-ug me duele la cabeza, ¿dónde estoy?-la luz del sol me molesta enormemente en estos momentos.
Espera, ¿la luz del sol?
Se supone que estaba en el laboratorio trabajando en esa derivación de la poción multijugos que estoy creando.
Miro a mi alrededor y me doy cuenta de que estoy en la enfermería.
-¿como rayos llegue yo aquí?-mientras observo a mi alrededor madame Pomfrey se acerca hacia donde estoy.
-oh mi querida niña ya has despertado-su tono calmo no concordaba mucho con su gesto preocupado, mientras por alguna razón que me es desconocida acaricia mi cabello como lo haría alguien con una chiquilla intranquila.
-¿qué es lo que ha pasado madame Pomfrey?- mm mi voz suena extraña, un tanto mas aguda y el dolor de cabeza se centra como un dolor agudo tras los ojos acompañado por una sensación de nauseas-¿y por qué me habla como si fuera una chica?-
Madame me mira extrañada, analiza mi expresión por unos segundos y sacando su varita invoca un espejo frente de mí.
Mis ojos se abren como platos al admirar aquel reflejo como si estuviera dandole la cara a un asesino fugado de Azkaban.
-¿pero qué diablos?-a pesar del dolor y el mareo repentino estoy lo suficientemente lucido para darme cuenta del porque madame me trato como una chiquilla cuando recién me vio.
Ese ente frente al espejo no soy yo, es una chiquilla de rasgos finos y cabello negro largo hasta los hombros cayendo como una cascada por parte de mi espalda, con expresión de cordero en el matadero.
-tranquila querida-madame Pomfrey me distrae del estudio de la persona en el espejo-tengo que revisar tu estado general y después hablaremos sobre esto-
Madame fue rápida y en menos de cinco minutos término.
-bien tu muñeca ya está en perfecto estado y no hay nada malo con tu salud física-
-bien, eso es bueno saberlo-la miro fijamente y espero que diga algo más, pero solo me examina fijamente sin decir nada.
Por largos minutos en los que nos sostenemos la mirada concentrándonos uno en la otra y viceversa hasta que ella suelta un suspiro desde lo más profundo del pecho.
-bien querida o debería decir querido-madame es más suspicaz de lo que muchos otros serian-dime, ¿quién eres tú?-
Sin rodeos le respondo algo que de seguro ella ya debe de saber o contemplar mínimamente.
-yo soy Severus Snape-su rostro imperturbable ante mi afirmación me confirma que ella ya lo tenía en mente-y por alguna extraña razón en estos momentos luzco como una chiquilla quinceañera-una suspicaz ceja alzada muy al estilo de cualquier Slytherin que se precie de serlo y una seca sonrisilla de lado expresan todo el sarcasmo que estoy seguro carga en estos momentos-y por desconocer esa extraña razón le pido que me explique cómo es que termine yo aquí-mm a pesar de tener este tono de niña aun puedo sonar frio y calmo.
-bueno querida-una mirada matadora marca Severus Snape dirigida hacia ella le hizo rectificar su error-querido, ayer en la noche los jóvenes Lucius y Régulus le trajeron inconsciente después de una terrible explosionen el laboratorio de pociones-mirada de regaño para mí-cuando le encontraron ya era usted una chica-
Una ira intensa me invade al darme cuenta que esta imagen, esta apariencia femenina no es más que mi culpa por haber fallado tan estrepitosamente en mi poción.
De solo recordar el porqué de tan garrafal fallo me enardece las venas de ira.
Maldito y desgraciado Sirius Black tu solo nombre arruina mi vida.
-Severus comprendes que tienes que decirme en que poción estabas trabajando y que hiciste para que terminara mal-maldita vieja tiene que seguir golpeando mi orgullo-mañana se acaba oficialmente el año y tenemos que encontrar una forma de devolverte a la normalidad-
Mierda es cierto, mañana acaba el año. No puedo volver a casa con eso bastardo luciendo así. Iba asesinar a ese maldito, le iba hacer un favor a Regulus y a toda la familia Black, sabia que Lucius le ayudaria a esconder el cuerpo cuando acabe con ese heredero de la familia Black.
Con ira y con culpa procedo a explicarle sobre la nueva poción en la que estaba trabajando y le menciono cual pudo haber sido la posible causa de que mis esfuerzos terminasen en tan terribles consecuencias.
-bien por lo que me explicaste el poder hacer un antídoto para que logres regresar a ser un chico o través será realmente difícil-lo sé bien vieja bruja no me lo restriegue en la cara-la poción multijugos originalmente pierde sus efectos después de un periodo de tiempo; sin embargo tú estabas creando una nueva poción a base de la multijugos y el agregado de veneno de cobra real puede hacer que los efectos duren indescifrablemente-
Algo en lo profundo de mi mente que casualmente suena como el idiota de Sirius Black me dice con vos cantarina:
Estas bien jodido Severus.
~J-O-D-I-D-O~