Superman es Alfa de un nivel que nadie imaginaria, uno superior al resto, pero con un corazón noble, mientras que Alexander Luthor es omega y no cualquier omega, es como todos llamarían un ser calculador, inteligente que ha llevado a cabo todas sus empresas, no se deja amedrentar por su casta, al contrario es el enemigo de nuestro héroe y de todo aquel que lo quiera rebajar a nada.
— Y... bien... ¿Por qué me estás diciendo esto Nightwing? Si ya estoy enterado de eso.
Tim deja su termo con imagen de Spiderman de un litro de café a un lado de la computadora para ponerse en pie y dirigirse al mayor, el ave azul mira a su tercer hermano, por donde lo vea, no puede creer que Tim sea un alfa.
— Bueno... pequeña ave... no quiero que sientas que te subestimamos, sabemos de lo que eres capaz de hacer, pero no debes olvidar que tu naturaleza te dominara cuando surja un omega adecuado para ti.
Ambos estaban en el cuartel de los jóvenes justicieros, estaban solos hablando sobre un tema que todos sabían al pie da la letra, varios de sus compañeros son Omegas, fuertes, sus celos son controlados por los supresores para no tener un altercado con enemigos. El resto de los jóvenes justicieros los cuales eran alfas, trataban de llevar uno que otro supresor por si uno de los enemigos fuera un alfa fuerte que doblegara a los jóvenes omegas, era un riesgo a morir, pero ante las leyes de igualdad, ante los omegas que tienen el control de sus vidas, se la jugaban a diario para no caer en las trampas donde secuestraban a un omega de nivel superior. Los laboratorios Wayne, creaban supresores para evitar dichos problemas, porque todos estaban enterados de la caza que se estaba dando para atrapar a los meta humanos o extraterrestres para preñarlos y crear una mejor especie.
Y a todo esto Grayson aun no se creía que su tierno y frágil hermano de justicia fuera un alfa, por donde mires a Drake notaras que parece más un omega y es ahí donde el mayor se preocupa por los resultados médicos que descubrieron de Red Robín. El cual ya molesto arma todo lo que le dice el ave azul.
— Grayson, de todos los que me conocen nunca imagine que tú fueras a dudar de mi casta.
Nightwing siente esa mirada seria de su pequeño petirrojo, una mirada que ni Bruce le da, pero que Drake le otorga con desdén y de todos, su tercer hermano es quien lo admira más y es a quien sin desearlo esta dudando de la casta.
— Pequeña ave... ¿Entonces estas al tanto de tu casta?
Tim suspira por lo despistado y confianzudo que puede ser su hermano mayor con él.
— Estoy al tanto de mi casta, Bruce lo sabe, mis padres que eran betas estaban enterados, es solo que no me da la gana vanagloriarme de ella como si fuera algo importante.
Vaya que le da risa la cara que ha puesto el mayor de los hijos Wayne, una cara de que no puede creer que Drake no le dé importancia a su casta y que Bruce le oculto dicha noticia.
— ¿Bruce lo sabe?
Tim indica con su cabeza que sí, ahora el rostro del gitano es de indignación.
— Jasón ¿Lo sabe?
Tim hace un rostro de desagrado, al recordar la cara de incredulidad de su hermano preferido de Red Hood.
— Digamos que por el rostro que vi de Jay, fue algo así: -_- Neee... no es cierto.
Dick: ...
— ¿Todos están enterados? Pequeña ave, ¿Por qué no me tuviste la confianza de decírmelo?
Tim suspira cansado por el tema.
— Nightwing... ser un Alfa no cambia en nada, sigo siendo tu Timbo, un Robín, oh acaso ¿Me veo diferente ahora que lo sabes?
Con suma tranquilidad toma de la mano al mayor, se quita el antifaz, para observarlo a los ojos. Dick es un omega, lo observa con atención a los ojos, esos ojos ya no son los de ese niño que llego con Batman revelándole que estaba enterado de las identidades de los justicieros de Gotham, no, Drake ya es mayor.
— No, no cambia nada... sigues siendo nuestro Timbo...
El mayor sonríe relajado, olvidando lo que en un inicio hablaría con su pequeño hermano, lo estrecha a su cuerpo para demostrarle que no cambia en nada la unión de hermanos que tienen.
— Confía más en mí, el hecho de que sea un omega no quiere decir que no pueda ayudarte... sabes que no soy débil.
Tim se quita del abrazo de su hermano, lo sujeta de los hombros.
— Nunca pensare que eres débil, de nosotros tres eres el que calma el mal humor de Batman, y fue a ti a quien el Joker no pudo quebrar.
Grayson sonríe lo abraza nuevamente, restriega su rostro en el rostro del menor quien trata de quitárselo.
— Pequeña ave, no sabes cuan tierno eres, solo por tus halagos modelare mi primer traje de Robín tal como me lo has pedido con anterioridad.
Tim se sonroja, solo se lo decía para molestarlo.
— No es necesario... si lo haces Jasón se molestara conmigo...
— Así es, prefiero que lo modeles para mí.
Jasón estaba sin su casco, sentía cierto recelo de Tim, no lo odia, al contrario su pequeño hermano es quien confío en él cuando ni Bruce le creía, le debe mucho, Tim a estado con él en las malas y siendo sinceros, en cierta forma Jasón sospechaba de que el menor es un alfa y vaya que sus sospechas no fueron en vano.
— Jay...
El menor corre hacia él para darle la bienvenida junto con Nightwing, Red Hood lo ve como su pequeño hermano, en el inicio creyó que el joven Robín era un omega por su aspecto, pero bien dicen que las apariencias engañan, pues el tercer petirrojo resulto ser un chico muy astuto y calculador, un buen estratega, tal vez no tenga la fuerza para derrotar a alguien físicamente, pero si la inteligencia y las habilidades para derrumbar un imperio tal y como lo hicieron el grupo de amigos de Drake, que gracias a sus planes lograron hacer temblar al medio oriente.
— Hola Timbo...
Por el bienestar de su equipo no quiere tener de enemigo a ese pequeño nerd que bien le configuro todo los medios de comunicación para que nadie encontrara al trío de mercenarios y aunque Roy es experto en maquinas, armas y medios masivos de internet, nunca olvidan que Drake un día los rastreo solo para solicitarles un suvenir de Egipto, lugar donde se encontraban realizando una misión.
— Nightwing, necesitamos irnos... el equipo nos espera...
Ambos se despiden de Drake, dejándolo a cargo de vigilar a sus compañeros. Antes de marcharse, Nightwing se detiene en seco tratando de recordar lo que le iba a decir al menor. Voltea y observa como este toma el termo de Spiderman para tomar otro sorbo de café como si su vida se le fuera si no lo hiciera.
— Pequeña ave no tomes tanto café, necesitas dormir unas cuantas horas o terminaras igual de mal humorado como Bruce.
Grayson olvida nuevamente la conversación que tendría con el menor, se marcha al escuchar que Jasón lo llama.
Habían pasado unas cuantas horas, sus jóvenes compañeros regresan sanos y salvos de sus misiones reportándose con Drake y Canario Negro que llego después para apoyarlo.
— Bienvenidos y gracias por la ayuda, Batman no a enviado ninguna misión, si no tienen otra cosa que hacer, cada uno puede retirarse a su casa a descansar. Solo no se pierdan, recuerden que no hemos dado con el grupo delictivo que se encarga de secuestrar a omegas.
Robín había dado las indicaciones, Canario Negro estaba de acuerdo.
— Vayan todos con cuidado, estén alerta muchachos...
Todos los jóvenes se despiden para regresar a sus hogares, Conner se aproxima a Tim.
— Hola Robín ¿Qué tal tu día?
El petirrojo abraza su termo, lo abre para tomar otro sorbo de café, lo alza hacia su amigo.
— Por el momento bien, no se ha acabado el café que has preparado... Así que aun puedes seguir vivo por otro día.
Superboy sonríe ante la actitud de Robín, aun no le perdona que por accidente rompiera el CD de una de sus cantantes preferida, que es ni más ni menos Enya, lo peor, un disco de colección de esos que ya no encuentras y que estaba firmado por la cantante.
—... En serio Tim... fue sin querer...
Drake deja el termo en un lugar seguro se aproxima a su compañero.
— Conner te aprecio mucho, pero eres muy torpe para cuidar las cosas que uno te encarga, por esa razón te mencione claramente que no tocaras nada de mi habitación.
Conner se exaspera también, lo aprecia de una forma distinta, pero admite que ante toda perfección de su compañero tiene un gran defecto y es el desorden que tiene en su habitación.
— Sabes que entre para llevarte a tu cama...
Tim se sonroja por la connotación de esas palabras, Conner también se sonroja, no era con esa intención, así que rápidamente le dice:
— Te aclaro que te quedaste dormido justamente en esta sala, así que te lleve para que descansaras adecuadamente en tu habitación, así que pise sin querer todo lo que tienes tirado.
Robín toma nuevamente el termo.
— Y por esa razón vas a prepararme el café por el resto de tus días al igual el pie de manzana que comen en la granja.
Conner ya estaba acostumbrado a preparar algunas comidas que la Señora Martha Kent le enseño, suspira ante la realidad de que estará en deuda con ese chico que no olvida nada.
— Por mí no hay problema...
Tim nota el cansancio en esas palabras, el sudor que recorre el rostro de su amigo, algo inusual en Superboy.
— Oye... ¿Te sientes bien?
Se aproxima a su compañero, se quita uno de los guantes para tocar la frente de Kent, se extraña ante la piel caliente.
— Estoy bien... es solo que me expuse demasiado en esta última batalla...
El petirrojo niega preocupado.
— Ve a darte una ducha, nunca enfermas, no importa que tengas genes de Luthor, no te enfermas... mientras observare las grabaciones de la pelea que tuvieron, por si algo extraño sucedió.
Conner lo toma de la mano desnuda, por un leve instante siente su cuerpo arder más de lo que ya esta, el contacto con esa suave caricia lo hace desear más, sacude su cabeza, lo quiere detener, sabe que se quedara tarde solo para analizar con minuciosidad toda la pelea que tuvieron con el enemigo. Quiere que también descanse, ha estado dedicándole mucho tiempo en buscar a los tratantes de omegas, que solo duerme de una a dos horas sin contar que después de eso se marcha al instituto para tomar las clases pendientes que le darán entrada a una de las mejores Universidades de Estados Unidos.
— Tim...
Drake también siente esa fiebre subir, con un tono autoritario para no mostrar su preocupación, le ordena.
— Obedece...
Conner lo suelta, da un paso atrás, lo que escucho fue la voz de mando, una que solo usan los Alfas con sus omegas, también comprende que quizá sea porque el menor ha estado muy irritado por la falta de sueño y por sus estudios, en silencio solo asiente y se retira. El tercer Robín lamenta utilizar ese tono, pero le extraña que Conner obedeciera, por lo regular es muy testarudo y se queda a su lado hasta lograr que se despegue de sus deberes y vaya a dormir unas cuantas horas.
Ambos habían creado un vínculo más fuerte que una amistad, más fuerte que una casta, pues Drake al parecer no le atraía ningún Omega, no existe omega que lo arrebate del tiempo que le otorga a su Superboy, todo el equipo de Monte Justicia están al tanto de esa relación que tienen, no es un secreto que su relación es más lenta que la de un caracol, pues Tim y Conner parecen dos niños que son buenos amigos, su amor es solo de compañerismo, varios piensan que es porque Superboy aparenta ser un joven cuando en realidad en años tiene como cinco y aunque su apariencia es una, su casta aun no se ha mostrado como tal y todos apuestan que será un Alfa por su complexión.
Conner entra a la habitación que le corresponde, donde años atrás fue su hogar, ahora que vive en Kansas, le resulta algo fría, sin el calor de la familia Kent. Tim tiene razón, tiene fiebre y una muy alta, rápidamente y con torpeza corre al baño quitándose la ropa para ducharse con agua fría.
Habían pasado unos quince minutos observando la pelea donde participo Superboy, es cierto que se había expuesto mas a un gas que el enemigo intento rociar al resto del equipo pero que Conner con rapidez se llevo lejos sin importar que lo estaba respirando. Drake analiza los residuos del químico, aquel que se impregno en su piel al tocar al joven de los Kent, había notado un aroma, esa fiebre no era normal en alguien con sangre Kryptoniana. Pasan tan solo cinco minutos cuando la computadora le da los resultados, un acelerador de celo para los omegas, feromonas con drogas mezcladas con afrodisíacos, todo para que el celo se adelante en aquellos que se cuidan con supresores.
— Maldición...
Murmura el tercer petirrojo, llama a todos los que estuvieron en esa pelea, al igual le informa a Canario Negro para que se aseguren que los compañeros omegas que estuvieron en esa misión lleguen sanos y salvos a sus hogares. Bruscamente se gira al recordar a su amigo.
— ¡¡Conner!!
Corre a la habitación de Kent, sabe que aun es muy joven para que muestre su casta, en dado caso esa droga solo afecta a omegas, pero por alguna razón se siente inquieto, hace unos momentos cuando lo toco y sintió su fiebre, le vino un leve olor, un leve olor a manzana, pero no puede creerlo, su amigo, sus genes, todo indica que es como Superman un alfa.
— Conner...
Llama antes de abrir la puerta, nadie contesta, solo escucha la regadera, vuelve a llamarlo y nada.
— Conner...
Entra a la habitación, se dirige hacia donde escucha el agua, lo llama nuevamente, no contestan, el aroma a manzana y canela con mezcla a madera y un verde bosque se hace más fuerte, toda una gama de aromas que no terminan por definirse, al aproximarse a la puerta del baño toca con su palma, esta fría, no puede estar fría, a su compañero le gusta ducharse con agua caliente, es ahí cuando comienza a preocuparse, abre la puerta de golpe, por un leve lapso retrocede al olfatear el fuerte aroma dulzón a manzana con esa mezcla de madera.
— Con... Conner...
Su compañero está en la tina con la regadera abierta en el agua fría, acurrucado en forma de feto, temblando, mientras que el agua se iba por el sumidero. Rápidamente Tim cierra la llave de la ducha, toma una de las toallas para cubrirlo.
— ¿Qué estás haciendo?
Superboy lo escucha, siente como lo cubren con la toalla, torpemente habla.
— Siento... siento mi cuerpo... hervir... no se quita... aun cuando ya me toque... cielos...
Tim trata de secarlo con la toalla, era cierto que el agua fría no le quita el calor que invade su cuerpo, a pesar de que el miembro de su compañero esta duro, lo que le sorprende es que de entre los glúteos de Conner escurre un liquido viscoso, aquel que los omegas crean cuando están en celo preparándose para su alfa.
— Kon... ayúdame a llevarte a la cama...
Lo cubre muy bien con la toalla, dócilmente Kent asiente, sonríe y obedece, se apoya en su compañero para caminar, pero sus piernas están torpes, deja caer su peso en Drake que hace lo humanamente posible para llevarlo hasta la cama, lo ayuda a subirse en ella y lo envuelve bien en las cobijas para que deje de temblar, pero Conner también olfatea el aroma de Tim, lo olfatea como no lo había hecho antes, pues su relación iba más allá que lo de una casta, no se sorprende al descubrir que su compañero es un Alfa.
— Alfa...
Murmura con sensualidad cada letra de esa palabra, lo llama, sabe que Tim no le faltara al respeto, no está en condiciones pues está consciente que todo fue a causa de algo, pero lo necesita más de lo que lo ha necesitado en toda esa relación, esa relación de niños, donde besos tiernos han subido de tono, pero no llegado a más, quizá por temor, quizá porque en realidad Conner es menor y no importa su físico de chico rudo y grande, es menor.
El corazón de Drake se acelera, siempre a controlado ese lado instintivo, ese lado animal al que todos se dejar inducir y caer en la inconsciencia, Timothy es un joven pensante, inteligente, escrupuloso, nada se le debe salir de las manos y lo único a lo que se ha dado el lujo en hacerlo es con su Superboy, Conner. Su animal interior brinca de alegría al escuchar el llamado de su omega, si, su Omega, el adecuado, un omega que no tiene nada de frágil, pero adecuado, como si siempre lo hubiera estado esperando, como si siempre lo hubiera sabido.
— Mi... Mi omega...
Murmura sonriendo, controlando ese instinto, porque aunque Conner tenga toda la fuerza y lo tome del traje de Robín para atraerlo y besarlo, aceptándolo, no abusara de la situación, solo se dará ese lujo de probar, puede controlarlo, los besos suben de tono, sus labios chocan, siente como es despojado de su traje de Robín. No tendrá la fuerza pero si la inteligencia, logra cubrirlo con la cobija, dejando a Superboy enredado como un sushi y Tim atrás, sabe que con el celo inducido algunos se vuelven fuertes otros débiles y al parecer Conner resulto de los que se vuelven débiles, como si el celo fuera una Kryptonita verde y eso lo agradece Robín ya que se sentiría que abusaría de la situación si lo hacían por la droga.
— No te atraigo... no te atraigo porque no soy como los omegas normales... soy...
El petirrojo estaba preparado para eso, quedamente le habla al oído, su aroma a Alfa le indica a Conner que lo ama, que sienta calma.
— No, no es eso... si lo hacemos así se sentirá como un abuso, te indujeron el celo, quiero que estés consciente...
La escena de ellos es curiosa, una alfa pequeño con porte de líder, carácter fuerte, estrechando por la espalda a ese omega alto, musculoso con apariencia de alfa. Lo sujeta con fuerza pegando su pelvis en los glúteos de Superboy, el cual jadea al sentirlo duro entre las cobijas que lo cubren.
— Sí, Kon... me estoy conteniendo mucho... soy humano... pero soy un ser pensante... pero sobre todo me importas mucho.
Conner siente como los labios de Tim besan el cuello, muerden sin marcar la glándula donde el aroma es más fuerte provocándole placer a ambos.
— Esto si podemos hacerlo... Mi omega.
Lejos de ahí Jasón y Dick se encontraban en el departamento que compartían, ambos estaban tumbados en la cama, desnudos, mientras el ave azul besaba el rostro del segundo Robín.
— Golden boy le advertiste a Tim sobre lo de Superboy...
Grayson se queda petrificado, Red Hood lee muy bien las facciones de su amante.
— Se supone que hablarías de eso con Timbo, sabemos que tienen una relación, por decirlo así no de niños, sino de ancianos...
Dick sonríe.
— El hecho de que no quieran hacerlo, no quiere decir que no se les antoje... o que estén chapados a la antigua, o que le tengan miedo a la Señora Kent...
Jasón atrae a Dick a sus brazos, lo estrecha con fuerza mientras lo besa.
— Bien, bien, comprendo más la tercera opción, pero habíamos quedado que tu hablarías con Timbo sobre los resultados de Conner... de que es Omega. Al parecer te impacto más el hecho de que nuestro Tim fuera Alfa que el hecho de que Superboy fuera Omega.
Dick sonríe nervioso.
— Creo que lo olvide.