Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Destino por Yukikaze

[Reviews - 89]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Holaaaa, hace tiempo que estoy un poco bloqueada y para librarme de ese bloqueo he decidido subir uno de mis proyectos (Sin terminar, por cierto), pero bastante encaminado, este fic forma parte de mi propuesta de "Parejas extrañas para Naru-chan" (De echo es el primero de esta propuesta mía) Espero que os guste, 


"Siempre quise escribir un ItaNaru"


(Aunque soy superfan del Sasunaru)


Yukikaze

Notas del capitulo:

Holaaa, espero que os guste esta pareja, no es tan extraña como para ponerla en mi propuesta, pero hay muy pocos fics de ella (En español al menos) y eso me molesta mucho porque aunque adoro el Sasunaru tambien me gusta ver a Naru con otras personas, de echo estoy escribiendo un extraño....pero muy extraño trío, un SasuNaruNeji, sí habeís oído bien ¿Os imagináis a Sasuke y a Neji compartiendo a Naruto? Yo no, pero todo se puesde escribir ¿Cierto?


¡Que disfruteís del Fanfic!

Naruto suspiro sentándose en un banco de madera mientras observaba a su Sensei coquetear con cada chica que pasaba por aquel camino de tierra que llevaba a un pequeño pueblo, ¿Por qué tenía que ser tan pervertido? Cada vez que pasaban por un pueblo se quedaban dos semanas por culpa de la perversidad de Jiraya, Naruto estaba seguro de que no había ser más pervertido que él en la tierra aunque su Sensei Kakashi no estaba muy lejos de alcanzarle.

-Ero-sennin, quiere dejar de molestar y ponerse en marcha-dijo cansado, ya estaba harto.

-Naruto tu quédate por aquí, yo tengo que ir a aquel pueblo a hacer unas investigaciones para mi próximo libro.

-¡Ah, no!, de eso nada, usted se va a quedar aquí si no quiere que lo castre- Naruto se quedo hablando solo ya que el viejo pervertido ya había partido al pequeño pueblo con una hemorragia nasal en la nariz persiguiendo a una chica de no más de 18 años.

Y el pobre rubio de ojos azules no pudo hacer más que volver a suspirar, ese hombre nunca cambiaría, estaba seguro de que si él fuera una chica sería capaz de coquetearle y pedirle información para sus “investigaciones”, se levantó de aquel incomodo banco de madera y comenzó a caminar tranquilamente por el camino de tierra admirando el paisaje, ahora que llevaba un par de meses solo su personalidad se había vuelto más serena y ya no era tan efusivo como antes, no valía la pena serlo si estaba solo, por suerte el hiperactivo rubio había aprendido a admirar las cosas a su alrededor y no a dejarse llevar siempre por su efusiva personalidad.

Estuvo un rato caminando en silencio hasta que se canso y paro a mitad de camino para aprovechar y beber agua, “Total no había nada de qué preocuparse”, su pervertido Sensei estaría haciendo sus “investigaciones” muy entretenido en un baño termal.

En el mismo instante en que bajó su mochila al suelo para tomar su botella de agua una sombra negra paso a su lado, pudo distinguir de esa sombra unos cabellos negros como la noche y unos ojos rojos como el infierno que solo poseían dos personas en el mundo, no dudo un solo segundo en seguir aquella sombra que extrañamente dejaba un rastro de sangre a su paso, después de estarle persiguiendo una media hora se dio cuenta de que alguien le perseguía a él, así que paro y se dio la vuelta para encontrarse de lleno con uno de los Akatsuki.

Era un hombre extraño con la piel azul y la cara en forma de pez, llevaba una espada larga y ancha en su espalda y su badana de la aldea de la niebla estaba rasgada con una línea horizontal.

-Pero mira que tenemos aquí, si es el Jinchuriki del Kyubi, mejor para mi, dos pájaros de un solo tiro-dijo fríamente.

-¿Qué te hace pensar que no me resistiré? ¿De echo que te hace pensar que podrás ganarme?-dijo Naruto en el mismo tono de voz.

-¡Oh vamos!, solo déjate atrapar, pequeño zorrito.

-¿Por qué no te callas pececito?-devolvió el insulto Naruto tomando un Kunai de su porta-Shurikens, no habló más y se dedico a asestar golpes uno tras otro, golpes que el cara de pez esquivaba sin problemas, ya cansado y sin energía, Naruto se alejó del cara de pez que también respiraba agitado y unió sus manos para realizar la técnica que su Sensei le había enseñado.

-RASENGAN-dijo con una bola azul de energía en la mano que giraba constantemente, el hombre con la cara de pez se preparó para esquivarla, pero Naruto se las arreglo para asestarle el golpe justo en el pecho, el cara de pez cayó al suelo sujetándose el pecho casi sin aire, Naruto sabía que aquello no lo mataría.

-AMATERASU-escucho detrás suyo y en seguida un fuego negro se extendió por el cuerpo del Akatsuki calcinando sus huesos hasta no dejar nada…ni siquiera sus cenizas, Naruto se giro sin respirar para ver como Itachi Uchiha caía al suelo lleno de heridas sangrantes.

Se quedó mirándolo un tiempo, observando como aquella sangre, roja como los ojos del Uchiha formaba un charco a su alrededor, ¿Qué hacía? ¿Lo ayudaba o no? Se suponía que el Uchiha mayor y ahora el menor también, eran renegados de clase S, si lo ayudaba como mucho sería prácticamente desterrado de la aldea, pero nadie tenía porque enterarse ¿Verdad?

Con una decisión ya clara en su mente se acerco al cuerpo inmóvil del Uchiha y lo palpo con sus dedos, el Uchiha no mostró amago de moverse y su respiración cada vez era más lenta mientras la vida se le escapaba de las manos, si quería salvarlo tenía que hacer algo ya o moriría sin remedio.

-Kage bunshin no Jutsu-dijo invocando 5 clones, observo los alrededores y encontró el lugar perfecto para llevarlo, una cueva, una pequeña cueva oculta tras una gran cascada, ahora agradecía haber pasado todos esos meses solo porque si no estaba seguro que nunca habría encontrado esa cueva, ordeno a sus clones que lo llevaran a la cueva mientras el sacaba un libro de su mochila de curación y buscaba las plantas medicinales que allí indicaba, después de 12 largos minutos encontró la planta que buscaba y corrió a la cueva, el Uchiha seguía inconsciente mientras sus clones velaban sus sueños, se sentó en el suelo cerca del Uchiha y comenzó a aplastar la planta con un poco de agua consiguiendo crear un mejunje verde que con mucho cuidado y algo nervioso paso por todas las heridas del Uchiha, las cuales eran abundantes, no sabía lo que le habían hecho pero parecía que hubiese vuelto de una guerra, aunque eso en el mundo ninja no era nada extraño.

Estuvo toda la noche metido en esa cueva con sus clones hasta que no pudo más y Morfeo lo venció llevándolo al más profundo de los sueños.

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

La mañana siguiente despertó nublada y con posibilidades de lluvia, la cueva detrás de la cascada estaba en completo silencio, solo podían oírse las respiraciones de los dos durmientes.

En la oscuridad de la cueva unos ojos rojos como el fuego se abrieron, Itachi Uchiha sentía un gran dolor, aunque no era nada comparado con el de ayer, por alguna extraña razón recordaba que alguien lo había salvado…alguien con una apariencia angelical, con unos ojos azules como el cielo y unos cabellos rubios como el oro, en el momento en que lo había visto pensó que estaba muerto, pero después recordó el dolor que sentía y si estaba muerto estaba seguro de que no sentiría aquel inmenso dolor que estaba sintiendo, gimió intentando incorporarse pero el dolor era tal que tuvo que volver a acostarse, en ese momento noto que estaba sobre un saco de dormir azul oscuro y que sus heridas estaban vendadas ¿Quién habría salvado a un ninja renegado como él? Porque estaba seguro de que cualquiera que viera su badana rasgada sabría que era un ninja renegado.

Las respuestas a sus preguntas mentales fueron contestadas al girar el rostro y ver sobre un costado del Futón en el que estaba una cabellera rubia como el oro, el chico rubio respiraba lentamente gimiendo de vez en cuando, Itachi lo miro más de cerca, le sonaba de algo, pero al no conseguir ver su rostro no sabía de que, el chico tenía sus brazos cruzados bajo su rostro no dejándolo ver, Itachi se acerco y en aquel momento el chico gimió y retiro las manos de su rostro, Itachi lo reconoció de inmediato ¿Cómo no hacerlo?

Uzumaki Naruto, Jinchuriki del Kyubi, compañero de equipo de su hermano…bueno, ex-compañero porque estaba al corriente de que su hermano había huido con la serpiente rastrera, cosa que la verdad no entendía, pero, lo que menos entendía era él porque, ¿Por qué aquel rubio lo había salvado? Se suponía que tendría que odiarlo, después de todo el era una de las razones por las que Sasuke había dejado la aldea, pero no, el chico lo salvaba de morir desangrado en medio del bosque, no lo entendía…no podía entenderlo.

En aquel momento como si fuera el más indicado, Naruto abrió sus ojos azules bostezando y frotándoselos, y si Itachi no había oído mal: ronroneando como un gato…bueno un zorro, el rubio pareció desorientado durante unos momentos, pero recobro la memoria al observar a Itachi, allí despierto: mirándole.

Naruto se alejó de él sobresaltado, ¡Se había quedado dormido con un ninja ultra súper peligroso a su lado!

-No sabía que causaba ese efecto en la gente-murmuro Itachi con una pequeña sonrisa al ver al rubio sobresaltado.

-Estas despierto.

-Creo que si…

-Sabes a lo que me refiero- dijo Naruto frunciendo el ceño, ¡Era igualito a Sasuke!, sin importarle las quejas del Uchiha mayor se acerco a él con el ceño fruncido y le quito las mantas que tenía encima dejando ver su pecho desnudo, Itachi no pudo evitar soltar un comentario despectivo acerca del estado en que lo había dejado su “enfermero”.

-No sabía que fueras tan…

-Shh, no habrás la boca Itachi Uchiha- lo calló el rubio, ya estaba suficiente nervioso como para aguantar los comentarios del Uchiha, quien se comportaba muy extraño, normalmente siempre había sido muy frío, en total silencio le cambio los vendajes por otros limpios y se sentó en una esquina de la cueva sin hablar.

-¿Por qué me ayudaste?-preguntó el Uchiha.

-No lo sé, simplemente lo hice-contesto el rubio con la verdad, no sabía porque lo había hecho, fue un impulso- ¿Por qué te perseguía tu compañero?- Itachi suspiro, esperaba esa pregunta.

-Porque lo he traicionado- contesto para el asombro del rubio.

-¿Traicionado? ¿Tú, Itachi Uchiha traicionaste a la organización más sanguinaria del mundo? ¿Qué hiciste?

-Aunque parezca un asesino sin escrúpulos no lo soy, nunca nadie se esforzó por comprender los motivos por los que asesine a todo mi clan.

-Ningún motivo justifica los hechos- susurro Naruto sentándose contra la pared escarpada de la cueva abrazando sus rodillas con la cabeza escondida entre ellas.

-Quizá no, después de todo fue mi decisión matarlos, aunque no pude cumplir mi misión-murmuro, Naruto alzó el rostro confundido ¿Misión?

-¿Misión?- Itachi esbozó una sonrisa en su rostro observando al rubio curioso.

-Misión- afirmo- era mi misión asesinar…masacrar a mi clan entero, pero, cuando vi a Sasuke a los ojos, a mi hermanito de apenas 7 años no pude hacerlo, no pude matarle y fallé-explico bajando su cabeza, nunca olvidaría el momento en que su hermano le había mirado a los ojos asustado con aquellos grandes e inocentes ojos negros, y de las palabras que le dijo para que no cometiera ninguna estupidez “Si quieres matarme, ódiame, aborréceme y sobrevive como puedas, huye, escapa y aférrate a la vida…y cuando tengas unos ojos como los míos, ven a por mí”, sabía que su hermano se lo había tomado enserio, porque ahora había huido con la serpiente rastrera.

-No es malo tener sentimientos-murmuro Naruto- aunque no logro entender qué clase de persona pudo mandarte una misión así.

-Fácil: Danzo, ¿Lo conoces? El viejecito del consejo, el clan Uchiha planeaba una masacre contra Konoha y el clan Uchiha fue masacrado- Naruto ni se inmuto al oír el nombre, por supuesto que conocía a ese viejo, lo había visto algunas veces junto con otros dos.

-Ninguna aldea está libre de corrupciones: tú pagaste por la maldad de tu clan y de la aldea.

-No te conocía ese lado filosófico…

-La soledad, que me hace decir estupideces, ¿No te arrepientes?-preguntó Naruto.

-Todos los días de mi vida, pero el destino quiso que aquello sucediera y ya no puedo volver atrás.

-Tú también con el destino, ¿Por qué le gente cree en él? El destino lo decides tú, son tus decisiones las que te llevan a donde estas.

-Pero, a veces no tienes elección ¿Entiendes? Si te ordenan matar y sabes que si no lo haces más personas morirán ¿Qué harías?-Naruto ni siquiera pensó su respuesta.

-Mataría, pero el destino quiso que nos encontráramos ayer por algo ¿no?

-Supongo.

Los días continuaron pasando entre charla y charla, Naruto cuidaba de las heridas del Uchiha todos los días, preguntándose si su Sensei se habría dado cuenta de su desaparición, cada vez se contaban más cosas tan privadas como tristes, tan superficiales como felices, cada vez se conocían más y no conseguían entenderlo ¿Por qué le contaban esas cosas a un total extraño? No lo sabían, simplemente actuaban, porque necesitaban algo de compañía y estaban seguros de que el otro no hablaría, así paso una semana y media e Itachi estaba curado casi por completo.

-¿Qué harás luego?-preguntó Naruto observando a Itachi que intentaba caminar sin rozar la herida que tenía en el abdomen.

-¿Luego cuando?-preguntó el Uchiha observando al rubio que lo observaba igualmente, tenía que reconocerlo, se había hecho dependiente de ese chico…ese rubio era la primera persona que lo ayudaba por el simple hecho de querer hacerlo y aquello era algo nuevo para él, algo extraño…algo que le hacía sentir algo que nunca había sentido.

-Cuando estés curado-dijo Naruto sin dejar de observar a Itachi, por un lado se alegraba de su recuperación, pero por otro no quería que se fuera porque estaba seguro de que si lo hacía no volvería a verlo, sabía que el objetivo de Sasuke era matar a su hermano e Itachi desgraciadamente era aquel hermano, no quería que se fuera, a pesar de que aquel ninja fuera uno renegado Naruto había aprendido a apreciarlo, cada vez que observaba aquellos ojos negros se perdía en ellos por completo…no quería que se fuera…no quería quedarse solo.

-No lo sé, tarde o temprano mi hermanito me encontrará, aunque creo que duraré unos añitos más-contesto con gracia.

-No digas eso, ¡Estas resignándote a morir!

-¿Qué más puedo hacer? Sasuke tiene derecho a matarme

-No lo tiene, tú tienes derecho a vivir, ¡Tu no hiciste nada!- Itachi dejó sus intentos por caminar sin dolor de lado y miró a Naruto a los ojos ¿Había escuchado bien?

-Naruto…masacre a mi clan.

-No por voluntad propia, quizá si le explicaras…

-Es mi destino morir a manos de mi hermano.

-¡No lo es! ¿Por qué todos están tan obsesionados con el destino?, era mi destino ser tratado como una miarda hasta el día de mi muerte pero no quise seguirlo, decidí cambiar…vivir, tu destino lo elijes tú Itachi, no puedes simplemente rendirte, ¿No tienes algo por lo que vivir?¿Algo que proteger?¿Algo por lo que darías tu vida sin contemplaciones que no sea tu hermano?- Itachi se quedó en silencio, por supuesto que lo tenía, aquel rubio revoltoso y su hermano vengador era todo lo que tenía aunque intentara negarlo sabía perfectamente lo que le ocurría, desde que vio a aquel rubio lo supo, aquella vez a sus 9 años, se acordaba perfectamente.

Flash Back

Un pequeño pelinegro de 9 años iba caminando por las calles de Konoha rumbo al supermercado, su madre le había pedido que comprara un par de verduras para hacerle la comida a su hermanito de apenas 4 años, las calles estaban como siempre silenciosas y oscuras, era normal ya que se estaba haciendo tarde, su madre no lo habría enviado si no supiera que él podía defenderse perfectamente después de todo era un prodigio.

Iba caminando en silencio cuando oyó un gemido que parecía de dolor, un poco extrañado se dirigió hacia el lugar de donde provenía el gemido y su corazón se congeló al ver aquella escena…un pequeño niño con el cabello más rubio que había visto en su vida se arrastraba por la calle con la ropa ensangrentada y un brazo doblado en un ángulo anormal, el niño se detuvo en una esquina y se sujetó el brazo adolorido, Itachi se acerco y se arrodillo a la altura del niño que alzó la cabeza dejando ver unos hermosos ojos azules como el cielo y el mar juntos cristalizados, parecía querer llorar, pero se negaba a hacerlo.

-¿Te encuentras bien, pequeño?-preguntó sabiendo la obvia respuesta, en ese mismo instante las lágrimas cayeron de los ojos del rubio que comenzó a sollozar sin amago alguno, Itachi no pudo hacer más que abrazarlo mientras el niño lloraba adolorido y desconsolado.

Fin Flash Back

-Lo tengo, pero ese algo no necesita ser protegido Naruto-murmuro.

-Pero quizás si necesita que tú estés a su lado, que luches por tu vida y que jamás te des por vencido, quizá te necesita…solo a ti-contesto el rubio escondiendo su cabeza entre sus rodillas, no podía comprenderlo, ¿Porque…porque todas las personas que conocía estaban obsesionados con el destino o la venganza? ¿Qué era lo que aquello te aportaba? Solo te dejaba triste y solo una vez completado tu objetivo, siendo un renegado, escondiéndote como una vil rata sin una pizca de honor, como un vulgar ladrón, sin nada ni nadie ¿Eso era lo que quería Itachi? ¿Eso era lo que quería Sasuke?

Itachi observo a Naruto detenidamente, sí, quizá aquel rubio tenía razón, pero ¿Como estar al lado de esa persona si eres un vulgar renegado, un asesino en masas? No podía hacerlo, por eso solo le quedaba una opción: huir y morir a manos de su hermano.

-Naruto…-susurro arrodillándose a la altura del rubio, el ojiazul levantó su rostro dejando ver cristalinas lágrimas deslizándose por él, Itachi se sorprendió, era la primera vez en años que alguien lloraba por él, la última persona había sido su madre…

-Yo…NO QUIERO QUE MUERAS-gritó abrazando a Itachi provocando que este callera de espaldas con él encima, no quería quedarse solo otra vez, sabía que tenía muchas personas esperando por él, pero todos eran…superficiales, Sakura, la chica que amo en su infancia y que le retribuyo con golpes, Tsunade a quien consideraba una abuela que tenía una gran esperanza sobre él, los sueños de su hermano y novio, Jiraya, el abuelo pervertido que lo usaba como señuelo para ligar, Kakashi otra pervertido y quizá…los 6 novatos restantes y el equipo de Gai-Sensei, esas eran las únicas personas que alguna vez llegaron a apreciarlo, y él las protegía celosamente, con miedo de perderlos, ya había perdido a Sasuke y aquello le había dolido en el alma, aquello había abierto una profunda herida en su pecho que tardaría en cerrar algún día, pero por mucho que lo buscara…jamás volvería con él, porque estaba obsesionado con la venganza, una venganza que no era más que una mentira, una sucia y vil mentira.

Itachi abrió sus ojos más de lo normal, sintiendo el calor del abrazó que le daba Naruto ¿Cuánto tiempo había pasado desde la última vez que lo habían abrazado? No tenía idea, pero se sentía bien…muy bien y sintiéndose un poco torpe correspondió el abrazo.

-Yo tampoco….quiero morir-le susurro al oído ya que el rubio tenía su cabeza entre el cuello y el hombro de Itachi

-Entonces…vive-contesto Naruto sin soltarlo-…vive, pero esta vez hazlo por ti…solo por ti.

El azabache sonrió mirando el techo cubierto de roca de la cueva, quizá eso debería hacer, solo…vivir.

Notas finales:

¿Que os a parecido? 


¿Extraño?


(Espero que no, aunque me ha quedado un poco cursi)


Agradeceria un comentario, necesito mucha inspiración para continuar con esta historia aunque ya tengo un par de capitulos escritos.


¡Muchisimas gracias por leer!


(Os adelanto que los primeros capitulos son solo un prologo para introduciros en la historia original)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).