Estaba desesperado, su padre ya había planificado sus eventos y negocios con la familia Parrish, así se apellidaba la chica con la que su progenitor lo había vendido, si vendido porque ni siquiera le preguntó o comentó nada, era una obligación y el no quería casarse.
Desde qué la guerra acabo, daba gracias a Merlin por eso, su vida se había vuelto un infierno, los juicios en contra de su familia los habían dejado solos y al borde del abismo sin posibilidades de creer poder salvarse de esa y es que a pesar de haber peleado del lado de la luz cuando la batalla por Hogwarts empezó, no ayudaba llevar la marca tenebrosa plasmada en su brazo...
La odiaba, odiaba esa marca con todo su ser, pero ya había intentado de todo para deshacerse de ella, se enorgullecía del porque la había tomado, su familia estaba en riesgo y el por su familia daría la vida, a pesar de que Liam, había decidido ser la única de los dos en llevarla, pero sabía que esa carga su hermana no podría resistirla, lo que los llevo a luchar de lado de la luz sin importarles ya nada fue ver morir a su madre salvando la vida del profesor Lupin, aunque su prima Ninphadora no había corrido con la misma suerte, al menos su sobrino Teddy no se había quedado totalmente solo....
Los habían encerrado desde el término de la guerra y absolutamente nadie los había defendido a excepción de Luna y Neville, pero nadie los escuchó, en Azkaban muchos quisieron pasarse de listos con el, tener una cara linda en un lugar así era muy mala idea, pero siempre fue Liam quien lo defendió e inclusive llegaba hasta hacer gritar a los tipos ya fuera después de romperles un par de huesos o con un hechizo mental, Liam era buena en magia sin varita, eso lo reconocía y no sabía como es que ella era tan buena en eso.
Al fin habían pasado por los juicios y para su sorpresa el mismo Harry Potter había declarado por el y su familia, al menos los que quedaban, los había defendido y estaban bajo su protección, no entendía porque eso, hasta que vio la mirada que le dirigía a su hermana Liam, a pesar de esta no darse cuenta o no importándole en lo absoluto, eso le dolió, porque en el tiempo que se vio envuelto en esa guerra tubo mucho que pensar y se dio cuenta de que amaba al elegido.
Liam no era fea, ni nada por el estilo, todo lo contrario era muy bella, muy hermosa y parecía muñeca de porcelana, el era guapo, pero no podía competir contra su hermana cuando esta podía darle algo a Harry que el no, una familia, hijos. El era hombre a pesar de poseer un cuerpo demasiado afeminado según su padre, pero que culpa tenía el, aún así no se sentía digno de Potter, el era un cobarde y estaba demasiado roto.
Ahora un año después, su padre le salía con esa trastada, no definitivamente debía de hacer algo para que esa boda no se llevara a cabo. El estaba seguro de su orientación sexual, y no creía poder cumplirle a la chica, a menos claro que fuera morena, ojos verdes y que se llamara Harry Potter, cosa que a pesar del tiempo, a pesar de prometerse dejar de pensar en éste, nunca pudo, lo tenía marcado con fuego en su corazón.
Liam: Podrías dejar de dar tantas vueltas - dijo con fastidio - Me tienes mareada, además vas abrir un agujero en el suelo - aseguró. (https://www.thefamouspeople.com/profiles/images/amanda-seyfried-1.jpg).
Draco: No puedo - dijo con tono lastimero - No me quiero casar por conveniencia de mi padre, esta mal pedir ser dueño de mi vida y hacer por una vez lo que yo quiera - mencionó con los ojos aguados de lágrimas acumuladas.
Liam: Tú puedes elegir dragón - aseguró con ternura al ver a su hermano con esa actitud - Yo lo hice cuando tenía 13 y mírame ahora, soy una gran modista y la diseñadora más reconocida tanto en el mundo mágico como muggle, hace mucho que no dependo del dinero de tío Luc - alegó para suspirar y caminar hasta posar se frente la Rubio platino - Dile a tío Luc lo que piensas y sientes, coge los toros por el cuerno, saca ese valor Gryffindor que tienes en el fondo, si no quieres casarte, no lo hagas pero dile a tío Luc el porque y si el decide dejarte en la calle pues entonces vente a vivir conmigo, tengo el su fuente dinero para reiniciar un nuevo negocio, porque seamos sinceros tío Luc hará que todos mis socios me cierren las puertas, por suerte tengo mis ahorros, ¿que te parece? - ánimo e informó haciendo que el la abrazara en gratitud.
A pesar de no ser su hermana de sangre, puesto que él la había encontrado abandonada en un callejón a los 10 años, esta sabía que era espacial y practicaba su magia sin varita, por esa razón era tan buena en ello, pero a pesar de la renuencia de su padre, su madre si la aceptó y adopto como sobrina y ambos se quisieron como hermanos desde entonces, a pesar de los malos tratos y malas pasadas de su padre para con esta, al final fue ella quien lo término callando al presentarse ante todos con la marca bien puesta en su brazo, lloró porque el no era tan osado pero tampoco quería que su hermana se hiciera cargo de todo, así que el mismo fue a hacer lo mismo, claro que la cachetada de Liam le había dolido como nunca a parte de que no se lo espero y por ello había terminado en el piso ante toda la familia que veía todo en shock, su padre la había golpeado de igual forma aunque ella ya estuviera acostumbrada a ello, el mismo la defendió y le pidió un porque de su actuar y por primera vez en su vida, lloró frente a sus padres.
"Liam: No lo entiendes dragón - dijo entre sollozos - Lo hice porque no quería que te vieras involucrado en esto, por que quería protegerte de todo esto, tu y tía Cissa son lo más importante para mi al igual que tío Luc y Severus, no soportaría que algo les pasara, ya perdí a una familia antes, no quiero que eso vuelva a suceder - confesó aferrada a el en un intento de controlar su llanto."
Esa fue la primera vez que había visto a su padre con los ojos aguados, aún así no dijo nada, y luego la siguió cuando su madre había muerto, tras salvar a Lupin tras estos ir a su casa a rescatar a Harry Potter, eso había detonado el inicio de la batalla final, el momento decisivo.
Amaba a su hermana, y sabía que ella a el igual, sabía que ella siempre estaría para el y sabía que el lo estaría para ella, pero a pesar de que la guerra había terminado, el mundo mágico los veía como escorias pues uñeron los únicos que se salvaron del beso del dementor y una eterna estadía en Azkaban, sus amigos a pesar de no haber participado, estos se encontraban muy afectados y unos se habían ido al extranjero como Blaise y Theo, otros estaban en la sección de psiquiatría de forma permanente en san Mungo como Pansy tras las torturas a las que el señor tenebroso los sometía pero ella y su hermana las llevaban peor pues Liam lo hizo por protegerlo a él pero Pansy fue vendida por su padre como la ramera personal del lord, Liam pasaba por lo mismo y el se sentía un inútil pero se dio cuenta de que Liam no cambiaba su forma de ser, al menos no con la familia, lo único que cambio fue su odio el cual se fue haciendo mucho más grande y todo dirigido hacia el lord, Daphne y Astoria habían muerto tras salvarle la vida a el a Liam, pues los abusos del lord habían rendido sus frutos, Liam decía que el bebé era inocente y no tenía la culpa de nada, aún así a pesar de la muerte de ambas un Avada la golpeó pero ella no murió pero si su hijo, Pansy estaba igual de embarazada pero con las torturas a las que el lord la sometía porque con cada abuso de este Pansy perdía más la razón, Cradd y Goyle habían ganado el mismo destino que sus padres.
Draco: Lo haré - dije decidido - Es hora de que sea yo quien trace mi propio camino - sentencie y salí de la habitación en busca de mi padre.
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Liam: ¿Estas bien? ¿Qué te paso? - la oí preguntar, se oía realmente preocupada y no era para menos, tenía el labio inferior partido y sangrante y el la mejilla derecha partida y algo amoratada.
Draco: Más o menos lo que teníamos presupuestado que pasaría - respondí con cierta tristeza y pesar mientras tomaba mi baúl y comenzaba a empacar mis cosas al puro estilo muggle.
Liam: Y para eso tenía que golpearte tan feo - reprochó con el entrecejo fruncido, sabía que estaba enojada.
Lo siguiente que escuché fue el azote de la puerta de mi aún habitación y sabía lo que sucedería, así que mejor me quedé en mi lugar y decidí terminar de empacar con magia.
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Liam: Se puede saber ¡¡¿que demonios pasó por tu oxigenada cabeza al atreverte a levantarle la mano a Draco?!! - bramé completamente furiosa luego de abrir de un azote la puerta del despacho de tío Luc.
Lucius: Y tú ¿quien demonios te crees para hablarme así en mi casa? - siseó igual de enojado aunque por sus expresiones parecía más como si se hubiera chupado una tapa de limón sin sal y sin el trago.
Liam: Si!! No niego que es tu casa, pero te recuerdo que Draco ya es lo suficientemente mayorcito para saber lo que quiere y lo que no - reproche - Ya lo hiciste pelear en una guerra a pesar de que te rogué de que no lo metieras en esto - resalté, porque fue por Lucius que Voldemort término haciéndose con mi cuerpo, a pesar de que Draco creía otra cosa - A diferencia de ti, Draco si tuvo los suficientes pantalones para negarse a cumplir los caprichos de su padre, no crees que ya es suficiente, déjalo ser, el esta enamorado y va a luchar por ello, porque tú no haces lo mismo, tía Cissa ya no está, se que ella te amaba pero seamos sinceros oxigenado, tu nunca sentiste más que gratitud y cariño hacia ella, no hagas que el sacrificio de tía Cissa sea en vano, ¿que creíste? ¿Qué no lo había notado? - rezongué, porque si lo había notado, tía Cissa no se sacrificaría por nadie que no fuera su familia y voy a cumplir mi promesa.
Lucius: Cállate o!!! - rugió alzando mano.
Liam: ¿O qué? Me vas a pegar - brame alzándome cuán alta era - Te recuerdo Lucius que la única razón por la que no te regreso cada insulto y cada golpe es por respeto a tía Cissa y por la promesa que hice - sisee completamente furiosa - Crees que eres el único capaz de golpear aquí, déjame decirte que a diferencia de ti, yo si cuide y Protegí a Draco con mi vida, ¿tu que hiciste? - cuestioné sin apartar mi mirada de el - El engendrar lo no tiene nada que ver con todo lo que te estoy reclamando - reproche.
Lucius: Si sale por esa puerta, dejará de ser mi hijo y de ser un Malfoy - siseo completamente iracundo.
Draco: Perfecto, para eso tengo el apellido de mi madre - dijo con los ojos aguados pero viéndolo orgulloso y desafiante - Ademas no es como que me sienta orgulloso de llevar el apellido Malfoy - alegó dando la vuelta con las manos metidas en las bolsas delanteras de su pantalón y dirigiéndose hacia la puerta principal conmigo detrás de él - Que tenga buena vida señor Malfoy - se despidió sin voltear a verlo y abriendo la puerta, salí detrás de el y cerré la puerta, ese sería un nuevo comienzo para ambos.