Familia Hyuga-Namikaze
¿Cuánto tiempo había pasado? Ya eran ocho años desde que Naruto paso por los momentos más difíciles de su vida, sin tenerte ninguna noticia del azabache, quizá debía darlo por muerto, sin embargo a pesar de ello ahora era feliz, podría decir que había superado por completo esa etapa, ahora su pequeño pronto cumpliría ocho años, y tan solo faltaban unos días.
Sonrió mientras terminaba de preparar el desayuno y subía a despertar a su hijo.
-Despierta – murmuró mientras lo movía suavemente – anda vamos a desayunar para que te despidas de tu papá y te prepares para que te lleve a la escuela.
-cinco minutos más – el pequeño se cubrió hasta la cabeza con sus sábanas.
- cinco minutos más y no podrás despedirte de tu padre, así que arriba – le quitó las sábanas y lo cargo para ir al comedor con él.
- Ya despertaste – el castaño sonrió y tomó al niño de los brazos de Naruto – hijo, si sigues tardando demasiado en levantarte tendré que quitarte tus juegos… así que hoy duérmete temprano.
- si papá – sonrió y le besó la mejilla.
Cómo todos los días, desayunaron con calma platicando algunas cosas, y Neji fue el primero en levantarse.
-bueno, me voy… me llamaron para que vaya más temprano – con cuidado beso la frente de su hijo y la del rubio antes de salir.
- ve con cuidado.
- Adiós papá.
Con calma terminó de desayunar, después ayudó a su hijo a vestirse para luego salir de la mano con él para llevarlo a la escuela.
-Recuerda…
- ya se mamá, no hablar con extraños y esperar a que tía Hinata venga por mí.
- exacto - sonrió acomodándole el sombrero del uniforme - por cierto, piensa cuál quieres que sea la temática de tu fiesta de cumpleaños para que le digamos a tu padre y compremos las cosas
- Si mamá… ¡oh ya se! Quiero que sea sobre los vengadores…
- Está bien, cuando vuelva tu padre hablaré con él - sonrió y beso la frente del pequeño para que entrara a la escuela, y el por su parte fue al hospital, donde ahora trabajaba.
Neji leí documentos, era extraño que en tantos años una infinidad de empresas y negocios fueran todos acusados de incumplimiento de contrato y otros delitos, lo más extraño es que al parecer todos estaban relacionados con un banco en especial… el de los Haruno, además al parecer la empresa de su tío se vería en problemas con ellos también, pues su prima menor había firmado un contrato de un préstamo y ahora comenzaban a cobrar, aunque Hanabi no era tonta, ella había tomado foto del contrato y no era el mismo con el que los chantajeaban, además podría jurar que habían falsificado su firma, eso era algo que Neji no podía ignorar, por lo que lo resolvería a toda costa.
-Tenten – llamo a su asistente – pide a Lee que investigue un poco sobre esto, algo no me da buena espina.
- Si, él ya investigó… mira – le dio más documentos – al parecer por lo que leí, esto comenzó alrededor de ocho años, cuando la hija comenzó a hacerse cargo del banco.
- ya veo… que Lee investigue sobre ello – suspiro viendo a la chica tomando el teléfono y él comenzaba a revisar los papeles.
Lo mismo que todos, algo no cuadraba… entonces de repente entre los nombres de las empresas resaltó un apellido que él conocía bien… Uchiha.
-Tenten… tráeme los antecedentes del señor Fugaku Uchiha.
- a la orden - la chica sonrió y salió a solicitar tal información.
Tenía un extraño presentimiento, estaba seguro que si investigaba más podría encontrar a ese maldito que había lastimado a su esposo.
-¡Neji! - un chico de cejas pobladas entró al lugar - estaba revisando la información de Sakura Haruno y al parecer vive en china…
- ¿Cómo lo buscaste tan rápido? - lo miro sorprendido por la eficacia.
- ah es solo que es bastante linda, así que la seguí en sus redes sociales - sonrió mostrándole la computadora.
- déjame ver – tomo el aparato y comenzó a revisar, entonces vio en la información casada con Sasuke Uchiha y la fecha de tal boda… era tan solo un día antes de la boda de Sasuke y Naruto.
- Neji, volví - la castaña entró con una carpeta - aquí está la información, lo trajeron por lo mismo que a todos, sin embargo esa misma noche Haruno retiró los cargos.
Ahora todo estaba claro para él, al revisar más sobre los Uchiha y Haruno descubrió que todo lo que les pertenecía a la familia de Sasuke ahora estaba a nombre de la esposa de este, prácticamente ellos estaban en la ruina.
Familia Uchiha-Haruno
Otro encantador día para Sasuke, miró al techo de su habitación, aunque estaba casado con Sakura él tenía su propia habitación, y sus padres… ellos vivían encerrados en una pequeña casa en el patio trasero de la casa principal. Suspiró con pesadez, ya faltaba poco para poder cubrir la deuda y alejarse de una vez por todas de esa bruja.
Con algo de fastidio se levantó para cambiarse de ropa y salir de la habitación, al llegar al comedor vio a su tan amada esposa hablando por teléfono, y parecía molesta.
-Mira no me interesa quien sea… solo resuelve lo – daba leves golpes a la mesa con los dedos.
- ¡Mamá! - una niña de siete años con lentes y cabello azabache se acercó corriendo a la mujer para tratar de abrazarla, sin embargo, está la empujo y se levantó para irse a hablar a otra parte.
- Si es necesario… desaparece lo… para que aprenda a no meterse en lo que no le importa
De nuevo suspiro y se acercó a levantar a su hija y darle los lentes que se le habían caído
-¿Te lastimaste?
La niña solo negó con la cabeza baja y volvió a su habitación.
Sasuke solo lo ignoró y se sentó a desayunar antes de que la mujer volviera a tratar de seducirlo, aún se preguntaba el motivo por el que Sakura había insistido en tener un hijo si iba a ser tan cruel como lo era con Sarada… él solo había aceptado porque con ello su deuda redujeron un veinte por cierto, así que simplemente tomó un frasco pensó en su amado rubio y le entregó su semen a la mujer para que lo usará y tuvieran un hijo.
Él se levantó y volvió a encerrarse en su habitación, Sakura por su parte al colgar fue a la habitación de su hija
-¿Crees que esto es un restaurante? Ve a desayunar o no comes hoy.
- Mamá… tú ¿Me quieres? – preguntó secándose las lágrimas.
-oh pequeña, claro que te quiero… simplemente hubiera preferido que fueras un niño y además con la cara de tu padre… pero saliste así… mira no me quites el tiempo y ve a desayunar para que te largues a la escuela a ver si aprendes a ser más útil.
- por eso papá no te quiere - murmuró bajo.
- ¿Que dijiste estúpida? – frunció el ceño furiosa por lo que la menor había dicho y sin dudarlo la tomó del cabello para sacarla arrastras de la habitación – maldita malcriada…
-¡No mamá! ¡Perdón! – estaba despertada tratando de soltarse conocía a su madre enojada y no era algo bonito.
Sakura salió hasta el jardín y al llegar seca a un árbol tomó la soga que estaba atada a una de las ramas y ató a su hija de las muñecas para luego tomar una vara de meta y comenzar a pegarle en la espalda.
-¿aprendiste la lección? - después de casi una hora al fin se detuvo y tomó con fuerza a su hija de las mejillas clavándole un poco las uñas - así que guarda tus comentarios mocosa - después de decir eso de dio una cachetada y le quitó los lentes para después pisarlos y dejarla ahí atada.
Era obvio que ese día no iría a la escuela, y el siguiente tampoco.
Mikoto salió de su casa y corrió hasta donde estaba su nieta para desatar la y llevarla con ella para curarle las heridas, suspiro con tristeza, no podía creer que Sakura fuera tan cruel con su propia hija. Definitivamente cuando todo acabará se llevarían a la niña con ellos.