se mantenía en silencio.
Mas como lo sospechaba, aquellos dos que estaban con el ya se habían dado cuenta y Giotto había ordenado una seria de estudios para Tsuna, aquellos síntomas le llamaban la atención, sospechaba que podría ser, pero necesitaba asegurarse, así podría ayudar a su hijo.
Aquel día Tsuna caminaba con sus amigos camino a la escuela, iban platicando de lo que harían el fin de semana, habían decidido salir a la playa a disfrutar del día, el castaño se detuvo ante la sorpresa de sus amigos y en un instante el joven heredero se desvaneció, siendo socorrido por su guardián de la lluvia.
--Tsuna, Tsuna—llamaba Yamamoto, al chico en sus brazos
--Aun estamos cerca de su casa, hay que llevarlo de regreso—fueron las palabras que salieron de los labios de Gokudera, siendo así que ambos jóvenes regresaban, para darle ayuda a su amigo.
Reborn llegaba del laboratorio con un sobre en mano, los resultados habían tardado más de lo que esperaba, al parecer habían realizado las pruebas varias veces, pero por fin habían decidido mandar los resultados.
--¿Son los resultados?—pregunto el fundador de Vongola
--si, primo, son los resultados—respondió el arcobaleno
Antes de hacer cualquier movimiento, la puerta se abre dejando pasar a los jóvenes
--¿Qué pasa?—pregunta el tutor de traje
--Íbamos caminando a la escuela, cuando de pronto se desmayo—exclamo Gokudera
Giotto tomo entre sus brazos a Tsuna, mientras dejaba a Reborn dar las ordenes necesarias.
Reborn indica a los jóvenes irse a la escuela y no dar ninguna alarma, solo decir que Tsuna se quedo en casa por que Giotto lo pidió, los jóvenes asienten y parten no sin mirar a tras.
El mejor hitman del mundo decide salir de la duda que lo aqueja desde que Tsuna comenzó con sus sintomas, por lo que abre el sobre, leyendo su contenido.
Frunce su ceño ante los resultados, ¿Cómo es posible? Suspira con cansancio, el chico de por si ya tiene muchos secretos como para aumentarle uno mas.
Subió a las escaleras y vio a Giotto acariciar con aquella ternura a Tsuna. Se mordió el labio, ¿Cómo explicarlo?
--¿Qué sucede Reborn?
--Nada, aquí están los resultados, hay… hay un prueba que sale positiva, pero no logro comprenderla
--¿Qué prueba es?
--una prueba de embarazo, según los resultados Tsuna esta embarazado.
--Tiene quince años y ya espera un bebe, ¿Quién lo diría?
--¿Giotto?
--Tsuna es un chico muy especial, como el nace uno en un millón, mito y leyenda, Tsuna es un doncel
--¿doncel?—pregunto confundido, había escuchado el término, pero no sabia en realidad que era
--un hombre con la misma capacidad que las mujeres para engendrar vida en su interior—exclamo poniendo su mano en el vientre del chico quien dormía.
Reborn proceso la información, hacia un mes que Hibari había pedido un permiso para que Tsuna se quedara en su casa, el mismo sabia que ese día el chico regresaría perteneciéndole por completo a su guardián de la nube, pero si hubiera sabido aquello, les hubiera advertido
--por ese motivo deje vongola—susurro Giotto sin saber que Reborn lo había escuchado mas hace comentario alguno
--¿Qué ordenas primo?
--primero hablare con el, hay que buscar un medico que nos apoye con esto y después indicar la situación a los guardianes y al padre de la criatura.
Reborn asintió y ambos salieron para dejar a Tsuna descansar, Giotto no podía evitar pensar que le sucedería a su niño, ahora con esa responsabilidad y con vongola en sus hombros, mismo pensamiento tiene el tutor del chico, ¿Qué pasara ahora con el heredero estando tan vulnerable?
Yamamoto y Gokudera han llegado a la escuela y dan la versión creada por el asesino…
Tsuna abrió los ojos se sentía desorientado, se encontró en su casa, frunció el ceño, el recordaba haber ido a la escuela, se levanto y decidió ver a su papa o su madre, para averiguar que había pasado.
Al llegar abajo se encontró con su padre mirando a la nada, las manos entrelazadas y perdido en sus pensamientos.
--¿papa?—pregunto llamando la atención del hombre rubio quien le sonrío
--¿Cómo te sientes Tsuna?
--cansado, ¿Por qué estoy aquí y no en la escuela?
--¿Qué es lo ultimo que recuerdas?
--ir a la escuela en compañía de Hayato y Yamamoto
--en el camino te desmayaste y los chicos te trajeron de regreso—respondió el primer cielo—mi niño ¿desde cuando te has sentido mal?
--hace un mes—respondió con la mirada baja
--¿Cuáles han sido tus síntomas pequeño?
--nauseas, vomito, mareos, cansancio
--¿Por qué no habías dicho nada Tsuna?—pregunto Reborn entrando
--no quería preocuparlos
--Tsuna te desmayaste enfrente de Yamamoto y Hayato, ellos se preocuparon, ¿Qué hubiera pasado si lo hubiera hecho frente a las chicas, Mukuro o Hibari?—cuestiono el bebe
--lo siento—susurra
--eso no importa ya—exclama Giotto—como lo sospecharas, nosotros nos dimos cuenta y te mandamos a hacer unos estudios, los resultados llegaron hoy
--¿Qué tengo? ¿Es malo?
--no Tsuna, lo que te sucede es algo muy extraño, muy pocos hombres llegan a nacer con tu don, pequeño, eres un doncel—dice Giotto mirando con ternura a Tsuna—un hombre con la capacidad de embarazarse, estas embarazado
--¿embarazado?—pregunto su intuición le decía que era cierto, puso sus manos en su vientre--¿un bebe? ¿Estoy esperando un bebe?
--si Tsuna—exclama Reborn—ya hable con Shamal el se hará cargo de seguir tu embarazo
--¿Qué le diré a los chicos?
--la verdad Tsuna... No puedes ocultarles esto, ellos deberán protegerte
--También se le avisara al noveno
Tsuna los mira pero sabe que tiene razón, sin poder usar sus llamas y ahora con esa situación estaba más indefenso que nada y debía ser protegido
--E…esta bien, pero quiero decirle a Kyoya primero
--lo llamare para que venga en una hora—dice Reborn saliendo con su celular.
--tus amigos te aceptaran Tsuna, note preocupes por que no lo hagan—exclama Giotto abrazándolo—todo saldrá bien, te lo prometo, no estarás solo, estaremos aquí contigo.
Tsuna asintió a las palabras de su padre.
Giotto desde su llegada a ese tiempo tenia dudas de por que estaba ahí, pero al saber del embarazo de su sucesor, supo que estaba en el lugar correcto.
Hibari frunció el ceño ante la llamada del bebe con el quería pelear, le había dicho que debía ir en una hora a la casa de su pareja por que este tenia algo importante que decirle.
--¿tiene algo que ver con sus síntomas?
~~ Así que te diste cuenta, si tiene que ver, pero es Tsuna quien te lo tiene que decir no yo, así que ya sabes
La hora paso y Hibari ya estaba en la casa de su pareja, Giotto y Reborn habían salido dejándolos solo
--Tsunayoshi ¿Qué pasa? ¿Que tienes?
--Yo…. Bueno….
--Tsunayoshi—pregunta tomando el rostro de su pareja--¿Qué pasa?
--Yo… no lo sabia Kyoya…yo soy un doncel—murmura
--¿un doncel?
--es extraño, mi papa dice que no es muy común que nazcan los que son como yo-dice con la mirada baja—yo…un doncel…estoy embarazado
Hibari no dice nada, solo se queda mirando al chico frente a el, sabe que Tsuna lo conoce como para no hacerle bromas, pero si se pone analizar, se percata que los síntomas que su pareja había tenido son los de una embarazada.
Tsuna no alza la mirada, pero el silencio de su novio le duele, ama a Hibari, pero si este no lo apoya, deberán terminar.
Hibari alza el rostro de su pareja y lo besa con ternura y pasión, Tsuna simplemente se deja se deja hacer. Cuando se separan por falta de aire se miran a los ojos
--Es cierto, nunca te mentiría
--lo se—responde Hibari—lo se, así que tendremos un hijo—dice poniendo su frente sobre la de Tsuna
--si—responde con un sonrojo—vamos a ser padres
--esto es sorpresivo, pero estaremos juntos en esto pequeño—dice besando la frente del chico--¿y cuando le diremos a los de la manada?
--no lo se
Mientras en un café se encuentran Giotto y Reborn.
--¿entonces la reunión para decirles será mañana?
--si, será lo mejor, así ambos estarán mas concientes de la situación
--le mandare mañana mismo la carta al noveno
--Reborn, necesito que Dino obtenga un documento creado por Ricardo, si no mal me equivoco deberá estar en una bóvedas de la mansión, esta con el nombre de
--me encargare de que lo obtenga y nos los traiga
--gracias /quien diría que en verdad lo usaríamos Ricardo/
=Es para prevenir, Giotto, es lo mejor que podemos hacer para nuestro futuro=