“Mis ojos ya no son de un adolecente libidinoso.
Mi mente a cambiado. Todo ahora es más razonable, serio y aburrido… Pero el recuerdo inminente de tu joven sonrisa convierte a mi corazón adulto en aquel joven equivoco, rebelde e incoherente… Y, después de muchos años, vuelvo a ser feliz”
….
Diversos cuerpos danzan frenéticamente al centro de un amplio hogar, los cuerpos sudorosos y con olor a alcohol, no poseen ningún miedo de tocarse y ni muestran pudor a la hora de quitarse sus pequeñas prendas. De igual estado a todos, alcoholizados, drogados, y sumido ante la excitación que provoca otro cuerpo humano se encuentra varado en una esquina un joven alto, de pelo semi- corto y de buen cuerpo.
Aquel joven, Choi Minho, se dejaba manosear por las largas y finas manos de su acompañante quien también era su compañera de clase. Sin dejar de bailar, Minho buscaba con su nublada vista , entre la obscuridad y parpadeos constantes de las luces, a su amigo quien se había perdido horas ante entre la masa de gente.
- Minho puedes tomarme atención… - entre los zumbidos provocados en su oído debido a la fuerte música, aquella voz chillona logro llegar a su tímpano, logrando así que se despertara de su perfil de “buscador”
- Lo siento es solo… que Key… no ah vuelto… - la voz del joven alto apenas podía modular de buena manera debido a la gran cantidad de alcohol, y de a poco su visión y su cuerpo comenzaban a fallar.
- Lo último que vi fue subir a la “Diva” con un muy apuesto chico, pero estaba tan ebrio que dudo que hayan logrado follar.
Minho apenas pudo oír la mitad de aquella oración ya que salió corriendo velozmente entre la gente para poder devolver todo lo que había desayunado, comido y tomado en aquel día. Después de varios tropezones y empujones logro llegar al baño, vomitando a tiempo aquel revoltijo de cosas en su estomago.
- ¡Maldito Key! Porque me traes a estos lugares… - de a poco los finos parpados del alto se fueron cerrando lentamente, y sin planearlo se quedo dormido en aquel estrecho y sucio baño.
Al despertar la primera sensación que sintió el joven Choi fue de dolor, el cual se ubicaba en su cabeza. Sus labios secos debido a la deshidratación rogaban por una gota de agua y sus cabellos se desordenaban entre si después de que Minho acariciara su cabeza para tratar de evitar su resaca.
Se levanto lentamente sujetándose fuertemente del lavamanos, su cuerpo pesaba mas de lo normal y su visión de a poco iba aclarándose. Se vio en el pequeño espejo que estaba incrustado en la pared y por inercia comenzó a arreglarse para ir a buscar a su amigo en aquella espaciosa casa.
(Minho)
Mi estomago ardía al igual que mi cabeza, mis piernas temblaban debido al cansancio y el no haber comido, y lo peor de todo es que en este estado debo encontrar a ese bastardo.
“¿Porque me invita si me va a dejar solo?”
Suspiro de forma pesada y camino lentamente para luego abrir la puerta. Al salir me encuentro con personas en el piso desordenadas y de mal olor, entre mas trato de adentrarme entre tantos cuerpos alcoholizados y drogados, más fuerte es mi deseo por encontrar a Key y largarnos de ese pestilente lugar.
No me sorprende encontrar en algunos sillones y alfombras cuerpos desnudos y porque no también teniendo sexo aun a estas horas de la madrugada.
“que voyeristas”
Observo a Jessica la chica con la cual baile antes de caer dormido, o eso es lo que recuerdo.
- ¡Jessica! – corro hacia ella apresuradamente despertando más de una persona. Ella se sorprende al verme y puedo notar un pequeño color rojizo en sus mejillas. No me digas que…
- ¿Q-Que sucede? – pregunta de forma nerviosa mientras yo la miro más detenidamente.
- Anoche… no sucedió nada ¿Verdad? – le pregunto inocentemente mientras finjo una sonrisa. Si tuve sexo con ella sería lo peor, no porque tenga un mal aspecto si no porque es la hija del director y si él se entera de seguro me expulsaría.
- No, no, no… Después de bailar te fuiste corriendo y no te volví a ver…. Solo eso – Con la cara algo entristecida giro lentamente mientras yo trataba de recordar.
“Salí… ¿Corriendo?”
- Ah ¡Jessica! Has visto a Key – agarre levemente su hombro para girarla.
- ¡Ash! Key, Key, Key, Key ¿Acaso no piensas en nadie más que no sea esa puta? – me sorprendí de sobremanera al ver aquellos cristalinos ojos observarme con ira, su mano sujetaba con mucha fuerza mi muñeca y sus dientes provocaban un leve sonido debido a la gran fuerza que ejercía en su mandíbula.
- ¡Oye! Contrólate, no eres nadie para mi así que baja ese maldito tono de voz ¡Mejor dime donde esta Key! – le pegue suavemente en su cabeza para hacer que entrara en razón, no me encontraba enojado (actitud que me sorprende) pero realmente me molesta cuando alguien trata de “Puta” a Key.
- Él… está durmiendo con un chico en la última habitación del pasillo que da al baño. – su tono de voz bajo de forma intimidante mientras ocultaba su rostro entre tu pelo.
Fue donde me indico Jessica y abrí ligeramente la perilla dorada de la puerta. Cuando entre me encontré con un muy tranquilo y dormido Key quien se encontraba totalmente cubierto y ¿Vestido? En aquella cama de blancas sabanas. Pude notar unos tostados y gruesos brazos que sujetaban la delicada y delgada cintura de mi amigo, me acerque de forma sigilosa y pude notar que aquel tostado hombre se encontraba despierto. Su rostro parecía de un cachorro o un dinosaurio, no sabía cómo definir sus extrañas facciones. Sus obscuros ojos me observaban a la vez que se levantaba lentamente ¿Vestido?.
- Yo… vine a buscar a mi amigo – apunte a Key y el solo me sonrió de lado, agarro las zapatillas y el suéter de Key el cual se encontraba en una silla al lado de la cama.
- Creo que debes cuidarlo más, pude notar que con solo tres copas de Tequila se quedo en ese estado.
- Tu y él, ustedes… - le mire alzando una ceja al igual que un rostro lleno de confusión se posicionaba en mi rostro.
- No soy ese tipo de hombre… solo le invite unas copas y bailamos. Dudo que me recuerde debido al alcohol que tomo antes de verme a si que… Hasta siempre.
Salió de la puerta rápidamente pero la cerro de forma lenta. Mire discretamente y confundido el cuerpo de Key el cual no se encontraba con alguna marca o con un olor “extraño”
“Ese era idiota”
Nunca he conocido a algún hombre que se haya resistido al cuerpo de Key, todos terminan follando con él o violándolo cuando el duerme. Cuando Key elige a un hombre no se rinde hasta que le pertenezca.
- Debe ser Heterosexual… ¡Si debe ser eso! – grito fuertemente debido a mi gran descubrimiento y oigo como el cuerpo de Key se mueve perezosamente.
- ¡Minho! No puedes hablar más despacio. Me duele la cabeza – se queja levemente y agarra la almohada con ambas manos para cubrirse
- Maldito bastardo como se te ocurre dejarme solo. No recuerdo nada y lo que alcanzo a divisar en mi mente se nubla de inmediato. –Le quito la rojiza almohada para luego golpearle en la cara con la misma, el me sonríe mientras le golpeo delicadamente y logro hacer que se levante.
- ¿No sé, pero lo que se lo pongo en duda? – “El y sus metáforas”
- ¡Exacto! A sí que vístete que me quiero ir de este lugar. Solo veo como personas se follan entre si y una que otras dormidos en cualquier lugar desnudos – comienzo a ponerle las zapatillas a la vez que él se coloca su blanco suéter. Pude notar como su mirada se poso en la enorme cama y su mirada se perdió, quizás, en un mar de recuerdos. - ¿Qué piensas?
- Alguien durmió con migo… ¿Verdad? – apunto el lado opuesto de la cama donde aquel sujeto se encontraba acostado.
- Si.
- Pero no me duele mi cuerpo… No me toco ¿Verdad? – me miro con los ojos algo entristecidos mientras juntaba sus manos para jugar con sus dedos.
- No, no te toco… - le mire para luego sonreírle, agarre su mano y abrí ligeramente la perilla para irnos.
- ¿Dónde está? – le mire confundido, él nunca pregunta por alguien con el cual durmió. Creo que este día es muy confuso.
- Lo recuerdas.
- No.
- Entonces no vale la pena decirte, de seguro no lo volveremos a ver – le acaricie sus finos cabellos rubios y rozados, y comenzamos a caminar hacia la salida.
(3 Semanas después)
El día que mas odiaba y detestaba sobre todos había llegado, el día donde debo vestirme de una forma monótona por 5 días para luego, después de dos días de descanso, volver a vestirlo.
Era mi primer día de clases y como siempre el congelante frio daba origen a un nuevo escolar, y todas esas estupideces formales que nombra la mierda del director.
Perezosamente comienzo a vestir mi uniforme que este año no será una simple camisa y corbata, si no que ahora estoy obligada a usar terno ya que al entrar en tercero de secundaria debes vestir formalmente.
Bajo rápidamente después de cepillar mis dientes después de varios minutos. No desayuno, simplemente me como una galleta en el camino ya que debo ir a buscar a Key quien odia que llegue unos segundos atrasado.
Llego a su casa la cual tiene un gran tamaño al igual que la mía, toco el timbre y puedo escuchar en el alta voz de la entrada su perezosa voz.
- Key apúrate que llegaremos tarde.
- Siempre llegamos tarde, no te apresures –
Después unos 20 minutos puedo ver como su rostro aun adormilado camina hacia donde me encuentro con el mismo uniforme que yo pero con una forma distinta de lucirlo. Le doy la ultima galleta que me queda y comenzamos a caminar lentamente.
- Ya son las 8:15. La vieja de la secretaria nos regañara…
- Como siempre. – aun no termina de comerse la galleta ya que ni siquiera se encuentra consiente para comer. - ¿Seguirás en la clase de Danza?
- Si, aprender a cantar no lo necesito, además adelgazo mejor bailando. ¿Y tú, seguirás en la clase de Actuación y cinematografía?
- No, ya aprendí lo suficiente, además la vieja de actuación se le nota que quiere tener sexo con migo. Basta con verle cuando me cambio de traje.
- Qué asco – puedo ver como una risa de burla se apodera de sus finos labios al igual que en los míos.
(END POV MINHO)
Al llegar después de varios minutos de charlas y bromas sin sentido alguno, ambos jóvenes llegan a la renombrada escuela Special Art.
Esta escuela se especializa en desarrollar a jóvenes en distintos tipos de arte; Danza, Canto, Instrumentos, Cine, Arquitectura, diseño, entre otros. Es de difícil acceso pero con suficiente dinero y buenas notas se logra ingresar con facilidad.
Minho pertenecía, en segundo año de secundaria, a las clases de Actuación y cinematografía. Key por otro lado se especializa en canto y danza, por lo que el único momento donde pueden verse y dialogar es en los recesos y en las materias como, lenguaje, matemáticas e Historia.
Key fue el primero en cruzar la enorme reja siendo detenido por el guardia, quien le sostiene el brazo para poder impedir su ingreso.
- Lo siento, pero la hora de entrada era aproximadamente hace 30 minutos. No puede ingresar.- la voz del uniformado se oía seria y autoritaria
- Ash que fastidio – Key le miro con enojo mientras quitaba sus rozados mechones de su rostro.
- Suéltalo – a lo lejos se pudo escuchar la gruesa voz de Minho y rápidamente su alto cuerpo se posiciono al lado de Key para quitar la adulta mano del guardia.
- Son órdenes del director. – Key sostuvo sus caderas, suspiro pesadamente y miro levemente a Minho quien sujetaba al guardia del brazo derecho.
- Minho… Encárgate por favor – un paso felino se hiso presente, las delgadas caderas comenzaron a moverse mientras que el cuerpo de Key se alejaba lentamente.
Al Llegar a la sala del 3D (tercero- Danza) todos los ojos se posicionaron en su persona y en su formado trasero. Camino lentamente entre los jóvenes que se encontraban sentado en el frio suelo y posiciono su trasero en las coloridas almohadas del piso.
- Señor Kim ¿Por qué esta en mi clase? – Le pregunto la maestra quien se encontraba vestida con ropa ligera y suelta.
- Mis padres no le pagan para que haga preguntas… si estoy aquí es por algo. – Lo profesora quedo en silencio por unos minutos y comenzó a dirigirse hacia los otros alumnos los cuales ya se encontrabas vestidos y preparados para la primera clase. Key se percato de esto y de inmediato comenzó a sacar su ropa de cambio para quitarse aquel estorboso terno.
Mientras sacaba su polera de su rosada mochila sus ojos se posicionaron en un chico, un alumno nuevo, el cual poseía una delgadez impresionante al igual que unos finos rasgos. Por unos momentos los celos se posaron en el rostro del joven felino y de a poco su sangre hervía al ver cada detalle de aquel nuevo chico.
- ¿Quién es el nuevo? – pregunto Key hacia su compañera Amber con la cual poseía una buena relación.
- Es un nuevo alumno. – dijo Amber acomodándose su gorro de algodón.
- Si me di cuenta, me refiero a como se llama – Pronuncio Key con un tono de “obviedad”
- Su nombre es Lee Taemin, pero es muy callado y serio, cuando saludo apenas movió un musculo de su rostro.
- Además tiene un primo que tiene un cuerpo perfecto, es pequeño, pero su cara de cachorrito es irresistible – pronuncio Sulli quien se encontraba al lado de la chica-chico ( como le decían los desconocidos)
- Cara… ¿de cachorro? – un silencio se poso entre aquellos compañeros, Key se había quedado en silencio por unos tortuosos segundos. Amber se impresiono por el estado de perdición que se posaba en el rostro de Key, quien ni siquiera pestañeaba.
- Key… ¿Estás bien? –
- Debo irme… a cambiar- Key rápidamente corrió hacia los vestidores del colegio los cuales se encontraban vacios.
Un extraño sentimiento se situó en su cabeza al igual que en su corazón. “Cara de Cachorro” , el no recordaba donde lo había dicho antes pero sí que se lo había dicho a alguien. Pequeños recuerdos se posaron en su mente mientras sostenía entre sus manos las delgadas ropas de cambio.
- ¡¿Por qué mierda no puedo recordar su cara?! - Key dio fuertemente su cabeza contra la pared para, tal vez así recordar a la única persona que le había tratado con amabilidad.
Por otro lado Minho Se encontraba sacudiendo su Terno el cual había sido ensuciado por culpa de aquel insistente guardia. El polvo comenzaba a hacerse más espeso cada vez que las sacudidas eran más fuertes.
- Cof cof – Minho escucho como una voz ronca tocia, la cual al parecer se encontraba subiendo las largas escaleras. Minho no le tomo mucha atención a la toz, y después de sacudir unas tres veces más su uniforme se lo coloco suavemente.
Cuando aquel joven de la toz subió por completo las escaleras, se topo con el alto cuerpo de Minho, quien tuvo que agachar un poco la vista para encontrarse con su presencia.
- Tú… - los ojos de Minho se volvieron más grandes a la vez que los del pequeño joven. No cavia duda que aquel sujeto de piel tostada que se encontraba frente a él era aquel muchacho de la fiesta pasada. - … eres el tipo de la fiesta.
- Oh eres el grandote de aquella vez… - ambos jóvenes se quedaron mirando por bastantes minutos, mientras que cada uno trataba de reorganizar el encuentro.
- Tú, que haces aquí… Se supone que no te volvería a encontrar – Minho se sobaba la cabeza al igual que el otro sujeto.
- Me integre este año a esta escuela, iré en la clase 4C (cuarto- canto). No creí que te volvería a ver.
- Wow eres mayor que yo, pero si eres más pequeño – El joven alto apunto al joven tostado produciendo un poco de enojo en el mayor.
- No soy pequeño… Tú eres el grandote.
- Mmm… Me llamo Choi Minho e iré en la clase 3D desde este año. – El menor extendió su mano para que el otro hiciera el mismo gesto.
- Kim Jonghyun mucho gusto –
Ambos estrecharon sus manos en un amigable saludo. Después de un tiempo charlando ambos se fueron a sus respectivas clases, uno de forma perezosa y el otro animadamente. Minho decidió no contarle su hallazgo a Key, de seguro se sentiría mal por no recordar aquel sujeto.
Desde aquel día cuatro destinos cruzaron sus caminos, unos más descuidados que otros. Ninguno se dio cuenta que con las personas con las cuales solos formularon palabra y miradas, crearían esta hermosa pero triste historia.